Deprecated: Creation of dynamic property ElementPack\Element_Pack_Loader::$_modules_manager is deprecated in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php on line 556

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831

Warning: Cannot modify header information - headers already sent by (output started at /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-content/plugins/bdthemes-element-pack-lite/loader.php:556) in /home1/rhd/fiatgarabandal.com/wp-includes/rest-api/class-wp-rest-server.php on line 1831
{"id":8939,"date":"2019-11-24T11:40:03","date_gmt":"2019-11-24T10:40:03","guid":{"rendered":"http:\/\/fiatgarabandal.com\/?p=8939"},"modified":"2022-03-16T12:24:52","modified_gmt":"2022-03-16T11:24:52","slug":"ezquioga-1931-1934","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/ezquioga-1931-1934\/","title":{"rendered":"Ezquioga 1931-1934"},"content":{"rendered":"\t\t
\n\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\n\t\n<\/svg>\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t
\n\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\"\"\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t
\n\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\"\"\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t
\n\t\t\t
<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t<\/i><\/div>\n\t\t\t\t\t\t<\/span>\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t\t

Leer\u00a0 m\u00e1s:<\/span><\/a><\/h2><\/blockquote>

https:\/\/\/el-rechazo-a-las-apariciones-de-ezquioga\/<\/p>\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/section>\n\t\t\t\t

\n\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t
\n\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t\t

CUARTO MILENIO EZQUIOGA<\/span><\/a>-VER<\/span><\/span><\/strong><\/h2>

\u2020<\/span><\/h1>

Procede ahora la inserci\u00f3n de aquellas Declaraciones de videntes, que guarden conformidad con las normas anteriormente sentadas. Helas aqu\u00ed:<\/span><\/p>

N\u00famero 1<\/span><\/p>

Declaraci\u00f3nes de Benita Aguirre<\/span><\/p>

N\u00daMERO 1.<\/em>\u2014 Declaraciones de Benita Aguirre. Juicio cr\u00edtico de los \u00e9xtasis y las declaraciones de esta vidente. Los castigos. Creyentes, videntes, director de estos y libro de la Virgen de Ezquioga. Presentes y futuras persecuciones. Los cruc\u00edferos, el gran monarca y el anticristo. Consejos. La ola rojiza empujando a la barquilla, s\u00edmbolo de Espa\u00f1a. Est\u00edmulos de Jes\u00fas y Mar\u00eda. Jes\u00fas, padre y maestro de las almas. Jes\u00fas llamando a los pecadores. Treinta especiales documentos, con algunas cortas poes\u00edas, dictados, unos por Jes\u00fas y otros por Mar\u00eda a la vidente en \u00e9xtasis, de diversas fechas.<\/em><\/span><\/p>

\u00a0<\/em><\/span><\/p>

Benita Aguirre y Odria, naci\u00f3 el 12 de marzo de 1922 en Legazpia (Guip\u00fazcoa). Es una ni\u00f1a de buena salud, extremada sensibilidad, ecu\u00e1nime mentalidad, muy despabilada, de honestas costumbres, simp\u00e1tica, piadosa y\u00a0apreciada de cuantos la conocen. Es una de las videntes m\u00e1s favorecidas del cielo. Durante la persecuci\u00f3n del oto\u00f1o de 1932 fue llevada al tribunal del juez de instrucci\u00f3n de San Sebasti\u00e1n, quien nada delictivo hall\u00f3 en ella. \u00daltimamente, a causa de ser todo lo franca y decidida que debe ser, y por no mentir, ha sido mal llevada y tra\u00edda ante el prelado de la di\u00f3cesis, quien puede que mal informado, la ha penitenciado p\u00fablicamente, sobrellevando la ni\u00f1a con paciencia y humildad la dura penitencia. \u2014Cap. XX. <\/span>Un caso como pocos<\/em>.\u2014<\/span><\/span><\/p>

Precisamente, esta disposici\u00f3n episcopal, por aquello de que Dios, de los males saca bienes, ha servido a Benita para que lejos del hogar dom\u00e9stico, se haya perfeccionado en la misi\u00f3n a que el cielo la tiene destinada; y sean, a partir de la fecha de dar a luz estas cuartillas, sus visiones y revelaciones asiduas, diarias, ininterrumpidas. Particularmente se nota que Jes\u00fas y Mar\u00eda, al hallarla m\u00e1s retirada y ejercitante en las virtudes, la han hecho instrumento de un sin n\u00famero de revelaciones interesantes, excepcionales, en las que descubrimos con la total ausencia de la personalidad humana \u2014tanto m\u00e1s ausente cuanto m\u00e1s ni\u00f1a es\u2014 la plena presencia de la personalidad divina. Las Declaraciones de la vidente Aguirre son una poderosa garant\u00eda de que sus visiones y revelaciones son verdaderas.<\/span><\/p>

Juicio cr\u00edtico de los \u00e9xtasis y las declaraciones de esta vidente<\/em>.\u2014 Al enjuiciar debidamente los \u00e9xtasis y las declaraciones de la peque\u00f1a vidente Benita, es nuestro \u00e1nimo avalorarlas, a fin de que en ellas brille la mano divina que las ha causado. Los \u00e9xtasis han sucedido en la campa de Ezquioga, en casa de la vidente y en otros lugares de su residencia; y las revelaciones, que les han seguido, se componen de: a) instrucciones; b) poes\u00edas; c) mensajes; d) amonestaciones; e) encargos; y f) dibujos, am\u00e9n de visiones, que han sido, por lo general, suaves, y por excepci\u00f3n tormentosas, cuando el cielo ha querido que, para la conversi\u00f3n de alguien se\u00f1alado, los malos esp\u00edritus la hayan infligido terribles sufrimientos.<\/span><\/p>

a-b) Las instrucciones, casi siempre en prosa, y a veces en s\u00f3lido y bello verso, generalmente las ha redactado, acabado el \u00e9xtasis, o alg\u00fan testigo se las ha tomado.<\/span><\/p>

c-d) En los mensajes se ha meramente como instrumento. Otro le lleva el pensamiento y la mano, porque la vidente nada sabe de lo que ha hecho ni c\u00f3mo lo ha ejecutado. Somos, con otros, testigos de ello, y la hemos practicado suficientemente pruebas conducentes a la conclusi\u00f3n, que es tal como afirmamos. Adem\u00e1s, cualquiera ve que una ni\u00f1a de tal edad, por lista<\/span><\/p>

que sea, contadas las circunstancias que la rodean, no es capaz de escribir mensajes como los instrumentados por ella. As\u00ed lo confiesa la vidente misma. Tan es as\u00ed, que luego de escritos, pregunta a veces, por el significado de ciertas palabras que por completo desconoce.<\/span><\/p>

  1. Los encargos han podido ser comprobados y confirmados casi<\/span><\/li>
  2. Acerca de los dibujos, los que hemos dado algunas lecciones de rudimentos de este arte, nos consta que la videntita a\u00fan est\u00e1 en el a, b, c <\/em>de ellos, y que no pudo ejecutar, a las horas en que dibuj\u00f3 la imagen del S. Coraz\u00f3n, como la que figura en la Documentaci\u00f3n Serie C, Secci\u00f3n IV. Aparte las circunstancias del \u00e9xtasis en que estando, a causa de \u00e9l, insensible, menos deb\u00eda poder ejecutar el dibujo.<\/span><\/li><\/ol>

    Todo cuanto dejamos dicho en Documentaci\u00f3n Serie B; n\u00ba 8, d) respecto a la forma con que la vidente, que dicho apartado refiere, se ha producido en estos casos, hay que aplicarlo a Benita, que por eso nos excusa su reproducci\u00f3n.<\/span><\/p>

    SECCI\u00d3N I<\/span><\/p>

    11 Julio 1931. Empieza as\u00ed la peque\u00f1a Benita:\u00a0<\/span><\/p>

    \u201cPap\u00e1 nos avis\u00f3 que en Ezquioga aparec\u00eda la Sant\u00edsima Virgen, y mam\u00e1 me dijo: \u00bfQuieres venir conmigo a Ezquioga? La respond\u00ed que s\u00ed, y preparamos el viaje para el siguiente d\u00eda. Dec\u00edame entre m\u00ed: Yo no ver\u00e9 a la Sant\u00edsima Virgen. El 12 fui con mam\u00e1. Iba sin esperanzas ni ganas de ver a la Virgen, porque me bastar\u00e1, dec\u00eda, verla en el cielo. Cuando llegamos al monte, empezamos a rezar el rosario. Rezaba yo con gusto, por la devoci\u00f3n que me inspiraba el modo de ser rezado. Al empezar el quinto misterio, con sorpresa y susto vi que una se\u00f1ora, rodeada de grandes resplandores, se me acercaba sonriente. Empec\u00e9 a dar gritos, diciendo: Mam\u00e1, mam\u00e1, que veo a una Se\u00f1ora que viene hacia m\u00ed, y parece que es la Sant\u00edsima Virgen, pero me da mucho miedo. Mam\u00e1 no me crey\u00f3, y cuando vio que la gente acud\u00eda a mis gritos, me cerr\u00f3 la boca, diciendo a todos que no era nada.<\/span><\/p>

    D\u00edjome que si afirmaba que hab\u00eda visto a la Virgen me pegar\u00eda, pues no era verdad que la ve\u00eda, sino ilusiones m\u00edas. De regreso, dije a mi hermana: No cuentes nada a mam\u00e1, pero he visto una se\u00f1ora que es la Virgen, porque va vestida igual. Mi hermana me crey\u00f3, pero mam\u00e1, que hab\u00eda o\u00eddo esto, me ri\u00f1o mucho. Cuando llegu\u00e9 a casa fui en busca de pap\u00e1, y le cont\u00e9 el caso, a\u00f1adi\u00e9ndole que la se\u00f1ora, que hab\u00eda visto, era guap\u00edsima y llevaba en una mano un pa\u00f1uelo y en la otra una espada. Mi pap\u00e1 dud\u00f3, pero mi mam\u00e1, que oy\u00f3 lo que estaba contando, me mand\u00f3 me retirase.<\/span><\/p>

    13 julio 1931. Algunos conocidos en tono de burla, dec\u00edan: \u201cA Benita no se la puede llevar a ninguna parte, porque se marear\u00eda y en todas partes ver\u00e1 a la Virgen\u201d. Yo repliqu\u00e9 que era cierto que hab\u00eda visto a la Virgen, y seguir\u00eda dici\u00e9ndolo aunque me matasen. Un sacerdote de Legazpia, que se enter\u00f3 de esto, me dijo si quer\u00eda ir con \u00e9l a Ezquioga, y accediendo, fui all\u00e1, haci\u00e9ndome explicar el hecho de la visi\u00f3n.<\/span><\/p>

    En efecto fui a Ezquioga, y dentro del rezo, vi otra vez, sonriente a la Sant\u00edsima Virgen, m\u00e1s no me habl\u00f3. En casa todos creyeron menos mam\u00e1.<\/span><\/p>

    14 julio 1931. Volv\u00ed de nuevo a la campa con mam\u00e1 y el sacerdote dicho, y vi de igual manera a la Virgen, que llevaba en la mano un pa\u00f1uelo; y poco antes de terminar la visi\u00f3n, vi que daba vuelta un poco al pa\u00f1uelo, en una de cuyas puntas se le\u00eda con letras bordadas, color lila: Paz en la tierra<\/em>.<\/span><\/p>

    15 julio 1931. La vi igual, y en el pa\u00f1uelo, con color rojo, le\u00ed las palabras: Gloria en el cielo<\/em>.<\/span><\/p>

    29 julio 1931. La pregunt\u00e9 si me hablar\u00eda al d\u00eda siguiente, y me contest\u00f3 que s\u00ed. En efecto, el d\u00eda 30 me habl\u00f3. \u00bfLa pregunt\u00e9 qui\u00e9n era? Y me contest\u00f3: \u201cSoy la Madre de todos\u201d. Tambi\u00e9n hubiese querido hablar al ni\u00f1o Jes\u00fas, pero como le vi tan peque\u00f1o, cre\u00ed que no sab\u00eda hablar, y no le pregunt\u00e9 nada, hasta que el sacerdote que me acompa\u00f1aba, me dijo preguntase al Ni\u00f1o que ve\u00eda, que qui\u00e9n era. Obedec\u00ed, y me contest\u00f3: \u201cSoy Padre de todos\u201d. Entonces le dije: Esto s\u00ed que no te lo creo. \u00bfTantos hombres de edad que hay y t\u00fa tan peque\u00f1o, ser el padre de todos? C\u00e1llate, no digas eso. Despu\u00e9s me mostr\u00f3 un angelito, y la pregunt\u00e9 que qui\u00e9n era, y me contest\u00f3: Un \u00e1ngel conocido de una que tienes a tu lado<\/em>. A mi lado estaba mi madre, y en efecto, el \u00e1ngel era una hermanita m\u00eda, que muri\u00f3 al a\u00f1o de nacida y que yo no conoc\u00ed.<\/span><\/p>

    Despu\u00e9s me pidieron interrogase a la Visi\u00f3n c\u00f3mo quer\u00eda que se la llamara. La pregunt\u00e9 y me respondi\u00f3: Mater Dolorosa<\/em>. Cuando fui a casa, dije a mam\u00e1: Oiga, me he llevado una gran desilusi\u00f3n, pues cre\u00eda que en Ezquioga se me aparec\u00eda la Virgen, y resulta que es \u201cMater Dolorosa\u201d. Mam\u00e1 se ech\u00f3 a re\u00edr por la gracia que la caus\u00f3 mi ignorancia del significado, el cual me explico y qued\u00e9 convencida.<\/span><\/p>

    Otro d\u00eda me pidieron la preguntase por qu\u00e9 aparec\u00eda en Ezquioga, y me contest\u00f3: \u201cHe bajado a Ezquioga, porque hay pocos buenos. Vengo a convertir a los malos, conservar a los buenos y avisar que vienen muchos castigos, para que todos se preparen y est\u00e9n alerta; m\u00e1s poco de esto consigo. Te digo, de verdad, a\u00f1adi\u00f3, que habr\u00e1 muchos m\u00e1s videntes, aunque unos por su culpa, y otros por culpa de otros, caer\u00e1n en las garras del\u00a0demonio. T\u00fa, s\u00e9 buena, y no me des ning\u00fan disgusto. Quiero que vengas siempre que puedas a la Monta\u00f1a: as\u00ed estar\u00e9 contigo\u201d. La respond\u00ed que me mandara lo que quisiera, que yo lo har\u00eda. Ella se sonri\u00f3.<\/span><\/span><\/p>

    Desde este d\u00eda continuaron diariamente las visiones hasta primeros de 1933, cuyas declaraciones no he podido recoger, por tenerlas guardadas el ec\u00f3nomo de Ezquioga, como miembro de la Comisi\u00f3n de Informaci\u00f3n que era. Mas recuerdo estas salientes:<\/span><\/p>

    Un d\u00eda Nuestra Se\u00f1ora me dijo: \u201cEn verdad te digo que si los hombres no se enmiendan y hacen mucha oraci\u00f3n y penitencia, vendr\u00e1n terribles castigos\u201d.<\/span><\/p>

    Otro d\u00eda a\u00f1adi\u00f3: \u201cHija, Yo, Madre de misericordia, he venido a la tierra para avisar a los m\u00edos que se preparen: pero, \u00bfves? \u00a1Qu\u00e9 poco de esto consigo! Mis hijos me vuelven\u00a0 las espaldas. Ten por cierto que todos aqu\u00e9llos que no creen en mis Apariciones\u00a0 es porque no me aman. Si me amaran se interesar\u00edan m\u00e1s por M\u00ed y vendr\u00edan m\u00e1s veces, y\u00a0 con las pruebas que les dar\u00eda quedar\u00edan convencidos; pero, ya lo ves, no me aman.\u201d<\/span><\/p>

    La pregunt\u00e9 una vez, \u00bfpor qu\u00e9 la gente cre\u00eda mucho m\u00e1s al principio que ahora? Y me respondi\u00f3: \u201cNo te extra\u00f1e esto. Los hombres mudan: Solo Dios es el que no cambia. No\u00a0\u00a0 te aficiones a ninguna persona particular. \u00c1malos a todos, en\u00a0 general, por Jes\u00fas y por\u00a0\u00a0\u00a0 M\u00ed. Si as\u00ed no lo haces, sufrir\u00e1s mucho, pues ver\u00e1s que personas que hoy\u00a0 te\u00a0 quieren mucho, ma\u00f1ana ser\u00e1n tus mayores enemigos; sigue mis consejos.\u201d<\/span><\/p>

    En una ocasi\u00f3n que lloraba Ella l\u00e1grimas de sangre, la pregunt\u00e9 \u00bfpor qu\u00e9 causa? Y me contest\u00f3: \u201cHija, \u00bfa\u00fan me preguntas por qu\u00e9 lloro? \u00bfNo ves t\u00fa que el mundo est\u00e1 tan\u00a0 mal? \u00bfNo ves que no me aman, que no me hacen caso? Pues, hija, por esto lloro. He bajado al mundo para avisar a mis hijos que se preparen; y ellos, en vez\u00a0 de\u00a0 agradec\u00e9rmelo y seguir mis consejos, no me atienden ni me escuchan, porque no me aman\u201d.<\/span><\/p>

    Cuando vi al demonio por primera vez, me asust\u00e9 mucho, y pregunt\u00e9 a la Sant\u00edsima Virgen, \u00bfpor qu\u00e9 hab\u00eda venido all\u00ed el demonio? Y me respondi\u00f3: \u201c\u00bfNo sabes t\u00fa que detr\u00e1s de cada cruz anda el diablo? Pues no te extra\u00f1e nada.\u201d Pero, Madre, la dije: \u00bfNo ves que\u00a0 si aparece muchas veces el demonio, creer\u00e1 la gente que aparece \u00e9l y no T\u00fa? \u2014Y Ella repuso: \u201cEl que diga que en Ezquioga aparece el demonio, en esto mismo dar\u00e1 a conocer que aparezco Yo, porque el diablo va tras de lo bueno; pues lo malo ya es de \u00e9l, aunque\u00a0 no lo vigile.\u201d<\/span><\/p>

    Otro d\u00eda, en vista del modo con que la Comisi\u00f3n de Informaci\u00f3n interrogaba a los videntes, me dijo \u201cque diera al Sr. Cura unas declaraciones superficiales.\u201d (P\u00e1gs. 36-37).<\/span><\/p>

    En nueva ocasi\u00f3n, que mucha gente se hallaba en el monte, habl\u00f3 as\u00ed: \u201cMis hijos\u00a0 est\u00e1n lejos, pero mis hijos est\u00e1n aqu\u00ed.\u00a0 Haced mucha oraci\u00f3n, penitencia y sacrificio. Si\u00a0 esto no hac\u00e9is, vendr\u00e1n castigos terribles y morir\u00e1 una tercera parte de la humanidad. Entonces, pocas familias quedar\u00e1n enteras. Todos tendr\u00e1n que llevar luto.\u00a0 Est\u00e1 cerca el\u00a0 fin del mundo. Cuando las mujeres no se distingan de los hombres por su manera de vestir, entonces pensad que ten\u00e9is encima el fin del mundo. Los a\u00f1os pasan volando y pocos se acuerdan de la muerte\u201d.<\/span><\/p>

    Los castigos<\/span><\/p>

    Fue en el mes de Agosto cuando me habl\u00f3 de los castigos generales. Su enumeraci\u00f3n fue por algunos copiada y repartida; pero yo no respondo m\u00e1s que de los que aqu\u00ed se citan. (Tampoco he podido recoger las declaraciones de los meses del a\u00f1o 1933 hasta septiembre del mismo a\u00f1o). \u201cComenz\u00f3 la Se\u00f1ora por mandarme que recemos por los pecadores; que tengamos mucha devoci\u00f3n a las almas del purgatorio; y que oremos mucho a Jes\u00fas Sacramentado. Durante el castigo, habr\u00e1 cinco d\u00edas de comunismo, y en tres d\u00edas caer\u00e1 fuego y no amanecer\u00e1. Que, durante estos d\u00edas, nadie salga de casa, pues los hombres confundidos, empezar\u00e1n a matarse unos a otros. Ha a\u00f1adido que el Esp\u00edritu Santo est\u00e1 enfadado con muchos sacerdotes por el poco respeto que tienen a los fieles. Que Ella est\u00e1 triste porque no se hace oraci\u00f3n, sacrificio ni penitencia. He venido \u2014 a\u00f1ade\u2014 a este pobre mundo en busca de mis hijos y a causa de sus miserias; y ellos en lugar de venir a M\u00ed, se complacen en alejarse cada d\u00eda m\u00e1s. \u00a1Alg\u00fan d\u00eda se han de acordar, pues todav\u00eda tienen cerrados los ojos, los pobrecitos!<\/span><\/p>

    Yo no soy la que mando el castigo, sino mi Hijo\u00a0 Jes\u00fas.\u00a0 Habr\u00e1\u00a0 terremotos,\u00a0 empezando en el extranjero y despu\u00e9s en Espa\u00f1a. Durante el terremoto de Santiago de Cuba ofrecieron su vida siete personas. El fuego destruir\u00e1 las cosechas. En el primer a\u00f1o habr\u00e1 hambre y muchos se condenar\u00e1n. En el cuarto a\u00f1o empezar\u00e1 a haber cosechas, y despu\u00e9s ir\u00e1 mejorando. Los ni\u00f1os m\u00e1s peque\u00f1os morir\u00e1n en brazos de sus madres. Los malos que hagan un acto de arrepentimiento, al momento de morir, no les servir\u00e1 de nada, porque no ser\u00e1 de contrici\u00f3n, sino por miedo al castigo. Llegar\u00e1 un d\u00eda que dando\u00a0 un paso, encontraremos un muerto, y dando otro, otro muerto, de tal manera que se abrir\u00e1n caminos con los cad\u00e1veres, como se abren cuando hay nieve. Par\u00eds ser\u00e1 carbonizado; Marsella tragada por el mar; Catalu\u00f1a tiene sobre si mucha carga; Madrid, Barcelona, San Sebasti\u00e1n y M\u00e1laga son las que tienen m\u00e1s carga. Habr\u00e1\u00a0 una\u00a0 guerra\u00a0 mayor que la europea, durante la cual San Miguel cortar\u00e1 la cabeza de los malos.<\/span><\/p>

    Durante el castigo los ricos empobrecer\u00e1n y los pobres mejorar\u00e1n de suerte; pero muy rico nadie. Habr\u00e1 una gran enfermedad contagiosa de la que morir\u00e1 mucha gente.\u00a0 Muchos frailes cuidar\u00e1n de los enfermos y algunos morir\u00e1n en esta labor.\u00a0 Hemos\u00a0 de pedir morir en el primer castigo. Quedar\u00e1 menos de la mitad de la gente de la que hay ahora. Durante el castigo, los hombres ser\u00e1n muy malos, se olvidar\u00e1n de Dios, y\u00a0 lo\u00a0 buenos que ser\u00e1n pocos, se podr\u00e1n contar. Despu\u00e9s reinar\u00e1 Cristo. Habr\u00e1 tres grandes castigos, y adem\u00e1s, tres grandes milagros. Dichoso el que muera en el primer castigo, \u2014 dijo Benita. \u00a1Yo pudiera ser una de ellas! Despu\u00e9s del castigo, la primera espada que atraviese Mi Coraz\u00f3n temblar\u00e1 la tierra. \u2014Posteriormente ha revelado la Sant\u00edsima Virgen a la misma vidente que se han disminuido algo los castigos\u2014.<\/span><\/p>

    1\u00ba Septiembre 1932. Queriendo nosotros practicar determinadas pruebas con la vidente, la invitamos a rezar el rosario, cabe una fuente, que est\u00e1 a corta distancia del tablado. Hab\u00eda otras personas. Una vez empezado el rosario, vimos con sorpresa, que Benita, que ya estaba en \u00e9xtasis, se adelant\u00f3, poni\u00e9ndose de rodillas unos metros m\u00e1s adelante. Los asistentes, no comprendieron su significado, hasta que otra vez, la vidente, metida por el monte en medio de un helechal, se puso de rodillas al lado de un \u00e1rbol. Una persona conoci\u00f3 el significado del acto y dijo: \u201cEstar\u00e1 haciendo el V\u00eda Crucis\u201d, y todos seguimos a la vidente. Al rezar el significado de cada paso, se notaban en Benita se\u00f1ales inequ\u00edvocas de que estaba sufriendo mucho. De esta manera continuamos monte arriba, detr\u00e1s de la vidente, hasta llegar a la c\u00faspide, donde termin\u00f3 el V\u00eda Crucis. Luego, Benita rez\u00f3 siete avemar\u00edas, e hizo siete ademanes, uno por cada avemar\u00eda, como sacando algo de alg\u00fan objeto invisible a nosotros. Terminado el rezo de las siete avemar\u00edas, la ni\u00f1a se puso de pie, y extendiendo los brazos para arriba, y poni\u00e9ndose sobre la punta de los pies, dio se\u00f1ales de querer coger a alguien; hasta que de pronto, se la termin\u00f3 la visi\u00f3n, y qued\u00f3 sin saber d\u00f3nde se hallaba, como da a entender la pregunta que hizo: \u201c\u00bfD\u00f3nde estoy?\u201d Al contar a la ni\u00f1a el acto realizado, quiso comprobarlo, comenzando por ir al lugar de la fuente, creyendo que la tendr\u00eda cerca (hab\u00eda quedado muy abajo, como a medio kil\u00f3metro) pero, al no encontrarla, crey\u00f3. La ni\u00f1a refiere el caso as\u00ed: \u201cAl empezar el rosario, he visto a la Virgen con siete espadas, llorando sangre. Ten\u00eda tres \u00e1ngeles a los pies y dos a cada lado. Ha aparecido Jes\u00fas y le han puesto una cruz en los hombros, haci\u00e9ndole ir por un camino, que yo no conozco, y grit\u00e1ndole mientras sub\u00eda: Salve, Rey de los jud\u00edos. Una vez llegado al monte, le han desnudado y crucificado. Despu\u00e9s, dos hombres le han bajado de la cruz y le han sepultado, desapareciendo entonces Jes\u00fas, y quedando solamente la Virgen. He rezado siete avemar\u00edas, y por cada avemar\u00eda, le<\/span><\/p>

    sacaban una espada del Coraz\u00f3n. Luego, se ha puesto alegre la Virgen, y he intentado cogerla pero no he podido.<\/span><\/p>

    2-5 Septiembre 1932. \u2014V\u00eda Crucis igual que los d\u00edas pasados\u2014. He rogado a la Virgen que me muestre alguno de los tres d\u00edas que vamos a entrar a obscuras. De pronto lo he visto todo negro, que apenas alcanzaba la vista nada m\u00e1s que alg\u00fan metro, y que todo estaba lleno de sangre. Yo estaba en una casa desconocida para m\u00ed. Ca\u00eda un fuego aterrador. Los hombres se echaban la culpa mutuamente y se mataban, y otros mor\u00edan a causa del fuego. Muchos de ellos han quedado negros despu\u00e9s de muertos, y estos son los que han muerto en pecado mortal. Luego he visto, como los malos mataban a los buenos. Un ni\u00f1o de siete u ocho a\u00f1os, iba con una crucecita que tapaba con las manos. Han intentado cortarle la cabeza, pero al no poder, le han cortado los brazos a machetazos, cuando un gran resplandor, como una nube, le ha envuelto por completo, subiendo hacia arriba; y cuando ya casi se hab\u00eda escondido, ha ca\u00eddo de la nube una gota de sangre sobre otra persona, a quien la estaban cortando el pecho con una espada. \u00c9sta al caerle dicha gota, ha abierto los ojos, y mirando hacia arriba, se ha escondido la nube. De nuevo han intentado cortarle el pecho, y al no poder la han dejado. Mientras la martirizaban, estaba muy contenta; pero cuando la han dejado en paz, se ha quedado triste.<\/span><\/p>

    23 Septiembre 1932. En este d\u00eda la Virgen apareci\u00f3 triste y con siete espadas y doce \u00e1ngeles. En las manos llevaba un pa\u00f1uelo. Me encargaron preguntara si curar\u00eda Mar\u00eda Celaya, vidente de Boc\u00e1icoa. Al hacer esta pregunta vi a dicha vidente, pero solamente la cabeza. La cara la ten\u00eda muy desfigurada, y parec\u00eda que sufr\u00eda mucho. No s\u00e9 decir d\u00f3nde se encontraba, dada la oscuridad del sitio en que me hallaba. Luego de la visi\u00f3n, que fue a eso de las seis de la tarde, me dijeron que hab\u00eda muerto por la ma\u00f1ana.<\/span><\/p>

    24 Septiembre 1932. Vi a la Virgen igual que ayer. La pregunt\u00e9 por Mar\u00eda Celaya, y me dijo que subi\u00f3 al cielo, cuando terminaron de rezar por ella las misas del entierro<\/em>. Luego, empez\u00f3 a marcharse la Virgen, y entonces una persona por pensamiento, ofreci\u00f3 siete avemar\u00edas para que no se marchara a\u00fan. La vidente o\u00eda contestar a la Virgen las avemar\u00edas, y a la tercera pregunt\u00f3 a qui\u00e9n contestaba, respondiendo la Virgen que a esta persona y que la diese a besar el Cristo<\/em>; y entonces baj\u00f3 la Virgen, desapareciendo al terminar las siete avemar\u00edas y dando la bendici\u00f3n.<\/span><\/p>

    30 Septiembre 1932. En este d\u00eda hemos terminado los Calvarios, tal como me indic\u00f3 Nuestra Se\u00f1ora. Me ha explicado por qu\u00e9 hemos hecho estos V\u00eda Crucis todos los d\u00edas del mes, esto es: por la conversi\u00f3n de los pecadores, por las benditas almas del purgatorio, y principalmente, por todos aquellos que no atienden a la Sant\u00edsima Virgen<\/em>. \u2014Durante los<\/span><\/p>

    tres meses siguientes, la videntita ha seguido teniendo en su casa visiones y revelaciones, las cuales no se recogieron a causa de ser la \u00e9poca de las persecuciones\u2014.<\/span><\/p>

    21 Enero 1933. La Sant\u00edsima Virgen me ha dicho \u201cque ha llegado ya el a\u00f1o del comienzo de los castigos, pues ha esperado bastante; ya que si nos dejara sin castigos ser\u00eda porque no nos quer\u00eda. Porque, as\u00ed como una madre, cuando ve que su hijo se porta mal, le reprende; as\u00ed tambi\u00e9n obra Ella con nosotros, que somos sus hijos\u201d.<\/span><\/p>

    23 Marzo 1933. Apareci\u00f3 de Dolorosa, con Gema y cuatro \u00e1ngeles. \u201cMe orden\u00f3 que hagamos mucha oraci\u00f3n y penitencia, pues se acercaban los castigos. Jes\u00fas no puede esperar a m\u00e1s, ya que termino el tiempo de sus misericordias\u201d.<\/span><\/p>

    26 Marzo 1933. (Todas las visiones que siguen, son por lo general id\u00e9nticas a la anterior; por cuya raz\u00f3n las omitiremos, declarando solamente las revelaciones en las mismas habidas). \u201cNuestra Se\u00f1ora me dijo\u00a0\u00a0 que tenemos encima el castigo, pues Jes\u00fas\u00a0\u00a0 no puede esperar a m\u00e1s; que roguemos mucho por los pecadores, cuyos ojos est\u00e1n cerrados; que San Sebasti\u00e1n ser\u00e1 tragada por el mar; que hagamos mucha oraci\u00f3n y penitencia; que seamos valientes, ya que los de Ella seremos muy perseguidos; y que se cerrar\u00e1n todas las iglesias, siendo las primeras las de Catalu\u00f1a; y que se acerca la guerra mundial; y despu\u00e9s los tres d\u00edas de tinieblas\u201d.<\/span><\/p>

    5 Abril 1933. \u201cDe nuevo me asegur\u00f3 que tenemos encima el castigo, el cual se ha aplazado bastante a causa de las oraciones que se han hecho; que, durante los castigos, los que crean en las apariciones de Ella, ser\u00e1n guardados bajo su manto, como ovejas escogidas, y que no tendr\u00e1n el menor cuidado; mientras los otros se llenar\u00e1n de terror y espanto, y quedar\u00e1n como ovejas perdidas, que no han atendido al\u00a0 llamamiento\u00a0 del Buen Pastor; que los de Ella gozar\u00e1n sobre su pecho para toda la eternidad; y que roguemos mucho por los pecadores\u201d. Llorando, dio su bendici\u00f3n y desapareci\u00f3.<\/span><\/p>

    Creyentes, videntes, director de \u00e9stos y libro de la Virgen de Ezquioga.<\/span><\/p>

    3 Junio de 1933. Suplicamos exponga Nuestra Se\u00f1ora la aclaraci\u00f3n de algunos puntos nubosos; y, comenzando por ciertos devotos que mucho la visitaron \u201cdice que est\u00e1 disgustada con ellos, porque no la llaman ni ruegan; que se entusiasman\u00a0 con la\u00a0 Obra y con su instrumento, haciendo menos caso de la Autora (la Sant\u00edsima Virgen); que toda la sabidur\u00eda es de Nuestra Se\u00f1ora, m\u00e1s ellos se han entusiasmado con\u00a0 la recibida mediante el instrumento; que Nuestra Se\u00f1ora comunica las cosa a la Obra para que, por medio del Instrumento, haga llegar sus gracias a la tierra; pero que se tenga presente que Ella, en toda ocasi\u00f3n, no quiere hacer llegar las cosas a la Obra, sino que las dice a los videntes<\/span><\/p>

    de Ezquioga; las cuales cosas, como no son del agrado de aquellos devotos, no las quieren recibir. Ense\u00f1a que el orgullo es la antesala de la cobard\u00eda; el odio de la venganza; y la caridad de las buenas obras. Y finalmente, que ellos, que se hab\u00edan comprometido a publicar la Obra de la Virgen y a otro menester, se han vuelto atr\u00e1s.<\/span><\/p>

    En cuanto a los videntes, desobedientes al P. Amado, declara que han jugado con su nombre. Tom\u00e1ndola a Ella por pretexto de sus caprichos; que todo el tiempo\u00a0 empleado en ellos ha sido perdido, que se ha llegado a un extremo en que va a tener que castigar; que confirma cuanto dijo a E. el domingo pasado, esto es: que de todos los videntes s\u00f3lo quedan en visi\u00f3n de Ella nueve, y que a\u00fan algunos de \u00e9stos quedar\u00e1n sin visi\u00f3n, a causa \u00a0de que no obedecen a dicho Padre y s\u00ed a las personas que les asisten; que A. tampoco la ve, aunque ofrezca las flores y el crucifijo; que el mencionado Padre aplique a todos los videntes la prueba de fuego; que los videntes que se queden sin visi\u00f3n, se revolver\u00e1n contra los que con Ella queden, y sobre todo contra su director. Y finalmente que dicho Padre borre del Libro todo cuanto deja escrito sobre F. quien, sabiendo y teniendo pruebas para distinguir entre las visiones del cielo y las que no lo son, por dar gusto a otros y a s\u00ed, ha mezclado muchas cosas que no son de Ella.<\/span><\/p>

    En lo tocante a los enemigos de Ezquioga van a pasar muchas cosas. Entre ellas hay dos sacerdotes que hacen el juego a cierto encumbrado se\u00f1or, los cuales ayudados de\u00a0\u00a0\u00a0 los exvidentes castigados con la no visi\u00f3n, se revolver\u00e1n contra los buenos videntes y su director: que llegar\u00e1 d\u00eda en que nos pinchar\u00e1n, y entonces tendremos que defender a la Virgen m\u00e1s que nunca. Y, puesto que Nuestra Se\u00f1ora se queja de que va quedando sola, nosotros la prometemos que levantaremos su nombre y su gloria muy alto, confiados en su ayuda, que no nos ha de faltar.<\/span><\/p>

    \u00daltimamente, habl\u00f3 de la publicaci\u00f3n del libro, ordenando entre otras cosas, se imprima pronto y en lugar donde se nombren poco las cosas de Ezquioga, a causa de un traidor existente\u201d.<\/span><\/p>

    4 Junio 1933. Nuestra Se\u00f1ora me habla de varias cosas, entre ellas: \u201cDiga al P. Burguera que ir\u00e1n a buscarle, pero que no reciba a nadie; que en vista de\u00a0 que\u00a0 no\u00a0 recibir\u00e1, le mandar\u00e1n una carta,\u00a0 que no debe abrir; \u2014Guardamos esta carta, mandada abrir\u00a0 a los once meses por Nuestra Se\u00f1ora\u2014 y como no ignorar\u00e1n que no la ha abierto, le mandar\u00e1n otra, con la cual har\u00e1 lo mismo que con la anterior. Habla luego, de ciertos devotos que, a causa de que su vidente carece actualmente de visi\u00f3n, no les\u00a0 indica vengan a Ezquioga, pero que a ellos les consta esto: Que cierta autoridad anda\u00a0 registrando toda la basura que se arroja contra los Hechos de Ezquioga, el cual registro<\/span><\/p>

    ser\u00e1 quemado antes de que salga a la luz. Veo a muchos sacerdotes salir de sus pueblos;\u00a0\u00a0 a los dem\u00e1s desdecirse de lo que, hasta ahora, contra los\u00a0 Hechos\u00a0 de\u00a0 Ezquioga,\u00a0 han dicho; y a cierto se\u00f1or\u00f3n en cama, con siete diablos, que le atormentan a juzgar por la cara que pone, y en un \u00e1ngulo de la habitaci\u00f3n hay un sacerdote que espera de su llamada, pero \u00e9sta no llega, porque no se le da tiempo\u201d.<\/span><\/p>

    5 Junio 1933. En \u00e9xtasis veo a la Sant\u00edsima Virgen, y a su lado al P. Burguera; y, habl\u00e1ndole sobre los videntes, confirma cuanto dijo a E. de \u201cque es su voluntad hacer una purificaci\u00f3n en ellos, a causa de que no la obedecieron, por la cual purificaci\u00f3n quedar\u00e1n \u00fanicamente los precisos; que, ahora son nueve, de los cuales dos quedar\u00e1n pronto sin visi\u00f3n, a causa de que no rinden su voluntad\u201d. (Pudimos convencer a una de estas dos videntes, de que la Sant\u00edsima Virgen iba a dejarla sin visi\u00f3n; la incitamos a penitencia; y, obtenida la venida de la Madre, \u201cNuestra Se\u00f1ora la dijo que no la dejar\u00eda sin visi\u00f3n, mientras ella la obedeciese en todo\u201d; y, prometido que fue esto, sigui\u00f3\u00a0 vi\u00e9ndola hasta que no obedeci\u00f3); \u201cque de todos \u00e9stos, con el tiempo quedar\u00e1n s\u00f3lo cuatro (cuyos nombres aduce); pero que no se extra\u00f1e el P. Burguera si encuentra alguno m\u00e1s de los nueve, ya que Ella los est\u00e1 buscando, por lo cual requiere a dicho Padre para que \u00e9l, y no otro, haga con todos los videntes la prueba del fuego, y el que no quiera someterse a\u00a0\u00a0 esta prueba que lo deje\u201d.<\/span><\/p>

    Preguntada la Sant\u00edsima Madre si sustituir\u00e1 los videntes dejados por\u00a0 otros, \u201crespondi\u00f3 negativamente, porque con todos ha querido hacer lo mismo y no han correspondido. Hay m\u00e1s cosas todav\u00eda de las que el P. Burguera piensa. Quiero, dice,\u00a0 hacer tres grupos de videntes: Uno para el Coraz\u00f3n de Jes\u00fas; otro para el Divino Ni\u00f1o, y otro para M\u00ed; pero que todos han de quedar bajo una misma direcci\u00f3n: la del\u00a0 P.\u00a0 Burguera. Que \u00e9ste no se apure, pues le ayudar\u00e9\u201d.<\/span><\/p>

    Sobre el premio material, que cierta vidente crey\u00f3 alcanzar por su penitencia y desvelos, \u201crespondi\u00f3 Nuestra Se\u00f1ora que, por ser terreno no es de Ella. Las cosas que se hacen se conocen por los efectos que producen. El demonio puede producir efectos buenos para conseguir un fin perverso\u201d.<\/span><\/p>

    Sobre este Libro, dijo: \u201cSu autor siga corrigi\u00e9ndolo, que Yo dir\u00e9 d\u00f3nde se ha de imprimir. Todo lo que ha pronunciado el P. L. sobre Ezquioga ha sido sin estudio s\u00f3lido. Ahora quiere estudiar, antes de volver a hablar; pero ya tendr\u00e1 en el libro cuanto apetezca. Sin embargo pretender\u00e1 hablar con su autor\u201d.<\/span><\/p>

    La Sant\u00edsima Virgen ha recusado, posteriormente<\/em>, declaraciones de algunos videntes que antes pasaron; \u201cporque, hasta la fecha en que pasaron (25 agosto de 1932), ellos no<\/span><\/p>

    pose\u00edan pruebas para discernir\u00a0 entre las visiones y revelaciones de Ella, del demonio y\u00a0\u00a0\u00a0 de la imaginaci\u00f3n; pero, que a partir de tal fecha, las poseyeron; y como dichos videntes no han hecho el caso debido, por esto las recusa\u201d. (En el Libro, por tanto, estas declaraciones no se fijan. Hay muchas cosas en todos estos respectos que s\u00f3lo se explican por la necesidad absoluta que tenemos de ser y vivir humillados<\/em>.)<\/span><\/p>

    \u201cQue alguien que no nombra, dar\u00e1 un gran disgusto a los que trabajan por Ezquioga. \u00c9l, que ten\u00eda puestas sus esperanzas en el P. L., al ver que \u00e9ste flaquea en sus antiguas afirmaciones, se desanima y sufre, y experimentar\u00e1 un d\u00eda bochorno\u201d.<\/span><\/p>

    \u201cTened entendido, concluye, que Mi nombre quedar\u00e1 por encima de los\u00a0 proyectos\u00a0 de mis enemigos. Que las gentes que creyeron en M\u00ed, volver\u00e1n hacia M\u00ed. Por tanto, no tem\u00e1is\u201d.<\/span><\/p>

    16 Junio 1933. Me particip\u00f3, \u201cque las contrariedades por las que pasamos son para que la Obra suya salga m\u00e1s clara; que pronto quedar\u00e1n s\u00f3lo cuatro videntes\u00a0 suyos,\u00a0 puesto que habiendo sido muy pocos de Ella, el demonio ha trabajado mucho con algunos, tom\u00e1ndolos como jefes, y diciendo por su boca todo el mal que ha\u00a0 podido; que el diablo enga\u00f1ar\u00e1 a todos mucho, pero que sepamos vencerle. Y que repartiera flores, se\u00f1al\u00e1ndome a quien dar\u00eda, y dici\u00e9ndome luego unos versos, para que yo los repitiese,\u00a0\u00a0 dio su bendici\u00f3n desapareciendo\u201d.<\/span><\/p>

    17 Junio 1933. \u201cMe dijo que habremos de sufrir contrariedades, aunque pronto pasar\u00e1n; que los que ahora son despreciados, despu\u00e9s ser\u00e1n levantados; y que no temamos, ya que muchos han pasado por estas pruebas y con su ayuda han salido bien; que participara al P. Burguera que no esperara nada de los c., ya que han ca\u00eddo por su soberbia. Que de los cuatro defensores que Ella ten\u00eda ha quedado solo uno, a quien iluminar\u00e1 cuanto necesite para hacer bien su Obra; que durante estos tiempos el P. Burguera tendr\u00e1 que padecer mucho, aunque Ella le dar\u00e1 \u00e1nimo bastante para llevar lo que sufra con paciencia. \u00daltimamente me dijo unos versos para que\u00a0 los\u00a0 repitiera,\u00a0 y dando la bendici\u00f3n desapareci\u00f3\u201d.<\/span><\/p>

    18 Junio 1933. \u201cA\u00f1adi\u00f3 que durante estas contrariedades Ella nos guardar\u00e1; que no temamos, pues son unas pruebas que Jes\u00fas nos manda para ver hasta donde llegamos; que las tomemos con paciencia, pues pronto terminar\u00e1n; que con estas contrariedades ganaremos muchos m\u00e9ritos, pues por el sufrimiento hemos de llegar al cielo; que somos hijos del dolor, y que de un sitio, que no apetecemos, hemos de llegar a\u00a0 donde\u00a0 queremos; y que diera flores\u201d, se\u00f1al\u00e1ndome a los que deb\u00eda dar. Y me dict\u00f3 unos versos para que los repitiera all\u00ed mismo.<\/span><\/p>

    21 Junio 1933. Me dijo que \u201clas se\u00f1ales que ha habido, son una prueba, para ver si la gente se convierte, pues que tenemos cerca el castigo. Y los que deb\u00edan de dar ejemplo\u00a0\u00a0\u00a0 lo quitan\u201d.<\/span><\/p>

    22 Junio 1933. Apareci\u00f3 Jes\u00fas con todas sus llagas cerradas, pero manando sangre de diferentes sitios, y dijo: \u201cEsta Sangre Preciosa, que derram\u00e9, cay\u00f3 sobre todas\u00a0 las\u00a0 criaturas del mundo y \u00e9stas la han despreciado\u201d. Call\u00f3 el Se\u00f1or, y la Virgen a\u00f1adi\u00f3: \u201cLos tiempos van adelantando y no puede durar esto mucho tiempo\u201d. Pregunt\u00e9 a Nuestra Se\u00f1ora si Ella hab\u00eda dicho a alguna vidente que no saldr\u00eda el Libro del P. Amado, y me ha contestado negativamente, a\u00f1adiendo que la que ha dicho eso ha sido enga\u00f1ada por el demonio, el cual no puede sufrir que dicho Padre est\u00e9 aclarando su Obra de Ezquioga.<\/span><\/p>

    \u00daltimamente, he visto cuatro cabras, dos blancas y dos negras. Con ellas estaba Jes\u00fas, vestido de pastor, qui\u00e9n con su vara toc\u00f3 a las negras y se volvieron blancas, y tocando a las que eran blancas, quedaron sus cuernos rojos de fuego. (Es la misma visi\u00f3n que P.C. tuvo en marzo pasado).<\/span><\/p>

    Presentes y futuras persecuciones<\/span><\/p>

    24 Junio de 1933. \u201cMe particip\u00f3 que cuando expulsen de Espa\u00f1a a los cat\u00f3licos no\u00a0\u00a0 les faltar\u00e1 nada en donde est\u00e9n, pues Jes\u00fas les ayudar\u00e1; que Espa\u00f1a ser\u00e1 muy castigada, siendo librados del castigo los cat\u00f3licos que se hallen fuera de ella, pues donde est\u00e9n \u00e9stos no habr\u00e1 castigo; que en tales tiempos en Espa\u00f1a habr\u00e1 s\u00f3lo gente mala, y que\u00a0 Jes\u00fas arrojar\u00e1 sobre \u00e9sta sin compasi\u00f3n, lo que tenga que arrojar; que no temamos los cat\u00f3licos, pues que al cabo de tres a\u00f1os y medio, volveremos a Espa\u00f1a, habi\u00e9ndonos librado del castigo, y que los hombres han obligado a Jes\u00fas a obrar as\u00ed\u201d.<\/span><\/p>

    25 Junio 1933. \u201cInsisti\u00f3 en que tengamos valor y sigamos adelante con todo, pues van disminuyendo los videntes a causa de sus faltas; que aunque muchos la dejan, no la dejemos nosotros; pocos quedan, aunque \u00e9stos, si la sirven bien, Ella sabr\u00e1 pagarles; y que no temamos, porque cuantas m\u00e1s contrariedades haya, m\u00e1s clara saldr\u00e1 la causa de Ezquioga\u201d.<\/span><\/p>

    26 Junio 1933. \u201cA\u00f1adi\u00f3 que hagamos mucha oraci\u00f3n, y que roguemos mucho por el Santo Padre, pues ser\u00e1 muy perseguido, y al fin martirizado; que el que le martirizar\u00e1 ser\u00e1 muy desgraciado en esta vida y a\u00fan m\u00e1s en la otra, y que el martirio del Papa ser\u00e1 a causa del asunto de Ezquioga\u201d.<\/span><\/p>

    30 Junio 1933. \u201cInsisti\u00f3 en que pronto vendr\u00e1 una persecuci\u00f3n muy grande para los cristianos, teniendo muchos de \u00e9stos que huir a los desiertos; que esta persecuci\u00f3n vendr\u00e1 cuando los comunistas se hagan due\u00f1os de Espa\u00f1a, los cuales martirizar\u00e1n a muchos de aquellos, aunque el comunismo durar\u00e1 muy pocos d\u00edas; sin\u00a0 embargo,\u00a0 mientras dure, quedar\u00e1n arruinadas muchas partes de Espa\u00f1a a la cual dejar\u00e1n en completa miseria; que muchos creen que cuando haya desaparecido la Rep\u00fablica\u00a0 espa\u00f1ola habr\u00e1 paz, m\u00e1s est\u00e1n muy equivocados; la Sant\u00edsima Virgen nos previene para que estemos preparados para una lucha mayor; y que los jesuitas, tanto como las dem\u00e1s \u00f3rdenes religiosas, ser\u00e1n expulsadas de Espa\u00f1a, y que tras su expulsi\u00f3n estar\u00e1 muy cerca el castigo\u201d.<\/span><\/p>

    2 julio de 1933. \u201cAfirm\u00f3 que muchos, que no son cat\u00f3licos de veras, cuando los que manden ordenen negar la Religi\u00f3n, negar\u00e1n; pero despu\u00e9s tendr\u00e1n que pasar por sus castigos; la Sant\u00edsima Virgen nos avisa ahora, para que luego no nos sorprenda lo que ha de venir; aunque muchos, que no quieren atender ahora, cuando venga lo que ha de venir, se aturdir\u00e1n, otros muchos enloquecer\u00e1n, y otros se suicidar\u00e1n; lo cual suceder\u00e1 porque no han querido atender a los avisos de Ella; y que los que deb\u00edan hacer m\u00e1s caso\u00a0 la han abandonado y despreciado, pero que en su pago, recibir\u00e1n lo que Jes\u00fas les mande\u00a0 a cada uno de ellos\u201d.<\/span><\/p>

    3 Julio 1933. \u201cMe comunic\u00f3 que el Anticristo cuenta ya nueve a\u00f1os y algunos meses,\u00a0 y a los 25 a\u00f1os de edad saldr\u00e1, vestido de fraile, \u2014Franciscano. (De otra revelaci\u00f3n de Abril \u00a0de 1934)\u2014 a enga\u00f1ar a la gente, haciendo falsos milagros, y que muchos le seguir\u00e1n; que en los tres a\u00f1os de hambre que habr\u00e1, vendr\u00e1 el Anticristo, con todo lo que necesite la gente para comer, y con este se\u00f1uelo atraer\u00e1 a muchos a su partido\u201d. Vi muchas iglesias saqueadas, sin puertas, los bancos y sillas en sus portales, las Sagradas formas arrojadas por el suelo, algunos frailes martirizados con espada, y otros quemados, monjas arrastradas por las calles, a las que tiraban de los cabellos, muchas personas ahogadas, muchas casas a las que el agua llevaba, y montes que ca\u00edan y desaparec\u00edan.<\/span><\/p>

    4 Julio 1933. \u201cInsisti\u00f3 que cuando venga el Anticristo, muchos entre estos, algunos religiosos, no le conocer\u00e1n\u00a0 por tal\u00a0 y le seguir\u00e1n, crey\u00e9ndole enviado de Dios, pero los\u00a0 que sabemos c\u00f3mo ha de andar, le conoceremos; que Dios conceder\u00e1 muchas gracias al Anticristo para que se convierta, aunque ser\u00e1n en balde\u201d. Despu\u00e9s me mostr\u00f3 en el infierno a cierta persona, de la cual me dijo: \u201cHasta ahora en el mundo la han tenido\u00a0 como santa, pero ya ves donde est\u00e1. A muchos de los que cre\u00e9is que han sido buenos y\u00a0que se han salvado, los ver\u00e9is en el infierno. A\u00f1adi\u00f3 que pronto quedar\u00e1n los claustros vac\u00edos\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    Esas azucenas entre espinas, \u00bfqu\u00e9 significan Madre? \u2014\u201cAh; signific\u00e1is los cat\u00f3licos que habr\u00e9is de pasar persecuci\u00f3n; porque el sufrimiento es parte\u00a0 del\u00a0 purgatorio.\u00a0 Muchos a causa del miedo, negar\u00e1n que son cristianos, pero llevar\u00e1n su\u00a0 castigo,\u00a0 muriendo desesperados. Despu\u00e9s del castigo, los malos quedar\u00e1n a montones en las calles. De los cat\u00f3licos morir\u00e1n tambi\u00e9n algunos, conoci\u00e9ndose qui\u00e9nes se han salvado y qui\u00e9nes no.\u201d\u2014 Ay, Madre: \u00bfqu\u00e9 es eso? Todas esas iglesias destruidas\u2026; c\u00f3mo escapan los religiosos\u2026; los quieren matar\u2026; a muchos les queman\u2026; en vez de dejar en paz a los cat\u00f3licos, \u00a1c\u00f3mo enredan!; tu querida naci\u00f3n se vuelve un infierno; env\u00edanos luz, Madre: \u201cYa la env\u00edo, pero los hombres la rechazan\u201d. Dices, Madre, \u00bfque habr\u00e1 m\u00e1s m\u00e1rtires que los que ha habido\u2026? Las casas de los que te amamos, en su mayor parte no ser\u00e1n destruidas\u2026 \u00a1qu\u00e9 pocos quedan para guerrear, Madre! \u00a1Ay, que horror! Los montes caen; el mar lo traga todo. \u00bfEs eso San Sebasti\u00e1n? \u00a1Qu\u00e9 pocas casas quedan! Par\u00eds todo carbonizado, en unas partes agua, en otras, sangre y fuego. S\u00ed, Madre, eso que queda en pie, \u00bfes el seminario del P.? \u00a1Qu\u00e9 Sagrado Coraz\u00f3n tan hermoso! Adi\u00f3s, Madre, adi\u00f3s.<\/span><\/p>

    5 Julio 1933. \u201cMe afirm\u00f3 que vendr\u00e1 pronto la degollaci\u00f3n de los religiosos y quedar\u00e1n los claustros vac\u00edos; que avisemos a esos que est\u00e1n esperando el arreglo pronto de Espa\u00f1a, ilusion\u00e1ndose que dentro de pocos meses, se arreglar\u00e1 todo; y mientras viven en tales ilusiones, les pisar\u00e1 lo malo, sin embargo, los que atendemos a la Sant\u00edsima Virgen recibiremos luz para ver todo lo que viene\u201d.<\/span><\/p>

    Pero, ay Madre, \u00bfqu\u00e9 es eso? \u00a1Cu\u00e1ntas casas caen! \u00a1Qu\u00e9 terremotos! \u00a1Qu\u00e9 hurac\u00e1n!,<\/span><\/p>

    \u00bfen qu\u00e9 montes estamos, Madre. Caen trozos de este monte\u2026 \u00a1c\u00f3mo huyen todos para salvarse! \u00bfEstamos en Gerona?, \u00bfqu\u00e9 monte es este, \u00a1c\u00f3mo caen las casas!\u00a0 \u00bf\u00c9sta\u00a0 tambi\u00e9n, Madre?, \u00bfy esa tambi\u00e9n? \u00a1Qu\u00e9 alegr\u00eda, ah!, para los tuyos, \u00a1qu\u00e9 d\u00edas, Madre! M\u00e1s \u00bfa d\u00f3nde me llevas?; no me lleves. \u00a1Ay, cu\u00e1nta sangre!, \u00a1qu\u00e9 horror!, como quedan carbonizados\u2026 Esa otra ni\u00f1a queda blanca; \u00bfse salvar\u00e1? \u00bfS\u00ed, Madre, s\u00ed? Parece que ha llovido sangre. \u00bfQu\u00e9 dices, Madre, que pronto vendr\u00e1 la guerra mundial y que en ellas\u00a0 San Miguel cortar\u00e1 la cabeza de muchos malos?, \u00bfque luego habr\u00e1 peste, huracanes, tres d\u00edas de oscuridad?, \u00a1qu\u00e9 horror!<\/span><\/p>

    9 Julio 1933. \u201cMe comunic\u00f3 que est\u00e1n prepar\u00e1ndose los malos para salir contra los buenos, y que estemos dispuestos a defender la Religi\u00f3n; que nos dar\u00e1 luz suficiente para bien obrar a los que la hemos escuchado, y viceversa a los que no la han atendido;<\/span><\/p>

    y que muchos de los que ahora r\u00eden a causa de lo de Ezquioga, llorar\u00e1n despu\u00e9s, por miedo al castigo; pero que, por esto Jes\u00fas no les dar\u00e1 luz suficiente para arrepentirse\u201d.<\/span><\/p>

    Despu\u00e9s me llev\u00f3 a un sitio donde no se ve\u00eda m\u00e1s que agua y cielo; y vi como el agua arrastraba muchos muertos; y caminando sobre las aguas, vi a muchos negros en guerra que mataban a los misioneros.<\/span><\/p>

    12 Julio 1933. \u201cMe dijo que pronto entrar\u00e1n los comunistas en Espa\u00f1a;\u00a0 que estos\u00a0 han empezado a cometer maldades, siendo muchos los que ciegos, no se dan cuenta de que, por encima del comunismo, vendr\u00e1 el castigo; y que del Sagrado Coraz\u00f3n de Jes\u00fas brota, d\u00eda y noche, un manantial de gracias, que se derraman sobre los que somos de \u00c9l, pero que procuremos corresponderlas, que \u00c9l nos lo recompensar\u00e1\u201d.<\/span><\/p>

    13 Julio 1933. \u201cMe particip\u00f3 que han ocurrido muchas desgracias, lo cual es se\u00f1al de que a Jes\u00fas se le agota su misericordia; y que se acerca el tiempo de las mayores contrariedades para los cat\u00f3licos, m\u00e1s que estemos preparados para\u00a0 defender\u00a0 la\u00a0 Religi\u00f3n con las armas espirituales, siendo en ello valientes, pues Nuestra Madre nos ayudar\u00e1\u201d.<\/span><\/p>

    14 Julio 1933. \u201cA\u00f1adi\u00f3 que muchos van acobard\u00e1ndose con las contrariedades que ocurren; que se han dado se\u00f1ales de que pronto viene el castigo; que algunos de los videntes ser\u00e1n m\u00e1rtires, ya que muy pronto se levantar\u00e1n inmensas calumnias contra todos los videntes y el que est\u00e1 aclarando su obra; que muchos de los videntes, que empezaron\u00a0 bien, han ca\u00eddo por el orgullo; puesto que, al \u00faltimo, no pudiendo ya m\u00e1s,\u00a0 han cerrado contra el que Ella ha puesto para aclarar su Obra; y Ella, en castigo, les ha quitado las visiones buenas, quedando con algunas malas; y que el demonio los tiene cogidos, como juguetes, haciendo con ellos todo lo que puede\u201d.<\/span><\/p>

    15 Julio 1933. \u201cAfirm\u00f3 que pronto se cerrar\u00e1n las iglesias, siendo las primeras en ser cerradas las de Catalu\u00f1a, la cual ser\u00e1 el sitio donde se cometan m\u00e1s barbaridades contra\u00a0 la Religi\u00f3n; aunque en Ella posea tres tesoros en tres almas, que la quieren mucho, y que son tres que se han ofrecido a Jes\u00fas por v\u00edctimas; y que a causa de estas tres almas, Catalu\u00f1a ser\u00e1 menos castigada de lo que merece. Termin\u00f3 dici\u00e9ndome\u00a0 que\u00a0 construyamos en nuestro coraz\u00f3n las armas con las que tengamos que defender la Religi\u00f3n\u201d.<\/span><\/p>

    16 Julio 1933. \u201cPrometi\u00f3 que Ella, como Madre de misericordia, si andamos\u00a0 como\u00a0 nos manda, nos proteger\u00e1 en vida, nos auxiliar\u00e1 en la hora de la muerte, y despu\u00e9s de\u00a0 \u00e9sta nos salvar\u00e1; que sigamos defendi\u00e9ndola con las armas que construyamos en\u00a0nuestros corazones, y Ella nos recompensar\u00e1; que, sobre todo, debemos ser pacientes, pues la paciencia todo lo alcanza; y que si vivimos as\u00ed, nada nos espantar\u00e1, ya que Ella estar\u00e1 a nuestro lado\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    19 Julio 1933. \u201cMe dijo que los que somos de Jes\u00fas roguemos para que se salven muchos de los que se hallan en condiciones de condenarse, y que nuestras s\u00faplicas, especialmente ahora, ser\u00e1n atendidas; y que para cuando venga el hambre,\u00a0 casi\u00a0 todos\u00a0 los cat\u00f3licos (de verdad) se hallar\u00e1n fuera de Espa\u00f1a, puesto que Jes\u00fas nos quiere salvar de la mayor parte de los castigos, por mediaci\u00f3n de los ruegos\u00a0 que se han\u00a0 practicado en el Monte de las Apariciones los cuales han sido o\u00eddos\u201d.<\/span><\/p>

    20 Julio 1933. \u201cInsisti\u00f3 que los tiempos adelantan y nadie se da cuenta de\u00a0 los\u00a0 peligros que corremos. Pronto, esos que est\u00e1n durmiendo, se dar\u00e1n cuenta, aunque entonces nada les valdr\u00e1. Despu\u00e9s me particip\u00f3 que me iba a llevar en esp\u00edritu a Ezquioga\u201d. \u00bfA Ezquioga me vas a llevar?, \u00bfpronto llegaremos?; ya hemos llegado. All\u00ed no hay m\u00e1s que un hombre que est\u00e1 durmiendo; y al preguntarle yo qui\u00e9n era, contest\u00f3 que Silvestre. Y, \u00bfahora, a d\u00f3nde vamos?… \u00bfa Zum\u00e1rraga?, \u00bfa ver al P. Burguera? Llegamos all\u00e1. \u00c1breme T\u00fa, Madre. Ay, est\u00e1 escribiendo. Yo le tiro de la mano, pero \u00e9l no se da cuenta. Qu\u00e9 raro..; c\u00f3mo escribe\u2026; si supiera que estoy aqu\u00ed\u2026; a un lado tiene a un \u00e1ngel\u00a0 y al otro al diablo. \u00bfQu\u00e9 haces t\u00fa aqu\u00ed? (al diablo); \u00bfqu\u00e9 dices? \u2014\u00bfQu\u00e9 reviente?\u2014 Revienta t\u00fa. \u00bfQu\u00e9 est\u00e1s pegando hojas para incluirlas en su libro? \u2014\u00a1Canalla!\u2014 Y, t\u00fa, Jes\u00fas, est\u00e1s encima de su cabeza y le explicas algo\u2026 \u2014Pero, ese demonio, qu\u00edtalo, Madre,\u00a0\u00a1qu\u00e9 feo es!\u2014 Despu\u00e9s, me trajo otra vez a Gerona, donde apareci\u00f3 el Ni\u00f1o Jes\u00fas.<\/span><\/span><\/p>

    21 Julio 1933. \u201cMe afirm\u00f3 que Ella aparece en muchos sitios de Espa\u00f1a y no s\u00f3lo en Espa\u00f1a, sino del mundo. \u2014En 1934 s\u00f3lo aparece en Ezquioga y con motivo de Ezquioga (Revel. de abril de 1934)\u2014. Que por todas partes hay muchas revelaciones, siendo esto se\u00f1al de que pronto suceder\u00e1n cosas grandes. Me repiti\u00f3 que el que tiene\u00a0 que\u00a0 separar\u00a0 a\u00a0 los falsos videntes de los aut\u00e9nticos tendr\u00e1 que sufrir gran persecuci\u00f3n, pues los malos se revolver\u00e1n contra \u00e9l, vali\u00e9ndose de sacerdotes y obispos, y armar\u00e1n una gran revoluci\u00f3n contra todos los verdaderos; pero que despu\u00e9s quedar\u00e1n vencidos y avergonzados, y muchos se suicidar\u00e1n; y que algunos que han andado hablando contra lo de Ezquioga se convencer\u00e1n, y cuando se convenzan, se convencer\u00e1n tambi\u00e9n todos los que con sus conferencias, se pusieron contra la Virgen\u201d. Despu\u00e9s apareci\u00f3 el Ni\u00f1o Jes\u00fas, y\u00a0 me dijo\u00a0 que trajera papel y l\u00e1piz y escribiera el mensaje siguiente:<\/span><\/p>

    \u201cVuestro Jes\u00fas os llama. Corred hacia \u00c9l. Quiero deciros a todos, hijos m\u00edos, que corr\u00e9is tiempos muy malos, y hab\u00e9is de sacar la cuenta de lo que me ten\u00e9is que<\/span><\/p>

    presentar. \u00bfDec\u00eds que sois m\u00edos, y en vuestros corazones reina el demonio?… No, hijos queridos; no puedo consentir eso\u2026 Pronto esos cines y teatros que frecuent\u00e1is diariamente, ser\u00e1n enterrados\u2026 Y vosotros, ap\u00f3stoles M\u00edos, en vez de dar ejemplo, \u00bflo quit\u00e1is? No puede ser as\u00ed, hijos queridos. \u00bfAcaso os ense\u00f1\u00e9 as\u00ed, o es que quer\u00e9is obrar de distinto modo al que os ense\u00f1\u00e9? Muchos de vosotros est\u00e1is ciegos y quer\u00e9is dormiros en los placeres del mundo\u2026.; muchos no sois verdaderos ap\u00f3stoles m\u00edos, y ninguno de los que est\u00e9is dormidos en los placeres del mundo sois del agrado de Mi Padre celestial. Yo, alg\u00fan d\u00eda, os pedir\u00e9 cuenta de todo esto. Y t\u00fa, Espa\u00f1a querida, arrepi\u00e9ntete de tus extrav\u00edos, y mientras oigas Mi silbido te bendice T\u00fa Jes\u00fas\u201d.<\/span><\/p>

    Luego la Sant\u00edsima Virgen a\u00f1adi\u00f3 el que sigue: \u201cVuestra Madre, que mucho os quiere, os llama, hijos del alma. Quiero deciros a todos que, como ovejas obedientes, oig\u00e1is el silbido del Buen Pastor; pero no os separ\u00e9is de \u00c9l, pues \u00c9l, si os extravi\u00e1is, no vendr\u00e1 a buscaros. Si vosotros vais a encontrarle, \u00c9l os acoger\u00e1 amoroso. \u00c9l reg\u00f3 toda la tierra con su Sangre, y vosotros le rechaz\u00e1is. \u00bfQu\u00e9 quer\u00e9is m\u00e1s que haga? \u00bfNo ten\u00e9is bastante con\u00a0 lo que os ha hecho? \u00bfAcaso est\u00e1 obligado a hacer algo por vosotros? Y vosotros, \u00bfqu\u00e9 hac\u00e9is por \u00c9l?, \u00bfqu\u00e9 le ofrec\u00e9is? Yo no ceso de pedir por vosotros, pero llegar\u00e1 el d\u00eda que no ser\u00e1n bastantes las oraciones, y os coger\u00e1 lo que merec\u00e9is. Como Madre, soy todo misericordia, pero a Jes\u00fas se la hab\u00e9is quitado vosotros. Ahora, queridos hijos, arrojaos\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 a los pies de Jes\u00fas, abandonaos en sus brazos y pedidle perd\u00f3n de todos vuestros extrav\u00edos. Y os bendice vuestra tierna y amoros\u00edsima Madre Mar\u00eda\u201d.<\/span><\/p>

    22 Julio 1933. \u201cMe dijo que muchos piden a Jes\u00fas luz para ver claras las cosas. Jes\u00fas no quiere enviar m\u00e1s luz a la tierra; est\u00e1 cansado de enviarla, pues los hombres la rechazan. \u00c9l pensar\u00e1 cu\u00e1ndo ha de mandarnos luz, pero que no la esperemos mientras esto est\u00e1 as\u00ed; \u00c9l nos la enviar\u00e1 cuando est\u00e9 todo esto arreglado. Despu\u00e9s apareci\u00f3 el Ni\u00f1o Jes\u00fas y me dijo que escribiera un Mensaje que \u00c9l me dictar\u00e1\u201d.<\/span><\/p>

    23 Julio 1933. \u201cAfirm\u00f3 que habiendo empezado a ser expulsadas de Espa\u00f1a las \u00d3rdenes Religiosas, \u00e9stas no piensan que las arrojar\u00e1n de ella a todas. Que cuando los cat\u00f3licos tengamos que huir de Espa\u00f1a en busca del desierto, conoceremos a un gran hombre, que luego que hayan pasado los castigos, y antes que los dem\u00e1s, volver\u00e1 a Espa\u00f1a; y aqu\u00ed empezar\u00e1 a trabajar con los pocos que habr\u00e1n quedado convirtiendo a muchos.\u201d<\/span><\/p>

    24 Julio 1933. \u201cA\u00f1adi\u00f3 que la gente se va dando cuenta que estamos en malos tiempos, y que no obstante sigue siendo lo mismo con sus malvadas costumbres. Que\u00a0 esto no se arreglar\u00e1 hasta que Jes\u00fas ponga en el trono a un gran hombre, el rey-general<\/span><\/p>

    de todo el mundo, y entonces ser\u00e1 cuando \u00c9l reinar\u00e1 en el mundo. Que este rey tendr\u00e1 otro que le ayude, quien ir\u00e1 por el mundo convirtiendo a la gente, y que a los que no quieran someterse a la Iglesia Cat\u00f3lica les mandar\u00e1 muchos castigos, quitando a muchos la vida.\u201d<\/span><\/p>

    25 Julio 1933. \u201cRepiti\u00f3, que despu\u00e9s del reinado de Jes\u00fas en Espa\u00f1a, vendr\u00e1 una persecuci\u00f3n muy grande; y despu\u00e9s de esta persecuci\u00f3n el fin del mundo. Pero que no morir\u00e1n todos, sino que Dios, luego del Juicio, dejar\u00e1 en el mundo a muchos justos para que le glorifiquen, viviendo en la tierra mil a\u00f1os, durante los cuales reinar\u00e1 la paz.\u201d<\/span><\/p>

    26 Julio 1933. \u201cA\u00f1adi\u00f3 que, despu\u00e9s del reinado del Coraz\u00f3n de Jes\u00fas, vendr\u00e1 el Anticristo, qui\u00e9n turbar\u00e1 la paz, y con \u00e9l cobrar\u00e1n fuerza los malos; a \u00e9stos no dar\u00e1 luz, pero s\u00ed a los buenos, para conocer al Anticristo; y que los que entonces quieran servir a Dios tendr\u00e1n que separarse de sus familias, amigos y conocidos, y huir a los desiertos.\u201d<\/span><\/p>

    27 Julio 1933. \u201cAfirm\u00f3 que Dios est\u00e1 preparando al Gran Monarca, el cual tendr\u00e1 que reinar con humillaciones y sacrificios; que el Gran Monarca fue malo en su juventud, pero ahora, hace mucho bien y dominar\u00e1 al mundo entero, el cual se ver\u00e1 obligado a obedecer y a adorar al Dios verdadero, y que luego, ir\u00e1 al \u00c1frica a convertir a la gente, y los que no quieran convertirse llevar\u00e1n gran castigo.\u201d<\/span><\/p>

    28 Julio 1933. \u201cAfirm\u00f3 que el Gran Monarca tendr\u00e1 otro compa\u00f1ero muy bueno, que le ayudar\u00e1 a difundir la Religi\u00f3n, y por defender a \u00e9sta, morir\u00e1 crucificado; que cuando estemos en el desierto, conoceremos al gran Monarca, y antes de que los dem\u00e1s hayan vuelto del desierto, \u00e9l vendr\u00e1 a Espa\u00f1a a recoger a todos los que quedar\u00e1n destrozados por los castigos; que Dios, luego de poco tiempo de que aqu\u00e9l haya vuelto del desierto, le coger\u00e1 de su mano, y le pondr\u00e1 en el trono; y que mientras \u00e9l est\u00e9 en el trono, reinar\u00e1 Jes\u00fas.\u201d<\/span><\/p>

    29 Julio 1933. \u201cMe particip\u00f3 que Jes\u00fas est\u00e1 preparando a muchas almas para que esparzan la Religi\u00f3n; que el demonio trabaja mucho y enredar\u00e1 a otras almas, que la\u00a0 gente tiene por varones espirituales, habiendo enredado ya a muchas, las cuales no volver\u00e1n a buen camino; que Jes\u00fas tiene muchas v\u00edctimas que se han ofrecido por los pecadores las cuales han sido aceptadas, pues necesita sangre inocente; y que muchos ven que corremos malos tiempos, pero que no quieren dejar sus costumbres escandalosas; quieren amar a Dios, pero sin sacrificios, lo cual no quiere Jes\u00fas.\u201d<\/span><\/p>

    31 Julio 1933. \u201cMe ense\u00f1\u00f3 que s\u00f3lo mientras reine Jes\u00fas tendremos paz los buenos, no obstante que los malvados tendr\u00e1n que sufrir mucho; que despu\u00e9s de este Reinado,\u00a0tomar\u00e1n fuerza otra vez los malos; y entonces ser\u00e1 cuando\u00a0 el\u00a0 Anticristo vendr\u00e1 a turbar la paz de los buenos; que tendremos que huir a los desiertos los que queramos servir a Dios, pues que los hombres no se entender\u00e1n; y que despu\u00e9s de\u00a0 esta\u00a0 persecuci\u00f3n\u00a0 vendr\u00e1 muy pronto el Juicio.\u201d<\/span><\/span><\/p>

    1 Agosto 1933. \u201cMe repiti\u00f3 que ha habido muchas desgracias, pues adelantan los tiempos en el mal. Que pronto se ver\u00e1n confundidos los que no\u00a0 aman de veras\u00a0 a Jes\u00fas,\u00a0 ya que vendr\u00e1 muy pronto una persecuci\u00f3n muy grande contra los cat\u00f3licos, y los que\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 no le aman de veras, le negar\u00e1n por librarse de los castigos que impondr\u00e1n a los que no\u00a0\u00a0 le nieguen; que muchos de los que son tenidos por varones espirituales, cuando llegue la hora de dar la vida por Cristo, le negar\u00e1n, pues el demonio trabaja mucho con\u00a0 ellos; y\u00a0 que a causa de los castigos que Dios nos mandar\u00e1, muchos se revolver\u00e1n contra \u00c9l; y entonces ser\u00e1 cuando Jes\u00fas descargar\u00e1 mayores penas para que se humillen, pero ellos antes de hacerlo, se suicidar\u00e1n.\u201d<\/span><\/p>

    2 Agosto 1933. \u201cDe nuevo me dijo que los malos se est\u00e1n preparando para la guerra, pero que Dios ayudar\u00e1 a los buenos; que muchos\u00a0 de estos tendr\u00e1n que dar su vida por\u00a0\u00a0 \u00c9l, quien les recompensar\u00e1; que tal guerra ser\u00e1 mundial y no podr\u00e1n hacer lo\u00a0 que\u00a0 quieran, ya que Dios est\u00e1 por encima de todos: Se declarar\u00e1 primeramente en Italia y despu\u00e9s entrar\u00e1 en Espa\u00f1a; y durante ella, har\u00e1 Dios muchos milagros para salvar a los buenos, convirti\u00e9ndose alguno de los malos.\u201d<\/span><\/p>

    4 Agosto 1933. \u201cMe dijo que las olas de ternura infinita est\u00e1n encerradas en Jes\u00fas y quiere derramarlas; mas que encuentra pocos corazones que quieran\u00a0 recibirlas,\u00a0 por\u00a0 estar encogidos por el ego\u00edsmo, cerrados por el orgullo, replegados sobre s\u00ed mismos y faltos de fe en su amor; y por eso, descargar\u00e1 Jes\u00fas su justicia sobre los hombres, pues\u00a0 hay muy pocos corazones que le amen de veras. Que pronto la luz se apagar\u00e1 completamente, y el r\u00edo pasar\u00e1 sin luz, pero presto, sus olas se enredar\u00e1n\u00a0 e ir\u00e1n de\u00a0 cabeza abajo.\u201d<\/span><\/p>

    5 Agosto 1933. \u201cA\u00f1adi\u00f3 que Jes\u00fas se cansa de esperar; que nuestro amor a Jes\u00fas ha de ser de reconocimiento, uni\u00f3n, conformidad, intimidad y preferencia, no cans\u00e1ndonos de amarle cada vez m\u00e1s, pues que \u00c9l nos ama muy de veras. Este amor nos transformar\u00e1 en su bondad y nos har\u00e1 vivir de su vida, irradiando misericordiosa caridad; que Jes\u00fas no pone su gracia donde le place, sino donde ve que le aman de veras; y que nos recojamos en su divina presencia, mir\u00e1ndole a \u00c9l y suplic\u00e1ndole humildemente.\u201d<\/span><\/p>

    Los Cruc\u00edferos. El Gran Monarca. El Anticristo. Consejos<\/span><\/p>

    6 Agosto de 1933. \u201cAfirm\u00f3 que, luego que hayan pasado los castigos, habr\u00e1 una sola religi\u00f3n (Orden) llamada de los Cruc\u00edferos, que salvar\u00e1 al mundo entero, predicando la verdadera fe y conquistando a ella a las almas. El jefe de los dichos Cruc\u00edferos ser\u00e1 un hombre muy santo, quien despu\u00e9s de su apostolado, morir\u00e1 crucificado en las puertas de Bel\u00e9n. En los \u00faltimos tiempos todo el mundo hablar\u00e1 un mismo idioma.\u201d<\/span><\/p>

    7 Agosto 1933. \u201cMe encareci\u00f3 seamos humildes. Nada perderemos por practicar actos de humildad y obediencia; por el contrario lo ganaremos\u00a0 todo,\u00a0 ya que ganaremos su coraz\u00f3n, y as\u00ed aceleraremos su hora. Se admiran algunos de que Yo escoja siempre a\u00a0 los m\u00e1s pobres, los m\u00e1s desprovistos de medios humanos para levantar mi Obra; pero esto es normal, a fin de que no se\u00a0 enga\u00f1e nadie, cargando a su propia cuenta la que es\u00a0 un don divino.\u201d<\/span><\/p>

    Luego, apareciendo el Ni\u00f1o Jes\u00fas, me dijo: \u201cVenid a M\u00ed. Yo soy infinitamente bueno. No quiero m\u00e1s que el bien. \u00bfQui\u00e9n temer\u00e1 venir a M\u00ed y hacer mi voluntad? El diablo \u00fanicamente es quien intenta apartaros de M\u00ed y hacer mi voluntad.\u201d<\/span><\/p>

    8 Agosto 1933. De nuevo, se me apareci\u00f3 el Ni\u00f1o Jes\u00fas y me dijo: \u201cQuisiera levantar una gran cruzada cristiana, bien comprendida y bien vivida. Quiero haceros vivir de mi Evangelio y atraeros a mi amor. Si no hac\u00e9is m\u00e1s es porque no me am\u00e1is bastante ni os transform\u00e1is en mi bondad; pero si no me am\u00e1is, cuanto deb\u00e9is y pod\u00e9is, es porque no\u00a0 me conoc\u00e9is de verdad. Querer comprenderme es muy sencillo: Nada hago de\u00a0 nuevo\u00a0 m\u00e1s que repetir lo que ya sab\u00e9is, lo que deb\u00e9is hacer, lo que en mi Evangelio os he declarado, lo que os ense\u00f1a mi Iglesia. No quiero otra cosa sino haceros verdaderos de\u00a0\u00a0 mi Padre celestial.\u201d<\/span><\/p>

    9 Agosto 1933. A\u00f1adi\u00f3: \u201cYo soy el infinitamente bueno, sabio y omnipotente. Os amo, siendo vuestro Salvador, vuestro Se\u00f1or, vuestro Dios. Para mi gloria os he creado, y desde toda la eternidad os he amado con una caridad incomparable, y por eso os he atra\u00eddo con misericordia. Nunca tendr\u00e9is exceso de confianza en vuestro Dios tan bueno y misericordioso, porque la verdadera confianza est\u00e1 fundada en la verdad, y esta verdad eterna es que soy infinitamente bueno. Si viv\u00eds de mi Evangelio mis ense\u00f1anzas dar\u00e1n fruto en vosotros, y comprender\u00e9is que si hab\u00e9is sido favorecidos m\u00e1s que otros muchos, habiendo sido atra\u00eddos por mi amor, deb\u00e9is esforzaros m\u00e1s tambi\u00e9n por darme y suplir por los que conocen el don de Dios.\u201d<\/span><\/p>

    10 Agosto 1933. Nuestra Se\u00f1ora dijo, \u201cque ahora empiezan las se\u00f1ales de\u00a0 los\u00a0 castigos y que ya casi estamos en ellos\u201d. Luego a\u00f1adi\u00f3 Jes\u00fas: \u201cLo que m\u00e1s me lastima el\u00a0coraz\u00f3n es que los ni\u00f1os se aparten de M\u00ed, y quiero que me conduzc\u00e1is a los peque\u00f1os, pues me agrada mucho la inocencia, principalmente los enfermos. Estos son los que tienen m\u00e1s necesidad de conocerme en mi Bondad. Yo quiero ayudarles, consolarles como lo hice en mi vida mortal. Lo propio de Mi Coraz\u00f3n es hacer bien, consolar al que sufre, endulzar sus hieles amargas y mostrarme generoso con los que me aman mediante el sufrimiento. No hay consuelo comparable al que sostiene el alma y reanima a sufrir cristianamente con fe y amor. Ayudadme vosotros a llegar a estos que tanto amo, dejadles como fruto de mi paso palabras que les dar\u00e1 valor en los sufrimientos\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    11 Agosto 1933. Me dijo Nuestro Se\u00f1or: \u201cHaced mucha oraci\u00f3n. Las oraciones de mi Iglesia son bellas y profundas; pero muchas veces no las hac\u00e9is m\u00e1s que de una manera superficial. Mediante mi Iglesia y sus oraciones os predico e ilumino. Yo he preparado el pan de los hijos, lo que no impide que cada uno se asimile lo que convenga seg\u00fan su necesidad. Tened el coraz\u00f3n grande y bueno. Quiero hablaros a vuestras almas y haceros comprender cu\u00e1n dulce y bueno soy en mi misericordia. Si eres pecador, te espera, te perdona, se ofrece por ti, y dice al Padre celestial: Perd\u00f3nale porque no te conoc\u00eda, porque ignoraba cu\u00e1n bueno eres. Y vosotros, amad\u00edsimos m\u00edos, hijos de mi ternura: Mirad c\u00f3mo la caridad me tiene preso en el Altar. All\u00ed me ofrezco por vosotros. Por vosotros renuevo la ofrenda del Calvario, con todo el amor del Padre, que es tambi\u00e9n el M\u00edo, el cual en vosotros he puesto por mi Esp\u00edritu Santo. Abrid vuestros senos a estas olas de ternura infinita, en que quiero sumergir a vuestras almas. Sed buenos, sed santos, como Yo soy bueno y santo\u201d.<\/span><\/p>

    12 Agosto 1933. Me dijo Jes\u00fas: \u201cMi amor hacia mis peque\u00f1as criaturas es un amor lleno de ternura. \u00bfNo veis que me inclino\u00a0 con\u00a0 preferencia hacia los m\u00e1s peque\u00f1itos? As\u00ed lo ha cantado Mar\u00eda, amor\u00a0 tierno y fuerte, y tanto m\u00e1s tierno cuanto m\u00e1s fuerte. Tal\u00a0 es\u00a0 el amor que Yo quiero comunicaros. Cuanto m\u00e1s fuerte sea vuestro amor hacia M\u00ed y las almas, tanto m\u00e1s tierno ser\u00e1 y verdadero, sin temor a flaqueza. Hab\u00e9is comprendido Mi divina lecci\u00f3n, que por s\u00ed misma rechaza toda objeci\u00f3n. \u00bfQui\u00e9n, despu\u00e9s de esto, alegar\u00e1 que esta ternura es sin\u00f3nima de debilidad, habiendo dicho Yo que no reconocer\u00e9 esta ternura que viene de M\u00ed, donde no se encuentre tambi\u00e9n la fortaleza? El amor es fuerte como la muerte, y su misma ternura es la que induce a todos\u00a0 los\u00a0 hero\u00edsmos\u00a0 y\u00a0 sacrificios\u201d.<\/span><\/p>

    13 Agosto 1933. Me dijo Jes\u00fas: \u201cAbierta el alma para recibir estas olas de ternura, que son luz de mi bondad, de mi caridad misericordiosa, \u00bfno os conmov\u00e9is vi\u00e9ndoos objeto de tal amor, teatro de tantos beneficios, a pesar de vuestra miseria? Este\u00a0contacto con mi ternura infinita, que tampoco merec\u00e9is, que tal vez acab\u00e1is de serme infieles, es lo que producir\u00e1 en vosotros la perfecta contrici\u00f3n.\u00a0 Este\u00a0 dolor\u00a0 purifica\u00a0 vuestra alma y os purificar\u00e1 para ser m\u00e1s vigilantes, para orar con mayor instancia y confiaros a Mar\u00eda, a fin de que os ayude para no volver a caer. El que recibe en su alma\u00a0\u00a0 las olas de mi amor, de mi ternura infinita, \u00bfpodr\u00e1 dejar de hacer todo cuanto de \u00e9l dependa para no disgustarme, para no rehusarme nada? \u00bfNo se sentir\u00e1 tambi\u00e9n desbordado de ternura para con su pr\u00f3jimo? Entonces no volver\u00e1 a amar\u00a0 a su pr\u00f3jimo\u00a0 por inclinaci\u00f3n natural, sino por el movimiento del Esp\u00edritu Santo, amor esencial que le\u00a0\u00a0\u00a0 es comunicado, amor lleno de ternura del cual esta alma se siente amada.\u201d<\/span><\/span><\/p>

    14 Agosto 1933. Insisti\u00f3 la Madre en \u201cque quiere oraci\u00f3n, mucha oraci\u00f3n, pues que\u00a0\u00a0 la oraci\u00f3n ha de salvar al mundo.\u201d Jes\u00fas continu\u00f3: \u201cYo quiero daros el secreto de\u00a0 amarme, que no es otro que aplicaros a conocerme en Mi bondad, practicando muchos actos de fe en esta bondad, en M\u00ed amor, en M\u00ed misericordia para con los humildes, los caritativos, los obedientes. Los peque\u00f1os, orad, suplicad y entregaos por Mar\u00eda a Mi misericordioso amor. Franqueadas vuestras almas, dadme corazones vac\u00edos por la humildad, dilatados por la caridad, preparados por la obediencia; porque no me agradan los frutos de la voluntad propia, que no son mis frutos, los de Mi voluntad\u201d.<\/span><\/p>

    15 Agosto 1933. Comenz\u00f3 la Virgen dici\u00e9ndome. \u201cTodos contin\u00faan dormidos y Jes\u00fas se cansa de esperar\u201d, quien continu\u00f3: \u201cNo se\u00e1is ego\u00edstas; pensad en estas pobres almas que no me conocen, y a las que se me presenta como un Se\u00f1or r\u00edgido y severo; que no\u00a0\u00a0 me aman, que no me sirven, sino con violencia, y a\u00fan as\u00ed no lo hacen; huyen y temen darse a M\u00ed. Mirad a vuestra Madre. En el cielo no est\u00e1 inactiva, vela por vosotros sin\u00a0 cesar, ejerciendo el oficio de Mediadora por los pobres pecadores. Ella quisiera que vosotros la ayudarais. Haced pasar por Mar\u00eda vuestros sacrificios y actos de obediencia. Por Mar\u00eda consagraos a M\u00ed, cada vez m\u00e1s en calidad de peque\u00f1os siervos de Cristo-Rey. Orad mucho; rogad por intercesi\u00f3n de Mar\u00eda para que el due\u00f1o de\u00a0 la\u00a0 mies\u00a0 env\u00ede\u00a0 obreros. Orad para que todas las ovejas errantes encuentren el redil de la Iglesia\u201d.<\/span><\/p>

    16 Agosto 1933. La Madre me manifest\u00f3: \u201cMuy pronto vendr\u00e1n los castigos; decidlo\u00a0 al p\u00fablico para que se prepare, aunque a la mayor parte no les haga provecho\u201d. Jes\u00fas continu\u00f3: \u201cVosotros, hijos m\u00edos, los que cre\u00e9is en las Apariciones de vuestra\u00a0 Madre, hab\u00e9is de dar ejemplo, hab\u00e9is de sobresalir en obediencia y humildad, pues sobre vosotros tengo designios muy grandes. Los malos pretenden arrojarme de todas partes y pasarse sin M\u00ed, Vosotros, los m\u00edos, ponedme siempre el primero. Tambi\u00e9n quieren una falsa libertad y dominar a los dem\u00e1s para ponerlos en mayor esclavitud; pero vosotros,\u00a0los m\u00edos, manteneos s\u00fabditos de vuestro Cristo y ser\u00e9is libres de la esclavitud de vicios y pasiones, y os aseguro que tendr\u00e9is el valor de vuestras opiniones. Quiero daros cruz, pues sin cruz no os quiero; y vosotros demostrad con vuestra conducta que mi yugo es suave y mi carga ligera. Servidme con pasi\u00f3n, alegr\u00eda, santidad y amor\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    17 Agosto 1933. Jes\u00fas me dijo: \u201cQuiero que se\u00e1is peque\u00f1as siervas de Cristo-Rey. Profunda y llena es la significaci\u00f3n de \u201cpeque\u00f1os siervos\u201d. Comprende la abnegaci\u00f3n de s\u00ed mismo para no hacer m\u00e1s que Mi divina voluntad. Dichoso aqu\u00e9l que oye la palabra de Dios y la pone en pr\u00e1ctica. Os prometo que derramar\u00e9 mi bendici\u00f3n all\u00ed donde la imagen de Mi Coraz\u00f3n est\u00e9 expuesta y honrada. Cu\u00e1nto m\u00e1s os acerqu\u00e9is al estado de inocencia por la pureza de vuestra vida y uni\u00f3n m\u00eda, tanto m\u00e1s participar\u00e9is de la verdadera vida que es todo caridad\u201d.<\/span><\/p>

    18 Agosto 1933. Nuestra Se\u00f1ora me declar\u00f3: \u201cHan empezado castigos por el extranjero y tambi\u00e9n por Espa\u00f1a, aunque nadie se da cuenta. Preparaos, pues pronto vendr\u00e1 el hambre\u201d. Jes\u00fas continu\u00f3: \u201cQuiero muchos corazones vac\u00edos por la humildad y ensanchados por la caridad. Quiero corazones que palpiten s\u00f3lo para M\u00ed, que lleven mi cruz. Y estos corazones, \u00bfsabes para qu\u00e9 los quiero? Por m\u00e1s que digas no acertar\u00e1s. Los quiero para guardar en ellos mis tesoros; quiero depositar en ellos mis alhajas. \u00bfY sabes qu\u00e9 son esas alhajas? Pues son todas esas gracias que Yo\u00a0 quiero\u00a0 derramar\u00a0 sobre\u00a0 la tierra, y encuentro pocos corazones que Me acepten y me sirvo de \u00e9stos para depositarlos\u201d.<\/span><\/p>

    19 Agosto 1933. Me manifest\u00f3 la Madre: \u201cDespu\u00e9s de una sequ\u00eda grande,\u00a0 que\u00a0 vendr\u00e1 pronto, habr\u00e1 hambre\u201d. Jes\u00fas continu\u00f3: \u201cLas olas de la revoluci\u00f3n braman enfurecidas en torno de la desmantelada nave doctrinaria, que s\u00f3lo lleva a bordo, como defensa, la discordia, agrupadas debajo de ense\u00f1anzas rasgadas, donde se lee como un recuerdo que sirvi\u00f3 de grito de combate. Y las olas, que se enfurecen y avanzan, que han tra\u00eddo sobre sus espumas la revoluci\u00f3n a Espa\u00f1a, acerca de cuyo apellido\u00a0 guardan\u00a0 silencio sus partidarios, como \u00fanica manera de encontrar en la mudez el acuerdo, no es m\u00e1s que una la que avanza, porque la empujan otras m\u00e1s grandes y enrojecidas que vienen detr\u00e1s. No habr\u00e1 extendido el velo de sus espumas sobre la playa y las rocas que hayan recogido los restos desechos de la nave doctrinaria,\u00a0 sin\u00a0 que\u00a0 una\u00a0 cordillera movible de aguas encrespadas la envuelvan, y otra a\u00fan m\u00e1s grande\u00a0 avasalle\u00a0 a\u00a0 la\u00a0 anterior. Y lanzando bramidos aterradores, se desborde hundiendo toda la llanura\u201d.<\/span><\/p>

    20 Agosto 1933. En estas siguientes visiones, hasta que se avise, me habla primero la Virgen conceptos particulares, para continuar Jes\u00fas y dar, al fin, la bendici\u00f3n. Dice as\u00ed: \u201cLaMItalia, regada con la sangre de tantos m\u00e1rtires, es la esclava de una demagogia diab\u00f3lica, que ha llegado a constituirse en consejera del Poder; y la pobre Espa\u00f1a, que palmo a palmo ha sido conquistada por la Cruz, se ha convertido en pueblo de ilotas, que corre al precipicio y lucha por romper sus tradiciones, su historia y su propia manera de ser. \u00a1Oh, santos Cruc\u00edferos!, vosotros destruir\u00e9is la maldita secta mahometana; vosotros pondr\u00e9is fin a toda suerte de herejes y sectas del mundo, y ser\u00e9is el acabamiento de todos los tiranos; vosotros pondr\u00e9is silencio con perpetua paz por todo el universo mundo; vosotros har\u00e9is santos a todos los hombres por fuerza o voluntad. \u00a1Oh, gente santa, oh gente bendita de la Sant\u00edsima Trinidad! Ser\u00e1 el jefe fundador gran capit\u00e1n de gente santa, llamada los Santos Cruc\u00edferos de Jesucristo. Obtendr\u00e1n el dominio de todo el mundo, tanto temporal como espiritual. Estos siervos de Dios limpiar\u00e1n el mundo con la muerte de un n\u00famero infinito de rebeldes. El Jefe y Fundador de esta milicia ser\u00e1 el gran Reformador de la Iglesia de Dios\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    21 Agosto 1933. \u201c\u00a1Ay de ti, Espa\u00f1a! Naciones se reunir\u00e1n en ti, y tus hijos m\u00e1s ilustres ser\u00e1n dispersados. Es seducida Espa\u00f1a por el mal gobierno. Aqu\u00ed los p\u00e1jaros han hecho su nido. La monarqu\u00eda est\u00e1 llena de enga\u00f1os y asechanzas. Las noblezas se han deshecho en vanas palabras. S\u00f3lo habr\u00e1 paz en Espa\u00f1a mientras Yo reine por medio del Gran Monarca, el Rey de todo el mundo, el Rey escogido por M\u00ed. Privar\u00e1n a la Iglesia de toda libertad de obrar; no la permitir\u00e1n ense\u00f1ar la verdad ni condenar el error, ni formar a sus ministros ni resguardar a sus disc\u00edpulos, ni rechazar los tiros de sus adversarios. Har\u00e1n cruda guerra a las Congregaciones p\u00edas, y sobre todo a las \u00d3rdenes Religiosas, queriendo borrar hasta el \u00faltimo vestigio de ellas. Dirigir\u00e1n sus tiros principalmente al Coraz\u00f3n de Jes\u00fas y al de la Iglesia, metiendo ciza\u00f1a entre los fieles para ahogar la caridad\u201d.<\/span><\/p>

    22 Agosto 1933. \u201cHabr\u00e1 tan grandes y diversas desgracias que, desde el principio del mundo no ha tenido lugar semejante turbaci\u00f3n, y nunca males tan numerosos y terribles habr\u00e1n afligido a la tierra. Yo aventar\u00e9 mi trigo por medio de crueles y sangrientas guerras, pestes, hambres, y otros males horribles. La Iglesia ser\u00e1 afligida por muchas herej\u00edas y malos cristianos. Di que esperen grandes y terribles castigos los malvados. Todo esto ser\u00e1 permitido por mi justo juicio a causa de haberme llenado la medida con vuestros pecados. Pronto se levantar\u00e1n pueblos contra pueblos, naciones contra naciones, tan pronto unidas como divididas, para combatir a favor o en contra del mismo partido, hasta que se llenar\u00e1 la tierra de mortandad y carnicer\u00eda\u201d.<\/span><\/p>

    23 Agosto 1933. La Sant\u00edsima Virgen a\u00f1adi\u00f3: \u201cLa perversidad del mundo es tan\u00a0 grande que Yo no puedo detener el brazo de mi Hijo ultrajado, sobre todo por la blasfemia, la profanaci\u00f3n de los d\u00edas santos, la impureza, el abandono o negligencia de\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 la oraci\u00f3n y el olvido de Dios. Por tantos cr\u00edmenes, y para ayudarme a contener el brazo\u00a0 de mi Hijo, os tocar\u00e1 sufrir bastante a los m\u00edos.\u201d Despu\u00e9s Jes\u00fas continu\u00f3: \u201c\u00a1Oh, ingrat\u00edsimos!\u201d, me ofend\u00e9is sin cesar y Yo obtengo de Mi Padre el perd\u00f3n,\u00a0 pero\u00a0 ha llegado ya el tiempo de no concederos misericordia.\u00a0 Doy a todos\u00a0 misericordiosamente luz suficiente para que conozcan la gran\u00a0 eternidad, pero les arredra la penitencia.\u00a0 \u00a1Ay,\u00a0 ay! \u2026 de los que no hagan penitencia\u201d.<\/span><\/p>

    24 Agosto 1933. Jes\u00fas me dijo: \u201cSer\u00e1n se\u00f1ales precursoras de la guerra, la tibieza religiosa y la corrupci\u00f3n de costumbres, el vicio tenido por virtud y la virtud por vicio, los creyentes tenidos por locos y los incr\u00e9dulos por iluminados. No se han acabado los disturbios de la Iglesia; suceder\u00e1 uno muy grande, aunque no muy duradero, despu\u00e9s de lo cual se sentar\u00e1n las cosas. Vendr\u00e1 un tiempo en que mi fe declinar\u00e1 de tal modo que pocos la conservar\u00e1n. Tan grande ser\u00e1 la persecuci\u00f3n de los malos contra los justos que \u00e9stos tendr\u00e1n que, padecer un verdadero martirio. Las cosas llegar\u00e1n al colmo, pero cuando la mano del hombre no pueda m\u00e1s y todo parezca perdido, Yo pondr\u00e9 mi mano y arreglar\u00e9 las cosas.\u201d<\/span><\/p>

    25 Agosto 1933. \u201cSabed que un Rey, (el Gran Monarca), reinar\u00e1 con justicia, y sus magistrados reinar\u00e1n con rectitud. Y este var\u00f3n ser\u00e1 como un lugar de refugio para guardarse del viento y guarecerse de las tempestades. Y ser\u00e1 como arroyo de frescas aguas en tiempo de la sequ\u00eda, y como la sombra de una alta pe\u00f1a en medio de\u00a0 un p\u00e1ramo. Mujeres opulentas, levantaos y escuchad mi voz. Hijas que os perd\u00e9is confiadas en las riquezas, prestad o\u00eddo a mis palabras, porque, despu\u00e9s de d\u00edas y de a\u00f1os, vosotras que viv\u00eds tan confiadas, os hallareis en turbaci\u00f3n, pues ya no habr\u00e1 m\u00e1s vendimias, ni\u00a0\u00a0 m\u00e1s recolecci\u00f3n de frutos. \u00a1Pasmaos, vosotras que est\u00e1is tan confiadas en\u00a0 las\u00a0 riquezas!…\u201d<\/span><\/p>

    26 Agosto 1933. \u201cLos hombres se han negado a recibir a un Dios bueno y misericordioso, y ver\u00e1n c\u00f3mo descargar\u00e1 sobre ellos la c\u00f3lera de un Dios justamente irritado; ver\u00e1n que no se insulta a Dios en vano y reconocer\u00e1n, aunque tarde, que soy Omnipotente. Antes que llegue la paz a Espa\u00f1a, el af\u00e1n de riquezas llevar\u00e1 a los hombres a negar la fe, y muchos ministros de la Iglesia, llevados de la voluptuosidad carnal y de la belleza y lascivia de las mujeres, abandonar\u00e1n el celibato y por donde quiera ir\u00e1 el demonio libre entre ellos\u201d.<\/span><\/p>

    27 Agosto 1933. \u201cLos Cruc\u00edferos, fidel\u00edsimos escogidos del Alt\u00edsimo, no pudiendo vencer con la escritura a los herejes, se mover\u00e1n impetuosamente contra ellos con las armas. Ya se acerca la hora en que Yo visitar\u00e9 al mundo con la nueva Religi\u00f3n de los Cruc\u00edferos, con el Crucifijo levantado en el m\u00e1s alto estandarte y de mayor lugar. Estandarte admirable a los ojos de todos los justos, el cual al principio, escarnecer\u00e1n los incr\u00e9dulos, malos cristianos y paganos; m\u00e1s, despu\u00e9s que vean las maravillosas victorias contra los tiranos, herejes e infieles, sus burlas se convertir\u00e1n en l\u00e1grimas. \u00a1Oh, santos Cruc\u00edferos, escogidos del Alt\u00edsimo, cu\u00e1n gratos sois a Dios! Reformar\u00e1 el Fundador la Iglesia de Dios, con sus secuaces, los cuales ser\u00e1n los mejores hombres del mundo en santidad, en armas, en letras y en todas las otras virtudes, que tal es la voluntad del Alt\u00edsimo\u201d.<\/span><\/p>

    28 Agosto 1933. Me habl\u00f3 la Sant\u00edsima Virgen: \u201cEs tan pesado el brazo de mi\u00a0 Hijo que, sola, no puedo sostenerlo m\u00e1s. Quiero que todas las obras buenas que hag\u00e1is, las ofrezc\u00e1is para poder sostenerle el brazo a Mi Hijo\u00a0 ultrajado\u201d. Despu\u00e9s Jes\u00fas continu\u00f3: \u201cAh, Espa\u00f1a, Espa\u00f1a, ciega naci\u00f3n, escucha la voz del Se\u00f1or que te destina para ejecutar en ti sus grandes justicias; \u00bfno ves en el fondo de esa tenebrosa atm\u00f3sfera que rodea un iris de paz, una aurora de alegr\u00eda? Quita tu voluntaria ceguera; mira que vendr\u00e1 un\u00a0 d\u00eda,\u00a0 no lejano, Aqu\u00e9l que te juzgar\u00e1. Ay de ti, gobernador inicuo\u2026 Preparaos, preparaos, vienen tiempos aterradores. \u00a1Oh qu\u00e9 ingratos son los hombres!, \u00a1cu\u00e1n poco me corresponden!… Pronto te llevar\u00e1n las rojizas olas con bramidos aterradores a la ola\u00a0 imp\u00eda que reposa en Espa\u00f1a, y mis ap\u00f3stoles ingrat\u00edsimos est\u00e1n sentados sobre ella\u2026\u201d<\/span><\/p>

    29 Agosto 1933. Me dijo Jes\u00fas: \u201cLa tierra est\u00e1 cubierta de cr\u00edmenes, y la infracci\u00f3n de los tres primeros mandamientos de mi Ley ha irritado a mi Padre, y Mi Sant\u00edsimo Nombre blasfemado, y el domingo profanado, han colmado la medida de las iniquidades. Estos pecados han subido hasta el Trono de Mi Padre, provocando su c\u00f3lera, que se derramar\u00e1, si no se aplaca su justicia. En ning\u00fan tiempo han subido tal alto los cr\u00edmenes\u2026\u201d<\/span><\/p>

    30 Agosto 1933. \u201cLos primeros que pertenezcan a la orden de los Cruc\u00edferos ser\u00e1n de la ciudad de Sevilla, en la cual abunda mucho la iniquidad, los vicios y los pecados. Se trocar\u00e1n los de esta ciudad de mal en bien, de rebeldes a Dios, en siervos suyos fidel\u00edsimos y fervoros\u00edsimos. Ser\u00e1 tal ciudad amada de Mi Sagrado Coraz\u00f3n y del Gran Monarca, \u00a1Escuchad, oh pueblos que habit\u00e1is la Espa\u00f1a\u2026 tiempo vendr\u00e1 en que gozar\u00e9is de la verdadera y antigua libertad; pues destruida ser\u00e1 la libertad falsa de que se est\u00e1n\u00a0sirviendo estos imp\u00edos! El gobierno tir\u00e1nico ser\u00e1 aniquilado, a pesar de sus terribles esfuerzos, y la verdadera religi\u00f3n florecer\u00e1 en toda Espa\u00f1a\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    31 Agosto 1933. \u201cDios suscitar\u00e1 un h\u00e9roe, que ser\u00e1 el libertador de la Patria oprimida. Antes de que en ella florezca la verdadera libertad, ser\u00e1 purgada con azotes terribles, y los buenos tendr\u00e9is que sufrir por los malos. El Gran Monarca ser\u00e1 en Espa\u00f1a como el sol entre los astros. Los astros ser\u00e1n los Cruc\u00edferos, quienes ir\u00e1n por el mundo convirtiendo a la gente, y estos astros, algunos ser\u00e1n opacos, y recibir\u00e1n la luz del sol, o sea, del Gran Monarca para poder seguir su carrera\u201d.<\/span><\/p>

    1\u00ba Setiembre 1933. \u201cQuiero caridad, mucha caridad, verdadera caridad de hermanos, \u00bfno veis que la caridad me tiene en el Sagrario encerrado? Pues aprended de M\u00ed. Cuando veis que una persona es mala, ya no la quer\u00e9is: esto no es verdadera caridad; a todos deb\u00e9is de querer como si fueran hermanos. Pues fijaos bien: todos sois hijos de un mismo Padre, que soy Yo. Caridad, caridad quiero, humildad, obediencia, sacrificio y oraci\u00f3n. Diversos males afligir\u00e1n la tierra al final de todos los castigos. Casi todas las familias tendr\u00e1n que llevar luto, pues much\u00edsimos morir\u00e1n, y muchos que se hayan salvado, se figurar\u00e1n que es el \u00fanico superviviente, pues los castigos ser\u00e1n terribil\u00edsimos, como nadie puede imaginar. Y esto, porque los hombres me obligan a ello.\u201d<\/span><\/p>

    2 Septiembre 1933. \u201cEspa\u00f1a est\u00e1 en el ata\u00fad; pues reina en ella la falsa libertad, y mandan los imp\u00edos, tiranos, herejes y malos cristianos; pero otra vez volver\u00e1 la paz perdida, la paz antigua, y en toda ella florecer\u00e1 la Religi\u00f3n por medio de los Cruc\u00edferos escogidos del Alt\u00edsimo, quienes sembrar\u00e1n la semilla. Todav\u00eda ten\u00e9is que sufrir mucho m\u00e1s de parte de los malos, pero\u2026 \u00a1ay de los que no sepan vencerles\u2026 ay de aquellos que por no dar su vida niegan la Religi\u00f3n! Y muchas personas consagradas, a\u00fan la negar\u00e1n por no dar su vida; pero no habr\u00e1n vuelto la espalda cuando Yo descargue sobre ellos mi justicia justamente irritada\u201d.<\/span><\/p>

    3 Septiembre 1933. \u201cPronto ver\u00e9is todas las iglesias cerradas, que parecer\u00e1n m\u00e1s bien cuevas de vividores; los ministros, sin h\u00e1bito se acobardar\u00e1n hasta tanto que la mayor parte huir\u00e1 de la Iglesia, y muchos me negar\u00e1n. Quiero que rogu\u00e9is por ellos, pues van saliendo de mi camino. Si no se enmiendan, Yo les mandar\u00e9 terribles castigos. No les tengo compasi\u00f3n, porque no miran m\u00e1s que al mundo, no buscan m\u00e1s que placeres, siempre tienen el pensamiento en el mundo\u2026 \u00a1Ay, si no se enmiendan!…\u201d<\/span><\/p>

    4 Septiembre 1933. \u201c\u00a1Ah, ingrat\u00edsimos! Mis enemigos se alegran;\u00a0 pero\u00a0 su\u00a0 alegr\u00eda ser\u00e1 seguida de muchas angustias. Levantan trofeos contra M\u00ed, m\u00e1s sobre los trofeos de\u00a0su victoria, establecer\u00e9 yo su ruina. La medida est\u00e1 ya llena, y pronto llegar\u00e1 a su colmo. Los malos dar\u00e1n decretos contra mi Iglesia; pero perecer\u00e1n con sus decretos y leyes sacr\u00edlegas\u2026 Con mi poderoso brazo los precipitar\u00e9, como el rayo al fondo del abismo, y caer\u00e1 con la misma prontitud y violencia que Lucifer y sus secuaces: esta suerte les espera\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    5 Septiembre 1933. \u201cLa Iglesia ser\u00e1 cruelmente perseguida. Los ministros de la Religi\u00f3n martirizados. Mi altar profanado por los ap\u00f3statas; la secta, llamada Filosof\u00eda, seducir\u00e1 de tal modo los pueblos, cuya juventud ser\u00e1 corrompida por el materialismo y la irreligi\u00f3n, que no querr\u00e1n obedecer ni a pont\u00edfices ni a soberanos, haciendo la Religi\u00f3n despreciable. Pronto la tierra ser\u00e1 cruelmente azotada. Este azote se har\u00e1 sentir por todo el mundo, y ser\u00e1 tan terrible, que cada uno de los que sobrevivieren se imaginar\u00e1 ser el \u00fanico que habr\u00e1 sido libre del castigo. Este castigo ser\u00e1 muy corto pero terrible\u201d.<\/span><\/p>

    6 Septiembre 1933. \u201cEspa\u00f1a y todo el mundo est\u00e1 en un desorden terrible; m\u00e1s todav\u00eda llegar\u00e1 a estar mucho peor, y cuando lleguen las cosas al colmo, Yo, con mi propia mano, lo arreglar\u00e9 todo. Estos gobernadores y traidores de la Patria ser\u00e1n muertos y totalmente arruinados, y entonces en Espa\u00f1a, reinara la paz\u201d.<\/span><\/p>

    7 Septiembre 1933. \u201cEsta Rep\u00fablica imp\u00eda, que reposa en Espa\u00f1a, cuya aparici\u00f3n ha sido se\u00f1al de los castigos venideros, pronto ser\u00e1 totalmente arruinada; m\u00e1s a\u00fan vendr\u00e1n peores tiempos. Los comunistas se apoderar\u00e1n de Espa\u00f1a y sacar\u00e1n fuera de ella a los buenos; y mientras los buenos est\u00e9is fuera, castigar\u00e9 cruelmente a toda Espa\u00f1a, sin temor a nada. Los buenos tendr\u00e9is que huir al desierto; m\u00e1s os declaro que no sufrir\u00e9is hambre, pues Yo os alimentar\u00e9. Despu\u00e9s en los desiertos, donde est\u00e9is, se har\u00e1n casas y se poblar\u00e1. All\u00ed en el desierto, conocer\u00e9is al que despu\u00e9s tiene que reinar (o sea, el Gran Monarca). Despu\u00e9s que pas\u00e9is tres a\u00f1os y medio en el desierto podr\u00e9is venir otra vez a Espa\u00f1a, pues habr\u00e1n pasado para entonces los castigos. Y es en este tiempo que vendr\u00e1 el reinado del Sagrado Coraz\u00f3n de Jes\u00fas, pero este reinado ser\u00e1 interior\u201d.<\/span><\/p>

    8 Septiembre 1933. \u201cDespu\u00e9s de que yo reine interiormente, vendr\u00e1\u00a0 el\u00a0 Anticristo.\u00a0 En este tiempo habr\u00e1 tambi\u00e9n algunos castigos terribles; habr\u00e1 una persecuci\u00f3n grande contra los buenos, y \u00e9stos, la mayor parte ser\u00e1n martirizados. Habr\u00e1 muchos m\u00e1s\u00a0 m\u00e1rtires que los que ha habido y el cielo se llenar\u00e1 de palmas. Despu\u00e9s vendr\u00e1 el d\u00eda del juicio, y vivir\u00e1n otros mil a\u00f1os los justos que bajar\u00e1n del cielo con\u00a0 Jes\u00fas. Los primeros,\u00a0 que bajar\u00e1n con \u00e9l, ser\u00e1n algunos m\u00e1rtires. En este tiempo no se podr\u00e1 pecar, de modo que ser\u00e1 como una especie de Para\u00edso en la tierra\u201d.<\/span><\/p>

    9 Septiembre 1933. \u201cEstos gobernadores imp\u00edos pronto\u00a0 ser\u00e1n\u00a0 totalmente arruinados, despu\u00e9s vendr\u00e1n peores, los cuales durar\u00e1n muy pocos d\u00edas, y\u00a0 en\u00a0 estos\u00a0 pocos d\u00edas Espa\u00f1a quedar\u00e1 completamente arruinada. En los tres a\u00f1os y\u00a0 medio\u00a0 que est\u00e9is en el desierto, antes de que los dem\u00e1s vengan, saldr\u00e1 un hombre del desierto que vendr\u00e1 a enterrar a los malos que habr\u00e1n sido muertos por los\u00a0 castigos.\u00a0 Este hombre\u00a0 ser\u00e1 como la paloma del arca de No\u00e9, que traer\u00e1 entre los buenos, la rama verde de la paz. Y entonces saldr\u00e9is todos del desierto, y vendr\u00e9is a Espa\u00f1a, donde alg\u00fan tiempo gozar\u00e9is de la verdadera paz; m\u00e1s esta paz se terminar\u00e1 con la venida del Anticristo\u201d.<\/span><\/p>

    2 Octubre 1933. \u201cYa no encuentro manera alguna de avisar a estos que andan por donde se les antoja, pues no me quieren escuchar; se apartan de M\u00ed creyendo que de M\u00ed les va a venir mucho mal, \u00a1pobrecitos, no saben lo que pierden! \u00a1Ah, si me conocieran c\u00f3mo correr\u00edan\u00a0 a mi alrededor!; pero no quieren\u00a0 conocerme. \u00a1Si supieras, ni\u00f1a, c\u00f3mo\u00a0\u00a0 me lastima el coraz\u00f3n! Muchos son los que quieren ser buenos, pero cuando ven que a\u00a0 los m\u00edos les quiero regalar Mi Cruz\u2026, todos escapan\u201d.<\/span><\/p>

    3 Octubre 1933. \u201cQuiero que hag\u00e1is mucha oraci\u00f3n y penitencia, penitencia, penitencia, \u00a1ay de los que no hagan penitencia. El castigo ser\u00e1 tan terrible que, cada uno de los que quede, se imaginar\u00e1 ser el \u00fanico que sobrevive. Ser\u00e1 todo tan terrible\u2026 pero\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 a los M\u00edos no os importe nada, pues siempre saldr\u00e9is triunfantes con vuestro Jes\u00fas\u201d.<\/span><\/p>

    4 Octubre 1933. \u201cCada d\u00eda la mar se enfurece. Las barquillas tiemblan m\u00e1s; todo es cada d\u00eda mayor, pues los tiempos pasan, \u00a1ah, cu\u00e1nta paciencia he de tener!, y todav\u00eda\u00a0\u00a0\u00a0 mis hijos se quejan y dicen que les env\u00edo castigos, \u00a1que ingratos son, que ingratos!\u201d.<\/span><\/p>

    5 Octubre 1933. \u201cAmaos unos a otros como yo os he amado. Yo he dado la vida por vosotros, y vosotros\u2026 \u00bfno quer\u00e9is darme la vuestra? Yo quisiera estar en\u00a0 los corazones\u00a0 de todas las criaturas; m\u00e1s no encuentro ninguna vac\u00eda, pues est\u00e1n llenos de muebles, y esto me impide entrar en ellos. Si quieren que Yo entre, primero tienen que vaciar\u2026\u201d<\/span><\/p>

    6 Octubre 1933. \u201cSed santos, como santo soy Yo. Si el ser santo consistiera s\u00f3lo en darse a las pr\u00e1cticas piadosas y sentir un sensible afecto y superficial fervor, muchos lo desear\u00edan pero no basta eso solo. Yo, a cada instante os estoy diciendo: el que quiera venir en pos de M\u00ed que se niegue a s\u00ed mismo, tome su cruz de cada d\u00eda y s\u00edgame.\u00a0 El\u00a0 camino de santidad est\u00e1 lleno de espinas, es muy estrecho; por esto van tan pocos, pues quieren andar a sus anchas. El alma que quiere ser santa tiene que entrar en\u00a0 las\u00a0 asperezas del camino y caminar trabajosamente con su cruz en pos de M\u00ed\u201d.<\/span><\/p>

    7 Octubre 1933. \u201cEl alma, que desea ser santa, que pone todo lo que est\u00e1 de su parte por subir la cuesta trabajosa y \u00e1spera y confiada en la Providencia divina, \u00e9sta, llegar\u00e1 al final, pues el Esp\u00edritu Santo estar\u00e1 con ella\u201d.<\/span><\/p>

    8 Octubre 1933. \u201cBusco almas generosas y compasivas en quien depositar mis preciosas joyas\u2026 y no las encuentro. Estoy mendigando, de puerta en puerta, buscando corazones vac\u00edos, pero encuentro muy pocos; casi nadie quiere darme posada por temor\u00a0 a la cruz, pues saben que si entro Yo en sus corazones siempre regalo la cruz\u2026\u00a0 \u00a1si\u00a0 supieran lo que pierden\u2026 m\u00e1s, ay! Cuando se den cuenta Yo ya no tendr\u00e9 misericordia, porque soy justo\u201d.<\/span><\/p>

    9 Octubre 1933. \u201c\u00a1Yo quisiera que hicierais mucha penitencia, a fin de aplacar a mi Padre Celestial! Me da gran pena tener que castigar a mis pobres hijos; m\u00e1s no puedo aguantar m\u00e1s, pues sabes soy muy Justo, y por esto mi justicia me obliga a castigarles; pero\u2026 oraci\u00f3n, oraci\u00f3n, pues la oraci\u00f3n puede mucho. Rogad mucho para que se conviertan los pecadores, \u00a1si supieran cu\u00e1ntas ganas tengo de perdonarles\u2026!; m\u00e1s, no se arrepienten. \u00a1C\u00f3mo lastima esto Mi Coraz\u00f3n! Yo les doy mil medios para que se conviertan; mas ellos hacen muy poco caso\u201d.<\/span><\/p>

    10 Octubre 1933. \u201c\u00a1Ah, ingrat\u00edsimos, me ofrezco sin cesar! Yo obtengo el perd\u00f3n de Mi Padre Celestial!; mas lleg\u00f3 la hora de no concederles m\u00e1s misericordia, pues no me atienden\u2026 se escapan de M\u00ed. La oraci\u00f3n cada d\u00eda es menor y los malos aumentan\u2026 \u00a1Si supieras c\u00f3mo blasfeman de mi Santo Nombre\u2026! Pocos son los que hacen penitencia, pero muchos los que se recrean en los falsos placeres del mundo; estoy ya cansado, no puedo esperar m\u00e1s\u2026 \u00bfno querr\u00edais ofrecerme vuestros sacrificios por mediaci\u00f3n de mi Madre? Mar\u00eda, vuestra Madre continuamente ejerce el oficio de Mediadora\u201d.<\/span><\/p>

    11 Octubre 1933. \u201cEspa\u00f1a pronto morir\u00e1, si sigue as\u00ed; pronto los cat\u00f3licos la abandonar\u00e1n, pues tendr\u00e1n que marchar a los desiertos\u2026. \u00a1Pobre Espa\u00f1a!, va a pasar su agon\u00eda en manos tan extra\u00f1as\u2026; sus hijos no podr\u00e1n hacerle nada. La mar cada vez se enreda y enfurece m\u00e1s, pero las barquillas\u2026 muchos no se acuerdan; est\u00e1n\u00a0 dormidos,\u00a0 y\u00a0 si alguno se acuerda no hace m\u00e1s que renegar, pues ya no le queda tiempo; m\u00e1s \u00a1cu\u00e1n pocos son los que ponen su confianza en M\u00ed!\u201d<\/span><\/p>

    12 Octubre 1933. \u201cLos malos est\u00e1n prepar\u00e1ndose para salir; m\u00e1s muchos no se acuerdan. La mayor parte est\u00e1n dormidos en los placeres del mundo, so\u00f1ando en las falsas delicias que el mundo les ofrece; m\u00e1s, este sue\u00f1o no ser\u00e1 muy duradero; pronto la muerte llamar\u00e1 y se ver\u00e1n obligados a dejar este sue\u00f1o, pues la vida es un r\u00edo que pasa muy pronto\u201d.<\/span><\/p>

    13 Octubre 1933. \u201cMi Coraz\u00f3n, siempre abierto para recibir a los pecadores, se va cerrando, y a medida que se vaya cerrando, se terminar\u00e1 la misericordia, porque Mi Padre Celestial as\u00ed lo quiere; m\u00e1s no tem\u00e1is, no se cierra para vosotros, no; seguid adelante con vuestras cruces, poniendo todo lo que est\u00e1 de vuestra parte para subir la cuesta trabajosa; as\u00ed podr\u00e9is llegar al final\u201d.<\/span><\/p>

    14 Octubre 1933. \u201cEn estos pocos d\u00edas que faltan para ir al desierto, \u00bfno quisierais darme alguna reparaci\u00f3n? Miradme, cada d\u00eda estoy aqu\u00ed recibiendo mayores ultrajes, sobre todo la blasfemia sube hasta el trono de M\u00ed Padre Celestial. Y vosotros\u2026 \u00bfno quisierais consolarme en estos momentos tan tristes, no quisierais ofrecerme nada?\u201d.<\/span><\/p>

    15 Octubre 1933. \u201cMirad al Coraz\u00f3n de vuestro Jes\u00fas, mirad como me hieren los ultrajes de los hombres; pero lo que m\u00e1s me hiere es que todos me despachan de sus corazones, nadie quiere ayudarme a llevar la cruz, me dejan solo. Vosotros, \u00bfverdad que me ayudareis? \u00bfSer despreciados de los hombres, verdad que no os importa?\u201d.<\/span><\/p>

    16 Octubre 1933. \u201cLos malos quieren borrar hasta el \u00faltimo vestigio de la Religi\u00f3n, m\u00e1s mis queridos espa\u00f1oles siempre tendr\u00e1n fe en su Jes\u00fas. Tambi\u00e9n quieren ahogar la caridad; m\u00e1s tampoco podr\u00e1n conseguirlo. Har\u00e1n todo lo que puedan\u00a0 sin\u00a0 conseguir\u00a0 nada, pues Yo siempre estar\u00e9 velando por los m\u00edos\u201d.<\/span><\/p>

    17 Octubre 1933. \u201cLos malos preparan sus armas para salir a pelear contra los buenos. Vosotros tambi\u00e9n preparad las vuestras, que son la oraci\u00f3n y penitencia, y con ellas vencer\u00e9is a todos los malos. Tendr\u00e9is que sufrir mucho, m\u00e1s no importa, porque siempre saldr\u00e9is victoriosos\u201d.<\/span><\/p>

    18 Octubre 1933. \u201cLos tiempos pasan, m\u00e1s nadie se da cuenta de nada. Vosotros haced mucha oraci\u00f3n durante este mes de octubre, pues est\u00e1is en v\u00edsperas de revoluciones muy grandes\u201d.<\/span><\/p>

    19 Octubre 1933. \u201c\u00a1Ah, me ofenden sin cesar, y se alegran de que otros me ofendan\u00a0\u00a0 y escandalizan a los ni\u00f1os y les apartan de M\u00ed! El que escandaliza a un ni\u00f1o merece ser arrojado al mar. Muchos ni\u00f1os se condenan por sus superiores. Rogad por ellos, rogad mucho, pues la oraci\u00f3n puede remediarlo todo.\u201d<\/span><\/p>

    20 Octubre 1933. \u201cUna barquilla va andando sobre el enredado mar. Sus olas la empujan mucho\u2026 \u00bfA d\u00f3nde ir\u00e1? Por \u00faltimo naufraga, y los que estaban en ella, \u00bfqu\u00e9 har\u00e1n? El viento empuja y las olas todas abajo gritan\u2026 \u00a1pobrecitos, murieron, y hacia el reino del olvido el viento les llev\u00f3! Mas, viene otra barquilla, la mar se tranquiliza y los que est\u00e1n dentro pescan perlas preciosas, primero, la obediencia; segundo, la humildad;\u00a0tercero, la paciencia y cuarto, Mi Cruz toman para no separarse jam\u00e1s. Los \u00faltimos llegaron al puerto, el Maestro sali\u00f3 al encuentro, y all\u00ed les registr\u00f3 todas sus preciosas perlas y la frente con coronas les ci\u00f1\u00f3 para siempre, la cruz de sus hombros les quit\u00f3 y all\u00ed arriba les subi\u00f3, les ense\u00f1o su cielo hermoso; a la obediencia le dio su premio; tambi\u00e9n a la humildad, mucho a la paciencia, y a la Cruz a\u00fan m\u00e1s. All\u00ed para siempre quedaron, all\u00ed arriba, s\u00ed; y estos hombres eran los poderosos Cruc\u00edferos, los Cruc\u00edferos fuertes, mis amant\u00edsimos.\u201d<\/span><\/span><\/p>

    21 Octubre 1933. \u201cAll\u00e1 arriba en el cielo est\u00e1n los que supieron vencer las olas, los que salieron triunfantes del desdichado mar. Desde all\u00ed, arrojan flores sobre el mundo que pelea con la mar y la tempestad. Los del mundo, agradecidos, invocan a los Cruc\u00edferos santos, a los reformadores de la Iglesia que, triunfal, goza de su antigua paz. All\u00ed todos ven a Dios, todo es gozo all\u00ed, y alegres cantan el canto, siempre diferente, a Mi Padre Celestial. Los que recogieron la preciosa perla de la obediencia, all\u00ed pueden hacer su voluntad, los de la humildad son ensalzados, los de la paciencia a M\u00ed siempre me ven alegre, y los de la Cruz s\u00f3lo all\u00ed flores encuentran. Todo es gozo, todo alegr\u00eda, todo paz y alaban eternamente a Mi Padre Celestial\u201d.<\/span><\/p>

    22 Octubre 1933. \u201cLas almas que quer\u00e9is ser santas, seguidme todas a M\u00ed, comunicadme vuestros deseos, pues Yo os llenar\u00e9 de Mis gracias, \u00bfvais adelante en virtud? Pero mirad, conviene que sep\u00e1is qu\u00e9 cosas me gustan m\u00e1s: es muy buena la humildad; casi m\u00e1s la penitencia, mucho la paciencia, bastante la oraci\u00f3n y tambi\u00e9n la caridad. Yo, siendo el Rey de cielos y tierra, nac\u00ed en un pobre portal de animales y mor\u00ed en una cruz; y vosotros siendo unos impuros gusanos, \u00bfsoberbia tendr\u00e9is jam\u00e1s? Yo hice mucha penitencia en el huerto de Getseman\u00ed, al llevar la cruz sobre mis hombros y al ver a Mi Madre al pi\u00e9 de la Cruz, y\u2026 \u00bfpor qu\u00e9 no lo har\u00e9is vosotros? Tambi\u00e9n tengo mucha paciencia, \u00bfno veis como espero al pecador para perdonarle? \u00bfNo veis tambi\u00e9n c\u00f3mo recibo en silencio los ultrajes de los gusanos, pudiendo en un momento quitarles la vida y arrojarles al infierno, \u00bfverdad que vosotros tambi\u00e9n la tendr\u00e9is? Yo hice mucha oraci\u00f3n durante mi vida y me gusta mucho que la hag\u00e1is. \u00bfNo veis c\u00f3mo la caridad me tiene encerrado en el Sant\u00edsimo Sacramento noche y d\u00eda? \u00a1Ah, si quer\u00e9is llegar a la santidad hab\u00e9is de tenerla mucho!\u201d<\/span><\/p>

    23 Octubre 1933. \u201cCuando el alma llega a mucha perfecci\u00f3n, enseguida Yo la llamo para Mi cielo. Los que no lo son no pueden comprender la santidad, aunque a ellos les parezca. Estas cosas son tan grandes, tan profundas que, sin que se hayan pasado, es dif\u00edcil entender sin que Yo d\u00e9 una luz extraordinaria. Cuanto m\u00e1s santo m\u00e1s sencillo, m\u00e1s humilde. Si quer\u00e9is ser santos, sed humildes; si sant\u00edsimos, humild\u00edsimos; esto es lo\u00a0que Yo he predicado. \u00a1Ah, son tan amargos los primeros pasos de santidad!… mas, cuando Yo veo el primer esfuerzo, esto me basta para hacerles muy dulce; lo amargo les vuelvo dulce y lo dulce amargo. La santidad consiste en la cruz, en la cruz santa que ha purificado a tantas almas, en la cruz est\u00e1 escrita la santidad, \u00a1ah, me agrada m\u00e1s que me pidan un trozo de mi cruz!… entonces s\u00ed que estoy contento. \u00bfNo quisierais ser santos? Con mi ayuda pod\u00e9is muy bien serlo. No perd\u00e1is el \u00e1nimo, pues a muchos pecadores he hecho santos y puedo hacer igualmente con vosotros. Sed santos, como santo soy Yo. \/ Aprended las ense\u00f1anzas \/ que Mi Coraz\u00f3n os da \/ a labrar vuestras coronas \/ al cielo Jes\u00fas va\u201c.<\/span><\/span><\/p>

    24 Octubre 1933. \u201c\u00a1Oh, s\u00ed supierais cu\u00e1nto os amo, cu\u00e1nto por vosotros padezco!…; mas, sale de mis labios una queja. Quisiera ense\u00f1aros a padecer con Mi paciencia. Haceros cargo que los criados no pueden hacer lo que ellos quieren, sino lo que el amo disponga de ellos. Este Amo soy Yo; vosotros, los criados, y si quer\u00e9is estar en mi casa ten\u00e9is que servirme fielmente, no atendiendo m\u00e1s que a Mi llamamiento. Y si veo que me serv\u00eds a M\u00ed, os pondr\u00e9 en mayor lugar; y si os esforz\u00e1is en hacer a\u00fan m\u00e1s, os tomar\u00e9 por hijos, pues a todos gusta tener hijos buenos. Como fieles criados tendr\u00e9is que ser vosotros hasta que Yo os llame para la gloria donde eternamente cantar\u00e9is a Mi Padre Celestial. Aprended las ense\u00f1anzas que para vosotros doy para que me se\u00e1is fieles servidores\u201d.<\/span><\/p>

    25 Octubre 1933. \u201c\u00a1Ah!, s\u00ed supierais cu\u00e1nto me ofenden\u2026, mas todo lo recibo callando; pero\u2026 ahora empiezo a repartir mis castigos. Mi\u00a0 Coraz\u00f3n,\u00a0 siempre\u00a0 abierto\u00a0 para recibir los pecadores, se va cerrando, pues soy muy Justo. Mi Justicia me obliga a esto. Durante estos d\u00edas, \u00bfno quisierais hacerme alguna reparaci\u00f3n? \u00bfNo quisierais consolar a Mi Coraz\u00f3n afligido? \u00a1Ah, cu\u00e1n despreciado soy de todos! Sufro, sufro mucho, viendo a mis hijos tan ingratos. No porque necesite de ellos, sino por la compasi\u00f3n que\u00a0 me inspiran, porque veo que van por el camino de la perdici\u00f3n eterna. \u00a1Cu\u00e1ndo podr\u00e9 verles por otro camino! \u00a1Oh, qu\u00e9 ingratos son! \u00bfVerdad que vosotros no me har\u00e9is llorar as\u00ed?\u201d<\/span><\/p>

    26 Octubre 1933. \u201cCruc\u00edferos Santos, oh benditos Cruc\u00edferos escogidos del Alt\u00edsimo,\u00a0\u00a1cu\u00e1n grande es vuestra misi\u00f3n, cu\u00e1n agradables sois al buen Dios, cu\u00e1n bien os sabr\u00e9 pagar! Vuestra alma ser\u00e1 la Cruz, donde escrita llevar\u00e9is: \/ Vencer\u00e9is con esta Cruz \/ y ser\u00e9is como leones \/ si ped\u00eds con oraciones \/ al buen Dios que os d\u00e9 su luz\/. Levantad, Cruc\u00edferos Santos, levantad vuestra cabeza, no os acobard\u00e9is por m\u00e1s que el viento silbe\u00a0\u00a0 y a\u00fallen los perros, pues os acompa\u00f1ar\u00e9 siempre; ning\u00fan instante os dejar\u00e9 solos. \u00bfQu\u00e9 temer\u00e9is conmigo? Y t\u00fa, Jefe, gran reformador de la Iglesia, \u00bfquieres que te d\u00e9 hombres\u00a0<\/span>santos? Te doy, t\u00f3malos; es lo mejor de mi vi\u00f1a; cu\u00eddalos bien; ri\u00e9galos de cuando en cuando, que lo dem\u00e1s se secar\u00edan. No dejes que ning\u00fan gusano entre y les coma la ra\u00edz, y haz lo que puedas para afirmarles. Trabajad, hombres fuertes, trabajad hasta que Yo os llame a mi patria celestial, en donde os mecer\u00e9 en mi falda y dormir\u00e9is con eterna paz junto al pecho del Salvador\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    29 Octubre 1933. \u201c\u00a1Oh, s\u00ed supierais qu\u00e9 buena es la cruz para santificar las almas! En ella se encuentra la verdadera dicha, la verdadera felicidad. Si el ser santo consistiera en darse s\u00f3lo a las pr\u00e1cticas piadosas, \u00a1cu\u00e1ntos lo ser\u00edan! Mas, para ser santo, hay que entrar en las asperezas del camino y beber el c\u00e1liz de la amargura. Por esto se ven tan pocos, pues muchos no quieren sufrimientos. Mientras Yo curaba a los enfermos y hac\u00eda milagros, todos me segu\u00edan; fui al huerto de Getseman\u00ed\u2026 y hasta los ap\u00f3stoles se durmieron; casi nadie me sigui\u00f3 hasta el Calvario. Me ayudaron a llevar la Cruz, pero por fuerza. Muchos hacen esto mismo cuando Yo les doy la Cruz; tienen que sufrir a la fuerza, pero no sufren con paciencia.\u201d<\/span><\/p>

    30\u00a0 Octubre 1933. \u201cLas azucenas blancas, muy blancas, que siempre son, consuelan\u00a0 mi Coraz\u00f3n con sus dulces perfumes. Estas azucenas son las v\u00edctimas de\u00a0 mi\u00a0 amor. El\u00a0 amor las va consumiendo hasta tanto que ya no\u00a0 queda casi\u00a0 nada de ellas.\u00a0 El alma,\u00a0 que es v\u00edctima de mi amor, no puede quedar por mucho tiempo en el\u00a0 mundo,\u00a0 pues\u00a0 enseguida la consumo. \u00a1Ah, el amor es fuerte como la muerte, por eso consume tan pronto! El amor hace dulce lo amargo y amargo lo dulce. El que tiene amor fuerte nada me puede negar. \u00a1Ah, s\u00ed supierais cu\u00e1n dulce es el camino de la santidad! Mas los\u00a0 primeros pasos son muy amargos. Los que andan por el camino de la santidad siempre sentir\u00e1n paz interior, aunque exteriormente tengan que sufrir. \u00a1Ah, s\u00ed muchos supieran cu\u00e1n dulce es el camino de la santidad\u2026! El amor hace amar a la Cruz; toda esta dicha se encierra solamente en la Cruz\u201d.<\/span><\/p>

    1\u00ba Noviembre de 1933. \u201cEn Espa\u00f1a los p\u00e1jaros traidores han hecho su nido y los buenos se han acobardado. \u00a1Ah! Por esto Mi Padre Celestial descargar\u00e1\u00a0 sobre\u00a0 esta\u00a0 naci\u00f3n tan grandes y horribles castigos, pues los buenos, por sus intereses, obedecen a\u00a0 los malos. Antes que a Dios ponen al dinero. Hay muchos\u00a0 que\u00a0 no\u00a0 contradicen\u00a0 a\u00a0 la Iglesia, pero es porque les conviene, pues por M\u00ed no hacen nada;\u00a0 s\u00f3lo\u00a0 hay\u00a0 algunos\u00a0 pocos, que se pueden contar, que son mis preciosas flores, las flores de mi escogido jard\u00edn. Estos son los que consuelan a Mi afligido Coraz\u00f3n; ellos son los ladrones de mis gracias. Para ellos brota de mi Coraz\u00f3n un manantial continuo de gracias\u201d.<\/span><\/p>

    2 Noviembre 1933. \u201cOs amo a todos. Amadme a M\u00ed. Y miradme aqu\u00ed, a Mi Coraz\u00f3n. Os amo, os amo, porque os amaba nac\u00ed, porque os amaba padec\u00ed mucho, porque os amaba os di a Mi Madre, porque os amaba mor\u00ed en la Cruz, porque os\u00a0 amaba\u00a0 lo hice todo. Y vosotros, \u00bfqu\u00e9 har\u00e9is para M\u00ed, no ten\u00e9is nada que darme? Hijos m\u00edos, tomad Mi Coraz\u00f3n y dadme el vuestro\u2026 Amadme, s\u00ed, amadme con amor m\u00e1s fuerte que la muerte; ofrecedme todo lo que pod\u00e1is: quiero amor por amor, coraz\u00f3n por coraz\u00f3n; pero no corazones llenos, no; quiero corazones vac\u00edos por la humildad y ensanchados\u00a0 por\u00a0 el amor. Que sus latidos sean siempre puros. Adem\u00e1s, quiero corazones enteros, no la\u00a0 mitad, no. Siendo una cosa tan peque\u00f1a vuestro coraz\u00f3n, \u00bfno me lo dar\u00e9is entero? No hag\u00e1is como muchos hacen: que la mitad del coraz\u00f3n la tienen\u00a0 para las\u00a0 criaturas\u00a0 y la\u00a0 otra mitad para M\u00ed. Yo no recibo mitades de corazones, sino bien enteros\u201d.<\/span><\/p>

    3 Noviembre 1933. \u201cQuer\u00e9is ser muy amigos \/ de mi amante Coraz\u00f3n \/ Pues escuchad bien sus latidos \/ Y dadle amor por amor \/ coraz\u00f3n por coraz\u00f3n. \u00a1Oh, s\u00ed supierais qu\u00e9 sed de almas tengo\u2026! \u00bfNo quer\u00e9is traerme ninguna? Orad, orad para que las ovejas errantes encuentren el redil de la Iglesia. El demonio enreda a muchas almas, pues en estos \u00faltimos tiempos le he dado m\u00e1s poder. Llegar\u00e1 un tiempo, y no lejano, que estar\u00e1 todo en un desorden horrible, pues el demonio enga\u00f1ar\u00e1 a muchas almas. Algunos buenos se volver\u00e1n malos; los malos tomar\u00e1n nuevas fuerzas y matar\u00e1n a los ministros de la Iglesia santa. Entonces ser\u00e1 cuando mi Padre Celestial descargue su divina c\u00f3lera divina justamente irritada\u201d.<\/span><\/p>

    Est\u00edmulos de Jes\u00fas y Mar\u00eda<\/u><\/span><\/p>

    12 Noviembre 1933. \u201cEs grande mi amargura, pues mis hijos se pierden;\u00a0 yo\u00a0 les\u00a0 llamo, m\u00e1s mi voz\u2026 se pierden en el desierto. Estoy cansado de esperar. \u00a1Ah, c\u00f3mo me obligan a castigarles! Cada d\u00eda la oraci\u00f3n va disminuyendo; los pecados aumentan.<\/span><\/p>

    \u00a1Cu\u00e1ntos me despiden de sus corazones y no me quieren recibir!\u00a0 \u00bfNo\u00a0 quisierais\u00a0 ofreceros como v\u00edctimas, sabiendo que Yo las necesito para perdonar a los pecadores?\u201d.<\/span><\/p>

    21 Noviembre 1933. \u201cVenid a Mi lado, al Sagrario, acercaos, escuchadme: Hay tres cielos, el cielo de arriba, el cielo del sagrario y el cielo de vuestras almas. Cuando dos de estos cielos se juntan (generalmente el cielo del sagrario y el cielo de vuestras almas) recobrar\u00e9is las fuerzas perdidas. Cuando os encontr\u00e9is sin fuerzas y la cruz casi os espante, venid al lado de mi sagrario, un\u00edos con este cielo y as\u00ed recobrareis las fuerzas perdidas hasta que os llame al cielo de arriba donde eternamente se juntar\u00e1n los tres cielos\u201d.<\/span><\/p>

    22 Noviembre 1933. \u201cVenid a M\u00ed, hijos m\u00edos, venid a M\u00ed, Yo soy el camino, la verdad y la vida. Ac\u00e9rcate t\u00fa, pecador, ac\u00e9rcate a Mi Coraz\u00f3n; mira cu\u00e1nto me cuesta el demostrarte mi amor; mira los pies por ti desgarrados; mira el agujero de mi pecho, de donde salen rayos de misericordia para contigo, ingrato pecador. Mete aqu\u00ed tu mano y palpa el agujero de la lanza y no seas m\u00e1s ingrato, sino fiel\u201d.<\/span><\/p>

    23 Noviembre 1933. \u201cMuchos dolores le esperan al pecador, m\u00e1s al\u00a0 que\u00a0 tiene\u00a0 puesta en M\u00ed su esperanza, mi Misericordia le servir\u00e1 de muralla, a fin de\u00a0 que\u00a0 el\u00a0 demonio no entre en ella. Alegraos, oh justos, alegraos s\u00ed, regocijaos en\u00a0 M\u00ed, gloriaos en M\u00ed, vosotros todos los de recto coraz\u00f3n, Yo no os desamparar\u00e9, no me apartar\u00e9 de vosotros, acudir\u00e9 a socorreros en todos los peligros seg\u00fan la confianza que en M\u00ed ten\u00e9is puesta\u201d.<\/span><\/p>

    24 Noviembre 1933. \u201cLa tierra est\u00e1 horrorosamente desolada, porque no hay nadie que medite de coraz\u00f3n. Mi Coraz\u00f3n reinar\u00e1 en todo el mundo, especialmente en toda Espa\u00f1a; mas no vay\u00e1is a creer que hago esto porque Espa\u00f1a es\u00a0 mejor\u00a0 que\u00a0 otras naciones; antes ya lo fue, mas ahora no lo es.\u00a0 Reinar\u00e9,\u00a0 porque esta naci\u00f3n\u00a0 es la que\u00a0 tiene m\u00e1s necesidad de que Yo reine, pues en ella se cometen muchos sacrilegios. Rogad por Espa\u00f1a, rogad para que salga del ata\u00fad y despierte\u201d.<\/span><\/p>

    27 Noviembre 1933. \u201c\u00a1Ah, cu\u00e1n poco me aman mis hijos! La tierra est\u00e1 hecha una horrible carnicer\u00eda. Yo soy el Omnipotente y el eterno Se\u00f1or. En Mi mano est\u00e1 todo el poder\u00edo y derecho de todos los reinos. Pronto volver\u00e9 mis misericordiosos ojos sobre la tierra, y las naciones que conf\u00edan en su propia fuerza, ser\u00e1n abatidas por la diestra de mi poder\u201d.<\/span><\/p>

    28\u00a0 Noviembre 1933. \u201c\u00a1Qu\u00e9 grande ser\u00e1 el terror de los hombres cuando\u00a0 aparezca\u00a0 Yo, Soberano Juez, para examinar todas sus acciones! \u00a1Oh, d\u00eda terrible en el cual el hombre culpable saldr\u00e1 del polvo del sepulcro para ser juzgado por M\u00ed, a qui\u00e9n \u00e9l ha ofendido!\u201d<\/span><\/p>

    29 Noviembre 1933. \u201c\u00a1No tem\u00e1is, hijos m\u00edos! Yo soy Todopoderoso y puedo libraros de las garras de los malos. Escuchadme, hijos m\u00edos, no digo ni hago nada nuevo, sino repetir lo que tantas veces he revelado, lo que est\u00e1 en el Evangelio. Ahora, hacia los \u00faltimos tiempos, los viejos profetizar\u00e1n y los j\u00f3venes ser\u00e1n videntes.\u00a0 Ya\u00a0 estamos\u00a0 en estos tiempos y no os extra\u00f1\u00e9is, porque habr\u00e1 muchos videntes\u201d. \u2014Cumplimiento de la profec\u00eda de Jo\u00e9l 2-28: \u201cSuceder\u00e1, dice, en los postreros d\u00edas \u2014habla el Se\u00f1or\u2014 que Yo derramar\u00e9 mi Esp\u00edritu sobre todos los hombres; y profetizar\u00e1n vuestros hijos y vuestras hijas: y vuestros j\u00f3venes tendr\u00e1n visiones y vuestros ancianos revelaciones en sue\u00f1os\u201d. En este mismo sentido se\u00a0expresa el profeta Isa\u00edas, 44-3; San Lucas en el Acta de los ap\u00f3stoles 2; y la Sant\u00edsima Virgen m\u00e1s adelante, 8 de Mayo 1934.\u2014<\/span><\/span><\/p>

    31 Noviembre 1933. \u201cYo soy el camino: No consentir\u00e9 que mis ovejas se extrav\u00eden. Yo soy la Verdad: No consentir\u00e9 que anden enga\u00f1adas. Yo soy la Vida: No consentir\u00e9 que ninguna de mis ovejas muera eternamente. Cuando os falte la fuerza, y la cruz casi os espante, venid a donde vuestro Buen Pastor, al sagrario, al calabozo divino que encadena a Jes\u00fas Rey de Reyes, Se\u00f1or de Se\u00f1ores. Unid el cielo de vuestras almas al cielo del sagrario y recobrareis las fuerzas perdidas, os abrazar\u00e9is gustosos a la cruz y me seguir\u00e9is am\u00e1ndome sobre todas las cosas\u201d.<\/span><\/p>

    1\u00ba Diciembre 1933. \u201cLa oraci\u00f3n y el sacrificio aumentan, y a medida que van aumentando, Yo voy disminuyendo los castigos; pero no cre\u00e1is que vais a quedar sin castigos, no, pues para eso no se hace a\u00fan bastante oraci\u00f3n. \u00a1Tengo unas ganas de perdonar a mis hijos! Tengo sed de almas. Apagad vosotros esa sed, mi sed devoradora; traedme almas, muchas almas; y entonces encontrar\u00e9 alivio en medio de mis amargu\u00edsimos dolores\u201d.<\/span><\/p>

    2 Diciembre 1933. \u201cHijos m\u00edos; haced muchos actos de virtud. La santidad es el \u00e1rbol cuyas ra\u00edces est\u00e1n en la tierra y su copa se abre en el cielo, y cada acto de virtud que hag\u00e1is ser\u00e1 una nueva hoja que adquiera este \u00e1rbol; el cual cuando est\u00e9 lleno de hojitas, como ser\u00e1 ya muy viejo, se ir\u00e1 despegando de la tierra y Yo lo traer\u00e9 al cielo, y all\u00ed le recompensar\u00e9 d\u00e1ndole hermosos frutos por las hojitas\u201d.<\/span><\/p>

    6 Diciembre 1933. \u201cNo me desagrada tanto que me ofenda uno que no me conoce, pero llega hasta lo m\u00e1s \u00edntimo de Mi Coraz\u00f3n una ofensa de un amigo m\u00edo.\u00a0 Nadie se puede figurar mi dolor\u2026 Las imperfecciones no me desagradan; prefiero que al llegar la noche, encontr\u00e9is alguna imperfecci\u00f3n en vosotros y no que dig\u00e1is: hoy\u00a0 no\u00a0 tengo\u00a0 ninguna imperfecci\u00f3n\u201d.<\/span><\/p>

    7 Diciembre 1933. \u201cEl camino m\u00e1s corto para llegar al cielo es la Cruz. A los que quiero llevar pronto al cielo les doy la Cruz, porque la Cruz es el atajo para llegar pronto. Las almas que me siguen con la Cruz, me roban el Coraz\u00f3n. Primero doy siempre una peque\u00f1a parte de mi Cruz, y si veo que me lo agradecen, les doy muy grande.\u201d<\/span><\/p>

    8 Diciembre 1933. \u201cTengo mucha sed, sed de almas. Hace algunos d\u00edas que se convierten muchos por medio de las oraciones que se hacen. Pronto vendr\u00e1 una sangrienta guerra contra los cat\u00f3licos; m\u00e1s, se ha disminuido mucha cosa\u00a0 de\u00a0 lo\u00a0 que hab\u00eda dicho en vista de tantas oraciones. Os prometo que saldr\u00e9is muy victoriosos por\u00a0encima de todo, mas no est\u00e9is dormidos sino bien despiertos y despabilados, porque la hora se acerca. Yo os dar\u00e9 la bandera de la paz, pero ten\u00e9is que sufrir mucho; ten\u00e9is que derramar muchas l\u00e1grimas, a fin de que con estas l\u00e1grimas convierta Yo a muchos\u201d.<\/span><\/span><\/p>

    9 Diciembre 1933. \u201cCuando veo un alma que est\u00e1 dispuesta a hacer cuanto Yo le mande, Mi Coraz\u00f3n se complace en colmarla de mis gracias. La primera y \u00faltima gracia que le har\u00e9 ser\u00e1 la cruz. Le dar\u00e9 cruz grande, cada vez mayor, pero asimismo, aumentar\u00e9 sus fuerzas\u201d.<\/span><\/p>

    10 Diciembre 1933. \u201cMuchos dolores le esperan al pecador, mas al que tiene puesta en M\u00ed su esperanza le socorrer\u00e9 en todas sus necesidades. En esta vida tendr\u00e1 que sufrir mucho, mas en la otra Yo le recompensar\u00e9 d\u00e1ndole mi hermoso cielo. En cambio, el pecador vivir\u00e1 aburrido, y all\u00e1 no podr\u00e1 descansar ni un momento\u201d.<\/span><\/p>

    11 Diciembre 1933. \u201cDeb\u00e9is amar tanto la mortificaci\u00f3n, que deb\u00e9is considerar como perdido aquel momento en el cual no sufr\u00eds de alguna manera. El sacrificio es el atajo que Yo hago tomar a las almas que se abandonan a mi amor para hacerlas llegar m\u00e1s pronto a la perfecci\u00f3n. Mi uni\u00f3n con las almas no se hace nunca tan perfecta como en el sufrimiento, ya sean del alma, ya del cuerpo, porque hay m\u00e1s amor, y cuando hay m\u00e1s amor hay m\u00e1s uni\u00f3n. El alma que me busca fuera de la cruz, puede hallarme, y a\u00fan a veces, me dejo encontrar; pero donde me encuentra infaliblemente es en la cruz, en las humillaciones, en el sacrificio y en la obediencia: todo est\u00e1 comprendido en la caridad. Un alma mortificada da frutos de vida eterna\u201d.<\/span><\/p>

    12 Diciembre 1933. \u201cHijo m\u00edo, si me miras me amar\u00e1s. M\u00edrame, no solamente con una mirada superficial, general, pasajera, sino m\u00edrame de cerca. T\u00fa ver\u00e1s que todas mis llagas tienen la se\u00f1al del amor, como los objetos de oro y plata tienen su contraste que los distingue. As\u00ed, todas mis llagas tienen el sello del amor. Si las miras superficialmente te parecer\u00e1 que no han sido hechas m\u00e1s que por los verdugos; pero los verdugos no hubieran podido hacerlas si el amor no se lo hubiera permitido. T\u00fa no puedes, como Yo, entregar las manos a los verdugos, pero si observar bien tu regla, la regla que Yo he impuesto a mis hijos. La piedra de toque de la santidad es la mortificaci\u00f3n; el amor del bienestar es la ruina de la santidad\u201d.<\/span><\/p>

    13 Diciembre 1933. \u201cSi la semilla pudiese hablar, pedir\u00eda por favor ser echada en la tierra y cubierta de la misma para poder germinar. Si un alma llegase a comprender lo que es el esp\u00edritu de mortificaci\u00f3n, lo que es la humillaci\u00f3n, lo que es el desprecio de s\u00ed misma y las p\u00e9rdidas en Dios, no anhelar\u00eda m\u00e1s que estas cosas. La p\u00e9rdida en Dios<\/span><\/p>

    gusta, pero es preciso poner los medios para llegar a ella, y a un alma que a\u00fan tiene apego a s\u00ed misma, por poco que sea, no llegar\u00e1 nunca a ella perfectamente\u201d.<\/span><\/p>

    14 Diciembre 1933. \u201cDios trata con las almas de\u00a0 coraz\u00f3n\u00a0 puro, como una madre\u00a0 trata a su ni\u00f1o peque\u00f1o. La pureza del coraz\u00f3n, la humildad del coraz\u00f3n, el desprendimiento de todo y especialmente de s\u00ed mismo es lo que Dios busca para comunicarse a un alma con una comunicaci\u00f3n \u00edntima y amorosa. Cuando m\u00e1s ama un alma la pureza del coraz\u00f3n, tanto m\u00e1s apta es para el consorcio con Dios. Un alma pura\u00a0\u00a0 es como un lirio de amor. Un alma pura es como una flor rica de n\u00e9ctar, que con su perfume atrae a Jes\u00fas, el cual, como una abeja m\u00edstica, se posa sobre esa flor para hacer su cosecha de amor\u201d.<\/span><\/p>

    15 Diciembre 1933. \u201cYo encuentro mis delicias en un alma habitualmente humilde, esto es, que est\u00e1 siempre en un ambiente de humildad. En cambio, un alma que no se humilla m\u00e1s que de cuando en cuando me hace sonre\u00edr en aquel momento,\u00a0 pero\u00a0 no\u00a0 hace mis complacencias como las hace un alma habitualmente humilde. No hay camino que conduzca m\u00e1s directamente, m\u00e1s seguramente, m\u00e1s pronto\u00a0 y m\u00e1s suavemente a\u00a0 Dios\u00a0 que la humildad. La humildad, estudiadla en el Evangelio; la humildad, aprendedla\u00a0 en mi vida; la humildad, profundizadla en la Eucarist\u00eda. Si beb\u00e9is\u00a0 la humildad\u00a0 en\u00a0 estos tres manantiales siempre la encontrar\u00e9is\u201d.<\/span><\/p>

    16 Diciembre 1933. \u201cYo me encuentro como oprimido por el\u00a0 peso de mis gracias,\u00a0 que vuelven a recaer sobre M\u00ed, pues que los hombres no las quieren;\u00a0 y\u00a0 cuando\u00a0 encuentro un alma que me deja la libertad de hacerle gracias, entonces mi Coraz\u00f3n se siente aliviado por decirlo as\u00ed, puesto que cuando digo que\u00a0 sufro, que\u00a0 estoy\u00a0 oprimido,\u00a0 no pretendo decir esto de un modo absoluto, sino seg\u00fan el modo humano\u00a0 de hablar,\u00a0 para hacerme entender Yo no puedo ahora sufrir cosa alguna, sufro en mi\u00a0 cuerpo\u00a0 m\u00edstico, la Iglesia, pues despu\u00e9s de mi resurrecci\u00f3n soy inmortal, impasible, glorioso\u201d.<\/span><\/p>

    Jes\u00fas, padre y maestro de las almas<\/b><\/span><\/p>

    17 Diciembre de 1933. \u201cPocas almas caminan con paso decidido por las\u00a0 v\u00edas\u00a0 del amor, porque son muy pocas las que entran con generosidad en los senderos del sacrificio. Pararse en el camino del sacrificio es pararse en el camino del amor. No dig\u00e1is basta nunca de esp\u00edritu de sacrificio, porque equivaldr\u00eda a decir BASTA de acrecentamiento en el camino del amor. Nada acreciente tanto el amor\u00a0 en\u00a0 el\u00a0 alma, como la cruz\u201d.<\/span><\/p>

    18 Diciembre 1933. \u201cLa humildad da tanta gloria a Dios, porque destruye el amor propio, que es lo que m\u00e1s se opone al amor divino. As\u00ed como hay una vida interior, as\u00ed tambi\u00e9n hay una muerte interior. No hablo de la muerte f\u00edsica del alma, pues el alma no puede morir; ni tampoco de la muerte del sentido, o de que pierda la gracia santificante que es su vida sobrenatural; hablo de la muerte de las pasiones, de la propia voluntad, del juicio propio, de lo que brota de la naturaleza corrompida. Mientras m\u00e1s se tenga de esta muerte interior m\u00e1s y m\u00e1s ser\u00e1 en el alma la vida interior, y sin morir no se puede llegar a la vida\u201d.<\/span><\/p>

    19 Diciembre 1933. \u201cEsa muerte interior repugna a la naturaleza y le hace sufrir, pero es necesaria, y s\u00f3lo el alma, que se abandona al amor, llega a la uni\u00f3n con Dios. Esta uni\u00f3n se verifica con la cruz. Como generalmente hablando no se llega a la muerte sino por medio de la enfermedad, que consume poco a poco la vida, as\u00ed tambi\u00e9n para llegar a la muerte interior se requiere una continua mortificaci\u00f3n. Cuando se hace alg\u00fan exceso se ocasiona m\u00e1s pronto la muerte. A un alma que se abandona al Amor, el Amor mismo le lleva a la muerte interior, pero un alma que trabaja con el Amor y ayuda al Amor llega m\u00e1s pronto a la muerte interior, reino Yo en aquel coraz\u00f3n, porque donde ya no reina mas el amor propio, reina mi Amor, y este Amor lo quiere todo\u201d.<\/span><\/p>

    20 Diciembre 1933. \u201cHay almas que me abren la puerta, s\u00ed; pero con cierto miedo. Otros me abren, pero con condiciones. Otras, por \u00faltimo, me abren de par en par las puertas y me invitan a entrar. Las primeras, son aquellas almas que dejan el mal por\u00a0 temor del pecado; las segundas me abren, pero quieren que Yo las\u00a0 contente,\u00a0 les\u00a0 d\u00e9 gusto y les acaricie; las \u00faltimas, me abren y me reciben con mi cruz, con mis espinas y\u00a0\u00a0\u00a0 con mi amor\u201d.<\/span><\/p>

    21 Diciembre 1933. \u201cVoy mendigando el amor de mis criaturas, y ellas\u2026\u00a0 me\u00a0 lo\u00a0 niegan para conced\u00e9rselo a tantos objetos que atraen sus miradas. Si supieseis cu\u00e1n doloroso es amar tanto y no ser correspondido\u2026 No desisto, sin embargo; siempre pido amor y nadie me lo da. Mas, \u00a1ah!, no s\u00f3lo no me aman sino que me aborrecen. \u00bfSab\u00e9is\u00a0\u00a0\u00a0 lo que me detiene de no castigar a los pecadores? Las oraciones de los justos son las que desarman mi divina justicia\u201d.<\/span><\/p>

    22 Diciembre 1933. \u201cSe tiene un concepto tan mezquino de la bondad de Dios, de su misericordia, de su amor\u2026 Se le mide por las criaturas, pero Dios no es un ser limitado como ellas; por eso su bondad no reconoce l\u00edmites. Estar Dios al alcance de todos y no aprovecharse los hombres\u2026 Y \u00bfpor qu\u00e9 no lo hacen? Porque a Dios no se le conoce por\u00a0\u00a0\u00a0 el mundo; Soy un tesoro infinito puesto por Mi Eterno Padre a disposici\u00f3n de todos. Mis<\/span><\/p>

    criaturas me rechazan y \u00a1con cu\u00e1nto detrimento para ellas! Esto s\u00f3lo lo podr\u00e1n entender en el otro mundo\u201d.<\/span><\/p>

    23 Diciembre 1933. \u201cLos pecados de los hombres son los que\u00a0 destrozan\u00a0 este\u00a0 Coraz\u00f3n divino, y tiene tan grandes deseos de santificar a las almas. Las resistencias que \u00e9stas me oponen le hieren, y por el contrario, \u00a1qu\u00e9 consuelo reciben aquellos que corresponden a sus invitaciones! Quiero que todas las criaturas sepan que la\u00a0 mayor ofensa que pueden hacer a mi Coraz\u00f3n es dudar de su bondad. Mi Coraz\u00f3n no s\u00f3lo se compadece, sino que se regocija cuando haya mucha materia en qu\u00e9 ejercer la\u00a0 reparaci\u00f3n, con tal de que no vea malicia\u201d.<\/span><\/p>

    24 Diciembre 1933. \u201cSi supierais lo que har\u00eda en un alma, aunque estuviera llena de miserias, si ella me dejara obrar\u2026 El Amor de nada necesita, s\u00f3lo desea no encontrar resistencia. Y frecuentemente lo que exijo de un alma, a la que quiero hacer muy santa,\u00a0 es que me deje obrar en ella. Las imperfecciones del alma, cuando no son consentidas,\u00a0\u00a0 no me disgustan, sino que atraen la compasi\u00f3n de mi Coraz\u00f3n\u2026 \u00a1Amo tanto a las almas! Las imperfecciones deben servir al alma como de escalones\u00a0 para subir a M\u00ed,\u00a0 por\u00a0 medio de la humildad, la confianza y el amor. Me inclino hacia el alma que se humilla; voy a buscarla en su nada para unirla conmigo\u201d.<\/span><\/p>

    25 Diciembre 1933. \u201c\u00a1Si supieran la pena que a Dios le causan dudando\u00a0 de\u00a0 su\u00a0 bondad divina! Por grandes, por enormes y numerosos que sean los pecados de mis criaturas, estoy dispuesto no s\u00f3lo a perdonarlos sino a olvidarlos, con tal de que los pecadores se vuelvan a M\u00ed\u201d.<\/span><\/p>

    26 Diciembre 1933. \u201cCuando un alma se arrepiente, cuando detesta el pecado, que tuvo la desgracia de cometer, cuando le llora de todo coraz\u00f3n, \u00bfme creer\u00edais tan\u00a0 duro\u00a0 que no lo olvide? No conocer\u00edais mi Coraz\u00f3n si lo juzgaseis as\u00ed. Mi amante Coraz\u00f3n tiene tal hambre y sed de los pobres pecadores, que cuando un alma empieza a volverse a su Dios, ya mi Coraz\u00f3n no puede contener y corre a su encuentro\u201d.<\/span><\/p>

    27 Diciembre 1933. \u201cNo me descorazonan las miserias, con tal de hallar una buena voluntad. En habiendo buena voluntad, hay probabilidad de trabajar. Mi amor\u00a0 se\u00a0 alimenta consumiendo miserias, y el alma que mayores las traiga, con tal de que tenga coraz\u00f3n contrito y humillado, es la que m\u00e1s me agrada, por darme mayor ocasi\u00f3n de ejercitar mi oficio de amante Salvador\u201d.<\/span><\/p>

    28 Diciembre 1933. \u201cAs\u00ed como el fuego se alimenta con el combustible, as\u00ed Mi Misericordia se alimenta con las miserias que consume; y mientras mayores sean las que tenga que consumir, m\u00e1s se engrandece mi misericordia, como sucede con el fuego que\u00a0se aviva a medida que le echan combustible. Si se supiera lo que goza\u00a0 Mi\u00a0 Coraz\u00f3n\u00a0 cuando creen las criaturas en su amor, y \u00a1creen tan poco el \u00c9l\u2026!\u201d<\/span><\/p>

    29 Diciembre 1933. \u201c\u00a1Oh!, con mis Cruc\u00edferos hago lo que quiero, con ellos puedo andar a mis anchas, ellos me abren las puertas de su coraz\u00f3n de par en par.\u00a0 Son\u00a0 azucenas, pero entre espinas muy punzantes. Hace alg\u00fan tiempo aprieto las espinas de\u00a0 sus alrededores a fin de que les pinchen. Algunos de los corderos se enfr\u00edan, pero que no se turben, pues Yo les prometo guardar a todos dentro de Mi Coraz\u00f3n\u201d.<\/span><\/h3>

    30 Diciembre 1933. \u201cYo soy el Amor. Mi esp\u00edritu es suave, y es preciso atenci\u00f3n para sentirle. As\u00ed como el \u00e1rbol necesita de un viento impetuoso para mover su tronco, sobre todo cerca de sus ra\u00edces; y para mover las ramas basta un viento menos fuerte (aunque fuerte tambi\u00e9n), pero las hojas, por poco que sea el viento, se mueven; as\u00ed sucede con las almas. Para mover a los pecadores m\u00e1s obstinados todo se necesita. Para otras almas, a\u00fan se requiere trabajo, empero las almas fieles sienten s\u00fabitamente las inspiraciones, y las mismas inspiraciones no son sentidas de todos. Vosotros no se\u00e1is como una hoja cualquiera, sino como una hoja muerta, que la arranca el viento y la lleva donde quiere\u201d.<\/span><\/h3>

    31\u00a0 Diciembre 1933. \u201cAl principio de este a\u00f1o, que hoy terminamos, os manifest\u00e9\u00a0\u00a0 que \u00e9ste era el a\u00f1o de los castigos. S\u00ed, hubieran llegado, si no se hubiera hecho mucha oraci\u00f3n, pero ha sido bastante la que se ha hecho. Ahora bien, si no se enmiendan los hombres, \u00e9ste que empezaremos, ser\u00e1 el a\u00f1o de los castigos. Mucho he esperado y no puedo esperar m\u00e1s, pues la tierra se volver\u00eda infierno. \u00a1Oh! Hasta necesito v\u00edctimas para conservar a los buenos\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    El Amor de los amores<\/b><\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    1\u00ba Enero 1934. \u201cHe amado de tal manera al mundo, que he derramado mi Sangre por \u00e9l, Yo por \u00e9l he muerto en el \u00e1rbol de la Cruz. En este \u00e1rbol, el pecador arrepentido encuentra la vida. \u00a1Oh, si supierais cu\u00e1nto os amo!; mas esto, no lo podr\u00e9is comprender, ni a\u00fan en la misma vida (el cielo)\u201d.<\/span><\/h3>

    2 Enero 1934. \u201cVen, pecador\u00a0 endurecido, ven. Mira mi\u00a0 Coraz\u00f3n, mira este agujero\u00a0 de donde salen rayos de misericordia para contigo\u2026 Mira mis pies por ti desgarrados\u2026<\/span><\/h3>

    \u00a1M\u00edrame, \u00e1mame! Si me miras, me amar\u00e1s. Si me amas vivir\u00e1s\u2026 porque el amor es la vida. \u00a1Ven, ven a M\u00ed! Jes\u00fas te espera con los brazos abiertos. \u00a1M\u00edrame! Servirme a m\u00ed es reinar\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a03 Enero 1934. \u201cSi quieres aprender a amarme tienes que ir a Mar\u00eda, mi Madre, y tambi\u00e9n la tuya. Ella te ense\u00f1ar\u00e1. El camino para llegar a M\u00ed, es Mar\u00eda. De Mar\u00eda a M\u00ed. Hay dos escaleras: La primera es blanca, adornada de azucenas, y al final est\u00e1 Mar\u00eda. La segunda es roja, adornada con cruces y espinas, y al final estoy Yo. Los que quieran venir a M\u00ed, ha de ser por Mar\u00eda.\u201d<\/span><\/h3>

    4 Enero 1934. \u201cAmadme, pues soy muy despreciado. Amadme con amor m\u00e1s fuerte que la muerte. Amad a este Coraz\u00f3n que tanto os ama. \u00a1Oh, si supierais qu\u00e9 consuelo recibo cuando en medio de tantas blasfemias oigo un, \u201cJES\u00daS, TE AMO!\u201d Si este, \u201cJes\u00fas,\u00a0 te amo\u201d es salido del coraz\u00f3n\u2026 Si supierais cu\u00e1ntas ganas tengo de llevar al cielo a todos los hombres\u2026 no porque me hacen falta, sino para que sean felices, pues s\u00f3lo busco vuestra felicidad\u201d.<\/span><\/h3>

    5 Enero 1934. \u201cTengo sed de amor de mis criaturas. Los serafines me quieren sobre todas las cosas; los santos tambi\u00e9n; y su amor es m\u00e1s puro y m\u00e1s perfecto: Tengo, pues, mucho amor en el cielo; pero vengo a buscarlo sobre la tierra, porque en ella el amor es libre. Yo tengo un Coraz\u00f3n humano. Quiero a los hombres, porque son mis hermanos, y atraigo a M\u00ed las miserias de mis pobres y d\u00e9biles criaturas para consumirlas en el fuego\u00a0\u00a0 de mi divina caridad\u201d.<\/span><\/h3>

    6 Enero 1934. \u201cQuiero resucitar vuestros L\u00e1zaros, vuestros hermanos los pecadores.<\/span><\/h3>

    \u00a1Ten\u00e9is tantos de \u00e9stos! Llevadme a sus sepulcros, \u00bfd\u00f3nde est\u00e1n sus\u00a0 sepulcros? Mira,\u00a0 uno est\u00e1 sepultado en el vicio de la gula\u2026 Pues \u00e9ste est\u00e1 muerto; ese vicio es\u00a0 un\u00a0 sepulcro, y cuando vosotros practic\u00e1is alguna mortificaci\u00f3n, me conduc\u00eds al sepulcro del primero. El segundo est\u00e1 sepultado en otros vicios; est\u00e1 muerto, y vosotros viviendo una vida ang\u00e9lica, me llev\u00e1is a su sepulcro. Pero escuchadme con atenci\u00f3n; enseguida doy orden al muerto y hago que resucite; pero queda todav\u00eda ligado,\u00a0 y mando\u00a0 a los\u00a0 suyos que desaten sus ligaduras. As\u00ed vosotros deb\u00e9is perseverar en las pr\u00e1cticas de\u00a0 mortificaci\u00f3n para acabar la obra de la resurrecci\u00f3n de los pecadores y conseguir que se vean libres de sus malas costumbres\u201d.<\/span><\/h3>

    7 Enero 1934. \u201cPreparaos, hijos, pues el viento se alza furioso para pelear con las olas del mar. La ola de la revoluci\u00f3n llega, aunque est\u00e1 cubierta ahora con espuma blanca; m\u00e1s otra vendr\u00e1 que le pasar\u00e1 por encima. \u00a1Oh, hasta los que se llaman cat\u00f3licos se hallan enredados entre la espuma! Despertaos, que pronto el reloj divino dar\u00e1 la hora\u201d.<\/span><\/h3>

    8 Enero 1934. \u201c\u00a1Oh, mendigo vuestro coraz\u00f3n! Y, \u00bfpor qu\u00e9 cre\u00e9is que ando mendigando vuestros corazones, siendo Yo tan rico, sino porque quiero que se\u00e1is felices y goc\u00e9is por toda la eternidad? Todos pod\u00e9is ser santos y, si no lo sois, es porque no quer\u00e9is. \u00a1Oh!, por unos gustillos de ah\u00ed, de la tierra, perd\u00e9is una eternidad feliz y gan\u00e1is el infierno\u201d.<\/span><\/h3>

    9 Enero 1934. \u201cDadme, s\u00ed, dadme vuestro coraz\u00f3n. En el cielo tengo muchos corazones, pero vengo a buscar sobre la tierra, pues en ella el amor es libre. Haced actos de amor, pues un solo acto de amor repara miles de blasfemias. Quiero, s\u00ed, quiero vuestros pobres corazones, vac\u00edos por la humildad y ensanchados por el amor. S\u00ed, enriquecido con las hermosas perlas de las virtudes\u201d.<\/span><\/h3>

    10 Enero 1934. \u201cYo soy el Amor. Mi Esp\u00edritu es suave y es preciso atenci\u00f3n para sentirle. El martirio de amor consiste en abandonarse al Amor como la le\u00f1a al fuego, como el oro en el crisol. El fuego consume a la le\u00f1a y la reduce a cenizas. El fuego purifica al oro y lo vuelve resplandeciente. Un alma abandonada al Amor, ya no puede temer la operaci\u00f3n del amor, a menos que siendo infiel, por ella misma se sustraiga a su acci\u00f3n. El amor no cesa hasta llevar al alma al grado de perfecci\u00f3n que Dios quiere de ella. Del mismo modo que el fuego sigue consumiendo la le\u00f1a, hasta que ya no queda ni una astilla\u201d.<\/span><\/h3>

    11 Enero 1934. \u201cLa confianza es la llave que abre los tesoros de mi infinita misericordia. \u00bfSab\u00e9is cu\u00e1les son las almas que gozan de mi bondad? Son aquellas que m\u00e1s conf\u00edan en M\u00ed. Las almas confiadas son las ladronas de mis gracias. El placer que experimento en un alma confiada es muy grande. Si clavaran las manos a un ladr\u00f3n, \u00bfpodr\u00eda robar aunque quisiera? Pues bien, Yo me he dejado clavar las manos para no poder, por decirlo as\u00ed, castigar a los pobres pecadores. Sufrieron tanto mis ojos por la sangre que entraba en ellos, que apenas pod\u00eda abrirlos, pero los abr\u00eda de vez en cuando para mirar con mucha compasi\u00f3n a los verdugos\u201d.<\/span><\/h3>

    12 Enero 1934. \u201cS\u00ed, concededme el consuelo que tanto ans\u00edo: el de darme vuestras miserias. Quiero ser el trapero, es decir, el que se queda con los trapos, y adem\u00e1s paga al que se los presta. Si me dais vuestras miserias, Yo las pago, os saco de la confusi\u00f3n en que os hall\u00e1is, y con ello me agrad\u00e1is; pero hay que vend\u00e9rmelas por un acto de profunda humildad, no superficial, sino sentida. Oh, s\u00ed, dadme esos harapos, con los cuales no sab\u00e9is que hacer. Yo sacar\u00e9 con ellos algo provechoso; dejad obrar a Mi Amor. El Amor y la Misericordia son como la respiraci\u00f3n de Mi dulc\u00edsimo Coraz\u00f3n\u201d.<\/span><\/h3>

    13 Enero 1934. \u201cSi quieres amarme a M\u00ed \/ has de aprender a sufrir, \/ pues, acu\u00e9rdate que as\u00ed \/ por tal camino has de ir. \/ En la Cruz encontrar\u00e1s \/ a Jes\u00fas tu Salvador: \/ fuera de la Cruz, jam\u00e1s \/ podr\u00e1s hallarle mejor. \/ Jes\u00fas padeci\u00f3 por ti \/ muchas penas horrorosas; \/ y al cielo no llegar\u00e1s \/ por un camino de rosas. \/ Mucho tendr\u00e1s que sufrir; \/ mas \u00c9l te lo pagar\u00e1 \/ y all\u00ed, muy arriba, s\u00ed, \/ \u00c9l, su cielo te dar\u00e1. \/ Cuanto m\u00e1s sufras aqu\u00ed \/ m\u00e1s feliz all\u00ed ser\u00e1s, \/ y siempre toma la Cruz \/ sin desaliento jam\u00e1s. \/ Gozando dichoso all\u00ed \/ oh, \u00a1qu\u00e9 dichoso ser\u00e1s! \/ mas mientras est\u00e9s aqu\u00ed \/ nunca pienses descansar. \/ En Mi regazo sentado \/ en \u00e9l, caliente estar\u00e1s \/ oh, aquel dichoso estado, \/ oh, qu\u00e9 feliz t\u00fa ser\u00e1s. \/ Ama a Jes\u00fas por Mar\u00eda \/ y a Mar\u00eda por Jes\u00fas. \/ Busca estos dos, hija m\u00eda \/ y dichosa ser\u00e1s t\u00fa\u201d.<\/span><\/h3>

    14 Enero 1934. \u201cSi quer\u00e9is ser santos, no fieis en vosotros mismos y confiad en M\u00ed. No basta el uno sin el otro; ser\u00eda un carro al que le faltar\u00eda una rueda y no podr\u00eda marchar con una sola. Si quieres agradarme conf\u00eda en M\u00ed; si quieres agradarme m\u00e1s, conf\u00eda a\u00fan m\u00e1s, y si quieres agradarme inmensamente, conf\u00eda inmensamente. Nunca podr\u00e1s confiar lo que desea Mi Coraz\u00f3n. Un acto de confianza me agrada hasta este punto por la raz\u00f3n de que con \u00e9l se honran mis m\u00e1s queridos atributos: la bondad y la misericordia\u201d.<\/span><\/h3>

    15 Enero 1934. \u201c\u00a1Oh, muchos son los que me aman durante el consuelo, pero pocos en la tribulaci\u00f3n! Tengo muchos amadores del cielo, pero pocos que quieran sufrir para entrar en \u00e9l. Muchos me siguen durante los consuelos, pero despu\u00e9s me abandonan. Muchos quieren mis milagros, pero pocos mi Pasi\u00f3n. \u00a1Cu\u00e1n pocos me aman! Muchos se apartan de M\u00ed como si fuera un asesino, un malhechor que quiera hacerles da\u00f1o\u2026 \u00a1Cu\u00e1n pocos son los que se arrojan en mis brazos\u2026!\u201d<\/span><\/h3>

    16 Enero 1934. \u201cLos malos quieren quitar hasta el \u00faltimo vestigio de mi Religi\u00f3n, y\u00a0\u00a0 los que se llaman cat\u00f3licos se acobardan, y muchos se ofrecen como esclavos a los malos para que ellos hagan lo que quieran. Se dan a los demonios para que hagan de ellos lo\u00a0 que quieran, y temen darse a M\u00ed como si fuese un asesino. No tengo quien me siga, no tengo ap\u00f3stoles, me faltan ap\u00f3stoles; ya tengo muchos, ya tengo, pero no\u00a0 son\u00a0 verdaderos ap\u00f3stoles, \u00a1ah, no!, est\u00e1n llenos de respetos humanos, Yo no les conozco como ap\u00f3stoles\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0La ola rojiza empujando a la barquilla, s\u00edmbolo de Espa\u00f1a.<\/b><\/span><\/h3>

    \u00a010\u00a0 Septiembre\u00a0 1933.\u00a0 \u201cDespertad,\u00a0 hijos,\u00a0 despertad,\u00a0 pues\u00a0 vienen\u00a0 tiempos terribles, \u00bfno veis como la ola rojiza extiende sus espumas sobre esta Mi Naci\u00f3n desdichada? \u00bfNo veis como choca contra las rocas y empuja hacia abajo la barquilla? Despertad, s\u00ed, despertad; si ahora no despert\u00e1is y empuj\u00e1is esa ola para atr\u00e1s, os vais a hundir sin remedio, y vuestros restos deshechos llevar\u00e1 el viento hacia el reino del olvido para siempre\u201d.<\/span><\/h3>

    11 Septiembre 1933. \u201cYo me canso de esperar. La ola roja viene hacia la barquilla,<\/span><\/h3>

    \u00bfno veis como se acerca?, \u00bfno o\u00eds su ruido aterrador? \u00a1Ah!, pronto extender\u00e1 sus espumas, y la barquilla, que es donde est\u00e1is vosotros, ir\u00e1 abajo, pues no podr\u00e1 seguir, por m\u00e1s que pelee contra la ola. Para entonces se habr\u00e1n apagado las luces, y en medio de la oscuridad pasareis toda esta pelea hasta que venga otra ola a\u00fan m\u00e1s rojiza y ensangrentada y os empuje contra las rocas, donde la barquilla se hundir\u00e1 con todos los suyos\u201d.<\/span><\/h3>

    13 Septiembre 1933. \u201cLos malos quieren quitar hasta el \u00faltimo vestigio de mi Iglesia; m\u00e1s, en Espa\u00f1a, no podr\u00e1n jam\u00e1s quitar, aunque s\u00ed en otras partes. Todav\u00eda a mi Iglesia la ver\u00e9is llorar; las Sagradas Formas sangrar\u00e1n; pero a\u00fan no se ablandar\u00e1n sus duros corazones. Ver\u00e9is cruces en la luna, raros rayos en el sol, y otras se\u00f1ales de \u00e9stas; pero los malos no abrir\u00e1n a\u00fan sus ojos, \u00a1ah, y cu\u00e1n amargo ser\u00e1 su despertar!…\u201d<\/span><\/h3>

    14 Septiembre 1933. Vi una iglesia muy grande, y encima de ella estaba el Padre Celestial, acompa\u00f1ado de infinidad de \u00e1ngeles. Muchos eran los que pretend\u00edan entrar, pero el Padre Celestial les despachaba diciendo: \u201c\u00a1Fuera, fuera, vosotros los que\u00a0 no hab\u00e9is atendido mi voz!\u201d En esto se llenaron de agua las calles, y los despachados se ahogaban casi todos. De pronto, apareci\u00f3 una barca con muchos hombres, que en el pecho llevaban cruces grandes, y al llegar a la puerta de la Iglesia, el Padre Celestial les dec\u00eda: \u201cEntrad, entrad, benditos m\u00edos\u201d. Despu\u00e9s de entrar los hombres, vino otra barca llena de mujeres que tambi\u00e9n llevaban cruces en el pecho, y el Padre Celestial les hizo entrar en la Iglesia como a los primeros. Luego de ellas, entr\u00f3 \u00c9l, y se cerraron las puertas. Preguntando yo a la Sant\u00edsima Virgen qu\u00e9 hab\u00eda sido aquello, contest\u00f3: \u201cEsto que has visto, hija m\u00eda, es la Orden de los Cruc\u00edferos, que despu\u00e9s de su conquista en el mundo van a reposar a la iglesia\u201d.<\/span><\/h3>

    15 Septiembre 1933. Jes\u00fas me habl\u00f3 as\u00ed: \u201cEsta ola que reposa en Espa\u00f1a, lleva en pos de s\u00ed a la barquilla. D\u00eda vendr\u00e1, y no lejano, en que no podr\u00e1 caminar, porque la ola rojiza le alcanzar\u00e1 y convertir\u00e1 a la barquilla en cruel carnicer\u00eda, y har\u00e1 lo que quiera en los pocos d\u00edas que est\u00e9. M\u00e1s, despu\u00e9s, Yo pondr\u00e9 mi mano y aplacar\u00e9 la furia de las olas. Entonces, la barquilla deshecha ser\u00e1 renovada con mi propia mano, y plantar\u00e9 en ella la semilla de la verdadera Religi\u00f3n la cual florecer\u00e1 pronto en toda la barquilla\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a016 Septiembre 1933. La Sant\u00edsima Virgen me dijo: \u201cCu\u00e1n pesado se me hace el brazo de mi Hijo!; ya no puedo sostenerlo m\u00e1s. Estoy sola, nadie me ayuda, nadie quiere sufrimiento; todos se apartan de la cruz; pocos son los que me ofrecen sacrificios, pues\u00a0 les arredra la penitencia.\u201d Despu\u00e9s Jes\u00fas continu\u00f3: \u201cViene la rojiza ola terrible, y muchos van a recibirla\u2026 Mas, pronto ver\u00e1n arruinada la barquilla; y antes que esto suceda, Yo sacar\u00e9 a los m\u00edos de esta barquilla y les llevar\u00e9 conmigo al desierto\u2026\u201d<\/span><\/h3>

    17 Septiembre 933. \u201cBraman enfurecidas las olas de la revoluci\u00f3n en torno a la barquilla, la cual pronto se ver\u00e1 despedazada entre el viento y las olas, y desaparecer\u00e1 entre bramidos aterradores. No habr\u00e1 paz en la barquilla; todo ser\u00e1 pelea hasta que Yo plante mi semilla y encienda las luces. Entonces, podr\u00e1n ver y salir del mar, pues la barquilla ser\u00e1 renovada\u201d.<\/span><\/h3>

    18 Septiembre 1933. \u201cTengo perlas preciosas y de mucho valor, que\u00a0 son\u00a0 las\u00a0 v\u00edctimas. Para \u00e9stas son todos los latidos de Mi Coraz\u00f3n; \u00e9stas me tienen robado el coraz\u00f3n; \u00e9stas me ayudan a contener el castigo; \u00e9stas me traen muchas almas,\u00a0 \u00a1ah, cu\u00e1nto las quiero!\u201d.<\/span><\/h3>

    19 Septiembre 1933. \u201cRogad a Mi Padre Celestial para que muchas ovejas,\u00a0 que\u00a0 andan perdidas, encuentren el redil de Mi Iglesia, pues muchos no\u00a0 tienen\u00a0 luz.\u00a0 No\u00a0 quieren obedecer a mis Ministros y a los que Yo he puesto para que obedezcan. Quiero que viv\u00e1is de Mi Evangelio. \u00a1Ah, cu\u00e1ntas gracias derramar\u00eda sobre la tierra!; pero no encuentro corazones que quieran recibirlas. Mi Padre Celestial no les da luz, y a oscuras no pueden preparar sus corazones\u201d.<\/span><\/h3>

    20 Septiembre 1933. \u201cYa llegan las mayores olas, las olas ensangrentadas, \u00bfno o\u00eds su ruido?, \u00bfno veis c\u00f3mo chocan contra las rocas y despedazan a la barquilla? En esta otra barquilla que ves, van mis perlas preciosas, \u00bfno ves c\u00f3mo avanza suavemente y va muy recta? \u00a1Ah!, dichosas las perlas de esta barquilla; m\u00e1s las de la otra\u2026 \u00a1qu\u00e9 desdicha, qu\u00e9 pelea! Mis preciosas perlas llevan cruces\u2026 \u00bfno ves c\u00f3mo brillan, y llena el aire de suave perfume? En esta barquilla hay muchas flores que yo he plantado\u201d.<\/span><\/h3>

    21 Septiembre 1933. \u201cLa ola ensangrentada extiende sus espumas sobre la playa, antes que las extienda, Yo descargar\u00e9 Mi Justicia justamente irritada por los ultrajes que cada d\u00eda recibo, sobre todo de la blasfemia, que es lo que m\u00e1s apena Mi Coraz\u00f3n, y el domingo profanado irrita sobremanera a mi Padre Celestial\u201d.<\/span><\/h3>

    22 Septiembre 1933. \u201cLas olas que se enfurecen y avanzan en torno a la desdichada barquilla, no son mas que peque\u00f1as se\u00f1ales. Si con \u00e9stas no pueden resistir, \u00bfqu\u00e9 har\u00e1 con las mayores? Las mayores son muy rojas, vienen de Rusia; pero, cuando los malos est\u00e9n dormidos, la barquilla empujada por las olas, se hundir\u00e1, y el viento empujar\u00e1 a las rojizas olas hasta donde vinieron. Entonces la mar se calmar\u00e1, y mis barquillas pasar\u00e1n pescando perlas preciosas del fondo\u201d.<\/span><\/h3>

    23 Septiembre 1933. \u201cEl viento se enfurece y la barquilla tiembla y choca contra las rocas. D\u00eda vendr\u00e1 en que ya no podr\u00e1 m\u00e1s y se hundir\u00e1; m\u00e1s despu\u00e9s vendr\u00e1 otra con mis perlas preciosas y perfumar\u00e1 aquellos alrededores con suaves aromas; y, despu\u00e9s de la batalla llegar\u00e1 al puerto y all\u00ed contemplar\u00e1 los rasgos de mi amor\u201d.<\/span><\/h3>

    24 Septiembre 1933. \u201cOrad, orad; s\u00f3lo la oraci\u00f3n y la penitencia os pueden dar la vida, la vida de paz, la vida de verdaderos cat\u00f3licos, la vida que Yo quiero. Sed buenos,\u00a0 sed santos, como santo soy Yo. Los que quieran seguirme tienen que tomar\u00a0 su cruz a\u00a0 cada instante y llevarla en pos de M\u00ed. As\u00ed, recoger\u00e1n mis perlas, que son mis gracias, las que a cada paso brotan de Mi Coraz\u00f3n. Si supieseis qu\u00e9 es el sufrimiento, \u00a1c\u00f3mo os gustar\u00eda!, pues el sufrimiento es prueba segura de que estoy con vosotros. Pensad un momento que un padre le colmase de regalos a su hijo; pues ese Padre soy Yo, que os colmo de regalos. Y esos regalos, que s\u00e9 hacer yo, son el sufrimiento. Os regalo Mi Cruz junto con Mi Coraz\u00f3n. Si me comprendierais como Yo soy, c\u00f3mo me seguir\u00edais,\u00a0 mas no\u00a0 me comprend\u00e9is\u2026\u201d<\/span><\/h3>

    25 Septiembre 1933. \u201cSufrimiento, sufrimiento quiero Yo. La cosa m\u00e1s hermosa que puede haber en este destierro es el sufrimiento. \u00a1Si supierais cu\u00e1nto os amo a los que sufr\u00eds con resignaci\u00f3n! Los que llev\u00e1is vuestra cruz en pos de M\u00ed, o\u00eds los latidos de Mi Coraz\u00f3n, y estos latidos\u2026 son para vosotros; pero, haceos cargo que sin cruz no pod\u00e9is venir a M\u00ed, y si os quitara la cruz ser\u00eda porque no os amo mucho; a los que os amo no os quitar\u00e9 la cruz, sino que la aligerar\u00e9 un poco, para que me pod\u00e1is seguir hasta el final de vuestra carrera, donde, sentados sobre mi pecho, os dar\u00e9 gozo eterno\u201d.<\/span><\/h3>

    26 Septiembre 1933. \u201cSeguidme a M\u00ed; venid en pos de M\u00ed, cada uno con\u00a0 su cruz.\u00a0 Estas almas que me siguen con su cruz son las ladronas de mis gracias. Cuanto mayor sea la cruz, mayores ladrones son de Mis gracias, porque andan m\u00e1s cerca de M\u00ed, y cuanto m\u00e1s cerca m\u00e1s gracias me robar\u00e1n, pues ellas tendr\u00e1n m\u00e1s ocasiones de robarme, y las almitas peque\u00f1as, que empiecen con la cruz, Yo les ense\u00f1ar\u00e9 a andar, pues no sabr\u00edan y\u00a0 se caer\u00edan. Mas, \u00a1ay de las que est\u00e1n tal altas y se caen, porque su ca\u00edda ser\u00e1 mortal! Pensad un poco que una ni\u00f1a del \u00faltimo piso cayera abajo; morir\u00eda, \u00bfno es verdad? Pues\u00a0 lo mismo pasa con las almas, que aunque mueran, Yo puedo resucitarlas, pero me cuesta mucho. Las peque\u00f1itas, aunque caigan, les dura poco el da\u00f1o y tienen menos peligro\u201d.<\/span><\/h3>

    27 Septiembre 1933. \u201cEl viento azota las barquillas, que son las almas, y \u00e9stas no pueden navegar. En vez de ir adelante, el viento las empuja para atr\u00e1s, y ellas no saben vencerle, y van donde les empuja el viento; \u00e9stas son las almas que no pueden soportar contrariedades, pues si supieran soportarlas, ir\u00edan adelante, aunque el viento las empujara para atr\u00e1s, pero se acobardan, no me piden ayuda, y solas no pueden hacer nada. Es que no miran m\u00e1s que al viento; no miran adelante, y as\u00ed no pueden ver que adelante est\u00e1 el puerto de paz y descanso. Y los infelices van atr\u00e1s y contin\u00faan hasta llegar al abismo\u201d.<\/span><\/h3>

    \u201cMis perlas preciosas que son los Cruc\u00edferos, llevan cruces sobre sus pechos. En esas cruces estoy Yo. Esta Religi\u00f3n ser\u00e1 la \u00fanica que despu\u00e9s habr\u00e1 en el mundo. \u00a1Cu\u00e1nto me gusta que est\u00e9s entre ellos! Yo continuamente estoy velando por ellos, pues ellos ni un instante se apartan de M\u00ed; siempre son obedientes a Mi llamamiento. Casi son los \u00fanicos que me aman mucho; \u00a1qu\u00e9 contento estoy en sus corazones\u2026! A cada latido de sus corazones sale una sonrisa de mis labios\u201d.<\/span><\/h3>

    29 Septiembre 1933. \u201cLa barquilla anda chocando contra las olas; pronto chocar\u00e1 con una grande y contraria, y entonces se romper\u00e1. Mas, despu\u00e9s, vendr\u00e1n las ensangrentadas, las cuales har\u00e1n llorar a Mi Iglesia e hijos. Los m\u00edos, no tem\u00e1is por nada, pues yo estar\u00e9 con vosotros; s\u00f3lo Yo basto; nada os falta si me ten\u00e9is a M\u00ed\u201d.<\/span><\/h3>

    30 Septiembre 1933. \u201cVienen los ladrones, los que quieren descristianizar a mis hijos; mas armaos bien, armaos; vuestra arma ha de ser la oraci\u00f3n y penitencia. \u00a1Si supierais qu\u00e9 valor tiene esa arma! Yo quiero que hag\u00e1is mucha penitencia, pues as\u00ed podr\u00e9is aplacarme mucho. Ofreced todos vuestros sacrificios a este fin; presentadlos a Mar\u00eda, para que Ella me los entregue a M\u00ed\u201d.<\/span><\/h3>

    1\u00ba Octubre 1933. \u201cCada d\u00eda recibo mayores ultrajes de Mis hijos ingrat\u00edsimos,<\/span><\/h3>

    \u00bfsabes de qui\u00e9nes me quejo m\u00e1s? \u00bfQuieres que te diga qui\u00e9nes\u00a0 lastiman\u00a0 m\u00e1s\u00a0 mi Coraz\u00f3n amoroso? Son los blasfemos. Estos son los que clavan mis espinas\u00a0 en\u00a0 Mi\u00a0 coraz\u00f3n amante. Soy olvidado de todos, y si alguno se acuerda de M\u00ed, es para blasfemar mi Sant\u00edsimo nombre; pero no temas; esto no te digo por\u00a0 los\u00a0 M\u00edos, que sabes\u00a0 tambi\u00e9n los tengo, aunque pocos, pero hay m\u00e1s blasfemos que buenos\u201d.<\/span><\/h3>

    17 Enero 1934. \u201cEstaban a los pies de Jes\u00fas tres almas. Una de ellas dijo: Quisiera, Jes\u00fas, amarte, \/ pero sin tribulaciones; \/ quisiera a Ti poseerte, \/ pero en las consolaciones. Despu\u00e9s, otra de las tres le dijo: Quisiera Jes\u00fas amarte; \/ pero yo con condiciones \/ pues yo no puedo seguirte \/ si lo que quiero no pones. La \u00faltima dijo: Quisiera Jes\u00fas amarte, \/ y me abandono a tu amor. \/ Jes\u00fas, har\u00e9 lo que gustes, \/ y dame T\u00fa el Coraz\u00f3n. Despu\u00e9s, Jes\u00fas dijo: Esta primera alma quiere, dice ella, amarme, pero sin tribulaciones; esto es como un enfermo que quisiese sanar, pero sin medicinas, y esto no puede ser. Esta segunda tambi\u00e9n quiere amarme, pero con condiciones, y es como el enfermo que quiere curar, que toma medicinas, pero no las que el m\u00e9dico le manda, sino lo que \u00e9l quiere, y tampoco puede ser. Por fin, la tercera es de mi agrado; es como el enfermo que quiere sanar y se arroja a lo que el m\u00e9dico le dice, y \u00e9sta pronto sanar\u00e1\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0Las leyes del Amor divino<\/b><\/span><\/h3>

    \u00a018 Enero 1934. \u201cTodo el secreto de la santidad est\u00e1 en estas\u00a0 dos\u00a0 palabras:\u00a0 desconfiar y confiar. Desconfiad siempre de vosotros mismos, pero\u00a0 no\u00a0 os\u00a0 deteng\u00e1is\u00a0 aqu\u00ed; subid enseguida a la confianza de vuestro Dios, porque si Yo soy bueno con todos,\u00a0\u00a0 lo soy sobre todo con los que conf\u00edan en M\u00ed. Las almas que m\u00e1s aprovechan\u00a0 de Mi\u00a0 bondad son aquellas que tienen mayor confianza. El agrado que encuentro en un alma confiada es muy grande. Estas cortas palabras encierran mucho jugo. Que nunca tenga\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 el alma miedo de Dios, porque Dios est\u00e1 siempre dispuesto a ejercer con ella su Misericordia, y que el mayor placer que puede tener el Coraz\u00f3n de vuestro Jes\u00fas es el de llevar a su Eterno Padre el mayor n\u00famero posible de pecadores. \u00c9stas son mis glorias, \u00e9stas mis joyas\u2026 \u00a1amo tanto a los pobres pecadores\u2026!\u201d<\/span><\/h3>

    19 Enero 1934. \u201cLa pureza del amor consiste en la pureza del sacrificio, y no hay sacrificio del que Yo me precie tanto como de la honra, y de la reputaci\u00f3n, porque \u00e9sa es la vida moral del hombre. Cuando un alma llega a amar el desprecio para dar m\u00e1s gloria a Dios, la miro y esa mirada es tal que si ella llegase a verla morir\u00eda de felicidad; pero se le teme al desprecio como se le temer\u00eda a un monstruo…\u201d<\/span><\/h3>

    20 Enero 1934. \u201cEl Amor hace muertos a la naturaleza para hacer resucitados a la gracia. Cuando se quiere hacer crecer a una planta, se la quitan las hierbas\u00a0 que\u00a0 la\u00a0 rodean; as\u00ed, si quer\u00e9is que crezca en vosotros el amor divino es preciso que arranqu\u00e9is el amor que ten\u00e9is de vosotros mismos. El fuego quema; as\u00ed una llama de amor de Dios quema sin saberlo. Un alma recogida en Dios es como un arpa armoniosa tocada no por\u00a0\u00a0 la mano de un \u00e1ngel, sino por el amor de un Dios\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a021 Enero 1934. \u201cNo son las fragilidades las que detienen las obras del Amor en un alma; son los rodeos del amor propio y la estima de s\u00ed. As\u00ed es que esta oracioncita sola: \u201cMe f\u00edo de Ti\u201d, me arrebata el Coraz\u00f3n, porque en esta oraci\u00f3n est\u00e1n comprendidos la confianza, la fe, el amor y la humildad\u201d.<\/span><\/h3>

    22 Enero 1934. \u201cTened los ojos fijos en M\u00ed. Cuando m\u00e1s cerca est\u00e1 llamada un alma\u00a0\u00a0\u00a0 a seguirme m\u00e1s se debe mortificar. El perfecto despojo es la condici\u00f3n m\u00e1s\u00a0 necesaria\u00a0 para adherirse a Dios. Una cosa de la que no se despoja, se deja y no se toma ya m\u00e1s. Es necesario dejar las costumbres defectuosas, como\u00a0 se deja un vestido roto y no se vuelve\u00a0 a poner. Deb\u00e9is vestiros de un vestido nuevo que os ha preparado el amor\u201d.<\/span><\/h3>

    23 Enero 1934. \u201cQuiero que os ofrezc\u00e1is a mi Coraz\u00f3n divino por la conversi\u00f3n de los pobres pecadores. Unir\u00e9is la obra a la oraci\u00f3n y as\u00ed\u00a0 obtendr\u00e9is\u00a0 m\u00e1s\u00a0 f\u00e1cilmente\u00a0 lo que con ardor deseo: la conversi\u00f3n de los pobres pecadores. Se trata de hacer un generoso sacrificio, a saber: ofrecerme aquella parte de m\u00e9ritos que todav\u00eda os sobran de la donaci\u00f3n que me hab\u00e9is hecho a favor de las almas del Purgatorio mediante el acto heroico de caridad\u201d.<\/span><\/h3>

    24 Enero 1934. \u201cAndo buscando corazones que me amen, y como no los encuentro, derramo sobre el reducido n\u00famero de los que me aman la plenitud de mis gracias\u2026<\/span><\/h3>

    \u00a1amo tanto a las almas que me son fieles, que me dejan obrar en ellas a Mi gusto lo que me place, que me apresuro a colmar todos sus deseos como si tuvieran para M\u00ed fuerza\u00a0\u00a0\u00a0 de ley\u2026 como si fueran leyes para M\u00ed\u2026\u201d<\/span><\/h3>

    25 Enero 1934. \u201cMe quedo en el Sacramento de mi Amor por mis criaturas, y ellas hacen de M\u00ed tan poco caso\u2026 Vosotros, los m\u00edos, al menos haced unas cuantas\u00a0 comuniones espirituales para suplir estas comuniones sacramentales que dejan de hacer otros. Hacedlas cortas, con tal de que las hag\u00e1is\u201d.<\/span><\/h3>

    26 Enero 1934. \u201cEl Amor cuida amorosamente de aqu\u00e9l que se abandona enteramente a \u00e9l. El Amor gu\u00eda de la mano, y si es preciso hasta lleva al alma que se entrega a \u00e9l. El Amor encierra en s\u00ed el alma que se ha dado una vez a \u00e9l, y no le deja ya salir, a no ser que ella quiera de su propia voluntad. Por lo dem\u00e1s, nada puede arrancarla al poder del Amor. El Amor goza al ver que el alma cree en \u00e9l en todas sus operaciones, a\u00fan las m\u00e1s dolorosas\u201d.<\/span><\/h3>

    27 Enero 1934. \u201cUn alma que abandona su voluntad a la de Dios tiene gran paz y participa todo cuanto es posible a una criatura de la inmutabilidad de Dios, y esta alma, haciendo la voluntad de Dios, hace la suya, porque la voluntad de Dios se cumple siempre. Un alma, que hace en todo la voluntad de Dios, no so\u00f3lo cumple su voluntad, sino que tambi\u00e9n estudia sus m\u00e1s m\u00ednimos deseos para cumplirlos, que est\u00e1, por decirlo as\u00ed, siempre al acecho, es un alma que est\u00e1 siempre en oraci\u00f3n\u201d.<\/span><\/h3>

    28 Enero 1934. \u201cNo me descorazonan las miserias con tal de hallar una buena voluntad. En habiendo buena voluntad hay probabilidad de trabajar. Mi\u00a0 amor\u00a0 se\u00a0 alimenta consumiendo miserias, y el alma, que mayores las traiga, con tal de que tenga coraz\u00f3n contrito y humillado es la que m\u00e1s me agrada por darme mayor ocasi\u00f3n de ejercitar mi oficio de amante Salvador\u201d.<\/span><\/h3>

    29 Enero 1934. \u201cEn cualquier estado que encuentre un alma cuando Yo la favorezco, la doy atractivo de imitar\u00a0 mi\u00a0 vida eucar\u00edstica: es una vida de muerte la que Yo\u00a0 inspiro\u00a0 con esto a aquella alma. Tener ojos y no ver m\u00e1s que para el servicio del Amor; tener o\u00eddos y no o\u00edr m\u00e1s que aquello que pueda acrecentar el Amor; tener\u00a0 boca\u00a0 y\u00a0 no\u00a0 emplearla m\u00e1s que para hablar del Amor; tener manos, pies, coraz\u00f3n, cuerpo, y no servirse de ellos m\u00e1s que cuando quiera el Amor, depender del Amor como un ni\u00f1o peque\u00f1o depende de su madre para todo\u201d.<\/span><\/h3>

    30 Enero 1934. \u201cEl alma, para agradar a Jes\u00fas, debe hacerlo todo con esp\u00edritu de reposo, de paz y de confianza; esto es, no apresurarse por aquello que hay que hacer; y, cuando advierta que se apresura, que se detenga un momento, aunque no\u00a0 sea m\u00e1s\u00a0 que el tiempo de hacer una aspiraci\u00f3n, como se har\u00eda con una vasija que hierve, a la cual se\u00a0\u00a0\u00a0 la quita la tapadera un momento para que no salga el agua\u201d.<\/span><\/h3>

    31 Enero 1934. \u201cEl Amor es alegr\u00eda, el Amor es paz, el Amor es reposo, el Amor es tranquilidad, el Amor es fidelidad, y cuando este divino Amor se posesiona\u00a0 de\u00a0 un\u00a0 coraz\u00f3n deja en pos de s\u00ed una paz divina, una confianza inquebrantable, una felicidad absoluta y un perfecto reposo. Entonces el Amor se detiene en aquella alma afortunada, hace de ella el centro de sus divinos favores y como un dep\u00f3sito de sus gracias especiales\u201d.<\/span><\/h3>

    1\u00ba Febrero 1934. \u201cCuanto m\u00e1s me ames m\u00e1s me conocer\u00e1s, y cuanto m\u00e1s me conozcas m\u00e1s me amar\u00e1s. Ten los ojos fijos en M\u00ed; ruega por tus\u00a0 hermanos\u00a0 los\u00a0 pecadores, que Yo les resucitar\u00e9, les sacar\u00e9 del sepulcro del pecado. Rogad, si, rogad porque todos sois hermanos. Yo soy vuestro Padre, y \u00bfno os parece que a un padre le sabr\u00eda mal tener que castigar a sus hijos? Pues este Padre soy Yo, y no quiero castigar a mis hijos\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a012 Febrero 1934. Visi\u00f3n y mensaje de Jes\u00fas. Veo, dice la vidente, un coraz\u00f3n destrozado por muchos perros negros. \u201c\u00bfQuieres agradarme?\u201d, la insin\u00faa Jes\u00fas. \u201cEscribe: Este Coraz\u00f3n, que tanto ha sufrido por los hombres, es destrozado por los perros, por\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 los pecados de los hombres. Mira, di a los m\u00edos que lloren al verme tan injuriado, tan ofendido, a fin de convertir con sus l\u00e1grimas a estos perros en fieles corderos. Soy muy ofendido. \u00bfNo quisierais en estos d\u00edas \u2014carnaval de 1934\u2014 ofrecerme algo? \u00bfNo ten\u00e9is para vuestro Jes\u00fas una mirada de compasi\u00f3n? \u00a1Oh!, Yo, que tanto he amado a los hombres, y ellos no piensan en M\u00ed. Vosotros, al menos, amadme. Oh, s\u00ed, amadme\u201d.<\/span><\/h3>

    \u201cA muchos escog\u00ed entre vosotros, y \u00a1cu\u00e1n pocos me correspondieron! \u00bfPor ventura,\u00a0\u00a0 a un bienhechor no le gusta verse correspondido? Pero mira, para vuestro Jes\u00fas no hay eso.\u00a0 No me aman.\u00a0 No me quieren. Amadme por los que no me aman. Orad por los que\u00a0 ya no oran. Hacedlo todo por los que no hacen. No quiero castigar a mis hijos, pero ellos me obligan. \u00a1Oh!, Espa\u00f1a, Espa\u00f1a, desgraciada Espa\u00f1a: t\u00fa me has destrozado este\u00a0 Coraz\u00f3n amant\u00edsimo.\u00a0\u00a0 Por esto, Yo env\u00edo y enviar\u00e9 sobre ti tan terribles castigos. Hija\u00a0\u00a0 m\u00eda: Di a los m\u00edos que no\u00a0 teman,\u00a0 que su Jes\u00fas vela por ellos; que est\u00e9n seguros de que\u00a0 Yo no les dejar\u00e9, si ellos no me dejan. Y t\u00fa, recibe la bendici\u00f3n de Jes\u00fas\u201d.<\/span><\/h3>

    Mensaje de la Sant\u00edsima Virgen: \u201cSoy Mar\u00eda, tu Madre, no temas. Escribe, si quieres agradarme. Quisiera, hija m\u00eda, que me ayudarais todos, pues no puedo sostener el brazo de mi amant\u00edsimo Hijo Jes\u00fas. Amo tanto a mis hijos\u2026 Soy tan misericordiosa\u2026 que s\u00f3lo busco vuestro bien. Por esto, antes de los castigos, he bajado a la tierra para avisar a las gentes, pero \u00e9stas no me han cre\u00eddo, no me han hecho caso. Es que no me aman. No creen, no porque no pueden creer, sino porque no quieren creer; pues bastantes se\u00f1ales les he dado para poder creer. Hasta muchos de los que me han visto me han negado. Al menos, los pocos que qued\u00e1is, no me desampar\u00e9is, no me dej\u00e9is sola. Di a los m\u00edos que\u00a0 no teman; y t\u00fa, recibe la bendici\u00f3n de tu Madre, Mar\u00eda\u201d.<\/span><\/h3>

    13 Febrero 1934. Mensaje del Sagrado Coraz\u00f3n de Jes\u00fas. \u201cHija m\u00eda: \u00bfQuieres agradarme? Escribe: Vendr\u00e1 tiempo en el cual estas cosas que te digo, que t\u00fa no entiendes, har\u00e1n mucho bien. \u00a1Cu\u00e1nto me ofenden los hombres, hija m\u00eda! Quiero que digas y hagas que rueguen mucho por los pecadores Quiero algo, y este algo muchos no me quieren dar. Quiero algo, quiero vuestro coraz\u00f3n. \u00a1Ah, cu\u00e1n ingratos\u00a0 son\u00a0 los hombres! Di a los m\u00edos que hagan mucha oraci\u00f3n y penitencia. He mandado a la tierra a mi Madre, Ella ha hablado, y su palabra no es atendida; se r\u00eden, no quieren creer que vengan castigos, porque no les conviene. \u00a1Ah, pero tendr\u00e1n que creerlo a la fuerza, aunque entonces ya no valdr\u00e1! Estoy como oprimido por el peso de las gracias, las cuales vuelven sobre M\u00ed, al no encontrar corazones que las quieran recibir. Que rueguen tambi\u00e9n por los sacerdotes. \u00a1Qu\u00e9 alegr\u00eda recibo cuando hallo\u00a0 un coraz\u00f3n\u00a0 que me abre\u00a0 sus puertas de par en par, para que yo haga en \u00e9l todo lo que me guste; m\u00e1s cu\u00e1n pocos de \u00e9stos tengo! A los m\u00edos, que no teman, que sigan adelante, y t\u00fa recibe la bendici\u00f3n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 de tu Jes\u00fas\u201d.<\/span><\/h3>

    20 Febrero 1934. \u201cHijos m\u00edos: Pronto habr\u00e1 una gran persecuci\u00f3n contra vosotros, pues ya vienen las olas rojizas, ensangrentadas; m\u00e1s, apenas llegar\u00e1n y os llevar\u00e1n hacia el desierto, ser\u00e1n cruelmente castigadas por la mano de Mi Padre Celestial. Hijos, no tem\u00e1is, porque, despu\u00e9s de la batalla, llegar\u00e9is al puerto. Confiad en M\u00ed y desconfiad en vosotros, porque sin M\u00ed nada sois, nada pod\u00e9is, pero s\u00ed conmigo. Oh, hijos, abridme las puertas de vuestro coraz\u00f3n, dejad obrar a Mi Amor, y as\u00ed estar\u00e9is seguros, porque el Amor no pasa hasta hacer santa a aquella alma que se ha entregado a \u00c9l. Sed santos como Santo es vuestro Padre Celestial. \u00a1Oh, si vierais las ganas que tengo de santificar a las almas\u2026! Pero ellas no hacen caso, dicen que ya les basta con ser buenas, y no se preocupan de ser santas. \u00a1Oh!, si supierais cu\u00e1nto me hacen sufrir tales almas, despu\u00e9s que Yo estoy haciendo tanto por santificarlas, y ellas salen con eso. Hijos, rogad por estas almas, \u00a1ay, cu\u00e1ntas son por desgracia!… Vosotros, no se\u00e1is as\u00ed, pues Yo os ayudar\u00e9 mucho. Sed valientes, seguidme con vuestra cruz, y si lo hac\u00e9is as\u00ed, Yo os dar\u00e9 mi luz. Os da a todos la bendici\u00f3n vuestro Jes\u00fas.\u201d<\/span><\/h3>

    23 Febrero 1934. Encargo especial\u00edsimo de la Sant\u00edsima Virgen. \u201cHija: Quiero que desenga\u00f1\u00e9is a la gente dici\u00e9ndola que Yo no he bajado a Ezquioga para hacer milagros, sino para avisarla que vienen castigos a fin de que se prepare. Di, hija m\u00eda,\u00a0 a todos, que\u00a0 se preparen, que se preparen, pues que el Padre Celestial, justamente irritado, pronto descargar\u00e1 su c\u00f3lera divina sobre los hombres. \u00a1Oh, qu\u00e9 d\u00eda tan terrible ser\u00e1 el de los castigos! Hija, he bajado porque les quiero, y nadie me hace caso; pero los m\u00edos\u00a0 no\u00a0 tem\u00e1is que Yo os ayudar\u00e9, aunque tendr\u00e9is que sufrir mucho\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    SECCI\u00d3N II<\/b><\/span><\/h3>

    \u00a0Treinta especiales documentos, con algunas cortas poes\u00edas, dictados unos por Jes\u00fas y otros por Mar\u00eda, a la misma vidente, en \u00e9xtasis de diversas fechas, ante testigos y nosotros, que los hemos redactado; los cuales, por ser m\u00e1s difusos, que los anteriores, hemos agrupado aparte; y a los que hay que aplicar; \u201cObservaciones siguientes\u201d, practicadas m\u00e1s adelante en esta misma documentaci\u00f3n Serie B, n\u00ba 8, d)<\/em><\/span><\/h3>

    \u00a0<\/em><\/span><\/h3>

    Son tan admirables las declaraciones anteriores, que suspendiendo el \u00e1nimo, le inclinan a la adoraci\u00f3n de donde proceden. \u00a1Qu\u00e9 claridad de pensamientos! \u00a1Qu\u00e9 concisi\u00f3n en las cl\u00e1usulas! \u00a1Qu\u00e9 elegancia en las frases!<\/span><\/h3>

    \u00a1Qu\u00e9 energ\u00eda amorosa en el nervio de la expresi\u00f3n! \u00a1C\u00f3mo Jes\u00fas, nuestro Redentor, y Mar\u00eda, nuestra Madre de Misericordia, buscan por todos lados al pecador y le instruyen y le corrigen y le avisan y le animan y le estimulan y le amenazan!<\/span><\/h3>

    Pero, si tales declaraciones son admirables, llegan al pasmo las que siguen, por la extensi\u00f3n, acentuaci\u00f3n y luminosidad de las mismas. \u00a1Qu\u00e9 visiones tan estupendas! \u00a1Qu\u00e9 doctrina tan pura! \u00a1Qu\u00e9 m\u00e1ximas tan profundas! \u00a1Qu\u00e9 razonamientos tan elevados! \u00a1Qu\u00e9 vida y energ\u00eda en su expresi\u00f3n! \u00a1Qu\u00e9 disposiciones tan asombrosas! \u00a1Y c\u00f3mo estimulan a los suyos y fustigan a los que fueron videntes y amenazan duramente a los enemigos!<\/span><\/h3>

    Lectura que no debe apartarse de nuestros ojos y caerse de nuestras manos y separarse de nuestro coraz\u00f3n. \u00bfQu\u00e9 dir\u00e1n a todas estas Declaraciones, rodeadas de las m\u00e1ximas pruebas de veracidad, los que buscan los flacos de las mismas? \u00a1Qu\u00e9 los busquen, qu\u00e9 los busquen; y ojal\u00e1 los busquen reposadamente, a ver si hallan en ellos su sobrenaturalidad, y se convierten, de este modo, a\u00a0 Jes\u00fas y a Mar\u00eda!<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    N\u00fam. 1.- Preciosas instrucciones<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    Tuve visi\u00f3n de que un animal \u2014el hombre\u2014, luchaba con Jes\u00fas y le mord\u00eda, escup\u00eda, ara\u00f1aba y se revolv\u00eda contra \u00c9l. \u00c9ste es el pago que da la humanidad a su Creador. Se me apareci\u00f3 la Sant\u00edsima Virgen y me dijo: \u201cNo tengo hijos, pues no los hay\u00a0 con\u00a0 voluntad. Tan dispuesto como est\u00e1 mi Hijo a dar el ciento por uno\u2026 Est\u00e1 la gente enfrascada en\u00a0 sus locos desvar\u00edos\u2026 Es hora de reparaci\u00f3n\u2026 Sufro m\u00e1s por los que no creen, y especialmente por los sacerdotes y religiosos, que son los que est\u00e1n m\u00e1s cerca de M\u00ed\u201d.<\/span><\/h3>

    Me dio las sentencias siguientes:<\/span><\/h3>

    \u201cEl amor es la antesala de la caridad. La caridad no consiste en dar limosna, sino en compartir la vida con el desgraciado.<\/span><\/h3>

    Andando de prisa se anda menos que andando despacio. Al que oiga misa todos los d\u00edas no le faltar\u00e1 la ayuda.<\/span><\/h3>

    Ser bueno es m\u00e1s f\u00e1cil que ser malo, sin embargo, hay m\u00e1s malos que buenos. \u00bfEn qu\u00e9 consiste?<\/span><\/h3>

    Aun cuando el trabajo es m\u00e1s dif\u00edcil, cuando es a gusto de ellos se hace m\u00e1s pronto. Por eso hay m\u00e1s malos.<\/span><\/h3>

    El \u00e1rbol que nace derecho sube muy alto. Al que nace torcido hay que cortarlo. El \u00e1rbol no da m\u00e1s sombras cuando m\u00e1s hojas tiene, sino cuanto m\u00e1s alto sea. No est\u00e1 en trabajar mucho, sino en la clase de trabajo que se ejecuta.<\/span><\/h3>

    No est\u00e1 la muerte en morir, sino en el g\u00e9nero de muerte que se tiene.<\/span><\/h3>

    Para ganar hay que trabajar. Para trabajar hay que sufrir. Y para sufrir hay que pedir.<\/span><\/h3>

    No todo el que corre mucho anda m\u00e1s, sino el que corre poco y mira donde pisa.<\/span><\/h3>

    Fingir es hacer lo contrario de lo que se siente. El que finge hace dos males: uno con\u00a0 \u00e9l y otro con el pr\u00f3jimo.<\/span><\/h3>

    La sinceridad es la antesala de la buena conciencia.\u201d<\/span><\/h3>

    \u00a0En otra visi\u00f3n, la Sant\u00edsima Virgen dio a los que fueron videntes las instrucciones que siguen:<\/span><\/h3>

    \u201cPensad que por no ser lo que Yo quise, hab\u00e9is perdido lo que hab\u00e9is tenido\u201d.<\/span><\/h3>

    Jes\u00fas dice a la divina Se\u00f1ora: \u201cNo pidas, Madre, porque luego que tuvieron la gracia que les di, no han querido recibirla, y por eso se han quedado sin ella\u201d.<\/span><\/h3>

    Contin\u00faa la Sant\u00edsima Virgen: \u201cEllos no han querido defenderme, Yo les he dado muchas se\u00f1ales para conocer al diablo, pero ellos no las han querido aplicar\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0Decid, sin miedo, que me veis \u2014a los videntes\u2014. No tembl\u00e9is, que el castigo est\u00e1 muy cerca. Que tiemblen los que ahora patean mi Obra.<\/span><\/h3>

    Di, hija, que el\u00a0 Monte santo\u00a0 obrar\u00e1 grandes\u00a0 prodigios. Que aparezco en este Monte y seguir\u00e9 apareciendo. Que no intenten quitar las cosas que hay en \u00e9l.<\/span><\/h3>

    Decir que Yo he de hacer y he de tomar las medidas para que se cumpla lo que me propongo.<\/span><\/h3>

    Mis gracias no ser\u00e1n visibles para los que no tienen fe. Har\u00e9 las gracias para aquellos que sepan defenderme. Obedeced a ese Padre. Sed pacientes y mortificados.<\/span><\/h3>

    Decid, que aunque os ultrajen, Yo os dar\u00e9 la energ\u00eda para que pod\u00e1is luchar.<\/span><\/h3>

    No perd\u00e1is la serenidad. Caminad por los senderos de mi luz. Que hay un sitio muy grande, y en ese sitio os hab\u00e9is de reunir para recibir de Mi Mano gracias grandes.<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    N\u00fam. 2.- Sabias lecciones de Jes\u00fas a videntes y enemigos de las Apariciones<\/span><\/h3>

    \u00a0Jes\u00fas me dice: \u201cHay una cuerda llena de nudos: Bienaventurado el que consiga llegar al \u00faltimo, porque en \u00e9ste se halla la felicidad.<\/span><\/h3>

    El mar est\u00e1 claro: D\u00eda llegar\u00e1 en que sus aguas se enturbiar\u00e1n, porque de sus profundidades saldr\u00e1 el esp\u00edritu sat\u00e1nico.<\/span><\/h3>

    Los surcos est\u00e1n abiertos. Hacen falta sembradores. Todo el que quiere no puede, y aquel que puede no quiere. D\u00eda llegar\u00e1 en que querr\u00e1n, y entonces no habr\u00e1 tiempo.<\/span><\/h3>

    Aqu\u00e9l que duerme descansa; pero el que vela consigue.<\/span><\/h3>

    El vig\u00eda de la torre sabe lo que pasa fuera: M\u00e1s le conviene saber lo que dentro debe haber hasta despu\u00e9s que se muera.<\/span><\/h3>

    De cinco bajar\u00e1n dos; y a tres, en la mitad del camino, se los tragar\u00e1 la tierra.<\/span><\/h3>

    El hijo que es verdadero, cambia por completo. Ellos van juntos, Yo no los mando.<\/span><\/h3>

    Las artes del demonio est\u00e1n all\u00ed.<\/span><\/h3>

    No teng\u00e1is miedo: Con vosotros no est\u00e1n. En la monta\u00f1a de Ezquioga muchas cosas pasar\u00e1n.<\/span><\/h3>

    Quiero que se\u00e1is vosotros las barcas donde naveguen todos los que a M\u00ed lleguen.<\/span><\/h3>

    \u00a0Remad, Yo os dar\u00e9 fuerza y no podr\u00e9is naufragar. Siempre os tendr\u00e9 presentes.\u00a0\u00a0 No os fieis de los hombres que hablan mucho: En el hablar casi siempre hay error.<\/span><\/h3>

    Fiaos de aquellos que siempre est\u00e1n callados, pues as\u00ed van obrando en el interior de ellos.<\/span><\/h3>

    \u2026 Pero nada de esto se hace; he perdido todos mis derechos\u2026; hay alguien que me los ha usurpado y no me queda m\u00e1s que el derecho de estar en mi casa y no dejar entrar a los que no me convenga\u2026 Este derecho lo tiene cualquiera en el mundo. Vengo a ser menos que el menor de ellos… Pero, desgraciados, porque el fin va a ser horrible\u2026<\/span><\/h3>

    Yo, que les quiero, y he procurado al criar el mundo la felicidad de ellos. Yo, que he puesto en este mundo todos los encantos y atractivos. Yo, que no he querido separarme un momento de su compa\u00f1\u00eda. Yo, que he recibido la muerte m\u00e1s afrentosa por salvarles. Yo, que estoy dispuesto a beneficiarles m\u00e1s a\u00fan, con tal que me escuchen\u2026, no me conocen\u2026, no existo\u2026, todo se ha hecho solo\u2026, no hay obligaci\u00f3n de hacerme caso\u2026, la Iglesia miente\u2026, mi Madre\u2026 mi Madre, es mentira\u2026<\/span><\/h3>

    Tengo defensores, hija m\u00eda, pero est\u00e1n ocultos. No ha llegado todav\u00eda el momento de aparecer. El d\u00eda que eso suceda \u2014al igual que el da\u00f1o causado por la langosta en Egipto\u2014 as\u00ed ser\u00e1 el da\u00f1o causado por los m\u00edos a sus adversarios\u2026 Tienen sus guaridas, est\u00e1n escondidos mientras las fieras se pasean.<\/span><\/h3>

    El hombre es tanto mayor y tanto m\u00e1s debe esconderse cuanto m\u00e1s vale, y tanto m\u00e1s vale cuanto m\u00e1s ama, y tanto m\u00e1s ama cuanto que el objeto amado es digno de tal amor, porque el amor se hizo para lo amable, y el sumo amor, para lo sumamente amable, y el sumamente amable y digno de su amado no hay otro sino Yo\u2026, porque el amor de los hombres dura poco y es enga\u00f1oso y mi amor es fiel y eterno\u2026 Pero los hombres, \u00a1qu\u00e9 mal corresponden a mi amor\u2026! No sacan cuenta de la vida m\u00e1s que en beneficio de ellos: Siempre el mundo, la nada. Gastan las energ\u00edas, ponen todos sus encantos, cifran todas sus delicias en las cosas que se van, no saben trabajar sobre la piedra fundamental del edificio que Yo les he fabricado. \u00a1Pobres de ellos! Qu\u00e9 intranquilidad la suya, qu\u00e9 amargura tan horrible, qu\u00e9 triste desesperaci\u00f3n cuando vean lo poco que han conseguido. Pudieron hacer m\u00e1s y se cansaron, Yo les di fuerza y la rechazaron, quise ayudarles y se negaron\u2026<\/span><\/h3>

    Vosotros, los m\u00edos, no os apur\u00e9is. No est\u00e1 lejano el d\u00eda en que ser\u00e9is recompensados\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0N\u00fam. 3.- Alocuci\u00f3n de la Sant\u00edsima Virgen sobre posturas que los suyos deben adoptar<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    \u201c\u00a1Pobres hijos m\u00edos!\u201d El horizonte se obscurece, las tinieblas del pecado envuelven\u00a0 las almas, \u00a1pobrecillas! Ser\u00e1n pisoteadas como se pisa la uva en el lagar\u2026 Vosotros, los m\u00edos, trabajad sin descanso, no dej\u00e9is que queden sarmientos, porque con ellos se prepara el fuego; procurad quitar los obst\u00e1culos que se opongan en vuestra carrera, porque est\u00e1is expuestos a caer, y aqu\u00e9l que tropiece ser\u00e1 pasado a cuchillo.<\/span><\/h3>

    Las tinieblas son cada vez m\u00e1s densas, la luna se oculta y el sol se eclipsa; llegar\u00e1 la noche, preparaos, el esp\u00edritu infernal saldr\u00e1 de los abismos y sus intenciones son sacr\u00edlegas. Mi Hijo, el Dios de la humanidad, que derram\u00f3 su Sangre por el bien de los dem\u00e1s, vituperado por el pobre hijo del alma, su Sangre no es reconocida. Bienaventurado el que toque, con sus dedos esa Sangre, porque ser\u00e1 regenerado en su alma.<\/span><\/h3>

    Daos prisa, que la noche llega; querr\u00e1n salir a la lucha y no encontrar\u00e1n labor. Saldr\u00e1n los barcos, echar\u00e1n sus redes y no habr\u00e1 pesca. La tierra envolver\u00e1 a los cuerpos, ya podridos. El hambre descender\u00e1 sobre regiones enteras: no sembr\u00e9is, porque la semilla no dar\u00e1 fruto; no grit\u00e9is, porque vuestra voz no ser\u00e1 o\u00edda.<\/span><\/h3>

    \u00a1Pobres almas, las que en esta noche no est\u00e9n en refugio! Entrad, entrad por\u00a0 la puerta que mi Hijo os abri\u00f3 con la regeneraci\u00f3n de su Sangre. Desgraciadas las ciudades donde Dios no es conocido, las monta\u00f1as sepultar\u00e1n sus hogares, los r\u00edos saldr\u00e1n de sus cauces y arrasar\u00e1n lo que encuentren\u00a0 a su paso; la justicia de Dios mandar\u00e1 rayos sobre\u00a0 la tierra; el fuego consumir\u00e1 las ciudades que son suma de pecados.<\/span><\/h3>

    El Padre celestial se cansa; vuestra Madre espera, y la humanidad sigue engolfada en sus vicios y pasiones. Mi Hijo es ultrajado, Yo vituperada y el Padre espera el desenlace de la obra. No hay hogares donde nos reciban, el hombre piensa en sus vicios, la mujer en el esc\u00e1ndalo, los sacerdotes y religiosos olvidan los ministerios a que Dios les destin\u00f3, las religiosas descuidan la educaci\u00f3n de los peque\u00f1os que Yo les confi\u00e9, y hasta los peque\u00f1os, los predilectos del Coraz\u00f3n de mi Jes\u00fas arraigan en sus corazones la semilla dispuesta para el mal. \u00a1Pobre mundo, qu\u00e9 buen principio tuviste y qu\u00e9 fin m\u00e1s desastroso el tuyo!<\/span><\/h3>

    Hijos, hijos, escuchad a vuestra Madre, que os ama con delirio; no dej\u00e9is pasar el tiempo, mirad que despu\u00e9s no es hora. Yo, vuestra Madre, trabajo por vuestra salvaci\u00f3n; y vosotros, hijos, \u00bfno trabajareis por M\u00ed? \u00a1Qu\u00e9 triste para una Madre no tener a quien confiar sus penas!; nadie me escucha, sola, de pie, no me canso, y ellos\u2026 ellos duermen, \u00bfCu\u00e1ndo llegar\u00e1 el d\u00eda en el cual pueda Yo descansar?<\/span><\/h3>

    Las trompetas os convocar\u00e1n a batalla, tendr\u00e9is buen capit\u00e1n, hacedle caso, el camino ser\u00e1 dif\u00edcil, la lucha ensangrentada, pero si hac\u00e9is caso a las llamadas de vuestra Madre, la victoria es segura.<\/span><\/h3>

    Trabajad, que el campo es grande, que el mar es ancho, y en las profundidades de su l\u00edquido existen peces que hay que extraer\u2026 Orad, sacrificaos, mortificaos y humillaos, haced penitencia por mi pobre Espa\u00f1a, la de los amores de mi Jes\u00fas\u2026 Ayudadme a llorar. Lloremos, hijos, lloremos, porque el mundo no sospecha su presente y su porvenir\u2026 Yo os dar\u00e9 la fuerza para luchar, y mientras tanto, recibid la bendici\u00f3n de vuestra Madre, Mar\u00eda\u201d.<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    N\u00fam. 4.- Arenga de la Sant\u00edsima Virgen<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    Nuestra Se\u00f1ora da su bendici\u00f3n y dice: \u201cEl Padre celestial aplaque su justicia y os elimine del castigo; el Hijo sea vuestro refugio en la hora de la\u00a0 muerte;\u00a0 y el\u00a0 Esp\u00edritu\u00a0 Santo descienda sobre vosotros, os d\u00e9 su luz e ilumine vuestros entendimientos. Yo, vuestra Madre, os acojo desde este d\u00eda bajo mi protecci\u00f3n y amparo; mi manto ser\u00e1 vuestro refugio, y mi coraz\u00f3n vuestro descanso en el cual estar\u00e1n escritos vuestros nombres.<\/span><\/h3>

    Andad, no retroced\u00e1is, no\u00a0 abandon\u00e9is la senda que hab\u00e9is escogido, que es la que\u00a0\u00a0 os conviene. No tem\u00e1is que los dem\u00e1s\u00a0 digan. Dejad\u00a0 al mundo que se\u00a0 engolfe en sus\u00a0 locos desvar\u00edos; pero vosotros sed mi consuelo, sed los hijos predilectos de mi coraz\u00f3n, sed mi fiel retrato.<\/span><\/h3>

    El mundo est\u00e1 loco; y Yo, cansada, rendida, no tengo en quien apoyarme. En este torbellino mundano dejad los obst\u00e1culos a un lado; y al menos, que tenga Yo confianza en vosotros, \u00a1hijos de mi Alma! Yo a todos quiero igual, pero todos no me corresponden lo mismo. Soy vuestra Madre. Mi coraz\u00f3n sabe agradecer los sacrificios que por M\u00ed se hacen, y mi Jes\u00fas no dejar\u00e1 sin recompensa vuestro cari\u00f1o. El hijo que ama a su madre sabe salir en defensa de los que sufren por ella.<\/span><\/h3>

    Vosotros, los m\u00edos, tened presentes dos cosas, que deben ser las antorchas que iluminen el camino para llegar a mi Jes\u00fas: El alma y \u00c9l. \u00c9l es su due\u00f1o y le corresponde.<\/span><\/h3>

    \u00a0Yo soy su Madre y tengo derecho. No tem\u00e1is, vuestra Madre est\u00e1 con vosotros, no la veis, m\u00e1s no importa; no est\u00e1 lejano el d\u00eda en que algo portentoso suceder\u00e1, y en ese d\u00eda de j\u00fabilo, la Madre tiene derecho a colocar en primer lugar a sus hijos, a quienes ama, y no dejar\u00e1 sin su auxilio, mientras ellos no la abandonen.<\/span><\/h3>

    Recibid mi bendici\u00f3n que, junto con mi Jes\u00fas, os env\u00eda vuestra Madre. Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    N\u00fam. 5.- Misiva de la Sant\u00edsima Virgen en la que se lamenta y aconseja<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    \u201cEn el nombre del Padre, y del Hijo, y del Esp\u00edritu Santo. Am\u00e9n. Hijos m\u00edos, Yo vuestra Madre, quiero volver a haceros una nueva llamada. Mi coraz\u00f3n de Madre no puede sufrir que sus hijos perezcan en los abismos del mar. Ruego a Jes\u00fas por ellos, m\u00e1s que pena ellos no corresponden al cari\u00f1o que su Madre les profesa. Quiero vuestro bien, hijos del alma; ese bien que es el \u00fanico que os importa, y que es la gloria de Mi Hijo, preparada por mi Jes\u00fas para los que le aman: gloria que fue creada con el solo pensamiento de que en ella se gocen los amantes del Coraz\u00f3n de mi Jes\u00fas.<\/span><\/h3>

    El trabajo es duro para una Madre, que ve que sus hijos andan enfangados en vicios y pasiones. Vosotros, hijos de mi alma, ayudad a vuestra Madre en la dif\u00edcil tarea que se le ha encomendado. Rogar\u00e9 por vosotros sin descanso, y mi Coraz\u00f3n no se sentir\u00e1 satisfecho mientras no recoja bajo mi manto a todos mis hijos, a quienes deseo salvar. Os encargo oraci\u00f3n, penitencia y sacrificio, porque la faena es dif\u00edcil.<\/span><\/h3>

    El averno se ha lanzado a la conquista de las naciones con mentiras y halagos. No teng\u00e1is miedo, trabajad sin descanso: que la oraci\u00f3n sea el instrumento con el cual sep\u00e1is segar y separar la ciza\u00f1a del trigo. El campo es grande, la mies mucha, los operarios pocos. Jes\u00fas llama y no es o\u00eddo. Yo, su Madre, quiero recoger el fruto con la oraci\u00f3n de ellos y las s\u00faplicas M\u00edas, pero ellos no sienten el sacrificio de su Madre. El Padre celestial, se irrita, porque ve que los avisos no son escuchados. Temblad, hijos, si no correspond\u00e9is a esas llamadas. Bienaventurados los que oyen la voz de su Pastor y siguen en pos de \u00c9l.<\/span><\/h3>

    \u00a1Qu\u00e9 terrible espect\u00e1culo se ve desde la altura! La tierra est\u00e1 confusa, los hombres\u00a0\u00a0 no se entienden, no se reza ni ora, los corazones est\u00e1n fr\u00edos, las iglesias desiertas, no acuden al llamamiento del Prisionero del Amor. Hay mucha\u00a0 maldad.\u00a0 Hay\u00a0 muchas\u00a0 madres que me obligan a hacer lo que ellas deb\u00edan hacer. No se dan perfecta cuenta de\u00a0\u00a0 la obligaci\u00f3n que las impusieron en el Sacramento. Los peque\u00f1os abandonados, y, a trav\u00e9s de su peque\u00f1a vida, son espejos de maldad. \u00a1Pobres florecillas M\u00edas; apenas\u00a0 abierto su c\u00e1liz, cuando el vendaval troncha sus ra\u00edces!<\/span><\/h3>

    Yo espero y no me canso, de pie, ante el Le\u00f1o Santo, bajo la Sangre derramada por mi Hijo. Llorar\u00e9 hasta que consiga que todas las ovejas vuelvan al redil y obedezcan a su Pastor. Pensad que \u00c9l es el Dios que os cre\u00f3, y por esto le pertenec\u00e9is; tiene derecho a la obra suya y os pedir\u00e1 cuenta de vuestra vida. Y, entonces, los unos, recordar\u00e9is con agrado vuestras buenas obras y la gloria que vais a gozar; y los otros con dolor, la mala vida y el castigo y tormento qu\u00e9 vais a padecer sin cesar\u2026 El Padre celestial, a causa de mis ruegos, dilata su justicia y aplaza el castigo.<\/span><\/h3>

    Vosotros, los que sois m\u00edos, amad a vuestra Madre y no teng\u00e1is miedo, que Yo ser\u00e9 vuestra ayuda en todas las ocasiones. Trabajad sin descanso en la vi\u00f1a de mi Jes\u00fas, que Yo rogar\u00e9 al Padre celestial para que dilate el castigo y espere hasta que est\u00e9 terminada la obra. Sabed que vuestra Madre os ama y no os abandona. Recibid la bendici\u00f3n que, junto con Jes\u00fas, os env\u00eda vuestra Madre, Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    N\u00fam. 6.- Fundadas quejas de la Sant\u00edsima Virgen<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    \u201cHija: Hace dos a\u00f1os, m\u00e1s que dos a\u00f1os, que d\u00eda tras d\u00eda, a peque\u00f1os y mayores, a ricos y pobres, a todos sin distinci\u00f3n, puesto que de todos soy Madre, vengo avisando, porque deseo que todos se salven. Una madre no puede sufrir con tranquilidad la perdici\u00f3n del hijo a quien ama, y por el cual mi Jes\u00fas derram\u00f3\u00a0 su\u00a0 Sangre.\u00a0 Por todos\u00a0 sufri\u00f3 y por eso a todos espera. Mi manto es grande. Muy grande. En \u00e9l cogen todos los que tengan voluntad de salvarse, y Yo, su Madre, no deseo otra cosa sino que correspondan a mi amor. Hecho esto, la Madre sabe agradecer el sacrificio que por Ella\u00a0\u00a0 se hace.<\/span><\/h3>

    \u00a1Cu\u00e1ntos avisos, cu\u00e1ntas llamadas, cu\u00e1ntas negativas de los corazones! \u00a1Qu\u00e9 desilusi\u00f3n para el coraz\u00f3n de una Madre ver que los hijos, en la hora de\u00a0 mayor\u00a0 necesidad, la cierran las puertas\u2026! Mira cu\u00e1ntas cosas est\u00e1n sucediendo, cu\u00e1ntos avisos por medio de enfermedades; cu\u00e1ntos muertos, cu\u00e1ntas desgracias!<\/span><\/h3>

    Mi Hijo espera a cuando ellos quieran. Yo, su Madre, no dejo de rogar por ellos, pero la justicia del Padre llega a los bordes, est\u00e1 pr\u00f3xima a salirse. Vosotros, los m\u00edos, predicad sin miedo, decid muy fuerte la verdad. Est\u00e1is conmigo y la verdad resplandecer\u00e1 a todas horas.<\/span><\/h3>

    \u00a0Nadie, nadie trabaja por la causa de su Madre. Los sacerdotes toman a rutina mi trabajo, los religiosos se distraen en las conversaciones que tienen conmigo; los matrimonios olvidan la obligaci\u00f3n que tienen de que mi Nombre aparezca en\u00a0 sus\u00a0 hogares; los j\u00f3venes se olvidan de pedir consejo a la Madre que s\u00f3lo desea su\u00a0 felicidad; los peque\u00f1os no me ponen en sus bocas sino para desacreditar mi honor;\u00a0 los\u00a0 gobernantes no piensan que sus negocios saldr\u00edan m\u00e1s derechos si tuviesen\u00a0 por norte a\u00a0 la Estrella que siempre brilla; nadie piensa m\u00e1s que en el mundo; para ellos, despu\u00e9s no hay nada.\u00a0 Dentro de las familias, que se tienen por cristianas, no se busca m\u00e1s que el\u00a0 af\u00e1n de aparentar, el deseo de ser bien mirados, la forma de c\u00f3mo lucir\u00e1n m\u00e1s.\u00a0 La Religi\u00f3n no la toman como base fundamental; en las confesiones, comuniones y obras piadosas de muchos, no hay m\u00e1s que un solo pensamiento: el de ser y el de hacer lo que los dem\u00e1s hagan por no ser ellos menos\u2026; en pocos sitios se vive como es mi deseo.<\/span><\/h3>

    Sin embargo, hija m\u00eda, mira y observar\u00e1s que las playas est\u00e1n llenas (lo necesitan para su salud); que los paseos est\u00e1n animados (necesitan distracci\u00f3n); que en los cines no caben m\u00e1s (precisan un lugar para pasar el tiempo); que los c\u00edrculos y caf\u00e9s est\u00e1n repletos (no importa, se distraen sin ofender a nadie). Vuelve la vista, hija m\u00eda, vu\u00e9lvela y mira las iglesias, que tambi\u00e9n est\u00e1n a veces, llenas. Pero en ellas hay de todo; de los que ves, no habr\u00e1 con verdadera devoci\u00f3n m\u00e1s que media docena; los dem\u00e1s van a espiar, a ver si hay serm\u00f3n, de qu\u00e9 trata, a interpretarlo a su capricho; si el sacerdote es bueno van a quitarle la piel; y la Madre, la Madre es v\u00edctima de ellos. Ver\u00e1s que son pocas las mujeres que en el templo, est\u00e1n como deben: Unas van, porque en alg\u00fan sitio han de pasar el tiempo; otras, porque todav\u00eda no es hora de ir al cine; algunas para ver de qu\u00e9 trata la pl\u00e1tica para ir a contarlo a la amiga que las espera y hacer la cr\u00edtica, desfavorable siempre para M\u00ed; los j\u00f3venes de ambos sexos, unos por devoci\u00f3n, y otros porque han quedado all\u00ed para verse; y a\u00fan podr\u00eda decirte m\u00e1s; de donde sacar\u00e1s las consecuencias de que son muy pocos los que me honran; no parando aqu\u00ed el mal, sino que como \u00e9ste arrastra, son los peque\u00f1os los que, viendo esto en los mayores, les imitan, creyendo que \u00e9sa es la ordenaci\u00f3n. Pero, basta, basta.<\/span><\/h3>

    Di al Padre Amado que mi ayuda no le faltar\u00e1; que no desmaye. Es grande el trabajo que pesa sobre \u00e9l, pero que no desmaye. El demonio tiene echadas sus redes para pescarlo, pero esas redes est\u00e1n tejidas muy anchas y el pez escapar\u00e1 por los agujeros. Yo, su Madre, le entrego la barca de la fe, que lo mantendr\u00e1 a flote. Echar\u00e1 el \u00e1ncora de mi auxilio. Sobre \u00e9l se alza la cruz de la fortaleza, y en su coraz\u00f3n pondr\u00e9 el amor hacia las criaturas. Navegar\u00e1 en el mar de la serenidad, luchando con las olas de las envidias, pues rodean su barca los peces de los rencores. Que no tenga miedo, pues en caso de apuro, lleva encima de \u00e9l el salvavidas que le defender\u00e1 del oleaje; y cuando acabe el camino, llegar\u00e1 a tierra; y entonces en ella se levantar\u00e1 la verdad de lo que pas\u00f3,\u00a0 esculpido en grandes letras, que reza el encabezamiento de una obra gigante. Que no tema, que no tenga prisa, porque a mayor distancia mayor conquista; que\u00a0 no\u00a0 se\u00a0 contente con ganar un palmo de terreno, pues es mi voluntad que el terreno que gane\u00a0\u00a0\u00a0 se cuente por kil\u00f3metros.<\/span><\/h3>

    Seguid, seguid adelante, vosotros los m\u00edos, en los consejos que os d\u00e9. Sabed que su deseo es el M\u00edo; y que lo que \u00e9l haga, Yo, su Madre lo doy por hecho. Seguidle, que \u00e9l encaminar\u00e1 vuestros pasos por la senda que es de mi gusto.<\/span><\/h3>

    Trabajad todos, cada cual en lo vuestro; y sabed que el amor de vuestra Madre no os faltar\u00e1 mientras implor\u00e9is su auxilio.<\/span><\/h3>

    Adi\u00f3s, hija m\u00eda: Di a los m\u00edos que su Madre les env\u00eda a todos su bendici\u00f3n: Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>

    N\u00fam. 7.- M\u00e1ximas dictadas por la Sant\u00edsima Virgen<\/span><\/h3>

    \u00a0<\/h3>
    1. \u201cNo es m\u00e1s listo aqu\u00e9l que m\u00e1s sabe sino aqu\u00e9l que practica lo que<\/span><\/h3><\/li>
    2. La caridad no consiste en decir: \u201cYo amo\u201d, sino en ejecutar las obras correspondientes a Dios y al bien del pr\u00f3jimo.<\/span><\/h3><\/li>
    3. No es caridad dar al pobre una limosna: Es participar en los andrajos de su buhardilla; es participar de su<\/span><\/h3><\/li>
    4. El amor es para lo m\u00e1s amable; y el sumo amor para lo sumamente amable, que es Dios.<\/span><\/h3><\/li>
    5. Tened misericordia: Y misericordia no es querer al pr\u00f3jimo, sino compartir con \u00e9l sus<\/span><\/h3><\/li>
    6. La murmuraci\u00f3n es la antesala de la No hace da\u00f1o el que murmura, sino los efectos que produce la murmuraci\u00f3n.<\/span><\/h3><\/li>
    7. El orgullo es la antesala de la cobard\u00eda.<\/span><\/h3><\/li>
    8. El odio es la antesala de la<\/span><\/h3><\/li>
    9. La caridad es la antesala de las buenas<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

      \u00a0No es humildad callar en las ocasiones: La verdadera humildad consiste\u00a0 en\u00a0 no tener a menos, vivir con los desgraciados y en socorrer al necesitado.\u00a0 No consiste\u00a0 en sufrir mucho, sino en la forma de<\/span><\/h3>
      1. No es m\u00e1s rico el que m\u00e1s tiene, sino el que sabe hacer uso de lo que<\/span><\/h3><\/li>
      2. Bienaventurado aqu\u00e9l \u2014 que toma el camino estrecho \u2014 porque llegar\u00e1 por \u00e9l \u2014<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

        a descansar en mi pecho.<\/span><\/h3>
        1. Bienaventurado aqu\u00e9l \u2014 que socorre a los dem\u00e1s \u2014 porque al fin del camino \u2014<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

          su Madre le dar\u00e1 m\u00e1s.<\/span><\/h3>
          1. Bienaventurado el que ama \u2014 a mi Hijo con amor \u2014 porque Yo le dar\u00e9 calma \u2014<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

            transcurrido su dolor.<\/span><\/h3>
            1. Quiero que todos mis hijos \u2014 a su Madre se parezcan \u2014 y a su Madre le ofrezcan<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

              \u2014 sus amores siempre fijos.<\/span><\/h3>
              1. No quieren corresponder \u2014 y me hacen padecer. Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 8.- Misiva de Jes\u00fas, dando consejos a los videntes<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                \u201cHija: Llegar\u00e1 un tiempo en que los que est\u00e9n por la calle no ser\u00e1n todos los que vivan\u2026 El mundo tiene ahora cinco partes, y en aquel d\u00eda tendr\u00e1 cinco medias partes. De cinco partes tres son agua; m\u00e1s entonces, no habr\u00e1 m\u00e1s que una media parte de tierra. Las aguas saldr\u00e1n de sus cauces. La justicia de mi Padre les dar\u00e1 amplia libertad\u00a0 para hacer lo que quieran. Se extra\u00f1an de qu\u00e9 Yo mande castigos; y no se extra\u00f1an de los horrores y atrocidades que cometen conmigo. Soy Rey, Padre, Se\u00f1or y Hermano Mayor. Como Rey, tengo derecho a que mis s\u00fabditos me obedezcan; como Padre, tengo poder para castigar a mis hijos, si estos no hacen lo que deben; como Se\u00f1or,\u00a0 tengo facultad\u00a0 para mandar a mis criados; y como Hermano Mayor, quiero que\u00a0 mis\u00a0 hermanos\u00a0 peque\u00f1os correspondan al cari\u00f1o que les tengo.<\/span><\/h3>

                Alguien se encargar\u00e1 de sacar a la luz lo vuestro..; y entonces, las gentes cambiar\u00e1n, os har\u00e1n halagos y falsas promesas. No hag\u00e1is caso, no les escuch\u00e9is. Vuestra Madre estar\u00e1 con vosotros y vuestro Padre no os abandonar\u00e1. Hay personas que llevan la contradicci\u00f3n encima; y ahora, todos sois buenos para ellos. \u00bfPor qu\u00e9 al principio de la obra de mi Madre no encontraron la verdad? Porque no quisieron cansarse. Pues sepan, hija m\u00eda, que para conseguir un poco hay que trabajar mucho; as\u00ed que, el que no trabaje nada, que no espere encontrarlo todo hecho. Trabajar es dif\u00edcil cuando no se tiene voluntad de trabajar; pero si se fuerza la voluntad, Yo doy doble de lo que debiera sacar al que la fuerza. No hay m\u00e1s que querer; lo dem\u00e1s es obra M\u00eda.<\/span><\/h3>

                Hay muchos santos de los que no se supo su vida hasta despu\u00e9s de su muerte: Tambi\u00e9n los hay ahora, que no ser\u00e1n conocidas sus grandezas hasta despu\u00e9s que se mueran. Entonces todo el mundo admirar\u00e1 los casos portentosos en que hayan intervenido. Mientras tanto en vida no han recibido sino menosprecios y burlas\u2026 No os importe, hijos: Sufrid desprecios, infamias, calumnias, callando; y\u00a0 as\u00ed\u00a0 ser\u00e9is\u00a0 fieles retratos de vuestro Padre.<\/span><\/h3>

                No tembl\u00e9is ante los jueces; no teng\u00e1is miedo a las rejas de las c\u00e1rceles; no os asusten las camisas de fuerza del manicomio; no os den pavor los zurriagos, ni el fuego, ni las hachas\u2026 Regocijaos al colocar la cabeza en manos del verdugo\u2026 Vuestro Padre est\u00e1 con vosotros; su presencia os dar\u00e1 valor; mi Madre os alentar\u00e1; y cuando vuestro cuerpo quede sin vida y vuestra sangre salga a borbotones y sirva para marcar en los labios de los criminales la satisfacci\u00f3n de haber cumplido con el deber, entonces es cuando su manto celestial os recoger\u00e1 y ser\u00e9is transportados al lugar de las delicias para siempre.<\/span><\/h3>

                Todo pasa, menos lo que siempre dura. Dejad las cosas pasajeras por las que son eternas. Vuestro Padre os da la fuerza para seguir los senderos dif\u00edciles de la vida. No mir\u00e9is donde pis\u00e1is; mirad donde vais a parar; y a la vista de aquel lugar, menguar\u00e1 el dolor que os produzcan las espinas del camino. Valor, fuerza, energ\u00eda, amor y buena voluntad, junto con la obediencia y humildad, es lo que deseo de vosotros, hijos m\u00edos.<\/span><\/h3>

                Ocupaos en la obra, \u2014 la que a M\u00ed tanto me agrada: \u2014 No faltar\u00e1 mi mirada, \u2014 y lo dem\u00e1s todo sobra.<\/span><\/h3>

                Os manda la bendici\u00f3n \u2013 este Padre que os ama, – y que a todos sus hijos llama \u2013 a que hagan oraci\u00f3n. Jes\u00fas<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 9.- Mensaje de la Sant\u00edsima Virgen sobre acontecimientos de Ezquioga<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                \u201cHija: Los designios de mi Hijo Jes\u00fas no son para tomarlos a juego. Llegan los tiempos horribles. No sospecha el mundo c\u00f3mo est\u00e1 envuelto. Todo va en contra de la Madre que les ama. En todas las clases sociales tengo hijos que son mis enemigos. Nadie cumple sus deberes como debe: Familias que se tienen por cristianas, no me aprecian en sus hogares. Sacerdotes, que descuidan los ministerios a que Dios les destina. Religiosos de ambos sexos, que descuidan las devociones. Las flores se secan. La mies es mucha, pero no hay operarios. La vid, madura; los racimos son grandes; la recolecci\u00f3n se acerca. El Due\u00f1o del campo separa la vid de los sarmientos. Unos ser\u00e1n llevados donde\u00a0 se\u00a0 puedan conservar por eternidades. Con los dem\u00e1s se har\u00e1 el fuego, y en\u00a0 \u00e9l\u00a0 se\u00a0 consumir\u00e1n los deseos que no fueron satisfechos.<\/span><\/h3>

                Todo llega y todo pasa; y como llegan las horas de gozo en la vida, llegar\u00e1 el d\u00eda de la tristeza y amargura. D\u00edas negros y borrosos, en los cuales el Sol de los soles se eclipsar\u00e1 y no dar\u00e1 luz a la tierra; en que los hombres pedir\u00e1n misericordia, y \u00e9sta se habr\u00e1 terminado; y en que se sembrar\u00e1 y la tierra no dar\u00e1 fruto. Los hombres gritar\u00e1n, clamar\u00e1n, y sus voces no ser\u00e1n o\u00eddas. D\u00edas de desolaci\u00f3n, de espanto y ruina; d\u00edas en los cuales s\u00f3lo los m\u00edos encontrar\u00e1n el consuelo y mitigar\u00e1n sus pesares.<\/span><\/h3>

                Mi manto es grande, muy grande, y en \u00e9l caben muchos. Yo los llamo, pero no oyen.<\/span><\/h3>

                \u00bfHay mayor angustia para una Madre que llamar a los hijos y no ser atendida? Hay muchos que en mi Monte sagrado profanan el lugar. Hay otros en los cuales s\u00f3lo reina la curiosidad. Hay otros, y estos son los m\u00e1s, que vienen solamente por el af\u00e1n de aparentar, por el deseo de ser vistos. Todas estas cosas alg\u00fan d\u00eda acabar\u00e1n. Todos mis hijos est\u00e1n siendo v\u00edctimas de los que a su Madre no creen. No os importe, hijos del alma. Decid claro y fuerte que Yo bajo a mi Monte Santo; y a aquellos que lo nieguen decidles que alg\u00fan d\u00eda no dir\u00e1n, que esto que ahora piensan de M\u00ed, llegar\u00e1 d\u00eda en que se tendr\u00e1 que publicar; m\u00e1s entonces no les valdr\u00e1. Todo tiene su t\u00e9rmino en la vida, y mi verdad resplandecer\u00e1 por los cuatro \u00e1mbitos de la tierra. Llegar\u00e1 d\u00eda en que, claramente en todas las regiones Yo, vuestra Madre, la Virgen de Ezquioga obrar\u00e1 la conversi\u00f3n de todas las gentes. M\u00e1s entonces no ser\u00e1 tiempo. Ahora es cuando lo es. Entonces creer\u00e1n, porque ver\u00e1n las maravillas que obrar\u00e9 cuando llegue su d\u00eda. Los que creen ahora, \u00e9sos ser\u00e1n los m\u00edos.<\/span><\/h3>

                Si mis hijos hubieran seguido como empezaron\u2026 La culpa (es necesario se diga) la tienen los sacerdotes, que no han sabido sacar el provecho que deb\u00edan de ello; que no\u00a0 han sabido dirigir a mis hijos. Todo se ha convertido en burlas, rechiflas, desorden\u2026<\/span><\/h3>

                \u00bfQu\u00e9 me detiene para hacer las cosas? Los milagros que estoy haciendo en otras partes, los hubiera obrado aqu\u00ed.<\/span><\/h3>

                Pero los ojos que est\u00e1n cerrados no ver\u00e1n nunca. No han visto nada. \u00bfQu\u00e9 har\u00e9 para mis hijos? No se puede hacer m\u00e1s. Para que abran los ojos es menester herir, Mi Hijonespera a\u00fan, pero el Padre tiene lleno el c\u00e1liz hasta el borde. Pronto est\u00e1\u00a0 dispuesto a\u00a0 herir. Rayos caer\u00e1n a la tierra. Ciudades enteras han de desaparecer. Y despu\u00e9s que esto ocurra, \u00bfcre\u00e9is que han de creer? Entonces pensar\u00e1n que es cosa de la tierra. \u00a1Oh,\u00a0 Espa\u00f1a! T\u00fa, que has sido siempre cuna del Coraz\u00f3n que te ama, \u00bfpor qu\u00e9 te\u00a0 dejas\u00a0 vencer? Crees que puedes dejarte a tus propias fuerzas. \u00a1Pobre Espa\u00f1a! Caer\u00e1s, sucumbir\u00e1s, como se sucumbe al golpe del tirano; har\u00e1n girones tu piel y te har\u00e1n beber\u00a0 la hiel de corazones podridos. \u00a1Espa\u00f1oles! \u00bfPor qu\u00e9 est\u00e1is tan dormidos? Os llaman a la pelea y es segura la victoria\u201d.<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 10.- Instrucciones de la Sant\u00edsima Virgen, sobre los padres de familia<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                \u201cNo es pobre todo el que pide. Pobre es aquel que no alcanza misericordia. Vienen grandes castigos: Las \u00f3rdenes religiosas ser\u00e1n expulsadas, y en su lugar\u00a0 pondr\u00e1n\u00a0 personas que no entienden lo que les encomienden. En los colegios, donde hay pocos ni\u00f1os, a escondidas, a\u00fan se podr\u00e1 ense\u00f1ar Religi\u00f3n; donde haya\u00a0 muchos,\u00a0 no\u00a0 ser\u00e1\u00a0 posible. Los padres cat\u00f3licos, por defender a sus hijos de las garras de esas fieras, ser\u00e1n ultrajados y v\u00edctimas, ya que alguno morir\u00e1 en defensa de sus hijos. Las\u00a0 criaturas\u00a0 perder\u00e1n los principios cristianos: en los padres est\u00e1 el saber guiarlos y guardarlos.<\/span><\/h3>

                \u00a1Padres y madres de familia: O\u00eddme! No hay nadie que, con derecho, pueda usurpar vuestros hijos. El ni\u00f1o tiene un alma y una conciencia. De la primera, mi Hijo es el due\u00f1o, y ha puesto en ella todos sus entusiasmos y afanes. Pero llegar\u00e1 d\u00eda en el cual la pedir\u00e1 porque es suya, y por tanto le pertenece. De la segunda tienen derecho los padres, y bajo la responsabilidad de \u00e9stos est\u00e1 la conciencia de sus hijos, y en ella la obligaci\u00f3n estrecha de educarlos y defenderlos de las garras de las fieras que piensan que, porque ellos no la tienen, el que la tenga, tiene obligaci\u00f3n a vivir sin ella. Padres: Estad alerta, defended a vuestros hijos, porque los hombres como lobos hambrientos, escapados de la manada, rodear\u00e1n la tierra, \u00e1vidos de comer lo que con tanto trabajo, a costa de tantos esfuerzos, ha sido creado por mi Jes\u00fas.<\/span><\/h3>

                La tierra est\u00e1 como pelota de goma en mano de ni\u00f1o. Mirad lo que sucede con ella: La pelota est\u00e1 hueca. El ni\u00f1o no es capaz de comprender que, al jugar con ella y darle tantos golpes contra el mismo sitio, se puede romper. Observa, hija, y ver\u00e1s como el ni\u00f1o pega, mete la tijera y la rompe. As\u00ed est\u00e1 el mundo: Hay muchas personas peores que el ni\u00f1o; tienen mayor malicia al obrar; saben que con lo que hacen, la tierra se puede cambiar; pero siguen en su intento, y como no logran lo que quieren, meten la espada de los instintos para romper las costumbres. Una vez rotas, la tierra se abre, dando lugar al desenfreno de las pasiones, que estaban encerradas dentro de la corteza de los fingimientos que envuelven esa tierra; saldr\u00e1n a luz todos los malos h\u00e1bitos.<\/span><\/h3>

                \u00a1Pobres, los que est\u00e9n ocultos, porque ser\u00e1n blancos de escarnio! El mar envolver\u00e1 esa tierra, arrastrando todo lo que en ella haya; habr\u00e1 muchos muertos. Se acerca y no quieren creerlo, pero viene a pasos agigantados.<\/span><\/h3>

                Yo te dar\u00e9 orden de esto que digo para que se den cuenta las casas religiosas, y tomen su determinaci\u00f3n, si no quieren ser v\u00edctimas, como lo fueron en la semana tr\u00e1gica de Barcelona. Habr\u00e1 muchos seglares que se cebar\u00e1n en ellos. \u00a1Pobres ornamentos sagrados! Iglesias cerradas, saqueadas y quemadas, las casas asaltadas, los bancos destruidos, fortunas sepultadas. \u00a1Qu\u00e9 horrores hace el ir contra la Doctrina de mi Hijo!<\/span><\/h3>

                Comunistas, anarquistas, reuniones izquierdistas ser\u00e1n los protagonistas de la obra. A vosotros, padres de familia, os toca luchar en defensa de la Religi\u00f3n de vuestros hijos. No quer\u00e1is pol\u00edtica ninguna. Mi reino es muy grande, pero ser\u00e1 para aquellos que tengan la pol\u00edtica que deben tener: el reinado de las almas en mi Jes\u00fas. \u00a1Qu\u00e9 diversidad de ideas, qu\u00e9 pensamientos tan distintos, qu\u00e9 vueltas tan aparatosas, qu\u00e9 hijos tan desgraciados, qu\u00e9 padres y qu\u00e9 madres tan poco observantes de su obligaci\u00f3n!<\/span><\/h3>

                Padres y madres: los tiempos se acercan. Vuestros hijos, y s\u00f3lo vuestros hijos es vuestra obligaci\u00f3n. Quieren implantar la ley por la cual los padres, desde que el ni\u00f1o llega a tener uso de raz\u00f3n, no mandan en \u00e9l, no lo admit\u00e1is. Ten\u00e9is derecho a vuestros hijos hasta el fin de su existencia. Silencio absoluto de todo, nadie lo ha de saber\u2026<\/span><\/h3>

                Hija, hay un refr\u00e1n que dice: El que ha de corregir no ha de tener vicios. Pues, \u00bfqu\u00e9 van a corregir unas personas las cuales o entre las cuales se cometen toda clase de ignominias? \u00bfC\u00f3mo va a corregir aqu\u00e9l que est\u00e1 lleno de vicios? En el mundo nadie puede corregir a nadie, porque nadie est\u00e1 sin defecto. Al \u00fanico que toca corregir es a mi Hijo, que es prudencia, sabidur\u00eda, rectitud y gloria eterna. El que sigue sus correcciones llegar\u00e1 al t\u00e9rmino, y ser\u00e1 en los d\u00edas de angustia el consuelo para \u00e9l, porque ver\u00e1 que aquello que Dios pide, es lo que \u00e9l ejecuta y le quedar\u00e1 la tranquilidad de conciencia; pero aquellos que van en camino contrario, muchos, por desgracia, tendr\u00e1n que entrar en el verdadero sendero a fuerza de golpes; porque, as\u00ed como cuando un hierro est\u00e1 torcido, para ponerlo derecho hay que someterlo al fuego y al martillo, as\u00ed el alma que est\u00e1 torcida al golpe de la justicia\u2026\u201d<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 11.- Mensaje dictado por la Sant\u00edsima Virgen sobre el porvenir pr\u00f3ximo y el encargado del campo<\/span><\/h3>

                \u00a0\u201cLas iglesias se van cerrando, porque el gobierno mete miedo a los curas y \u00e9stos no saben defender lo que deben. \u2014Los castigos del cielo no atienden a clases. \u00a1Que no se tomen estas palabras igual que las que se tomaron las de la M. Rafols! Ser\u00eda malum signum. <\/em>Este mensaje es del verano de 1933.\u2014<\/span><\/h3>

                Habr\u00e1 gran niebla; el c\u00edrculo ser\u00e1 cada vez m\u00e1s obscuro, porque cada vez\u00a0 se\u00a0 ve menos a pesar de haber m\u00e1s luz. Vienen cosas gordas que est\u00e1n cerca. Son\u00a0 ramalazos\u00a0 que mi Hijo da para ver si despiertan. El que tenga el foco\u00a0 interior de la fe,\u00a0 \u00e9se ser\u00e1 el\u00a0 que vea, pues los dem\u00e1s morir\u00e1n en las tinieblas. El que no tenga fe en ese momento decisivo, no podr\u00e1 defenderse, porque lo que se ha de tratar son cosas de fe. Como que\u00a0 se trata de defender el amor que se nos tiene a los dos, y el que no tiene fe no podr\u00e1 defendernos. Es el momento que espera el demonio para coger a los que no tienen fe.<\/span><\/h3>

                Mucha guerra, mucha guerra. Los pirineos no han conocido otra igual. La cat\u00e1strofe ha prometido empezar por el extranjero para avisar a los espa\u00f1oles.<\/span><\/h3>

                En esta \u00e9poca los curas ser\u00e1n los peores. El Gobierno les ha dicho que les quitar\u00e1 las iglesias, y esto ser\u00e1 lo que les sublevar\u00e1, siendo esto un castigo por no saber cumplir con su ministerio. Que hay muchos que est\u00e1n deseando vestir de paisano, porque antes de cumplir con la obligaci\u00f3n que tienen, se ocupan de pol\u00edtica, c\u00edrculos y reuniones.<\/span><\/h3>

                Los tiempos est\u00e1n malos y se avecinan sucesos terribles. La humanidad, hija, cree encontrar la felicidad en la tierra, pero se equivoca, porque a mayor org\u00eda, placer y diversi\u00f3n, hay menor camino espiritual. El alma se dedica menos a lo que debe atender. No sabe que los placeres y diversiones de la tierra no calman el dolor que producen las amarguras de la vida, no disminuyen el peso que produce la cruz. Al contrario, despu\u00e9s de que todo eso pasa, porque todo tiene su fin en la vida, vuelven a reaparecer con m\u00e1s \u00edmpetu los dolores: la cruz pesa m\u00e1s. \u00bfC\u00f3mo van a encontrar remedio en el dolor si huyen de Aqu\u00e9l que solo puede calmarlo? \u00bfC\u00f3mo van a encontrar el camino suave, la carga ligera, si no miran, acuden y piden consejo a la Madre que s\u00f3lo quiere su bien?<\/span><\/h3>

                Al bajar del cielo a la tierra mi deseo no fue otro que el qu\u00e9, por medio de mis llamadas, acudiesen mis hijos; y junto con ellos, nos emple\u00e1semos todos en la misma obra, trabajando para hacer f\u00e9rtil el campo de la vida a fin de que en \u00e9l aparecieran los corazones cicatrizados por las heridas causadas por la zarpa del enemigo infernal.<\/span><\/h3>

                \u00a0El trabajo era grande. Yo cre\u00ed encontrar quien me ayudase. A las primeras llamadas fueron muchos los que acudieron. Y, aunque tuve que hacer gran separaci\u00f3n, mi Hijo y Yo est\u00e1bamos satisfechos. Pas\u00f3 el tiempo. El enemigo entr\u00f3 en el campo. Las plantas que estaban bien arraigadas, que ten\u00edan las ra\u00edces muy profundas, crecieron. Las otras, d\u00e9biles, fueron arrancadas por el enemigo. Mi alma sufri\u00f3 entonces amarguras grandes, porque vi la confusi\u00f3n terrible, la confusi\u00f3n espantosa por la que el director del campo hab\u00eda de pasar. El tiempo pas\u00f3. Se suceden los d\u00edas, y en el transcurso de ellos, veo que las plantas son tronchadas. Cuando llega la noche, el enemigo se encarga de devastar mi campo. No tengo m\u00e1s que un encargado. Puse cuatro, y tres han huido cobardemente. No importa. Quedar\u00e1n pocas, pero esas pocas quiero que sean cuidadas de los embates de los dem\u00e1s. Hay que trabajar, hay que luchar hasta que esas plantas se desarrollen por completo. Sus ra\u00edces adquirir\u00e1n fuerza suficiente para mantenerse en pie. Las dem\u00e1s no soy Yo quien las plant\u00e9 ni quien las cuida. Hay una mano que, con habilidad sat\u00e1nica, procura y hace esfuerzos para que se desarrollen m\u00e1s que las m\u00edas. No est\u00e1n conmigo. Yo no las veo. No les da el sol. El agua con que son regadas est\u00e1 podrida. No tienen frutos, y al no tenerlos, esa mano se los coloca y las hace ver que de ellos nacieron.<\/span><\/h3>

                \u00a1Pobres! Vendr\u00e1 el d\u00eda de la recolecci\u00f3n, y entonces mis operarios, dirigidos por el mayordomo, que cuid\u00f3 el campo, recoger\u00e1n mi fruto sazonado, regado por los consejos que esta Madre da a quien debe practicarlos.<\/span><\/h3>

                Lecci\u00f3n que ha de servir de norma en el tiempo que pod\u00e1is vivir, hasta que mi Hijo se sirva segar las cabezas de esas flores. Y con la sabia que ellas saquen, pueda regenerar y dar vida a otras flores tronchadas. Las otras, sin mayordomo, acabar\u00e1n mal; quien ciertamente, trabaja sin mirar arriba, trabaja con fines humanos, y no obtendr\u00e1 fruto; y al ver que su trabajo no rinde el fruto apetecido, antes de doblar la cerviz ante quien se le est\u00e1 previniendo, acabar\u00e1 mal.<\/span><\/h3>

                El cielo es grande, es hermoso, pero los medios para conseguirlo, han de ser proporcionados al fin que dese\u00e1is. Si el cielo es grande, grandes tienen que ser los medios para adquirirle. Con medios s\u00f3lo humanos, con fines rastreros y pasajeros no se llega a \u00e9l.<\/span><\/h3>

                En la vida todo es jugar, todo pasa, como el rayo cruza el espacio. No hay m\u00e1s que una verdad. No hay m\u00e1s que un solo fin, al que deb\u00e9is aspirar para conseguir lo que deb\u00e9is. La verdad es la muerte; el fin es Dios; el medio que deb\u00e9is apetecer y al cual est\u00e1is obligados es vuestra alma. Lo dem\u00e1s no os debe importar nada. Sufrir, padecer, sin que os importen los desprecios, insultos y vejaciones porque pod\u00e1is atravesar. Dejad que los dem\u00e1s hablen y digan. Vosotros, como fieles soldados, al mando de vuestro capit\u00e1n en la tierra, el capit\u00e1n \u00fanico para vosotros, al cual deb\u00e9is ser fieles en las \u00f3rdenes que os imponga, seguid el camino emprendido. Es largo, dif\u00edcil, lleno de obst\u00e1culos. En sus laderas ten\u00e9is escondido, entre sus matorrales, enemigos que quieren asaltar vuestra empresa. No tembl\u00e9is, marchad con \u00e1nimo, no volv\u00e1is la cabeza a ver qui\u00e9n os sigue. Siempre de frente, y al comp\u00e1s del himno triunfal que os ha de servir de lema en vuestros trabajos, vivid y caminar con la esperanza de encontrar pronto el fin apetecido.<\/span><\/h3>

                En vuestra marcha, la Madre no dejar\u00e1 a sus hijos; y al final de la jornada, el Padre os recibir\u00e1 con los brazos abiertos. Frotar\u00e1 el sudor que corra por sus mejillas, y os dar\u00e1 el agua que reponga vuestras fuerzas, agua de vida, agua que os aplacar\u00e1 la sed que os devora.<\/span><\/h3>

                Recibid la bendici\u00f3n que, juntamente con mi Jes\u00fas, os da vuestra Madre, Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 12.- Mensaje del Divino Coraz\u00f3n sobre el amor pr\u00e1ctico de Jes\u00fas<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                \u201cHija: Di a mis hijos que con cu\u00e1nta satisfacci\u00f3n recoger\u00eda Yo las manifestaciones de la fe suya. Pero se olvidan de mis palabras: \u201cEl que cree en M\u00ed tiene vida eterna\u201d. Siempre me encuentran dispuesto a favorecerles. No tem\u00e1is que salga fallida vuestra fe en la santa Eucarist\u00eda. All\u00ed deben de estar guardados todos nuestros cari\u00f1os. El Sagrario ha de ser el lugar de vuestros recuerdos, porque \u00e9l ser\u00e1 siempre el nido de vuestros amores. Procurad quitar de vuestros corazones todo lo que me molesta, el pecado que mata el alma y hace que no sirva la vida de la fe. Quiero ser el due\u00f1o de vuestro coraz\u00f3n, y si me lo dej\u00e1is de buena gana, ver\u00e9is qu\u00e9 gozo ten\u00e9is. Quiero que la fe que teng\u00e1is la forr\u00e9is de buenas obras; quiero que teng\u00e1is respeto en mi casa, obediencia ciega, piedad cuando habl\u00e9is conmigo; que teng\u00e1is odio al pecado, cualquiera que sea la forma como os la presente el enemigo. Que no descansen vuestros corazones en nadie m\u00e1s que en M\u00ed\u2026 Aunque todo os falte, siempre me tendr\u00e9is a M\u00ed. Yo no morir\u00e9, porque no puedo morir, y os amo como nadie os ha amado. Mi Coraz\u00f3n siempre arde y no se consume, porque mi fuego no se apaga. Pues, si todo lo puedo, no os puedo faltar y soy vuestro fin, \u00bfqu\u00e9 puede preocuparos, si viv\u00eds vida de uni\u00f3n conmigo y Yo estoy satisfecho de vosotros?<\/span><\/h3>

                Si me am\u00e1is, cual es mi deseo, tendr\u00e9is el cielo en la tierra, porque os lo anticipar\u00e1; ser\u00e9 Padre cari\u00f1oso, amigo que os acompa\u00f1ar\u00e1 en esta vida hasta la eternidad. Si est\u00e1is<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                conmigo tendr\u00e9is la seguridad de entrar en el cielo, porque lo cri\u00e9 para mis amigos fieles y mis promesas no os pueden faltar. El cielo y la tierra pasar\u00e1n, pero mis palabras ser\u00e1n cumplidas a la letra; y como prometo el cielo a los que me sirvan, es vuestro, si segu\u00eds el camino que yo os trazo. No os pido sino amor, traducido en obras buenas, porque no todos entrar\u00e1n en el cielo, sino aquellos que hagan la voluntad de mi Padre celestial.<\/span><\/h3>

                No teng\u00e1is otro deseo sino amarme sin medida, con amor afectivo, llevando una vida ejemplar, evitando todo lo que disguste a mi Coraz\u00f3n y lo que no sea digno de un alma puesta a M\u00ed servicio y a mi amor. Deb\u00e9is de ser obedientes y sumisos a vuestros mayores; amar la virtud, cualquiera que sea su forma; amar mi Doctrina y ponerla siempre en pr\u00e1ctica; amar la pureza, porque Yo no puedo ver cosas impuras; amar la humildad, recibiendo con abatimiento las correcciones que os hagan; amar la piedad, practicando los rezos con intenci\u00f3n de complacerme; amarme en todo aquello que sep\u00e1is que me agrada. Si me am\u00e1is as\u00ed vivir\u00e9is; no apartar\u00e9 mi vista de vosotros y ver\u00e9is qu\u00e9 alegr\u00eda inunda vuestro esp\u00edritu.<\/span><\/h3>

                Yo suspiro por el amor de mis hijos para hacerlos felices. No os conform\u00e9is con decirme que me am\u00e1is, sino que vuestra vida est\u00e9 conforme con vuestras palabras. Todas las virtudes me encantan, pero ninguna tanto como la santa pureza. Si la pon\u00e9is en pr\u00e1ctica tendr\u00e9is un lugar preferente en mi Coraz\u00f3n. Con esta virtud os parec\u00e9is a mi Madre en su blancura, y ser\u00e9is \u00e1ngeles en la tierra. Hab\u00e9is de huir de todo aquello que pueda marchitar esa flor hermosa. A esa virtud a\u00f1adid una entera sumisi\u00f3n a mi voluntad. No deb\u00e9is de querer m\u00e1s que lo que Yo quiera. Sin que os espanten mis mandatos, que ser\u00e1n suaves y f\u00e1ciles con mi ayuda.<\/span><\/h3>

                Guardad mis mandamientos, esto es lo que os pido; y si lo hac\u00e9is, me amar\u00e9is\u00a0 y\u00a0 ser\u00e9is felices. Quiero que me am\u00e9is por los que os ofenden, por los que no se acuerdan\u00a0\u00a0 de M\u00ed. Nada hay que me haga olvidar tanto mis ofensas, como los corazones que s\u00f3lo piensan en tenerme contento. Amadme por encima de todas las criaturas y m\u00e1s que a todas las cosas, y as\u00ed estar\u00e9 contento con vosotros; no exijo m\u00e1s. Ya veis que todo me parece poco para daros; poco me pareci\u00f3 el morir muerte de cruz; poco el quedarme\u00a0\u00a0 para vuestro alimento, y no vacilo en daros a mi Madre tambi\u00e9n.<\/span><\/h3>

                Llamadla, invocarla con cari\u00f1o y confianza sin l\u00edmites. Es Madre cari\u00f1osa que espera vuestra s\u00faplica. No teng\u00e1is miedo de molestarla. Siempre est\u00e1 preparada para favoreceros: no tiene otro oficio. Os la di para vuestro consuelo y vuestra protecci\u00f3n. Amadla mucho; sed buenos hijos para con Ella y no hag\u00e1is nada que lastime su Coraz\u00f3n.<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                Quiero que hag\u00e1is todos los d\u00edas algo en honor, y sobre todo, en imitaci\u00f3n de sus virtudes de pureza y humildad, y as\u00ed os har\u00e9is acreedores a su protecci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                Esto es lo que desea de vosotros vuestro Jes\u00fas.\u201d<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 13.- Mensajes de la Sant\u00edsima Virgen sobre consejos y ejemplos a los amantes de Ezquioga<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                \u201cHija: El d\u00eda de los palos llega pronto. M\u00e1s pronto de lo que piensan. Van a quedar pocos m\u00edos, muy pocos. Mi deseo es que ning\u00fan hijo m\u00edo (habla de los videntes) hable\u00a0 con ning\u00fan seglar. Los que son m\u00edos de verdad, que se distingan\u00a0 por\u00a0 el\u00a0 silencio. No\u00a0 pid\u00e1is (en lo m\u00edo) parecer a nadie, pues lo que quieren es fastidiaros. Si la gente quiere saber algo que lo pregunte al Padre. \u2014Se refiere al autor\u2014. Vosotros, nada de explicaciones. Dir\u00e1n que sois groseros\u2026 Poca piel os queda (se refiere a la cr\u00edtica despiadada contra todo lo de Ezquioga) \u00bfQu\u00e9 importa aunque os la quiten toda? Os\u00a0 hacen un favor con quitarla del todo, pues os saldr\u00e1 una nueva.<\/span><\/h3>

                No os fi\u00e9is, no todos son devotos. No consiste la devoci\u00f3n en rezar mucho, condolerse mucho y saber cosas del otro mundo. La devoci\u00f3n consiste en entregarse por entero a Jes\u00fas; y esto se hace mediante una hermosa meditaci\u00f3n, que da por fruto el cambio de vida y el abandono de las propias pasiones. Por eso, hija, hay tan pocos devotos. La devoci\u00f3n es una virtud que empuja el alma al cumplimiento exacto de los mandamientos de Dios, y al cumplimiento de los deberes y a obedecer las inspiraciones sobrenaturales.<\/span><\/h3>

                Pronto voy a castigar. Que tiemblen los que no han querido escuchar la voz de la Madre. No quieren otra cosa que su felicidad terrena. El d\u00eda est\u00e1 cercano, y los m\u00edos ser\u00e1n pasados por la criba de la pureza. Los que han sido m\u00edos, y me han abandonado,<\/span><\/h3>

                \u2014habla de los que fueron videntes\u2014 esos pasar\u00e1n por el crisol del dolor. Yo les har\u00e9 ver palpable que la ofensa cometida es m\u00e1s grave de lo que pensaron. Conmigo no se puede jugar; porque adem\u00e1s de poder obrar Yo por mi misma, tengo por defensor a mi Hijo, y\u00a0 \u00a0\u00a0\u00c9l no consiente las burlas y los desprecios a su Madre.<\/span><\/h3>

                He querido vuestro bien y no lo hab\u00e9is admitido. Pens\u00e9 en colmaros de gracias y las hab\u00e9is despreciado. Pues, solos, sin nada, sin apoyo ni consuelo tendr\u00e9is que atravesar el sufrimiento y padecer las penas ocasionadas por vuestra culpa. Nada de eso quer\u00eda Yo, vosotros lo hab\u00e9is buscado. \u00a1De cu\u00e1n distinta manera era mi intenci\u00f3n que estuvi\u00e9ramos en las horas presentes! Quise formar legi\u00f3n, que un d\u00eda hab\u00eda de ser la<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                gloria de las generaciones. La han rechazado, no la quieren. Pues de ellos tendr\u00e9 esa mies, el grano lleno, la espiga dorada; y los m\u00edos ser\u00e1n los que reciban todo lo que hab\u00eda de dar a los dem\u00e1s. En todos los tiempos hay santos. En todas las edades ha habido hombres perfectos, y en los tiempos presentes los habr\u00e1 tambi\u00e9n.<\/span><\/h3>

                De este peque\u00f1o grupo saldr\u00e1n grandes, muy grandes santos. Todo est\u00e1 en\u00a0 que sepan seguir los consejos de aquel a quien Yo he puesto como maestro de ellos. Los que queden sean fieles, observen mis consejos, y est\u00e9n seguros de que nada ni nadie podr\u00e1 contra ellos, porque Yo, su Madre, velar\u00e9 siempre, y nunca les faltar\u00e1 mi protecci\u00f3n y auxilio. Los dem\u00e1s ser\u00e1n arrojados para escarmiento de los hombres.\u00a0 Quise hacer\u00a0 un\u00a0 bien y no lo admitieron. Ellos se lo han buscado. \u00a1Qu\u00e9 giman entre tormentos! La misma Obra, y \u00a1qu\u00e9 distinta manera de obrar! El mismo fin, y \u00a1qu\u00e9 distintos caminos para alcanzarlo!<\/span><\/h3>

                Seguid a mi Jes\u00fas. \u00c9l os indicar\u00e1 el sendero que os ser\u00e1 m\u00e1s provechoso. No imit\u00e9is en nada la conducta de los dem\u00e1s. Mirad que los capitanes de los dos ej\u00e9rcitos son contrarios. Mirad a aqu\u00e9l cuya gloria y honor os eleve hasta la regi\u00f3n donde est\u00e1 vuestra Madre. Desde aqu\u00ed, y al final de la jornada, ver\u00e9is que las intenciones del capit\u00e1n opuesto son perjudiciales. Que su ej\u00e9rcito, elevado por riscos y pe\u00f1as, se precipita en los abismos para no volverse a levantar. Ver\u00e9is la tristeza marcada en los semblantes y una risa ir\u00f3nica y falaz en el falso capit\u00e1n. Mientras tanto, habr\u00e9is caminado por sendero llano, aunque lleno de espinas. Y si os mir\u00e1is, ver\u00e9is alegr\u00eda en vuestros semblantes. Si mir\u00e1is a vuestro capit\u00e1n, lo encontrar\u00e9is con rostro satisfecho dar la bendici\u00f3n a aquellos que han sabido seguirme hasta el fin.<\/span><\/h3>

                Trabajad mucho para no perder lo que Jes\u00fas y Yo os damos. No teng\u00e1is miedo, que si as\u00ed lo hac\u00e9is, sabr\u00e9is defendernos. Nosotros en ocasi\u00f3n propicia, sabremos agradeceros. Mar\u00eda.\u201d<\/em><\/span><\/h3>

                \u00a0<\/em><\/span><\/h3>

                N\u00fam. 14.- Instrucci\u00f3n dada por la Sant\u00edsima Virgen sobre lo que hay que hacer ante la persecuci\u00f3n episcopal<\/span><\/h3>

                \u201cHay muchas personas que ignoran sus desgracias, y las hay que con\u00a0 desgracias tienen que trabajar para que los dem\u00e1s conozcan las suyas. Que en las horas de felicidad\u00a0 y de calma todos los hijos son buenos, y en las horas de amargura todos los hijos, que parece que son buenos se escapan.<\/span><\/h3>

                \u00a0No puede el obispo mandar una cosa que no puede practicar. Es muy f\u00e1cil decir a los otros que sean buenos, pero no es tan f\u00e1cil el ser a si mismo bueno.<\/span><\/h3>

                Si el b\u00e1culo y la mitra dan libertad para poder mandar, tambi\u00e9n tienen mucha obligaci\u00f3n que poder cumplir. Si \u00e9l, como obispo, tiene derecho a mandar; tambi\u00e9n como obispo, tiene obligaci\u00f3n de hacer.<\/span><\/h3>

                Dif\u00edcilmente se puede discutir y poner remedio a una cosa, la cual no se entiende, porque no se conoce. No pondr\u00e1 remedio un labrador si a un pastelero se le queman los pasteles. \u00bfPor qu\u00e9 ser\u00e1? Porque no entiende la materia en que el pastelero trabaja. Pero a \u00e9l a\u00fan le pasa peor. \u00c9l conoce los ingredientes que han de entrar en la materia que ha de formar, pero no conoce la forma de trabajarla, no puede saber si quedar\u00e1 bien o mal. Sabe teolog\u00eda, suponiendo que la sepa: que si la supiera a fondo y la tuviera bien estudiada, sabr\u00eda que muchas de las cosas, que hasta ahora ha hecho, son erradas y torcidas.<\/span><\/h3>

                Suponiendo, hija, que sepa teolog\u00eda, \u00bfpor qu\u00e9 no sabe poner\u00a0 en\u00a0 pr\u00e1ctica\u00a0 aquello\u00a0 que debi\u00f3 estudiar a fondo, aquello que, si lo supiese, ver\u00eda y entender\u00eda de lo que se trataba? Saben teolog\u00eda, es decir, tienen los datos para poder hacer\u00a0 aquello\u00a0 que\u00a0 intentan; pero como ignoran las proporciones, porque no las han estudiado, la cuesti\u00f3n que han de tratar les sale torcida. Cuanta m\u00e1s luz tienen, ven menos. \u00bfCreer\u00e1 el obispo que con vestir las ropas, cumple y llena el ministerio que tiene? \u00bfCreer\u00e1 que solamente, con las ropas que Yo le he dado \u2014porque Yo se las he dado\u2014 podr\u00e1 desempe\u00f1ar el\u00a0 cargo que tiene? Es muy hermoso ser obispo. Pero el serlo implica una obligaci\u00f3n extens\u00edsima. \u00c9l es pastor de su reba\u00f1o; mas, \u00bfc\u00f3mo lo pondr\u00e1 al abrigo, si \u00e9l est\u00e1 en la mitad del campo? \u00bfC\u00f3mo ha de proporcionar calor a sus corderos aqu\u00e9l que se siente completamente frio? \u00bfC\u00f3mo alimentar\u00e1 una madre a su hijo, si ella no come primero? Pues, \u00bfc\u00f3mo ense\u00f1ar\u00e1 \u00e9l la doctrina a sus hijos si \u00e9l no la entiende?<\/span><\/h3>

                \u00a1Oh, vosotros, mis hijos! Que no tenga que decir nunca \u00e9l que hab\u00e9is desobedecido. Me refiero a los m\u00edos, a los que est\u00e1n colmados de mis gracias \u2014a los videntes probados y obedientes\u2014. No me refiero a los que suben a mi Monte. Obedecedle, y puesto que os priva de venir, no veng\u00e1is. \u00a1Tantos a\u00f1os de estudio para no poder entender que la Madre ir\u00e1 a donde est\u00e1n sus hijos! Porque lo sobrenatural se eleva siempre por encima de lo terreno. \u00c9l estriba las cosas que Yo hago con los m\u00edos en la cruz, que est\u00e1 puesta en la monta\u00f1a, y la manda quitar. \u00bfPara qu\u00e9 han estudiado tanto? \u00bfPara qu\u00e9 tienes el cargo que te di, si no entiendes que ni a la Madre, ni a sus hijos les hacen falta monte alguno para poderlos Yo colmar de gracias y favores? No veng\u00e1is; Yo ir\u00e9 a donde est\u00e9is<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                vosotros. En M\u00ed no manda el obispo. Pero notad y decid, vosotros, los m\u00edos, que \u00e9l no manda <\/em>a los dem\u00e1s que dejen de venir al Monte. Por supuesto, porque no le conviene mandar <\/em>tal cosa. \u00c9l quiere y ser\u00eda gusto suyo, que no venga nadie al Monte, quedando as\u00ed siempre libre de responsabilidad. Mas, como eso no puede ser. Porque al prohibir lo mismo que al mandar, tiene que haber una causa, que \u00e9l tiene que conocer. Al dar esa causa queda al descubierto. Por eso no le conviene mandar que no vengan, y solo ruega, quedando as\u00ed en buen lugar.<\/span><\/h3>

                Que me traigan muchos peque\u00f1os. Quiero peque\u00f1os. En los mayores no he sabido encontrar aquello que apetec\u00eda. No he podido formar aquello que\u00a0 era\u00a0 mi\u00a0 ilusi\u00f3n.\u00a0 Quedan pocos, pero como van a quedar menos \u2014porque mi Obra con ellos va a empezar\u2014 con los que queden y con los peque\u00f1os que me traigan voy a hacer algo, a\u00a0\u00a0 ver si el obispo calla de una vez.<\/span><\/h3>

                Hijos: Hablo en general. No teng\u00e1is miedo en venir. No tendr\u00e9is videntes en alg\u00fan tiempo. Venid por M\u00ed; Yo sabr\u00e9 agradecer vuestro sacrificio. No\u00a0 tem\u00e1is,\u00a0 porque\u00a0 no\u00a0 puede haceros nada\u201d.<\/span><\/h3>

                Siguen encargos particulares y cargos a exvidentes y falsos videntes. Y contin\u00faa:<\/span><\/h3>

                \u201cEs mi gusto que los m\u00edos obedezcan en la tierra; y sin embargo, ellos \u2014los exvidentes y falsos videntes\u2014 afirman que Yo he dicho que desobedezcan<\/em>. Ninguno de ellos me ve, mal pueden decir que Yo he dicho tal cosa. Son enga\u00f1ados; y \u00a1c\u00f3mo los tiene cogidos el enemigo! \u00a1Qu\u00e9 mal fin van a tener! Poco a poco, Yo les har\u00e9 convencer y<\/span><\/h3>

                \u00a1cu\u00e1nta verg\u00fcenza van a pasar! \u00bfPor qu\u00e9 escapar del Monte cuando afirman que Yo he dicho que va a pasar una cosa? Porque no es cierto. \u00a1Oh, todo el lujo que llev\u00e1is, todo lo que disfrut\u00e1is en viajes y recreos, c\u00f3mo lo vais a pagar! Porque os vais a encontrar en necesidades grandes, sin tener qui\u00e9n os tienda la mano; pues aqu\u00e9l que os la tend\u00eda, bastante que hacer tendr\u00e1 con pagar lo que debe. Que se d\u00e9 por satisfecho si antes de morir, da por liquidadas las cuentas de ac\u00e1 abajo.<\/span><\/h3>

                En las cosas de la vida hay dos partes: Unas son las alegr\u00edas, que os presenta el enemigo, las cuales se pasan muy veloces. Otras son las amarguras, que os env\u00eda vuestra Madre para probar vuestras almas y haceros ganar la gloria. El que mejor sepa cumplir, el que mejor sepa llevarlas, \u00e9se me agradar\u00e1 m\u00e1s. Vosotros hab\u00e9is pasado la primera. Todo fueron alegr\u00edas, excursiones, grandes comidas, poniendo por pretexto la salvaci\u00f3n de las almas, diciendo que Yo os la hab\u00eda dicho. Mi manera de obrar, hija del alma, no consiste en salvar las almas de esta forma. Yo predico la humildad, no la ostentaci\u00f3n. Yo quiero la caridad con el pr\u00f3jimo, pero sin beneficio de uno mismo, desprendidos. Aquello ya pas\u00f3; todo pasa en la vida. Os queda por pasar la segunda parte. \u00c9sta es m\u00e1s dolorosa, porque como me hab\u00e9is puesto por pretexto de vuestros caprichos, y despu\u00e9s, a mis espaldas hab\u00e9is dicho que lo del Monte Ezquioga era bueno para sacar dinero, no tendr\u00e9is mi mano amiga que os alivie en vuestra pena. Pod\u00e9is ir a pedir consejo al que os ha llevado a grandes hoteles; al que, para que estuvieseis contentos, os ha comprado tantas cosas\u2026, pedidle consejo; ya tendr\u00e9is alguno, pero dinero no tiene. Ya no pondr\u00e9is por pretexto a la Madre en vuestros viajes. El dinero se acab\u00f3. Si Yo os mandase ahora que fueseis a Zaragoza, dir\u00edais que no es cierto.<\/span><\/h3>

                Si a vosotros os toca estar con ellos y os dicen que los m\u00edos no tienen visi\u00f3n, preguntadles: \u00bfC\u00f3mo es que vosotros ten\u00e9is visi\u00f3n y veis a la misma persona, y sin embargo, aun dentro de vosotros os contradec\u00eds los unos a los otros? \u00bfPor qu\u00e9 reina esa desuni\u00f3n, si todos ten\u00e9is visi\u00f3n? Cuando vais a hacer una cosa, el que os conduce a nadie escucha m\u00e1s que a una de vosotras porque sabe que ninguna de vosotras tiene visi\u00f3n, y como ha de hacer el papel, si pregunta a las dem\u00e1s entra la contradicci\u00f3n. Lo que aquella dice es lo que hace. \u00a1Oh, si tuviera tan cierto que iban a entrar en Mi gloria como que los hijos m\u00edos, los que ellos no pueden ver, tienen visi\u00f3n de su Madre, ya pod\u00edan morirse hoy mismo. Si a los m\u00edos, uno a uno, en diversas partes del mundo, se les pregunta, todos contestar\u00e1n igual. Todos me ven a M\u00ed; hablo a todos a un tiempo, digo la misma cosa para todos; no pueden contradecirse, pues todos oyen igual. Mientras que ellos son muchos demonios, hija; todos no tienen lo mismo; no llevan igual vestido; all\u00ed entra la confusi\u00f3n; todos les hablan de distinto modo; no pueden decir igual.<\/span><\/h3>

                No hag\u00e1is caso; seguid lo mismo y tened paciencia. Poco tiempo queda por medio, y ya se ver\u00e1 qui\u00e9n se ha equivocado; ya se ver\u00e1 qui\u00e9n tiene raz\u00f3n: si ellos en tener visi\u00f3n o Yo en haberme aparecido.<\/span><\/h3>

                Trabajad, no desmay\u00e9is; la obra toca a su fin; guardad silencio; alg\u00fan d\u00eda sabr\u00e1n que he bajado. Mi Hijo Amado tendr\u00e1 quien le d\u00e9 mis parabienes; que los rechace, pues ser\u00e1 de las personas que hoy m\u00e1s rabia le tienen. Que no haga caso de todas las honras y glorias, que quieran elevarle; que no haga caso, pues las glorias pasan pronto. Poned la vista siempre en M\u00ed. Todo tocar\u00e1 a su t\u00e9rmino; y, mientras en esto os ocup\u00e1is, recibid la bendici\u00f3n de vuestra Madre. Mar\u00eda.\u201d<\/em><\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                N\u00fam. 15.- Instrucci\u00f3n dada por la Sant\u00edsima Virgen sobre el modo que hemos de luchar durante estas persecuciones y t\u00e9rmino de los falsos videntes, con otros pormenores muy dignos de atenci\u00f3n<\/span><\/h3>

                \u00a0\u201cA mayor revoluci\u00f3n m\u00e1s calma despu\u00e9s. Cuantos m\u00e1s elementos formen esa revoluci\u00f3n mayor ser\u00e1 esa calma luego. En la que ahora atraves\u00e1is, hijos del alma, cuando mi Hijo confundi\u00f3 las lenguas, al querer edificar la torre de Babel, no fue tan grande la confusi\u00f3n como en los tiempos presentes. Advirtiendo que el delito y da\u00f1o cometido es m\u00e1s grande hoy que entonces. Entonces se trataba de la confusi\u00f3n por un bien material. Hoy se trata de la confusi\u00f3n por un bien sobrenatural. Tanto m\u00e1s debe el hombre poner sus fuerzas cuanto m\u00e1s agradable sea el objeto que ejecuta. Si entonces fue una simple torre, hoy es la omnipotencia de todo un Dios y el amor de una Madre siempre Virgen. Entre lo humano y lo divino existe una diferencia de muchos millones. Entre la torre y Nosotros la diferencia es inconmensurable. Si entonces, Dios permiti\u00f3 la confusi\u00f3n de los hombres, para el bien de ellos, hoy har\u00e1 la confusi\u00f3n para el bien de mis hijos, para el honor de la Madre y para salvaci\u00f3n de las almas que deseen salvarse. Yo pido; Jes\u00fas espera; y el Padre celestial aguarda la hora en que ha de dar el golpe definitivo. Pobres hijos del alma: \u00bfLuchar\u00e9is a favor de la hora de vuestra Madre? \u2014 (Lucharemos).<\/em><\/span><\/h3>

                Luchad, luchad sin cortapisas. No teng\u00e1is miedo en decir que es vuestra Madre la\u00a0\u00a0 que baja; pero a\u00f1adid tambi\u00e9n que no baja para todos. S\u00f3lo baja para aquellos que obedecen\u00a0 a aqu\u00e9l a quien\u00a0 Yo he puesto en la tierra. Decid que estabais muy solos; que\u00a0 os hizo falta uno que os ense\u00f1ase a andar por el camino emprendido. \u00c9ste fue mi hijo Amado. Le coloqu\u00e9 \u00a1Qu\u00e9 pocos le han hecho caso! Que no le importe.\u00a0 Despu\u00e9s\u00a0 de\u00a0 mucho tormento viene m\u00e1s gloria y contento. No hagas caso. Todo pasa. Deja que te digan, deja. Deja que te digan cosas. Que despu\u00e9s que esto termine, porque tiene que terminar, tendr\u00e1s quien te sepa defender. El d\u00eda est\u00e1 cercano. Poco falta, no desmayes. Pasa t\u00fa por ese mundo sin saber que existe nadie m\u00e1s que tu Madre, que quiere que trabajes por su honra. Despu\u00e9s, Yo sabr\u00e9 pagarte el\u00a0 trabajo que hayas hecho. Alienta a\u00a0 los m\u00edos, vosotros, vosotros, hijos del alma: No hag\u00e1is caso a los otros, que se han vuelto rebeldes a los consejos de su Madre y no los quieren aceptar. \u00a1Oh, cu\u00e1nto van a llorar!\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Di al Padre que ya empec\u00e9 mi tarea; que est\u00e1n dados algunos puntos; que la labor est\u00e1 muy bien preparada. Que quiero que me ayuden a recoger los hilos de esta labor. Yo me encargo del trabajo. \u00a1Oh, no os desanim\u00e9is! \u2014Tuyos somos hasta morir<\/em>\u2014.<\/em><\/span><\/h3>

                \u00a0Con el obispo hay tres can\u00f3nigos: dos de V. y el tercero de fuera; aquellos dos traidores. Los cuatro van a acabar mal.<\/span><\/h3>

                Todos los videntes falsos van a sufrir un castigo grande. Quiero probar hasta d\u00f3nde llegan. Diles, hija, que seg\u00fan sean las causas, as\u00ed habla vuestra Madre. Porque, as\u00ed como una madre en la tierra a todos los hijos quiere igual, y sin embargo, a aqu\u00e9l que le ha ofendido le castiga, le reprende; lo mismo Yo soy Madre de todos vosotros. Pero aqu\u00e9l que me ha ofendido, aqu\u00e9l que me ha vendido \u00a1oh! Le tengo que castigar. Entre ellos, hija m\u00eda, reina un gran desconcierto. Todos son falsos. La se\u00f1al que te doy para que t\u00fa les conozcas es: Aquellos que hayan pasado por la prueba de fuego y que hayan obedecido a aqu\u00e9l a quien Yo mand\u00e9, esos son los verdaderos. Los dem\u00e1s no me ven a M\u00ed. Esos andan muy cogidos del demonio. Triste es decirlo, hija, pero es la realidad. Todav\u00eda es m\u00e1s triste pensar que, despu\u00e9s de haberles dado Yo misma mis gracias y de haberlos escogido, me han desobedecido. No han hecho caso de M\u00ed, y andan a merced de todos los que quieran llevarlos. Si no se arrepienten antes de que venga el castigo, ser\u00e1n piedra de esc\u00e1ndalo al mundo. Fueron m\u00edos y ya no son.<\/span><\/h3>

                Han deshecho la justicia y el poder de mi Hijo. No han querido atender los consejos que Yo les he dado, y por eso tendr\u00e1n que sufrir. Por mi parte les perdono, pero Jes\u00fas no transige con las faltas cometidas contra su Madre, y Jes\u00fas no ha empezado todav\u00eda a castigar. Cre\u00edan que su poder hab\u00eda terminado.<\/span><\/h3>

                Mira si el castigo est\u00e1 cerca, hija, que si ellos se diesen cuenta, se preparar\u00edan este mismo d\u00eda. Muchos, del hambre que mi Hijo va a mandar, no la podr\u00e1n pasar, porque habr\u00e1n fallecido.<\/span><\/h3>

                El obispo ha arrojado un jarro de agua a toda la luz que hab\u00eda. La luz est\u00e1 apagada.<\/span><\/h3>

                \u2014Esta instrucci\u00f3n la dio Nuestra Se\u00f1ora a ra\u00edz de la publicaci\u00f3n de la circular de Septiembre de 1933\u2014. Cuando esa luz empiece a brotar de nuevo, Jes\u00fas no va a dar lugar a que muchos se alumbren con ella; pues, teni\u00e9ndola encendida, no quisieron aprovecharse de ella. Todos los delitos que ha cometido en esta temporada el primero que fue a apagar esa\u00a0\u00a0 luz, los va a pagar el obispo. T\u00fa no lo sabes todo, hija, hay muchas cosas tan grandes, tan terribles que no se pueden contar. No pod\u00e9is verlas hoy d\u00eda. Las ver\u00e9is cuando Yo os encienda la luz de mi lamparilla.<\/span><\/h3>

                Habr\u00e1 mucha lluvia de fuego; habr\u00e1 cat\u00e1strofes grandes, en que los hombres por no entenderse, se matar\u00e1n unos a otros. Y esto empezar\u00e1 por las cabezas. Todas aquellas personas que, por culpa de sus jefes han salido de sus filas, tendr\u00e1n calabozo perpetuo.<\/span><\/h3>

                \u00a0Han sido como los soldados de Efra\u00edn que, dispuestos y armados para la lucha, al\u00a0 entrar en \u00e9sta todos abandonaron sus puestos. Lo cual tiene mucha relaci\u00f3n con lo que pasa en el Monte Ezquioga, con la diferencia de que aqu\u00ed van a luchar por una causa espiritual,\u00a0 por la salvaci\u00f3n de sus almas y la gloria de su Madre. Estaban muy bien alineados, al principio, cuando a\u00fan no hab\u00eda nada. Pero cuando han visto que la lucha es cierta, que hab\u00eda que pelear y que si\u00a0 quer\u00edan triunfar\u00a0 a muchos les costar\u00eda la vida, entonces todos\u00a0 se me han retirado. \u00bfD\u00f3nde est\u00e1n, hija del alma, d\u00f3nde est\u00e1n aquellos ministros de mi Hijo que, con los brazos en cruz y rosario tras rosario, no abandonaban mi Monte hasta muy entrada la noche? \u00bfQu\u00e9 se han hecho? \u00a1Oh! Dicen que es perder el tiempo en una cosa como \u00e9sta.<\/span><\/h3>

                \u00a1Hija!: El mundo est\u00e1 horrible. \u00bfQu\u00e9 se han hecho tantos miles de hijos como en la falda del Monte rezaban con gran respeto? \u00bfQu\u00e9 se han hecho? \u00a1Ah! Los ver\u00e1s diseminados. Tienen que ir a las playas, a caf\u00e9s, a reuniones, a circos y a fiestas. Tienen que alternar porque el mundo as\u00ed lo exige; y mientras tanto, me tienen abandonada a M\u00ed, su Madre. Yo espero el d\u00eda de fiesta, porque es el m\u00e1s acertado para reunirse la familia en torno de la Madre. Pero para M\u00ed, para esta Madre que los ama, es el d\u00eda de m\u00e1s angustia; es el d\u00eda que Yo no quisiera que llegara. Tienen que cumplir con el mundo.<\/span><\/h3>

                \u00a1Oh!, el mundo no les va a dar el pago. El\u00a0 mundo se ha de acabar. Todo pasa en\u00a0 esta\u00a0 vida.<\/span><\/h3>

                Di al Padre que no atienda los ruegos que le van a hacer, porque le quieren coger\u00a0 para hacer una trampa; que no se f\u00ede. Es persona que merece cr\u00e9dito de los hombres en\u00a0 la tierra; pero Yo har\u00e9 que se tuerza todo, y as\u00ed no podr\u00e1n llegar en modo alguno hasta donde ellos quieren; que no se f\u00ede y no tenga miedo.<\/span><\/h3>

                Que la labor, que \u00e9l sabe, est\u00e1 en unas manos. Todo est\u00e1 preparado: Yo mandar\u00e9 recado con alguien, que va a venir, que tenga un poco de calma, que todo lo arreglar\u00e9. Hay dos personas en Legazpia que pretenden hacer una cosa con \u00e9l. Van a salirle al camino, pues dicen que est\u00e1n fastidiados porque le ven venir tantas veces. Les intriga lo que viene a hacer aqu\u00ed. Cuando el cabecilla de la expedici\u00f3n tenga preparadas las personas, tendremos una expedici\u00f3n. \u2014Afirmamos que los hechos posteriores respondieron exactamente a como la Sant\u00edsima Virgen los anunci\u00f3 en esta Instrucci\u00f3n, d\u00edas antes\u2014.<\/span><\/h3>

                Unos, que fueron mis devotos, est\u00e1n hoy muy satisfechos porque el obispo ha demostrado que no hay nada en el Monte; y que por tanto, no hay ning\u00fan vidente aut\u00e9ntico. Si en Ezquioga no estoy, y no hay videntes, tampoco la de ellos lo es, porque si Yo no existo en el Monte, tampoco existo para que cierta sierva m\u00eda hable a ella. Que por tanto, ella no ver\u00e1 a mi sierva, porque \u00e9sta, por si misma, no puede hablar nada.<\/span><\/h3>

                Yo soy para todos la Virgen, y puedo presentarme a cada uno de distinto modo. Con aquella vidente me valgo de mi sierva. Con vosotros lo hago personalmente. Es mayor la gracia que vosotros recib\u00eds que aquella vidente. \u00bfPor qu\u00e9 \u00e9sta se ensoberbece? \u00bfPor qu\u00e9 os echa a rodar por tierra? La alegr\u00eda de C. va a terminar. Yo les voy a inutilizar el instrumento. Y cuando el instrumento desaparezca, y quieran recurrir a M\u00ed, como no es verdad que bajo, no les voy a escuchar. \u00bfA ver qu\u00e9 hacen entonces? \u00a1Tanto como est\u00e1n hablando de vosotros, hijos m\u00edos! Cuando ellos no tengan nada, y lo de vosotros haya salido, a ver entonces qu\u00e9 dicen. Hay personas particulares que son instrumentos de los cuales se ha valido el demonio para haceros da\u00f1o. \u00a1Qu\u00e9 amarguras van a tener\u00a0 que\u00a0 pasar!<\/span><\/h3>

                Vosotros, los m\u00edos, recordad que el d\u00eda est\u00e1 cerca. Vuestra honra saldr\u00e1 a flote, Jes\u00fas se despedir\u00e1 de vosotros, como en la \u00faltima Cena, y en esa despedida, la Madre sabr\u00e1 pedir la fuerza que necesit\u00e9is para el viaje que vay\u00e1is a emprender. \u00c1nimo, fuerza, oraci\u00f3n, obediencia, humildad, penitencia, sacrificio. Con estas armas entrar\u00e9is en la pelea. Pulidlas, limpiadlas, preparadlas; y mientras esto hac\u00e9is, Yo rogar\u00e9 por vosotros al Padre y al Hijo. La bendici\u00f3n que os da en uni\u00f3n de los tres, vuestra Madre. Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>

                (N\u00fam. 16: No existe en el libro)<\/em><\/span><\/h3>

                \u00a0<\/em><\/span><\/h3>

                N\u00fam. 17.- Instrucci\u00f3n dada por la Sant\u00edsima Virgen sobre exvidentes y falsos simpatizantes de Ezquioga<\/span><\/h3>

                \u00a0<\/h3>
                • (Vidente) \u00a1Qu\u00e9 miedo! Est\u00e1s disgustada\u2026 No quieres que te la nombre \u2014una exvidente\u2014 a causa de su defecci\u00f3n. Est\u00e1 contento el demonio\u2026 \u00a1Qu\u00e9 horror!<\/span><\/h3><\/li>
                • (Virgen) Dejo a elecci\u00f3n del Padre el dejar o no subsistentes en el Libro las declaraciones de<\/span><\/h3><\/li>
                • De F. \u2014Un exvidente\u2014 nada,<\/span><\/h3><\/li>
                • (Vidente) \u00bfY si el diablo lo coge?<\/span><\/h3><\/li>
                • (Virgen) \u00a1M\u00e1s cogido del demonio de lo que est\u00e1! Qu\u00e9 herida m\u00e1s grande tiene.<\/span><\/h3><\/li>
                • (Vidente) Son gusanitos peque\u00f1os\u2026<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                  \u00a0<\/h3>
                  • (Virgen) Eso es que el coraz\u00f3n de \u00e9l est\u00e1 encogido. No hay sangre, no hay vida en \u00e9l. No quiero que el Padre haga nada. No se desesperar\u00e1<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                    Es necesario castigar para que los dem\u00e1s se vean en el ejemplo castigado. No hay que lisonjear a los que algo tienen, porque lo que tienen es recibido. Ensalzaron a F., lo mimaron, cifraron toda su dicha en cosa terrena, sin pensar que lo que \u00e9l ten\u00eda no era suyo; que se lo daban, y deb\u00eda haber correspondido a esa gracia, mas ellos han sido su obst\u00e1culo. No han dejado que las gracias recibidas se desarrollasen para su bien. Lo han estropeado, y ahora, a \u00e9l, \u00bfqu\u00e9 le queda? Como lo que ten\u00eda no era suyo, se lo han quitado; y ahora, han comprendido que es un hombre como los dem\u00e1s, que si algo ten\u00eda ha desaparecido. El remordimiento del mal obrar est\u00e1 constante en \u00e9l; quiere remediar lo que pod\u00eda no haber sucedido, y se encuentra desprestigiado de aquellos que m\u00e1s le hab\u00edan ensalzado. Huid de las pompas. En vosotros, hijos m\u00edos, quiero la sencillez. Dejad que mi trabajo se extienda y ramifique. Ya llegar\u00e1 la hora en la cual podr\u00e1n ver y admirar las Obras m\u00edas hechas por vuestra mediaci\u00f3n. Mientras tanto no hag\u00e1is caso de nada ni de nadie. Seguid trabajando con las gracias que os doy. No coj\u00e1is operarios que en menos tiempo quieran hacer m\u00e1s, porque la Obra se concluir\u00e1. El Padre, nada; \u00e9se es mi gusto; tiene \u00e9l tambi\u00e9n que hacerles ver que lo que de \u00e9l han dicho, todo lo mal que han hablado, tiene su fin; y en el momento supremo en el que m\u00e1s falta les hace, es mi deseo que no tome parte en nada. Aquellos que eran salomones para \u00e9l, arreglen las cuestiones que, seg\u00fan ellos, nada ten\u00edan de sobrenatural.<\/span><\/h3>

                    De la otra nada. Tendr\u00e1s en ello una enemiga ac\u00e9rrima; tendr\u00e1s que sufrir mucho; m\u00e1s nada imites. Siquiera a lo menos, que me ayude alguien con quien pueda compartir mi tristeza. Fue la preferida; la supe distinguir; mas ella no ha sabido agradecer. Ha tenido avisos claros y patentes de la Madre que no quer\u00eda abandonarla: no los ha recibido. Y ahora se extra\u00f1a de c\u00f3mo es posible, despu\u00e9s de haber tenido tantas gracias, que Yo no haya dicho eso de ella. Pues, as\u00ed es. Para M\u00ed es recuerdo de que alguien ha dicho lo m\u00edo<\/em>; lo dem\u00e1s todo pas\u00f3; ya no queda rastro de nada; \u00e9sta es la vida: luchas, zozobras, que siempre paran en desenga\u00f1os.<\/span><\/h3>

                    All\u00ed, en mi Monte, reina grande envidia. Todos quieren ser m\u00e1s que los otros. En vosotros, los m\u00edos, la humildad sea vuestro distintivo; no os preocup\u00e9is por los dem\u00e1s; cada cual mire a s\u00ed mismo; y si observa todos sus deseos, al pie de la letra, \u00e9se ser\u00e1 el m\u00e1s perfecto.<\/span><\/h3>

                    Obediencia, humildad, silencio. Hay personas que no van m\u00e1s que por molestar, por ser vistas, porque no se hable mal de ellas, por figurar; sus pensamientos no est\u00e1n en aquello que realizan, y \u00e9sas son las que m\u00e1s da\u00f1o os hacen. Procurad hablar poco con ellas. Huid de todas aquellas que os molesten y molesten mi Obra: \u2014Aqu\u00ed se\u00f1ala, uno a uno, los principales enemigos de las Apariciones que frecuentan el Monte santo y cuyos nombres quedan archivados\u2014. Temblad de todos, no os fi\u00e9is. Hay muchos\u00a0 m\u00e1s,\u00a0 ya te los ir\u00e9 diciendo:\u00a0 hay 14 sacerdotes; 30 se\u00f1oras que frecuentan Ezquioga, cerca de 40 hombres y 7 peque\u00f1os. Tened cuidado, no os fi\u00e9is.<\/span><\/h3>

                    Que es cierto que el demonio puede hablar otras lenguas; mas \u00e9l no las habla. Obra en el alma como instrumento, pero \u00e9l no realiza la funci\u00f3n. Mientras que vosotros, los m\u00edos, ten\u00e9is la contrase\u00f1a de que soy Yo. Una vez dada la lengua que Yo hable, la pod\u00e9is hablar. \u00c9sa es m\u00eda, la pod\u00e9is hablar; no es de \u00e9l. La que Yo hablo cuando te quiero hacer saber algo, que a los dem\u00e1s no les interesa, di al Padre que es m\u00eda. Que es la lengua primitiva m\u00eda, que \u00e9l ya sabe cu\u00e1l es (la aramea), pero no media el demonio. No tengas miedo, la hablo Yo; t\u00fa ves que Yo soy la Virgen, no soy \u00e9l (el diablo).<\/span><\/h3>

                    Cuando est\u00e1is conmigo, vuestra alma disfruta de paz y sosiego. Los que est\u00e1n con \u00e9l, tienen agitaci\u00f3n en su alma. Los efectos que produzco Yo en el alma no\u00a0 puede\u00a0 producirlos \u00e9l; son completamente opuestos. De aqu\u00ed que el demonio, cuando obra en alguno, haci\u00e9ndole hablar otro idioma, no lo hablar\u00e1 tranquila y\u00a0 reposadamente,\u00a0 sino que como est\u00e1 col \u00e9l, y su esp\u00edritu est\u00e1 agitado, agitada tambi\u00e9n ser\u00e1\u00a0 la\u00a0 forma\u00a0 de\u00a0 decirlo. Estate tranquila, que hay muchas cosas que \u00e9l puede hacer, mas son, con permisi\u00f3n divina. De otra forma no las hace. Y aun con permiso divino no llega m\u00e1s que hasta donde le dejan. Estad tranquilos los m\u00edos, que si sab\u00e9is responder a mis llamadas,\u00a0\u00a0\u00a0 si sab\u00e9is atender\u00a0 mis s\u00faplicas, Yo obrar\u00e9 en\u00a0 vosotros, y rara vez permitir\u00e9 al demonio\u00a0 que est\u00e9 con vosotros. \u00c9ste ser\u00e1 tambi\u00e9n el distintivo que separe a los m\u00edos\u00a0 de\u00a0 los dem\u00e1s, es a saber: en que ellos rara vez tendr\u00e1n mi gracia.<\/span><\/h3>

                    De aqu\u00ed al 8 de septiembre di al Padre que no suceder\u00e1 nada \u2014Se atribuye a cierto vidente que el 15 de agosto, en el lugar de las Apariciones y en visi\u00f3n, dijo que de aquella fecha al 8 de septiembre acontecer\u00edan graves sucesos atmosf\u00e9ricos y terr\u00e1queos. Pero el mismo vidente, en carta suya del 21 de agosto nos declara hagamos patente que la Sant\u00edsima Virgen le\u00a0 ha revelado igual que se apunta en esta Instrucci\u00f3n. Esto es: que, en ese tiempo, de Ella, nada pasar\u00e1.\u2014 que si algo sucede no es m\u00edo. Cuando suceda algo ser\u00e1 sin aviso, porque mi Hijo Jes\u00fas no tiene que ni debe dar satisfacci\u00f3n a nadie de lo que piensa hacer. Hace mucho tiempo que os viene encargando de que os prepar\u00e9is. Al deciros esto es para que os prepar\u00e9is, pero \u00e9l no tiene por que fijar fecha. Pasar\u00e1 como el otro d\u00eda. No falta mucho; esperad y ver\u00e9is con vuestros ojos lo que vuestra Madre os dice. Si algo\u00a0 sucede,\u00a0 os\u00a0 repito, no es m\u00edo. \u2014Interrumpimos diciendo que si sucediera algo dir\u00edan que es por lo que atribuyen al apuntado vidente, con lo que se dar\u00eda p\u00e1bulo a la mentira y al descr\u00e9dito de Ezquioga; y acto seguido, a\u00f1adi\u00f3 Nuestra Se\u00f1ora\u2014: Di al Padre que si dicen eso que \u00e9l dice, Yo sabr\u00e9 decir otra cosa que nadie sabe todav\u00eda, y entonces ver\u00e1n como no puede ser.<\/span><\/h3>

                    Di tambi\u00e9n al Padre que, respecto del se\u00f1or que vino el otro d\u00eda, es mi gusto que est\u00e9 aqu\u00ed hasta que \u00e9l regrese; y observe y vigile, sin decir nada a nadie, pues est\u00e1 para lo que est\u00e1, y que el Padre est\u00e1 fuera. Es a fin de que el Padre, mientras est\u00e1 fuera, tenga una persona que le lleve cuenta de todo lo que sucede; y a su regreso, sepa darle cuenta de lo que ha sucedido. As\u00ed, el Padre no tendr\u00e1 necesidad de preguntar nada a nadie, sino que por sus datos se podr\u00e1 guiar. Quiero y es mi gusto, que \u00e9l sea quien ayude al Padre, en esta temporada, en la Obra m\u00eda. Mar\u00eda<\/em>. \u201c<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 18.- Instrucci\u00f3n del Sagrado Coraz\u00f3n sobre el fin para que Nuestro Se\u00f1or vino al mundo, y el valor de la Madre de Dios, con explicaci\u00f3n por la Sant\u00edsima Virgen<\/span><\/h3>

                    \u00a0\u201cHija, estoy solo, y desde el silencio de mi Sagrario te busco para hablar contigo. Quiero explicarte por qu\u00e9 vine Yo al mundo. Cu\u00e1l es mi Madre, para que sep\u00e1is amarla cual merece.<\/span><\/h3>

                    Los hombres no piensan para qu\u00e9 han sido creados, hija. Est\u00e1n embebidos en diversiones y juergas, sin pensar que hoy, el mundo se haya peor que nunca. El diluvio no bast\u00f3 para la impureza que en \u00e9l hab\u00eda. Con el fuego no pude acrisolar los corazones de los hombres. Todo eran basuras, y Yo no pod\u00eda pasar por ellas sin mancharme. Mas, como el amor que profeso a mis hijos es grande, quise venir a ellos y busqu\u00e9 una Mujer que me ayudase a bajar.<\/span><\/h3>

                    Miradla, y ver\u00e9is levantarse detr\u00e1s del horizonte a una Mujer que tiene en sus pies la luna. En su cintura van ce\u00f1idos los rayos del sol con el azul del cielo. En su cabeza lleva corona de doce estrellas. Miradla, es bella por sus facciones, es bella por sus virtudes, es bella en su tipo, es m\u00e1s bella en su amor hacia los hombres. Esa Mujer hab\u00eda de ser la anunciada por el \u00e1ngel y dar al mundo el fruto de la Redenci\u00f3n. La escog\u00ed pura, sin mancha alguna. Y en Ella se escondi\u00f3 la flor de la virginidad. \u00danica flor que se desarrolla en el jard\u00edn hermoso de mi Iglesia. La flor de la virginidad, los colores delicados de sus p\u00e9talos recrean mi vista. El olor que exhala sirve para hacer bienaventurados a los \u00e1ngeles con los cuales me recreo.<\/span><\/h3>

                    \u00a0Yo soy la virginidad, la flor de los campos y el lirio de los valles. Todo lo que me rodea es virginal. En el cielo, las almas gozan de la virginidad suma. Mi Madre es la Mujer Virgen por excelencia, que os dar\u00e1 fuerza para poder adquirir en grado sumo la virtud de la virginidad. \u00bfA qui\u00e9n se la vais a pedir sino a Aquella que es la Madre virginal por esencia?<\/span><\/h3>

                    Amad a mi Madre. Sed vosotros, hijos de mi alma, fieles espejos y retratos de esa Madre. Su ayuda no os faltar\u00e1. Su deseo es socorreros. Su amor es tan grande que quiere dulcificaros vuestras penas. Pero, hijos, amadla, defendedla, queredla, respetadla. Es Madre de la humanidad. Sus hijos deben de aconsejarse de Ella. \u00a1Cu\u00e1n pocos son! Baja a ese mundo a anunciar lo que el Padre va a hacer. O\u00eddla y sabr\u00e9is lo que dice:<\/span><\/h3>

                    Hijos m\u00edos: El Padre celestial agita la espada de su justicia divina. Las ingratitudes de los hombres van llenando, hasta los bordes, el c\u00e1liz del Padre adorado. Preparaos. Con pasos de gigante el d\u00eda terrible y espantoso se acerca. Temblad y no temblad. Temblad, si no hab\u00e9is puesto de vuestra parte todo lo necesario para defenderme a M\u00ed. No temblad, si hab\u00e9is hecho lo contrario, porque en el d\u00eda terrible, la Madre sabr\u00e1 agradecer los favores que hacen los hijos que la aman. Sabr\u00e1 colocar en primer lugar a los hijos que supieron defenderla.<\/span><\/h3>

                    (\u00bfQu\u00e9 veo, Madrecita? Si miro hacia arriba te veo a gran altura. Si miro hacia abajo \u00bfqu\u00e9 es lo que veo? Veo mucha gente, mucha. Van y vienen muy de prisa; dan desde aqu\u00ed la sensaci\u00f3n de que est\u00e1n locos. No entiendo yo lo que es eso.)<\/span><\/h3>

                    Pues es muy sencillo, hija. \u00c9se es el confuso remolino de seres vivos enfrascados en sus pasiones y vicios. Todos simulan estar alegres. A la vista unos de otros todos parecen contentos. Sin embargo, unos a otros se difaman; unos a otros se descubren; unos\u00a0 a\u00a0 otros no se entienden.<\/span><\/h3>

                    Al crear mi Hijo al mundo cre\u00f3 un jard\u00edn bello, muy bello. En \u00e9l puso toda clase de plantas para que all\u00ed diesen sus frutos. El jardinero regaba y las flores crec\u00edan. La naturaleza toda se asociaba al encanto de Aqu\u00e9l que los cre\u00f3. Pero hubo un d\u00eda triste, hubo un d\u00eda negro en el cual las dos primeras plantas fueron emponzo\u00f1adas por la ciza\u00f1a del enemigo. Y como sale el tiro del ca\u00f1\u00f3n, de esa misma forma, como reguero de p\u00f3lvora, se contaminaron las flores del jard\u00edn. Desde entonces las flores no crecen ya fuertes y robustas. Tienen mucha debilidad. Tienen orgullo y soberbia. Tienen muy poca humildad.<\/span><\/h3>

                    \u00a0\u00a1Oh, hija!: La humanidad est\u00e1 toda perdida. Son muy pocas las flores que se conservan bien. \u00bfA qu\u00e9 es debido, pues? Yo te lo explicar\u00e9. Yo vi el jard\u00edn enteramente marchito; recog\u00ed flores que introduje en el invernadero, y \u00e9stas son las que est\u00e1n bien. Supieron corresponder a mis deseos y hacer que todo el trabajo m\u00edo sirviese para multiplicar las flores que estaban dentro. El resto est\u00e1 marchito, no se pueden levantar. No saben que hay que dar la mano a Aqu\u00e9l que est\u00e1 muy alto. No piensan que hay que mirar a la estrella que es potente.<\/span><\/h3>

                    Vosotros, hijos del alma, mirad fijos a esta Estrella; es reluciente y muy bella y de Ella sois todos hijos.<\/span><\/h3>

                    Es la Madre idolatrada,<\/span><\/h3>

                    que de amor siempre encendida, supo consagrar su vida,<\/span><\/h3>

                    y estar siempre amargada.<\/span><\/h3>

                    Es la Madre que derrama l\u00e1grimas de gran dolor;\u00a0 es la Madre, que de amor<\/span><\/h3>

                    muere, por ser siempre amada.<\/span><\/h3>

                    \u2026\u2026\u2026\u2026..<\/span><\/h3>

                    Oh, Mar\u00eda Inmaculada, Reina, Se\u00f1ora, Esperanza del alma que en Ti conf\u00eda:<\/span><\/h3>

                    ruega de noche y de d\u00eda por\u00a0 esta Naci\u00f3n amada.<\/span><\/h3>

                    No la dejes marchitarse, y ruega mucho por ella;<\/span><\/h3>

                    Madre, s\u00e9 su dulce Estrella, en que pueda ella mirarse.<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 19.- Mensaje del Divino Coraz\u00f3n respecto al modo de tomar las falsas acusaciones<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cPara ense\u00f1anza de mis fieles quise ser perseguido por los poderes p\u00fablicos. Ante An\u00e1s y Caif\u00e1s se me hicieron preguntas sobre mis disc\u00edpulos y mi doctrina. Como a M\u00ed no<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    me acusase la conciencia de nada malo, con caridad suma call\u00e9 de ellos; y de mi doctrina dije: Que p\u00fablicamente hab\u00eda ense\u00f1ado al mundo. Que lo hab\u00eda hecho en sinagogas y templos donde se reun\u00edan los jud\u00edos, y que a escondidas no hab\u00eda ense\u00f1ado. Y estas verdades deb\u00edan de servir de pr\u00e1ctica a los m\u00edos. Mi Doctrina es la verdad suma, y no necesita de la noche para apoderarse de las inteligencias, ni necesita mendigar la fuerza para conseguir el asentimiento de los hombres. El que me oye no anda en tinieblas, porque Yo soy la Luz del mundo.<\/span><\/h3>

                    La sencillez que obraba en la verdad fue causa de que mis respuestas cayesen con desd\u00e9n en los sacerdotes; y un soldado se atrevi\u00f3 a cruzar Mi rostro con una bofetada. Pude hablar, pero \u00e9sa no era la manera pr\u00e1ctica de defender la Verdad. La Verdad se defiende sola, porque sus claridades disipan las nubes de las acusaciones humanas.<\/span><\/h3>

                    Llegar\u00e1 d\u00eda en que ser\u00e9is acusados por vuestros enemigos, por la sola raz\u00f3n de seguir mi Doctrina y de no pertenecer a los bandos contrarios. Pero no tem\u00e1is. Cada vez que se\u00e1is acusados, poned los ojos en M\u00ed, y ver\u00e9is lo loco que est\u00e1 el mundo en la manera de entender las cosas, Yo, Sabidur\u00eda infinita, me toman por loco, por alterador del mundo, por profanador de la ley, por pecador y seguidor de pecadores. Todas estas cosas decretaron mi sentencia, y por ellas dijeron que Yo hab\u00eda blasfemado y que era reo de muerte. Pero, si ante las palabras de los hombres call\u00e9, no deb\u00ed callarme ante la pregunta que se me hizo con la autoridad de Dios, mi Padre: En el nombre de Dios, dinos si t\u00fa eres el Cristo. A esta pregunta contest\u00e9 serena y claramente que s\u00ed; que Yo era. Yo os aseguro que llegar\u00e1 un d\u00eda en que ver\u00e9is al Hijo del Hombre sentado sobre las nubes del cielo venir a tomar posesi\u00f3n a la diestra del poder de Dios.<\/span><\/h3>

                    \u00c9sta debe ser la confesi\u00f3n que hagan los m\u00edos, cuando llegue la hora de confesar mi fe. La mejor virtud de un cristiano es no hacer caso a los juicios de los hombres. No hay mayor maldad que la hipocres\u00eda. Ella envenena y seca los sentimientos del coraz\u00f3n. Para el hip\u00f3crita no hay virtud. El hip\u00f3crita es mentiroso. Tiene que obrar as\u00ed, puesto que no le conviene que su adversario salga a flote.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Cu\u00e1ntas reuniones de bandidos y criminales se juntan para dar el golpe definitivo a mi Iglesia! Mas, no prevalecer\u00e1n contra Ella. Yo os he prometido\u00a0 estar\u00a0 con\u00a0 vosotros hasta la consumaci\u00f3n de los siglos. Haced caso a mis consejos; y \u00a1ojal\u00e1\u00a0 que\u00a0 estas \u00a0palabras m\u00edas queden bien grabadas en vuestras almas, para que de esa manera sean b\u00e1lsamo que cicatrice las horas de angustia en los d\u00edas de prueba!<\/span><\/h3>

                    Os da la bendici\u00f3n triple vuestro Jes\u00fas\u201d.<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 20.- Explicaci\u00f3n de la Sant\u00edsima Virgen sobre interpretaci\u00f3n que algunos dan al cargo conferido al autor<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    Despu\u00e9s de contestarme cabalmente la Sant\u00edsima Virgen a cinco preguntas mentales, dijo: \u201cCierta persona piensa pedirme consejo, mas no lo he de recibir. Para dar Yo los consejos no hubiese puesto al Padre. Si algo me llev\u00f3 a obrar as\u00ed, fue el que vosotros, los m\u00edos, no os hab\u00edan de creer. Le puse a \u00e9l para que a \u00e9l se le hiciera caso, para que el pudiese contestar a muchas cosas, que a vosotros, los m\u00edos, os hubiese sido dif\u00edcil. Como vosotros no sois m\u00e1s que instrumentos m\u00edos, hay muchas cosas con respecto a las cuales no hac\u00e9is sino repetirlas, pero que vuestras inteligencias no son capaces de concebirlas y vosotros de expresarlas. Por eso le puse a \u00e9l, para que\u00a0 estudiara\u00a0 los casos\u00a0 e hiciese lo que m\u00e1s acertado fuera.<\/span><\/h3>

                    Hay personas que quieren anteponerse a mis designios. Estas personas no encontrar\u00e1n mi auxilio. Que vayan a buscarlo a quien Yo lo he confiado; que vayan a consultar a aqu\u00e9l que Yo he elevado. No quieren rendir su juicio. Tienen mucho orgullo y amor propio. Son muy due\u00f1os de su voluntad.<\/span><\/h3>

                    Para vivir y ser de mi agrado, es necesario vivir de mi voluntad y prescindir de la que teng\u00e1is vosotros. Si quer\u00e9is ser m\u00edos hab\u00e9is de hacer lo que Yo quiera por mandato de \u00e9l. Hab\u00e9is de pisar vuestro orgullo, someti\u00e9ndoos a las pruebas que, por su mano, os env\u00edo. S\u00f3lo as\u00ed ser\u00e9is del agrado de vuestra Madre. Desgraciado de aqu\u00e9l que no siga mis consejos, porque a la hora de mayor angustia no lo escuchar\u00e9. Bienaventurado el que los practique, porque en el gran d\u00eda, la Madre sabr\u00e1 ponerlo en el lugar que se mereci\u00f3. Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 21.- Alocuci\u00f3n de Jes\u00fas sobre el arrepentimiento<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cTodos fueron culpables de mi muerte. Todos dijeron que s\u00ed en la sentencia que dieron contra Mi persona. Es preciso, dijo con voz potente, a todo el concurso, el sumo sacerdote, es preciso que \u00c9l muera para que no perezca el resto de la gente. Yo, conforme con la voluntad de mi Padre, cog\u00ed la cruz y fui camino del Monte para ser sacrificado por la salvaci\u00f3n del mundo. Y as\u00ed se llevar\u00eda a efecto la redenci\u00f3n del pecador. Escucha atenta, hija m\u00eda: M\u00edrame salir con la cruz a cuestas, sirviendo de risa, escarnio y burla a toda la gente. Esta gente est\u00e1 dividida en dos bandos: unos me miran con odio y rencor, otros lloran y se arrepienten. Para los primeros, mi Pasi\u00f3n y Muerte<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    les sirve de condenaci\u00f3n. Para los segundos les sirve de salvaci\u00f3n. De los primeros, el primero que se condena es Judas. \u00c9ste sigue con su vista a su Maestro en todo el proceso de Mi causa. Cuando llega a Mi sentencia, se arrepiente y devuelve las monedas diciendo: He pecado, porque he vendido la sangre de un inocente. Yo le sigo con mi vista, y en los ojos de su conciencia ve la bondad M\u00eda para con \u00e9l. Y en sus o\u00eddos resuenan las dulces palabras de Amigo m\u00edo. Todo puede servir para su arrepentimiento. Todos los recuerdos pueden obligarle a que as\u00ed lo haga. Mas no se arrepiente de veras. En su arrepentimiento est\u00e1 la desconfianza y cree que su delito es tan grande que no alcanzar\u00e1 misericordia, y ese solo pensamiento le obliga a ahorcarse.<\/span><\/h3>

                    Con la cruz a cuestas me ve Pedro, y con sus ojos llenos de l\u00e1grimas me sigue con la esperanza del perd\u00f3n. No viene a defenderme, porque ve que es el\u00a0 mandato\u00a0 de\u00a0 mi Padre el que me obliga a beber, hasta las heces, el c\u00e1liz de la amargura. Tengo que consumirlo para la salvaci\u00f3n del mundo, y \u00e9l me sigue de lejos, d\u00e1ndose golpes de pecho en se\u00f1al de verdadero arrepentimiento.<\/span><\/h3>

                    Hija: Quisiera Yo, vuestro Jes\u00fas, que os fijaseis en lo que os digo. Los dos son disc\u00edpulos m\u00edos; a los dos quiero igual; los dos me han ofendido. Uno me ha vendido\u00a0 como se vende una bestia; otro me ha negado con juramento, como se rechaza a un pecador. Los dos me ven camino de la muerte cargado con la cruz de sus maldades. Uno se arrepiente con esperanza de alcanzar perd\u00f3n; otro se arrepiente sin esperanza de conseguirlo. Para uno mi cruz es su salvaci\u00f3n; el otro, a pesar de mi cruz, se condena.<\/span><\/h3>

                    De la gente que me segu\u00eda, un grupo de mujeres se conduele de M\u00ed. Pero los fariseos, los sacerdotes, los soldados, en sus caras se reflejaba el odio y la maldici\u00f3n. Todos piensan en el suplicio, pero nadie se conduele de M\u00ed. Aquellas mujeres y algunos ni\u00f1os, sin temor al orgullo de los escribas y a los sacr\u00edlegos sacerdotes, llegan hasta M\u00ed llorando, y se conduelen de Mi persona. Mas sus l\u00e1grimas no sirven, porque las derraman por verme as\u00ed, debiendo llorar por el pecado, \u00fanica causa que as\u00ed me puso.<\/span><\/h3>

                    Quiero que a los m\u00edos os queden bien grabadas estas ense\u00f1anzas. No consiste en condoleros de mis sufrimientos, sino en saber llevar la cruz vuestra con amor, con odio\u00a0\u00a0\u00a0 al pecado, con arrepentimiento del mismo, dispuestos a recibir con alegr\u00eda todas las cruces que mi Padre Celestial quiera enviaros. Porque al final, no ser\u00e1n coronados m\u00e1s que aquellos que lleven la cruz de su sufrimiento y pasiones con el verdadero arrepentimiento de ellas.<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    Di a los m\u00edos que mediten, que piensen cu\u00e1l de los dos les conviene. Cu\u00e1l de los dos me es m\u00e1s agradable y en cu\u00e1l de los dos van a sacar m\u00e1s partido. El mundo no os importe. Las cosas se suceden y se suceder\u00e1n todav\u00eda m\u00e1s torcidas. Ver\u00e9is que los\u00a0 canallas ocupan buena posici\u00f3n, y los que sois m\u00edos, por el mero hecho de pertenecer a M\u00ed, sois calumniados. No os importe. Sufrid, orad, obrad, callad: \u00c9ste es el deseo de vuestro Padre, que os ama y os da su bendici\u00f3n. Jes\u00fas<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 22.- Instrucciones de Jes\u00fas sobre la resignaci\u00f3n en los padecimientos<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cNada hiri\u00f3 m\u00e1s fuertemente Mi coraz\u00f3n en los \u00faltimos momentos de mi vida como la visi\u00f3n prof\u00e9tica de la persecuci\u00f3n que hab\u00edan de sufrir los predestinados a la gloria, y que estaba representada por los escribas y fariseos del pueblo, quienes, todos a una voz, vi\u00e9ndome sujeto al Madero, sin poder evadirme de sus garras, repet\u00edan: \u2014T\u00fa, que eres el Hijo de Dios, que destruyes el templo y lo reedificas en tres d\u00edas, s\u00e1lvate si puedes. A otros has salvado y a Ti mismo no puedes. Espera en Dios, pues, que venga a salvarte, si puede.\u2014 Todas estas exclamaciones os ser\u00e1n dichas a vosotros, cuando llegue la hora de salvar mi Doctrina. Cuando os ve\u00e1is necesitados y alargu\u00e9is la mano para socorrer la miseria os dir\u00e1n: \u00bfD\u00f3nde est\u00e1 vuestro Dios? Aqu\u00e9l que hac\u00eda alarde de tener cielos y tierra en un pu\u00f1o, \u00bfpor qu\u00e9 os deja pasar esta miseria? \u00bfNo veis como los canallas y criminales son considerados y gozan de magn\u00edfica posici\u00f3n? \u00bfD\u00f3nde est\u00e1 vuestro Dios? M\u00e1s, no tem\u00e1is, los hombres hacen las guerras y Yo las dirijo. Bienaventurados los pobres de esp\u00edritu, porque de ellos ser\u00e1 el reino de los cielos. \u00a1Qu\u00e9 pocos ricos entrar\u00e1n en \u00e9l!<\/span><\/h3>

                    Abrazaos a mi Cruz. Con ella vencer\u00e9is al mundo y a mis adversarios. Sufrid, orad, callad, obrad, dejad que os calumnien y vituperen, porque entonces es cuando est\u00e1is ganando m\u00e1s m\u00e9ritos para el cielo. Sufrid con paciencia, que muy pronto sonar\u00e1 la hora de que Yo pondr\u00e9 en claro vuestro honor. Jes\u00fas\u201d<\/em>.<\/span><\/h3>

                    (\u00a1Oh, Padre, dice la vidente, qu\u00e9 cosas me muestras! Hay un monte que es muy alto. En la punta de ese monte hay un hombre acompa\u00f1ado de un \u00e1ngel. Por \u00e9l suben muchas personas que llevan cruces al hombro: Unas, suben bastante bien; otras, caen y se levantan; y otras, est\u00e1n ca\u00eddas y no se levantan. \u00bfQu\u00e9 significa esto, Padre? Veo que el monte no tiene caminos y que por \u00e9l todos suben reunidos, revueltos.)<\/span><\/h3>

                    \u201c\u00bfDices que esto significa la salida de los hombres del mundo, al final del juicio? Las almas que suben bien son las que siguen mis consejos; para \u00e9stas mi yugo es suave y mi<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    carga ligera, pero que suben muy cansadas; para purificarlas, las llevo por un camino secreto, y luego de estar en \u00e9l poco tiempo, llevar\u00e1n la Cruz muy bien hasta que lleguen a la mansi\u00f3n de delicias. Pero de entre estas hay dos grupos: Unas, los que siguieron con perfecci\u00f3n el camino de la Cruz; y otras, que sacaron mayor provecho, son las que llevan la Cruz, no s\u00f3lo para alcanzar la gloria, sino para que, ayud\u00e1ndome a M\u00ed alcanzar\u00e9 Yo victoria\u201d.<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 23.- Instrucci\u00f3n prof\u00e9tica de Jes\u00fas sobre la falacia e inutilidad de las riquezas<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cEstoy entre ellos y no me ven. D\u00eda vendr\u00e1 que me buscar\u00e1n y no\u00a0 me\u00a0 hallar\u00e1n. Buscad mi Reino, os he dicho, y no ponen los medios para encontrarle. Muchos ricos\u00a0 ser\u00e1n castigados por no haber hecho buen uso de sus riquezas. Correr\u00e1n, se dispersar\u00e1n\u00a0\u00a0 y no tendr\u00e1n lugar de refugio, pues les preocupan los castigos. M\u00e1s les valiera preocuparse de las causas que los van a producir. Tienen miedo a la muerte. \u00bfNo muri\u00f3 por ellos otro que fue mayor que ellos? Hay muchos con partidos; otros est\u00e1n\u00a0 en\u00a0 pedazos; y otros no tienen coraz\u00f3n. Sin Dios est\u00e1n muy bien. Les importa esto, porque aqu\u00ed, lo que les permiten lo ven. Lo M\u00edo no lo ven, pero es bastante m\u00e1s cierto que todo\u00a0 lo del mundo. D\u00eda llegar\u00e1 que en ese mundo se prometer\u00e1n las cosas que no\u00a0 se\u00a0 cumplir\u00e1n. Yo lo he prometido, pero, para poseerlo hay que dejar lo que estorba. Eso os probar\u00e1, hijos m\u00edos, que lo que Yo prometo es m\u00e1s grande que lo del mundo. En el\u00a0\u00a0 mundo y a la hora presente, aqu\u00e9l que quiera recibir algo, cuanto peor sea, antes lo consigue. Conmigo no os pasar\u00e1 igual. Para conseguir lo que os prometo tendr\u00e9is que seguirme, para seguirme tendr\u00e9is que sufrir; pero no sufrir de cualquier forma: Sufrir como Yo he sufrido por vosotros. Porque si Yo he sufrido tanto, y soy todo un Dios, vosotros no sois de mejor condici\u00f3n que Yo. Deb\u00e9is de sufrir por lo menos como Yo he sufrido. Y as\u00ed conseguir\u00e9is aquello que os he prometido, que es tan grande.<\/span><\/h3>

                    Los hombres luchar\u00e1n por defender sus intereses, y en la lucha, despu\u00e9s de esa batalla no quedar\u00e1n m\u00e1s que las obras de ellos. Los intereses se perder\u00e1n. No se entender\u00e1n. Porque su prop\u00f3sito es tan dificultoso como la erecci\u00f3n de la\u00a0 torre\u00a0 de\u00a0 Babel. Se confunden y no se entienden. Porque no hay dos que tengan la misma\u00a0 intenci\u00f3n, el mismo pensamiento. Todo es torcido. Preparaos, preparaos, porque\u00a0 la\u00a0 noche se acerca. La luz se extinguir\u00e1. Los truenos recorrer\u00e1n la tierra. Los rayos se\u00a0 soltar\u00e1n de la mano justiciera que los atenaza. Poco tiempo le basta a mi poder para destruir cientos de mundos. Los cri\u00e9 para que los disfrutaseis, pero dentro de ese goce,<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    reconocieseis la Mano del Creador; mas no hab\u00e9is querido. Os llam\u00e9 y no me respondisteis. Mand\u00e9 a Mi Madre y la rechazasteis. Pues tendr\u00e9is el pago del trabajo que hab\u00e9is ejecutado.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Oh, mundo! Trabajaste mucho, es verdad, pero trabajaste para tu ruina. No te supiste aprovechar del tesoro que Yo puse en la entra\u00f1a de ese mundo. Correr\u00e9is en su busca, pero desaparecer\u00e1, como desaparecen las naves en el fondo de los mares. El agua invadir\u00e1 este mundo. Sus aguas sacudir\u00e1n la tierra, y en sus sacudidas producir\u00e1 efectos asombrosos que el mundo no los cree. El agua no bast\u00f3 para limpiar en un tiempo ese mundo. El fuego no supo consumir del todo sus maldades. La espada justiciera sabr\u00e1 darles cortes agudos a ese gran mundo.<\/span><\/h3>

                    No creen que Yo, que lo he hecho, pueda destruirlo. No creen que, si est\u00e1n en \u00e9l, es por obra de misericordia. No saben agradecerlo. Yo les demostrar\u00e9 cual fue mi fuerza\u00a0 para con ellos. Sabr\u00e9 agradecerles, sabr\u00e9 pagarles cual merecen. \u00a1Oh, hijos, los\u00a0 que\u00a0 and\u00e1is torcidos! Enderezad vuestros pasos antes que la hora llegue. En aquel momento\u00a0 no tendr\u00e9is tiempo. No habr\u00e1 quien os escuche. No tendr\u00e9is quien os d\u00e9 lo\u00a0 m\u00e1s\u00a0 necesario. Todos los que ahora os alaban, todos los que os hacen promesas, en aquella hora no os atender\u00e1n, mirad que es vuestro Padre quien os habla. Mirad que para M\u00ed\u00a0 nada necesito. Mirad que lo \u00fanico que me mueve es el amor que os tengo, y mediante\u00a0 ese amor, quiero conseguiros la felicidad de vuestras almas.\u00a0 No\u00a0 despreci\u00e9is\u00a0 mis\u00a0 consejos. Mirad que os amo, hijos; veo que el tiempo se acerca, y antes de que llegue quiero reunirme con vosotros. No se\u00e1is traidores a la cita. Ser\u00e1 la \u00faltima despedida que hag\u00e1is conmigo a partir de ese m\u00edsero mundo. No hag\u00e1is caso a lo que pasa;\u00a0 fijad\u00a0 vuestras esperanzas en Aqu\u00e9l que siempre dura.<\/span><\/h3>

                    Muchas de las personas que hoy pasan por cristianas (me refiero a las que suben al Monte santo de mi Madre) muchas, hija, temblar\u00e1n, como tiembla la rama en el \u00e1rbol; temblar\u00e1n porque no piensan que lo que ahora hacen no me agrada: Ostentaci\u00f3n, envidia, orgullo, falsedad, pobreza de intenci\u00f3n, poca rectitud de conciencia. No saben guiarse por aquella base y cimiento que les di. Dejad el yo y seguidme. Vais a vivir poco; os vais a marchar y no os podr\u00e9is llevar lo que tanto ambicion\u00e1is en este mundo.<\/span><\/h3>

                    M\u00e9dicos; \u00bfpor qu\u00e9 cobr\u00e1is tan altas sumas, cuando vosotros est\u00e1is expuestos a enfermar y a morir? Sacerdotes, \u00bfpor qu\u00e9 no cre\u00e9is en aquello que os manda creer el estudio que de ello hab\u00e9is hecho? Tambi\u00e9n morir\u00e9is, y entonces ver\u00e9is claro que todo cuanto hab\u00e9is le\u00eddo es real y verdadero. \u00bfPor qu\u00e9, pues, lo neg\u00e1is? Ricos, potentados, hombres de fortuna; \u00bfpor qu\u00e9 atesor\u00e1is riquezas que se pueden concluir? Os hab\u00e9is de morir, lo hab\u00e9is de dejar, pues, \u00bfqu\u00e9 os importa de ello? Coged y guardad riquezas que con ellas pod\u00e1is dar raz\u00f3n de vuestra vida: riquezas que puedan pasar al lugar donde Yo os destine. Trabaj\u00e1is en balde, porque Yo no excluyo a los ricos por ser ricos y porque valgan m\u00e1s, porque tengan mejor posici\u00f3n. Entrar\u00e1n y pasar\u00e1n por el crisol de la prueba para que Yo sepa dar cr\u00e9dito y firmeza a todo lo que Yo os he expuesto.<\/span><\/h3>

                    Oir\u00e9is grandes cosas. Tened paciencia porque todo llegar\u00e1. El d\u00eda en que vuestro honor sea probado est\u00e1 cercano. \u00a1Ay de aquellos que emplearon su\u00a0 honor\u00a0 en\u00a0 las\u00a0 pompas de la tierra! \u00a1Ay de aqu\u00e9l cuyos mayores coloquios haya tenido con los hombres del mundo!<\/span><\/h3>

                    Mis casas ser\u00e1n cerradas. Mis ministros ser\u00e1n cobardes. Mis hijos tendr\u00e1n que guarecerse y las fiera se pasear\u00e1n dando saltos de muerte. Vendr\u00e1 la desolaci\u00f3n, el espanto; la obscuridad reinar\u00e1 en torno de aquellos que, habiendo visto mi Luz, no hayan querido su claridad. En la hora de la angustia llamar\u00e1n, y sus voces no ser\u00e1n o\u00eddas. Tendr\u00e1n hambre y sus graneros estar\u00e1n vac\u00edos, porque la tierra por mi mandato, no habr\u00e1 producido fruto. Querr\u00e1n salvarse y estar\u00e1n mar adentro. Las costas se alejar\u00e1n. Las barcas a merced de las olas y el viento, naufragar\u00e1n en el mar del olvido.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Cu\u00e1ntas personas, en esas horas de angustia, reflexionar\u00e1n que tuvieron ocasiones propicias para salvarse! El sufrimiento ser\u00e1 entonces mayor. Mas, que tengan en cuenta que ahora hacen pasar por mi mente las atrocidades m\u00e1s grandes que han conocido los tiempos.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Oh, montes, temblad, porque muchos desaparecer\u00e1n, como\u00a0 desaparece el\u00a0 humo\u00a0 en el espacio! Pobres, aquellos que no est\u00e9n bien cimentados. Los golpes ser\u00e1n certeros, la sangre correr\u00e1 a torrentes, los muertos formar\u00e1n montones enormes. Mis hijos ser\u00e1n pocos. No importa. He prometido no abandonar a aquellos que sean m\u00edos. Yo os dar\u00e9 la fuerza necesaria para saber encaminaros al lugar de vuestra dicha. No olvid\u00e9is mis consejos. No ech\u00e9is en olvido mis palabras. Recordadlas, y que ellas os servir\u00e1n, junto\u00a0\u00a0 con mi bendici\u00f3n, para alentaros a querer mucho a este Padre que os ama: Jes\u00fas<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 24.- Instrucci\u00f3n prof\u00e9tica de la Sant\u00edsima Virgen sobre los prontos castigos<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cJes\u00fas vino al mundo a ense\u00f1ar a los hombres a padecer, instrucci\u00f3n que no quieren recibir. Muere por la salvaci\u00f3n de los hombres, y estos no reconocen la sublimidad del Padre. Ven que los d\u00edas transcurren veloces, y no saben aprovecharse de aquello que les dio. Y el tiempo se termina. La Obra de mi Hijo va a empezar. Dichoso de aqu\u00e9l qu\u00e9 est\u00e1 bien preparado, porque su fin ser\u00e1 dichoso y duradero. Desgraciado de aqu\u00e9l que no se encamina en esas condiciones, porque el esp\u00edritu del mal se aprovecha de \u00e9l. Tendr\u00e1 su t\u00e9rmino en la guarida de las tinieblas. Todo el que me ame, que me escuche:<\/span><\/h3>

                    Hija: Llegar\u00e1 un d\u00eda en que todo el universo, mandado por mi Hijo, obedecer\u00e1 a las leyes que \u00e9ste le impondr\u00e1. El sol se obscurecer\u00e1. El cielo se rasgar\u00e1 para dejar libre paso\u00a0 a los rayos de la justicia de mi Hijo. Los montes desaparecer\u00e1n. Las piedras se romper\u00e1n unas contra otras. Los muertos saldr\u00e1n de sus sepulcros. Los hombres se matar\u00e1n unos a otros. La humanidad correr\u00e1 de un lado para otro, esperando encontrar\u00a0 lo que hace\u00a0 tanto tiempo buscaba. Las casas se hundir\u00e1n. Los r\u00edos se desbordar\u00e1n. El mar se alzar\u00e1 gigante amenazando tragar la tierra, y mientras esto\u00a0 suceda,\u00a0 sin\u00a0 intermisi\u00f3n\u00a0 ni descanso, mi Hijo lanzar\u00e1 rayos sobre la tierra. Ser\u00e1n varias horas, al final de las cuales quedar\u00e1 as\u00ed: Muchos pueblos habr\u00e1n desaparecido. De la mayor parte de las ciudades, unas ser\u00e1n tragadas por el mar; otras, la sangre te\u00f1ir\u00e1 sus calles. Los montones de cad\u00e1veres dar\u00e1n lugar a epidemias horribles. Habr\u00e1 poca tierra. De las personas\u00a0 que hayan quedado, las que fueron ricas ser\u00e1n pobres. No tendr\u00e1n m\u00e1s que aquello que hicieron en beneficio de mi Hijo. Los pobres que hayan cre\u00eddo en \u00c9l ser\u00e1n ricos, porque\u00a0\u00a0 no les faltar\u00e1 la alegr\u00eda en sus esp\u00edritus. Los pobres ser\u00e1n amparados por M\u00ed, puesto que supieron luchar en mi defensa. Muchos se convertir\u00e1n; pero muchos, tambi\u00e9n muchos,\u00a0\u00a0 se condenar\u00e1n.<\/span><\/h3>

                    Hijos: Trabajad por mi honra. Trabajad para saber agradar a mi hijo el beneficio tan inmenso que os hizo. Mirad que la hora de la despedida est\u00e1 cerca. Mirad que a \u00faltima hora os encontrar\u00e9is solos. Quiero probar hasta d\u00f3nde llega vuestro esfuerzo y voluntad. El tiempo est\u00e1 cercano. La vid llega a su saz\u00f3n. La recolecci\u00f3n se har\u00e1 forzosa. Los operarios ser\u00e1n pocos. Hay mucha vid. Vosotros luchar\u00e9is, vosotros trabajar\u00e9is, vosotros ganar\u00e9is la partida, no desfallezc\u00e1is.<\/span><\/h3>

                    Mi Hijo quiere estar breves momentos con vosotros antes de la lucha. Quiere daros \u00f3rdenes de c\u00f3mo hab\u00e9is de ejecutar la batalla. Ten\u00e9is muchos traidores. El enemigo est\u00e1 emboscado. Las ramas que lo encubren son crecidas. Mirad mucho. Yo os ayudar\u00e9 a esclarecer la verdad. Vuestra Madre, Mar\u00eda<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 25.- Alocuci\u00f3n en\u00e9rgica y prof\u00e9tica de la Sant\u00edsima Virgen sobre la persecuci\u00f3n episcopal a todo lo referente a Ezquioga<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cHija: Daos mucha prisa. Sabed que es mi deseo que os adelant\u00e9is. El enemigo ha preparado el terreno. Sabed vosotros buscad las emboscadas. Daos prisa, no tard\u00e9is, vosotros, los m\u00edos, en mi trabajo. El tiempo apremia porque el d\u00eda se acerca. El enemigo ve todo muy claro. Pero vosotros lo ver\u00e9is m\u00e1s claro, porque Yo os dar\u00e9 mi luz. No os importen las prohibiciones que decreten contra vosotros. Obedeced los mandatos de no acudir a mi Monte. Con esa obediencia ser\u00e9is y dar\u00e9is a entender que sois m\u00e1s hijos m\u00edos. La tormenta pasa y la calma renace; y entonces, todos esos decretos caer\u00e1n por tierra, como caen las hojas arrastradas por el vendaval; y entonces ser\u00e1n impuestas todas mis obligaciones y todos los mandatos de mi Hijo.<\/span><\/h3>

                    No todos sufrir\u00e1n callando. Alguien se levantar\u00e1 contra la prueba que Yo os env\u00edo. Ser\u00e1 prueba para los m\u00edos, desesperaci\u00f3n para los otros y castigo para los dem\u00e1s. En mi Monte no me faltar\u00e1 gente;\u00a0 aunque no\u00a0 sea m\u00e1s que uno, siempre lo tendr\u00e9. Vosotros,\u00a0 los unos, no teng\u00e1is miedo, porque esas prohibiciones no pueden obligarme a no estar con mis hijos. Son mis hijos los que os hab\u00e9is sujetado\u00a0 a mis mandatos y a las\u00a0 \u00f3rdenes\u00a0 del Padre. No tembl\u00e9is, porque sois m\u00edos y Yo soy vuestra Madre. Saldr\u00e9 en defensa de mis hijos cuando estos hayan sabido defenderme; y cuando cre\u00e1is que est\u00e1is solos, cuando cre\u00e1is que est\u00e1 todo peor, cuando pens\u00e9is que os he abandonado, me ten\u00e9is cerca. Os alentar\u00e9 m\u00e1s, rogar\u00e9 por vosotros y os bendecir\u00e9.<\/span><\/h3>

                    Quiero que los peque\u00f1os sean los que m\u00e1s, en estos d\u00edas, acudan a mi Monte. Es mi gusto que deis a conocer que sois m\u00edos. Detr\u00e1s de una firma os pedir\u00e1n la segunda. No pod\u00e9is mentir por nada ni por nadie. No pod\u00e9is negar que estoy con\u00a0 vosotros,\u00a0 cuando\u00a0 los efectos que en vosotros produzco acreditan ser cierta mi Aparici\u00f3n. Os har\u00e1n que negu\u00e9is: no lo hag\u00e1is. Responded que no pod\u00e9is negar una cosa que aun no existe. Decid que lo que se palpa no admite negaci\u00f3n. Decidles que lo nieguen ellos, a pesar de las gracias que les di, porque quieren quedar bien con aqu\u00e9l que me ha vendido. Decid que las ventas del mundo concluyen pronto. Decid que el que vende a su Madre, no espere que, al final de los tiempos, que est\u00e1n pr\u00f3ximos, la Madre salga en defensa\u00a0 suya.\u00a0 Decidles que con las madres juegan los peque\u00f1os cuando son peque\u00f1os. Que los hijos mayores deben de ser el apoyo de la Madre que les dio todo\u00a0 cuanto tienen\u00a0 y poseen: Que no es mayor aqu\u00e9l que m\u00e1s se burle de su Madre, porque llegar\u00e1 un d\u00eda en que esa misma burla le servir\u00e1 para su condenaci\u00f3n: Que no consiste en decir que se ama a una persona solamente con decirlo, pues las obras de ese amor han de corresponder a la persona a quien se ama. Y, siendo Yo la Madre de la humanidad la que sufre y padece, la\u00a0que ruega y pide por todos los hijos del mundo, di que creo que no soy digna de que se\u00a0 me trate as\u00ed.<\/span><\/h3>

                    He bajado para llamarlos, he bajado para avisarlos; pero ni los ruegos ni las s\u00faplicas me sirven para atraerlos. Mi Hijo me dice que no ruegue m\u00e1s. La justicia del Padre no admite s\u00faplicas. La misericordia est\u00e1 para terminar. Mis hijos siguen igual. El tiempo corre, la hora se acerca, y ellos no lo ven. \u00a1Ay de aquellos que a \u00faltima hora quieran enmendarse!.<\/span><\/h3>

                    Hija: Los hombres no me escuchan. De las mujeres, a muchas de las cuales he distinguido con mi amor, no han hecho caso de mis llamadas. \u00bfPor qu\u00e9, si lo han prometido no lo cumplen? La hora se acerca para X. El remordimiento entrar\u00e1 en su coraz\u00f3n. Porque le contradije su voluntad\u2026, porque lo que ella quer\u00eda no pod\u00eda cumplirse\u2026: As\u00ed pagan mis hijos el bien que Yo les concedo.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Con cu\u00e1nta satisfacci\u00f3n hubiese Yo recibido a todos los que eleg\u00ed! \u00a1Pero, se alejan de M\u00ed, y qu\u00e9 mal fin van a tener! El capit\u00e1n, que las ha echado a perder se quedar\u00e1 en la miseria; ya ha empezado a padecer y peor quedar\u00e1 luego. Que hay m\u00e1s todav\u00eda, pues dicen lo que no es\u2026\u201d<\/span><\/h3>
                    \u00a0<\/div>

                    \u00a0N\u00fam. 26.- Mensaje del Divino Coraz\u00f3n sobre las almas que hay en la tierra y sus sufrimientos por ellas, y sobre los sacerdotes enemigos de las Apariciones de su divina Madre en Ezquioga<\/span><\/h3>

                    \u00a0\u201cHay muchas clases de almas, aunque en el principio del mundo hice a todas igual. Las primeras que form\u00e9, pecaron, y al parecer, se contaminaron todas. Despu\u00e9s sufr\u00ed muerte de cruz por librarlas del infierno. Desde entonces el mundo est\u00e1 revuelto; muy poco sirvi\u00f3 mi Sangre, pero en la culpa no todas incurren lo mismo. Hay distintas almas, hija. Hay almas que son de oro; otras de plata; las m\u00e1s de cobre, y tambi\u00e9n hay otras de plomo. \u00a1C\u00f3mo pesan \u00e9stas, hija!<\/span><\/h3>

                    Las almas de oro son aquellas que supieron corresponder a la gracia que les di, sacando mucho partido. De \u00e9stas, unas las llev\u00e9 a descansar y otras est\u00e1n a\u00fan en el mundo.<\/span><\/h3>

                    De plata son aquellas en que mi gracia obra directamente, m\u00e1s son pobres de voluntad y flaquean. No est\u00e1n siempre lo mismo. No saben conservar la gracia que les\u00a0 doy. De \u00e9stas, tambi\u00e9n me he llevado algunas, pero han ido al purgatorio, de las cuales unas han salido ya y otras muchas lo est\u00e1n todav\u00eda.<\/span><\/h3>

                    Las de cobre son obscuras. Tienen mucho cardenillo. Aunque mi gracia las lava no saben secarse y dejan que se le forme el mugre. De \u00e9stas, muchas se convierten a \u00faltima hora, m\u00e1s tambi\u00e9n hay algunas que han de purgar mucho.<\/span><\/h3>

                    Las de plomo son aquellas con las cuales andan formadas sociedades antirreligiosas y sectas. Todas, o la mayor parte, salen revolucionarias. De los partidos que hay en el mundo, el de ellas es el de los peores. \u00c9stas han sido formadas igual que las otras, hija; pero el demonio las coge, las trabaja mucho, y por m\u00e1s que me empe\u00f1o en derramar sobre ellas mis gracias, nada consigo, porque su alma est\u00e1 fr\u00eda. De estas, se salvan muy pocas y son con las que tengo mayor trabajo. Es una carga pesada y en el mundo abundan m\u00e1s.<\/span><\/h3>

                    No quieren creer que mi Madre haya bajado al mundo. Baja y bajar\u00e1 antes que el Padre celestial descargue su justicia a la tierra. Es Madre, y en su coraz\u00f3n la distinci\u00f3n no puede caber. Todos son iguales para Ella; y a los que no est\u00e1n conformes con que baje, pod\u00e9is decir, de parte del Hijo de Ella, que ha elegido aquel rinc\u00f3n porque es el que m\u00e1s falta le hac\u00eda. Que bajar\u00e1 bastante tiempo a\u00fan, porque Ella quiere tra\u00e9rmelos todos a M\u00ed, a su Hijo.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Sacerdotes, sacerdotes!: Todos los d\u00edas conmigo y \u00a1qu\u00e9 poco piensan, qu\u00e9 poco! Dicen muchos dislates \u2014Se refiere a los sacerdotes que regatean a la Virgen Madre los privilegios singulares de que goza\u2014 Creen que mi Sant\u00edsima Madre no tiene poder\u00a0 para\u00a0 ello. Sepan, y dilo alto, hija, que mi Madre, mi Madre, \u00bfentiendes bien? Posee muchas gracias, muchas, muchas. Que es Reina, y como tal, puede hacer lo que quiera. Es Madre de misericordia, no es madre de esas madres justicieras. Que tiene un coraz\u00f3n grande que, al morir el Hijo suyo, se hizo due\u00f1a del universo entero. Di que puede bendecir; y\u00a0 que aquellos hijos, sobre todo sacerdotes, enti\u00e9ndelo bien, que se burlan de mi Madre\u00a0\u00a0 en los hijos que se muestra en la tierra, de ninguna manera piensen que podr\u00e1n entrar\u00a0\u00a0\u00a0 en el cielo, sin antes purgar el delito que cometieron. Que no son compatibles dos cosas que realizan: Decir Misa a la ma\u00f1ana y comulgar; y, por la tarde, subir a re\u00edrse de mi Madre. Que si en el monte no la ven, tampoco me ven a M\u00ed a la ma\u00f1ana. Que si deben respetar el lugar donde celebran, tambi\u00e9n deben respetar el lugar donde mi Madre aparece; el cual, si hoy no es m\u00e1s\u00a0 que un monte,\u00a0 d\u00eda vendr\u00e1 que ser\u00e1 iglesia;\u00a0 pero que\u00a0 un castigo de los que voy a dar va a ser el que no llegar\u00e1 a celebrar ninguno de ellos en aquella iglesia.<\/span><\/h3>

                    \u00a0Todo es el ego\u00edsmo marcado, hija de mi alma. Celebran a la ma\u00f1ana, y lo hacen con respeto, no porque crean en el Sacrificio,\u00a0 sino porque hay gente que les mira y que\u00a0 tienen que cobrar;\u00a0 y all\u00ed, en aquel monte hab\u00eda gente, cierto es, y gente hay, aunque\u00a0 poca. Mas ellos no tienen que hacer ning\u00fan papel en que los puedan subir\u00a0 a la altura a que apetezcan y no tienen que cobrar. \u00a1Qu\u00e9 verg\u00fcenza! Hacen las cosas nada m\u00e1s que\u00a0 por aparentar, por ser bien mirados. Y \u00a1son sacerdotes, hija! El ministerio que tienen ha\u00a0 de ser para dar ejemplo; y si ellos son as\u00ed, \u00bfqu\u00e9 extra\u00f1o es que los dem\u00e1s se tuerzan al verlos como les ven?<\/span><\/h3>

                    Estamos atravesando el mar, que est\u00e1 muy picado; ya renacer\u00e1 la calma. Despu\u00e9s que la alta marea baje, quedar\u00e1n al descubierto. \u00a1Oh, cu\u00e1ntas atrocidades! \u00a1Cu\u00e1ntas personas que van, que salen por ese mar, no podr\u00e1n volver atr\u00e1s, porque habr\u00e1n sucumbido! Otras, tendr\u00e1n que luchar contra el oleaje para ganar la orilla. Y otras, en fin, tendr\u00e1n que doblar la cerviz ante la verdad tan grande. Cuando llegue ese momento, mi Madre se dar\u00e1 a conocer con algo muy portentoso, pero ser\u00e1 cuando el reposo renazca, cuando no haya tropiezos, cuando todo sea suave, cuando no queden sino aquellos que la han defendido. \u00a1Cu\u00e1ntos habr\u00e1 que tendr\u00e1n que declarar que estuvieron ofuscados! Dichosos si as\u00ed lo hacen. Porque si conocen la verdad, y no obstante, se mantienen en las suyas, oh, entonces, m\u00e1s les valiera no haber nacido, Yo soy el Rey de la gloria, el Padre amante y bueno; m\u00e1s, enti\u00e9ndelo bien, hija, soy tambi\u00e9n el juez justiciero.<\/span><\/h3>

                    Mirando a los delitos de la tierra, cuanto m\u00e1s grande es la persona ofendida, mayor castigo se da al ofensor. Eso, siendo aqu\u00e9lla polvo, nada; pero es por\u00a0 obedecer\u00a0 a las\u00a0 leyes\u00a0 que rigen. Pues, \u00bfqu\u00e9 ser\u00e1 ofenderme a M\u00ed? Yo, que no he tenido principio ni\u00a0 tendr\u00e9 fin, tratar\u00e9 con m\u00e1s rigor los delitos cometidos contra mi Madre. \u00bfQui\u00e9n no ama con delirio a su madre en la tierra? Pues, \u00bfc\u00f3mo no amar\u00e9 Yo a mi\u00a0 Madre,\u00a0 Virgen\u00a0 bendita entre todas las mujeres, sin mancha ni pecado, en quien desde su animaci\u00f3n,\u00a0 obr\u00f3 el Esp\u00edritu Santo? \u00bfQu\u00e9 mujer hay en el mundo que goce de tantas\u00a0 gracias?\u00a0 Ninguna. Pues la ofensa que Ella recibe se pagar\u00e1, \u00a1oh, terriblemente!, con penas nunca vistas. Jes\u00fas<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 27.- Alocuci\u00f3n de Jes\u00fas sobre la vana ciencia del siglo<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cHija m\u00eda: No hagas aprecio de la elegancia y delicadeza de los discursos de los hombres; pues no est\u00e1 el Reino de Dios en ellos, sino en la virtud. Considera con<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    atenci\u00f3n Mis palabras, que son las que abrasan el coraz\u00f3n, alumbran el entendimiento, dan compunci\u00f3n y consuelan de varios modos. Jam\u00e1s leas Mis palabras con la intenci\u00f3n de ganar nombre de sabia. Apl\u00edcate a mortificar tus deseos desordenados, que de esto sacar\u00e1s m\u00e1s provecho que de entender muchas cuestiones delicadas. Por m\u00e1s que hubieses le\u00eddo y estudiado, es preciso que, por \u00faltimo, vengas a un solo principio, y es, que el Se\u00f1or ense\u00f1a la ciencia a los hombres, y concede a los humildes inteligencia m\u00e1s clara que la que son capaces de comunicar todos los maestros y doctores. Aqu\u00e9l a quien Yo hablo ser\u00e1 prontamente sabio y adelantar\u00e1 maravillosamente en la perfecci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Ay de aquellos que estudian por contentar su curiosidad y viven poco aplicados a servirme! Tiempo vendr\u00e1 en que Yo, Maestro de los maestros y Se\u00f1or de los \u00e1ngeles, aparecer\u00e9 a tomar la lecci\u00f3n a todos; esto es: a examinar la conciencia de cada uno. Entonces registrar\u00e9 con luces lo m\u00e1s escondido de Jerusal\u00e9n y se manifestar\u00e1 lo que estaba oculto en tinieblas y callar\u00e1n los argumentos de los hombres.<\/span><\/h3>

                    Yo comunico, en un instante, a las almas humildes m\u00e1s claridad sobre las verdades eternas que la que pudieran adquirir en diez a\u00f1os de escuelas. Yo ense\u00f1o sin sonido de palabras, sin diversidad de opiniones, sin ostentaci\u00f3n y sin altercaci\u00f3n de argumentos. Yo soy el que ense\u00f1o a despreciar las cosas de la tierra y mirar con tedio lo presente, desear y buscar lo eterno, huir los honores, no seguir los malos ejemplos, poner la esperanza en M\u00ed, no desear fuera de M\u00ed cosa ninguna y amarme sobre todas las cosas con toda el alma.<\/span><\/h3>

                    Am\u00e1ndome de coraz\u00f3n han conseguido algunos, especial conocimiento de las cosas espirituales y hablaban de ellas admirablemente. Con renunciar a toda afici\u00f3n y apego adelantaron m\u00e1s que si hubiesen estudiado las cuestiones m\u00e1s curiosas y dif\u00edciles.<\/span><\/h3>

                    Pero, a unos digo cosas comunes; a otros, especiales; a algunos Me comunico, poco a poco, por medio de s\u00edmbolos y figuras; y a otros, descubro misterios con harta claridad. Los libros hablan a todos de un mismo modo, pero no instruyen con igualdad a todos: Porque Yo soy el que ense\u00f1o la verdad a las almas, el que registro los corazones, el que penetra los pensamientos, el que mueve a hacer las buenas obras, y el que distribuye, seg\u00fan mi voluntad, los dones y talentos. Jes\u00fa<\/em>s.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 28.- Avisos, lamentos y m\u00e1ximas sobre los pr\u00f3ximos castigos, que el Divino Coraz\u00f3n da a la misma vidente<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    \u201cSi supiesen cu\u00e1ntas cosas tienen escondidas\u2026, mas pronto saldr\u00e1n a la luz.<\/span><\/h3>

                    No todos los que se arrepienten se salvar\u00e1n, porque muchos lo har\u00e1n por temor\u201d.<\/span><\/h3>

                    (Veo a Espa\u00f1a, sigue la vidente, convertida en una Babilonia. Todos est\u00e1n mezclados. Tiene siete boquetes. A Portugal y Francia los veo separados. En San Sebasti\u00e1n, hay un boquete. En Galicia, dos. En Catalu\u00f1a, tres agujeros. En Sevilla, C\u00f3rdoba y Navarra, mucha sangre. En Almer\u00eda, un caminito estrecho que va hasta C\u00e1diz. En C\u00e1diz, un sendero grande que va a Portugal. En Par\u00eds, un agujero grande. En Oporto, soldados. En Madrid, \u00a1qu\u00e9 horror!, muchas casas cerradas, y de las que est\u00e1n abiertas salen osos; todos van hacia una casa muy grande que tiene una escalinata ancha con columnas. \u00a1Pobres criaturas!<\/span><\/h3>

                    \u00bfQu\u00e9 culpa tendr\u00e1n ellos si no tienen culpa de nada? Eso es Rusia: Veo ej\u00e9rcitos de rusos que vienen. \u00a1Cu\u00e1ntos vienen! \u00a1Pobre Espa\u00f1a! La masticar\u00e1n. Los rusos; pero, \u00bfes posible, Padre? Est\u00e1n en pacto, \u00bfcon qui\u00e9n? Estaban fingiendo. Que todo no acaba ah\u00ed. \u00a1Oh, que gordo es eso! No lo dir\u00e9, pues me da mucho miedo pensar que eso va a llegar. \u00bfQu\u00e9 subsistir\u00e1n pocos edificios en pie? \u00bfConventos que existen y que dentro de poco no existir\u00e1n? \u00bfQuemados? La gente ver\u00e1 que donde se guardan reliquias no quemar\u00e1n. Ya tenemos, pues, unas cuantas. La gente no ve. \u00bfEn d\u00f3nde? En Canarias. \u00a1Qu\u00e9 horror! No te entiendo.)<\/span><\/h3>

                    \u201cTodos los que est\u00e1n no son y todos los que fueron no est\u00e1n.<\/span><\/h3>

                    \u00bfQu\u00e9 van a pasar grandes cosas, dentro de poco? \u00bfQu\u00e9 se oir\u00e1n muchos gemidos, m\u00e1s nadie les aliviar\u00e1? Tienen el tiempo de sobra y no quieren emplearlo, pues cuando\u00a0\u00a0 les haga falta no podr\u00e1n hallarlo.<\/span><\/h3>

                    Los hombres no se han de entender y algunos se pegar\u00e1n. Las mujeres rabiar\u00e1n por no poder comprender. \u00a1Tanto como hablan ahora, y tan poco como creen! \u00a1Ya veremos\u00a0\u00a0\u00a0 a qu\u00e9 lo atribuyen! Hay mujeres que son malas de verdad. Estas nuestras cosas las atribuyen a hechicer\u00eda, magia, diablo. Todo lo malo que ellas hacen lo atribuyen a Dios: Dios lo quiere. Eso tiene que ser. Mientras tanto fastidian al pr\u00f3jimo.<\/span><\/h3>

                    Hay un refr\u00e1n que dice: El que ha de reprender no ha de tener vicios. El \u00fanico que puede reprender es Dios.<\/span><\/h3>

                    En alg\u00fan tiempo os re\u00edais de las cosas antiguas, y hoy las m\u00edas son extravagantes. Si la humanidad no se hubiese entretenido en s\u00ed misma, no se hubiere acarreado los males. Todos mandan. \u00a1Maldito orgullo!<\/span><\/h3>

                    \u00a0No hay humildad, amor, caridad. Si hubiese humildad, cada cual comprender\u00eda sus defectos. Si amor, nos doler\u00edamos del pr\u00f3jimo. Si caridad, le remediar\u00edamos.<\/span><\/h3>

                    El tiempo que se va no se halla. El que quiera salvarse que siga los mandamientos de la Ley. En el domingo V despu\u00e9s de Pentecost\u00e9s, dije a mis disc\u00edpulos: Si vuestra manera de obrar no fuese m\u00e1s justa que la de los fariseos, no entrar\u00e9is en el reino de los cielos. Hab\u00e9is o\u00eddo que se dijo a vuestros mayores: No matar\u00e1s, y que quien matare ser\u00e1 condenado a muerte en juicio. Yo os digo m\u00e1s, quienquiera que tome ojeriza con su hermano, merecer\u00e1 que el juez le condene. Y el que le llamare \u201craca\u201d (calificativo despreciativo<\/em>), merecer\u00e1 que le condene el concilio. Mas quien le llamare \u201cfatuo\u201d ser\u00e1 reo del fuego del infierno\u201d.<\/span><\/h3>

                    Con que ya sab\u00e9is, si quer\u00e9is dar vuestra ofrenda, el tiempo se avecina.<\/span><\/h3>

                    Todos los montes no son iguales, porque por ellos no andar\u00e1n iguales personas.<\/span><\/h3>

                    Hay un punto luminoso que hoy brilla, pero alg\u00fan d\u00eda se obscurecer\u00e1 para alumbrar dos caminos. Estamos sentados descansando, pero cuando estamos de pie trabajamos m\u00e1s. El que est\u00e1 dormido no se defiende, pero el que vela, evita.<\/span><\/h3>

                    Cuando hay muchos es m\u00e1s listo el que m\u00e1s calla, porque los dem\u00e1s no saben lo que piensa.<\/span><\/h3>

                    No se debe en todas ocasiones exteriorizar todos los sentimientos. Es muy dif\u00edcil que entre muchos todos piensen lo mismo.<\/span><\/h3>

                    No es igual sufrir que resignarse con el sufrimiento.<\/span><\/h3>

                    Hay alguien que cuando le llaman no oye, porque el que llama no le agrada; sin embargo, cuando no le llaman escucha, porque le interesa lo que dice.<\/span><\/h3>

                    Tanto se falta por desobedecer como por obedecer, cuando no hace falta.<\/span><\/h3>

                    Cuando teng\u00e1is que elegir, elegid lo m\u00e1s peque\u00f1o, que en lo grande hay mucho sitio y puede haber mucho malo.<\/span><\/h3>

                    Los d\u00edas son cortos; empleadlos en Dios. El tiempo pasa y el fin llega. La vida no tiene ning\u00fan atractivo m\u00e1s que el amor a Dios.<\/span><\/h3>

                    El fin est\u00e1 cercano. Siempre que amamos a Dios, \u00bfqu\u00e9 importa lo dem\u00e1s? Cuando el mundo se acabe no querr\u00e9is que digan que hab\u00e9is sido buenos. La bondad es Dios, la imperfecci\u00f3n vosotros.<\/span><\/h3>

                    \u00a0Dichoso el que haya empleado su vida en amor, porque al terminar, se encontrar\u00e1\u00a0 con un Padre y no con un juez.<\/span><\/h3>

                    Siendo la vida tan corta, \u00bfpor qu\u00e9 no habr\u00e9 amado siempre? Hay muchos que siempre quieren hacer lo que no les conviene.<\/span><\/h3>

                    Cuando vay\u00e1is a devanar no tom\u00e9is nunca la punta de abajo sino la de arriba.<\/span><\/h3>

                    Hay dos luces desiguales, y la que entra por los cristales distinta tambi\u00e9n. As\u00ed son las personas. Unas, cuando las necesitan, no se encuentran; cuando empiezan a hacer bien, es tarde. Otras, que valen menos, son m\u00e1s d\u00e9biles, esas hacen m\u00e1s. Y otras que, aunque las maten, nunca dejan de alumbrar. \u00c9stas son la perfecci\u00f3n; aqu\u00e9llas el sacrificio y las otras la mortificaci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                    Es una escalera alta. All\u00e1 arriba hay una vela. Suben hombres y m\u00e1s hombres y nadie la puede encender. Sube un ni\u00f1o, y \u00e9ste la ha encendido.<\/span><\/h3>

                    En la tierra pasa igual. Hay muchos que siempre se empe\u00f1an en hacer una misma cosa. Los designios de Dios son que aqu\u00e9l que es m\u00e1s peque\u00f1o y se humilla, subir\u00e1 m\u00e1s alto; y aqu\u00e9l podr\u00e1 conseguir aquello que le hace falta. El menor es grande si va unido al sufrimiento.<\/span><\/h3>

                    Con la fe se ve, pero hay muchos que no la tienen.<\/span><\/h3>

                    No todos los que cantan alaban, porque en el canto no hay intenci\u00f3n. Los que llamo no vienen. \u00a1Ay de ellos!<\/span><\/h3>

                    No consiste en el querer, sino en realizar lo que uno quiere.<\/span><\/h3>

                    Muchas cosas que se hacen nos parecen mal, pero es porque en un principio no tuvimos buena intenci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                    Las cosas se deben hacer con dos fines: Por el amor de Dios y del pr\u00f3jimo. Sin caridad no hay amor y sin amor no hay gloria.<\/span><\/h3>

                    Todo el que quiere no ama, pero s\u00ed ama todo el que quiere.<\/span><\/h3>

                    Los que me ven (se refiere a exvidentes) me han dejado, y los que no me ven, \u00bfqu\u00e9 pasar\u00e1?<\/span><\/h3>

                    \u00a1Y todav\u00eda los que me dejar\u00e1n\u2026! \u00bfC\u00f3mo no he de estar triste?<\/span><\/h3>

                    \u00a1Dichosos los que creen sin ver!\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 29.- Instrucciones de Jes\u00fas a la misma vidente y para el director de los videntes: y nuevos avisos sobre los pr\u00f3ximos castigos<\/span><\/h3>

                    \u00a0\u201cHija: Di al Padre Amado que, como pastor que es, guarde el reba\u00f1o suyo y m\u00edo; que recoja pronto las cosas suyas y m\u00edas; que no deje que se contaminen con las\u00a0 dem\u00e1s, y\u00a0 que tenga sumo cuidado de tres flores que est\u00e1n\u00a0 pobres en\u00a0 savia,\u00a0 porque la savia que\u00a0 las ha producido est\u00e1 seca, y de seguir as\u00ed, no tendr\u00e1 otro remedio que cortarlas. \u00bfC\u00f3mo va a formar un ramo si las flores est\u00e1n mezcladas y no se pueden juntar?\u201d<\/span><\/h3>

                    \u201cPronto van a pasar cosas grandes. Lo que hasta ahora ha pasado no es sino preparaci\u00f3n para lo que viene. Los comunistas trabajan en secreto con los rusos, y ser\u00e1n los primeros que tomen parte en el Gobierno. \u00c9ste caer\u00e1, y en su lugar vendr\u00e1n personas que os van hacer pasar muchos trabajos. Despu\u00e9s de la guerra, en la cual tomar\u00e1 parte todo el mundo, vendr\u00e1 el Anticristo, y con los traidores ganar\u00e1. Despu\u00e9s\u00a0 habr\u00e1\u00a0 otra nueva era de paz, en la cual Jes\u00fas reinar\u00e1 de lleno. Entonces tendremos\u00a0 luz,\u00a0 pero\u00a0 llegar\u00e1n otra vez las tinieblas, y Jes\u00fas no dar\u00e1 ya luz. Los buenos tendr\u00e9is que ir a los desiertos, m\u00e1s no todos, porque algunos, antes de confesar a Cristo, se suicidar\u00e1n. La guerra empezar\u00e1 por el extranjero, siendo la primera naci\u00f3n Italia, y ser\u00e1 as\u00ed, porque lo primero que quieren quitar es al Papa, con pretexto de que, no habiendo iglesias, no necesitan quien las dirija. Las \u00d3rdenes religiosas pronto ser\u00e1n expulsadas\u201d.<\/span><\/h3>

                    \u201cMuchos de los milagros que Yo quer\u00eda obrar en Ezquioga, los est\u00e1n obrando en el extranjero, porque en el extranjero tengo hijos de verdad. Deb\u00e9is querer a mi Hijo con\u00a0\u00a0\u00a0 un cari\u00f1o inmenso. Hay personas muy buenas que est\u00e1n muy unidas a quien les puede hacer da\u00f1o. A Guip\u00fazcoa le viene, dentro de poco, otro nuevo ramalazo \u2014Exactamente ocurri\u00f3 con la inundaci\u00f3n de Octubre del mismo a\u00f1o. Nota escrita tres meses y medio luego del texto\u2014. Qu\u00e9jase luego de sus hijos, y de que en Valencia hayan\u00a0 roto la cabeza y corona\u00a0 de su Imagen del puente del r\u00edo y hayan arrojado sus pedazos al r\u00edo. Que E. la est\u00e1n introduciendo muchas cosas en la cabeza. Que es su gusto no est\u00e9 all\u00ed, lo cual ha hecho saber tambi\u00e9n a ella. Y que lo que el Padre diga, \u00e9sa es su voluntad\u201d.<\/span><\/h3>

                    \u00daltimamente Jes\u00fas me dict\u00f3 esta poes\u00eda, expresi\u00f3n de su dolor:<\/span><\/h3>

                    \u201cSoy Jes\u00fas, el Padre amante, que a todos los hijos quiero: Yo por eso los espero,<\/span><\/h3>

                    y ellos siguen adelante.<\/span><\/h3>

                    \u00a0No quiero m\u00e1s que una cosa; que reconozc\u00e1is la ofensa; y eso ninguno lo piensa,<\/span><\/h3>

                    \u00a1qu\u00e9\u00a0 verdad tan dolorosa!<\/span><\/h3>

                    Sufro al ver que me desprecian y que Yo los quiero tanto; por eso es tanto mi llanto<\/span><\/h3>

                    y las olas tanto arrecian.<\/span><\/h3>

                    Yo, qu\u00e9 cri\u00e9 para ellos lo mejor y m\u00e1s precioso\u2026, y el hijo siempre orgulloso no descifra mis destellos.<\/span><\/h3>

                    Yo soy la luz, la verdad; quien me ama todo tiene:<\/span><\/h3>

                    \u00bfPor qu\u00e9 el hijo no viene a pedir con humildad?<\/span><\/h3>

                    Hay alguien que le conviene que se tuerza en el camino; no ve el sendero divino,<\/span><\/h3>

                    por eso \u00e9l se detiene.<\/span><\/h3>

                    Si mis hijos conociesen el cari\u00f1o que les tengo,<\/span><\/h3>

                    que del otro mundo vengo para que mal no \u00a0muriesen\u2026<\/span><\/h3>

                    Va a llegar un momento que tendr\u00e9 que castigar porque se van a enredar,\u00a0 y para M\u00ed es un tormento.<\/span><\/h3>

                    Yo los quiero todav\u00eda, pero mi Padre reclama; por eso mi Madre llama tanto de noche y de d\u00eda.<\/span><\/h3>

                    \u00a0Sed buenos, hijitos m\u00edos, todav\u00eda est\u00e1is a tiempo:<\/span><\/h3>

                    Yo calmar\u00e9 los tormentos, si no os encuentro fr\u00edos.<\/span><\/h3>

                    Pero, si segu\u00eds lo mismo, preparaos y temblad:<\/span><\/h3>

                    el castigo que he de dar ser\u00e1 un grande cataclismo.<\/span><\/h3>

                    Jes\u00fas<\/em>.\u201d<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    N\u00fam. 30.- Instrucciones del Sagrado Coraz\u00f3n y de la Sant\u00edsima Virgen a la propia vidente con relaci\u00f3n a las facultades del director de videntes, de actuaci\u00f3n de \u00e9stos, y sobre los pr\u00f3ximos castigos<\/span><\/h3>

                    \u00a0<\/h3>

                    Comienza la Sant\u00edsima Virgen: \u201cHija: Qu\u00e9 horror el\u00a0 que una Madre no pueda tener\u00a0 un momento de reposo. No me quieren hacer caso. Creen que Yo estoy jugando. Son cosas todas muy serias. No juego, hija, no juego. Los que juegan son ellos con la honra m\u00eda. Tienen las se\u00f1ales que Yo a ellos he dado. \u00a1Qu\u00e9 contento est\u00e1 el demonio con ellos! Tienen se\u00f1ales para conocer\u00a0 y no las quieren. Pongo en mi jard\u00edn un hombre y tampoco\u00a0 lo respetan. No es eso solo. Ponen mi Nombre, el de la Madre, para poder dar m\u00e1s\u00a0 cr\u00e9dito a la mentira que dicen. Os le he puesto para que le obedezc\u00e1is en todo.<\/span><\/h3>

                    \u00bfEntiendes, hijo del alma? En todo, en todo, en todo. Yo no he dicho a nadie que obedezc\u00e1is \u201cen parte\u201d a \u00e9l. Lo que mando es entero, no es parte. \u00bfPor qu\u00e9 afirman que soy Yo? \u2014\u00bfLa que tales mentiras dice? Se refiere a una visi\u00f3n diab\u00f3lica que E. tuvo.\u2014 Porque quieren echar a \u00e9l la culpa.\u2014 \u00bfNo ven estos hijos m\u00edos lo que pueden traer las mentiras que dicen? Os he dicho, hija m\u00eda, a todos igual. \u00bfPor qu\u00e9 al referirlo, vosotros no dec\u00eds todos lo mismo? El momento m\u00e1s dif\u00edcil no es el de verme y o\u00edrme: Es el de repetir despu\u00e9s exactamente, exactamente lo que os he dicho. Que\u00a0 lo\u00a0 confront\u00e9is\u00a0 todo;\u00a0 porque, as\u00ed como quiero que todos los hijos m\u00edos sean uno, tambi\u00e9n quiero que lo que\u00a0\u00a0 les diga a todos sea una misma cosa. Si no confront\u00e1is y no dec\u00eds todos lo mismo, no es m\u00edo. Porque Yo a todos os quiero para un mismo fin. De ah\u00ed que a todos os llevo por el mismo camino. Los enga\u00f1an, \u00a1qu\u00e9 pena! \u00a1Qu\u00e9 dolor para una Madre,\u00a0 despu\u00e9s\u00a0 de\u00a0 trabajar tanto, sacar tan poco fruto!<\/span><\/h3>

                    Otra cosa, hija del alma: Yo he dicho estas palabras: Yo os he puesto al Padre para que hag\u00e1is caso en todo, en todo; y el que no le obedezca, no quiero decir aqu\u00ed que se condenar\u00e1, quiero decir que, al no hacer caso al Padre, no har\u00e1 el gusto m\u00edo. Por lo tanto, pecar\u00e1. No peca tanto por ofender al Padre como por ofenderme a M\u00ed. Ahora bien, como el mandato que el Padre os da, es m\u00edo, por eso es doble pecado. Yendo por ese camino, si no vuelve a la senda que el Padre le mostrar\u00e1, porque lo que \u00e9l haga, \u00bfentiendes hija? Lo que el Padre os mande y haga es mi gusto. El que no siga esa senda, est\u00e1 claro, muy claro, que se condena. As\u00ed que, hija, lo puedes decir bien claro. Yo lo he dicho as\u00ed: Que el que no obedezca al Padre se condena; pero claro, no se paran a estudiar, no meditan mis palabras, no profundizan y no ven lo que quiero decir en ello.<\/span><\/h3>

                    El P. L. no ha hecho nada. \u00bfC\u00f3mo crees t\u00fa, hija m\u00eda, que el delito a todo un Dios y a\u00a0\u00a0 su Madre se va a pagar con una novena? Me consideran, \u00a1ah! como si fuera cualquier mujer del mundo, y aun peor; porque si ofenden a una mujer en la tierra, pedir\u00e1n reparaci\u00f3n; ir\u00e1n y hablar\u00e1n con ella; pero a M\u00ed, con una novena \u00bfpagan? No, hija. Yo\u00a0 soy la Virgen, y aunque no tuviese ning\u00fan privilegio, soy la Madre de todo un Dios, y mi Hijo no perdona los ultrajes inferidos a su Madre con novenas. No ha hecho nada. Est\u00e1 igual. No ha estado con el obispo, porque el d\u00eda que eso pase, Yo quiero ayudar a mi hijo. La voluntad del obispo cambiar\u00e1 en aquel momento y dar\u00e1 el permiso. \u2014Todos los extremos de este Mensaje son respuestas a determinadas afirmaciones que el diablo sugiri\u00f3 a E.G. para separarla del buen camino. Por las repuestas se descubre cu\u00e1les eran los argumentos.\u2014 Ya ves, hija, como el obispo no puede decir que no, porque no estuvo con \u00e9l. Eso\u00a0 tardar\u00e1\u00a0 todav\u00eda. Las almas no est\u00e1n dispuestas, est\u00e1n excitados los \u00e1nimos. Hay que esperar el momento propicio en que la Madre desconsolada pueda sacar m\u00e1s partido.<\/span><\/h3>

                    \u00a1Qu\u00e9 no ser\u00e1n todo penas! Han dicho. \u2014El esp\u00edritu del mal hab\u00eda sugerido esta frase a E.<\/span><\/h3>
                    1. para que no creyera en los castigos inminentes.\u2014 \u00a1Oh, hija m\u00eda! Pronto esperan alegr\u00eda. Tienen que sufrir a\u00fan mucho. La cosa que apetec\u00e9is los buenos, los que sois m\u00edos, es grande, inmensa. Es nada menos que el reinado de todo un Dios en la tierra. Y eso, hija m\u00eda, cuesta. Ten\u00e9is que sufrir a\u00fan mucho. Todo llegar\u00e1. Con vosotros est\u00e1 siempre vuestra Madre: Lo que quiero es que sep\u00e1is corresponderme. Que no os dej\u00e9is enga\u00f1ar, porque el tiempo que avecina el demonio lo encamina para llevar almas al mal. Que no\u00a0 os enga\u00f1e. La se\u00f1al ya os he dado. Los dem\u00e1s, \u00a1c\u00f3mo se dejan enga\u00f1ar!<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

                      Otra cosa: Ella ha dicho que \u201cva a tal casa para decir si son ciertas las visiones\u201d.<\/span><\/h3>

                      \u00bfQui\u00e9n es ella, pobrecilla? \u00bfElla va a deliberar? No\u00a0 le toca a ella ese trabajo. Hija, antes,\u00a0 se niega a ir a donde dice, y \u00bfahora, no? \u00bfEn qu\u00e9 consiste esto? \u2014E.G. a qui\u00e9n enga\u00f1\u00f3 el diablo, y que a causa de esto, desobedeci\u00f3 al P. Director.\u2014<\/span><\/h3>

                      Hay muchas cosas que quiero que sep\u00e1is, pues son necesarias:<\/span><\/h3>

                      \u00a0A cierta exvidente voy a hacer pasar una prueba grande. A ver si se da cuenta ella de qui\u00e9n le est\u00e1 haciendo el mal.<\/span><\/h3>

                      A otra que pasa por vidente, y no es ni lo ha sido, la dejo por imposible. La llaman, la amonestan y no hace caso. No puede ser, hija m\u00eda. \u00a1Creer que esa mistiquez que tiene es debida a que ella me ve! No, hija, no es as\u00ed. No me ha visto nunca, nunca. \u00a1Cu\u00e1nto da\u00f1o est\u00e1 haciendo! \u00a1Es juguete del enemigo infernal! Que a ella han hecho mucho mal, pero ella lo hace a los dem\u00e1s.<\/span><\/h3>

                      Hay tres videntes a quienes falta someter a la prueba, y que son los que m\u00e1s da\u00f1o han de hacer\u201d.<\/span><\/h3>

                      Se apareci\u00f3 el Sagrado Coraz\u00f3n de Jes\u00fas y me expres\u00f3: \u201cDi al Padre que no estoy dispuesto a pasar m\u00e1s adelante. Las ofensas son graves. Los ultrajes horribles, y Yo no lo consentir\u00e9.<\/span><\/h3>

                      No es l\u00edcito que d\u00e9 gracias a quien no se las merece,<\/span><\/h3>

                      y a otro, que su alma ofrece, lo deje sin darle nada.<\/span><\/h3>

                      Aqu\u00ed arriba, en mi mansi\u00f3n la desigualdad no existe;<\/span><\/h3>

                      el que ama la resiste<\/span><\/h3>

                      el que no, muere de dolor.<\/span><\/h3>

                      Cicatrizo las heridas del alma que a M\u00ed me ama;<\/span><\/h3>

                      pongo en su pecho la llama y renuevo nuevas vidas.<\/span><\/h3>

                      Soy el m\u00e9dico divino<\/span><\/h3>

                      que ando tras los enfermos\u2026\u201d<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      (Luego, me muestra un circo romano. Est\u00e1 lleno de gente. Veo a Ner\u00f3n que est\u00e1 con sus ministros. A su banco imperial sube una cadena, que est\u00e1 sujeta a una anilla en el suelo. \u00a1Cu\u00e1nta gente! Ner\u00f3n ci\u00f1e una corona de laurel. \u00a1Oh, qu\u00e9 horror! Trae a mucha gente a ese circo a empujones. Han tirado de la cadena, y \u00a1horror! Es una trampa de la\u00a0 que salen leones, osos y leopardos. En un momento devoran a aquellos infelices, no<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      dejando m\u00e1s que los huesos. Y \u00a1c\u00f3mo se r\u00ede Ner\u00f3n! \u00bfPor qu\u00e9, Jes\u00fas m\u00edo, me has mostrado esto?)<\/span><\/h3>

                      Jes\u00fas la explica: \u201c\u00bfVes el circo, hija?: Pues es el mundo. Ner\u00f3n, tambi\u00e9n hay un\u00a0 Ner\u00f3n. Ahora el que est\u00e1 en (determina el punto). \u00c9se es Ner\u00f3n. Los ministros que ves a\u00a0 su lado son sacerdotes que est\u00e1n conformes con lo que piensa Ner\u00f3n. La\u00a0 plaza del circo\u00a0 la ver\u00e1s llena: Es el pueblo. \u00bfVes c\u00f3mo han abierto la trampa?: Tambi\u00e9n hoy existe, hija. En ella est\u00e1n encerradas, para cuando llegue el d\u00eda, personas a quienes he concedido gracias y no han sabido sacar el partido por M\u00ed deseado: \u00c9sas han de ser las fieras que os devoren. Hay de todo: sacerdotes y seglares. Por \u00faltimo, \u00bfhas visto las personas que llevaban a matar? Tambi\u00e9n hay de todo: Hombres, mujeres, ancianos y peque\u00f1os, de todo.<\/span><\/h3>

                      No teng\u00e1is miedo, que el martirio pronto acaba. Tened puesta la mirada ah\u00ed, en el cielo. De muchos de los que devoren, \u00a1qu\u00e9 cosas m\u00e1s grandes he de hacer Yo!<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Porque son los que han sabido seguir consejos que he dado; los que a mi Madre han amado desde el principio hasta el fin.<\/span><\/h3>

                      Yo os dar\u00e9 fortaleza para que pod\u00e1is luchar:<\/span><\/h3>

                      y no os cans\u00e9is de esperar que el tormento pronto acaba.<\/span><\/h3>

                      Los jueces ser\u00e1n severos; no tembl\u00e9is ante esos jueces:<\/span><\/h3>

                      Tiemble quien desobedece los mandatos del Eterno.<\/span><\/h3>

                      El que oye muchas veces de Mi Madre los consejos; el que ve de mis reflejos Mi rostro severo y grave;<\/span><\/h3>

                      Al que Yo he dado la se\u00f1a y distinguir al demonio;<\/span><\/h3>

                      al que mi Madre le ense\u00f1a a que no sirva de estorbo:<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Mientras viv\u00eds en el mundo trabajad sin compasi\u00f3n; trabajad mucho y profundo y obtendr\u00e9is la salvaci\u00f3n\u201d.<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      La vidente<\/em>:<\/span><\/h3>

                      Dame que piense en Vos, Madre querida; quererte con amor siempre constante:<\/span><\/h3>

                      Que el Esp\u00edritu Santo est\u00e1 delante y los tres, en uni\u00f3n, me deis la vida.<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Estrella sois\u00a0 refulgente de amores resplandeciente,<\/span><\/h3>

                      Virgen hermosa, Mar\u00eda.<\/span><\/h3>

                      \u00bfQu\u00e9 gusto yo no tendr\u00eda si pudiese yo ofrecerte un ramo de flor divina?<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Te o\u00ed, por fin decir:<\/span><\/h3>

                      La azucena has de elegir, s\u00edmbolo de la pureza<\/span><\/h3>

                      y la humildad con presteza.<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Eleg\u00ed con preferencia de mi gusto las virtudes:<\/span><\/h3>

                      sabes que son la obediencia, la humildad y la paciencia,<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      la castidad, sobre todo; penitencia a todas horas, tambi\u00e9n mortificaci\u00f3n ser\u00e1n las acreedoras<\/span><\/h3>

                      a tu eterna salvaci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      En otra ocasi\u00f3n la Sant\u00edsima Virgen me dict\u00f3 estas quintillas:<\/span><\/h3>

                      \u201c\u00c9rase un ni\u00f1o de ojos muy bellos, frente muy pura,<\/span><\/h3>

                      boca muy fina, y rubios cabellos:<\/span><\/h3>

                      Era este ni\u00f1o flor delicada, rayo de luz<\/span><\/h3>

                      pura y sin mancha, linda y dorada:<\/span><\/h3>

                      Erase un ni\u00f1o de gracias lleno, tiernas sonrisas, dulces palabras, mirar sereno:<\/span><\/h3>

                      Era este ni\u00f1o tan bello y bueno, tan sabio y santo Dios, nuestro Rey, Jes\u00fas Nazareno\u201d.<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Pr\u00f3xima etapa a la publicaci\u00f3n del Libro<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      Cuenta esta etapa, muy importante, cuatro meses; y en ella Benita no ha dejado de tener, y sigue en la actualidad teniendo, diariamente dos \u00e9xtasis, cuando menos, siendo nosotros sus testigos. En nuestros cuadernos de Memorias llevamos registrados todos y cada uno de dichos \u00e9xtasis con sus visiones y revelaciones, admirabil\u00edsimos por sus lecciones y avisos. Con la particularidad de que, a medida que los d\u00edas adelantaban, y Jes\u00fas y Mar\u00eda se mostraban m\u00e1s interesados, (hablamos as\u00ed a nuestro modo) tambi\u00e9n el demonio, a esa misma proporci\u00f3n, iba adentr\u00e1ndose m\u00e1s en las libertades que se toma para obrar el mal.<\/span><\/h3>

                      No todo es hacedero, ahora y aqu\u00ed manifestar. Queda lo m\u00e1s \u00edntimo y particular, sobre personas y cosas de Ezquioga, y de fuera, presentes y venideras, para tiempos futuros. Por esta raz\u00f3n espigaremos en esta Secci\u00f3n lo m\u00e1s saliente<\/span><\/h3>

                      \u00a0<\/h3>

                      y que mayor granaz\u00f3n ofrezca. De todos modos cumple decir que el d\u00eda que tales Memorias se conozcan, se habr\u00e1n cumplido muchas cosas que en ellas se insertan; se conocer\u00e1n otras en tiempos a\u00fan muy futuros; y muchos, con su lectura, fortalecer\u00e1n su fe y su caridad, y alabar\u00e1n a Dios y a su Madre, que tales prodigios obran. Si la humanidad no estuviese tan adelantada en el mal, algo m\u00e1s se podr\u00eda decir; pero es que esta humanidad, en general, suele mezclar y hasta confundir la obra divina con la humana; y no hay cosa peor para el hombre y de lo que m\u00e1s se indigna Nuestro Se\u00f1or. El espejo est\u00e1 en los videntes de Ezquioga. Precisamente, nuestro gusto ser\u00eda declarar lo que para bien de todos el cielo revela y \u00a1qu\u00e9 l\u00e1stima que, a causa de impreparaci\u00f3n de aquellos para quienes se revela, no se pueda manifestar la revelaci\u00f3n!<\/span><\/h3>

                      Uno <\/em>de los notables extremos de los primeros d\u00edas de esta etapa ha sido la sangraci\u00f3n de dos crucifijos en Gerona y L\u00e9rida y la sudaci\u00f3n del de Gerona, con promesa de sangraci\u00f3n y sudaci\u00f3n, para fines espirituales diversos. De forma que han constituido tres profec\u00edas cumplidas, seg\u00fan se documenta en la Serie C.<\/span><\/h3>

                      Otro <\/em>ha sido a) el persistente dialogar del diablo con nosotros y b) acometimiento del mismo a Benita, maltrat\u00e1ndola, y c) a nosotros, caus\u00e1ndonos muchos dolores. Lo primero era para enredarnos y pescarnos; lo segundo, para la conversi\u00f3n de la autoridad laica X; y lo tercero, para ver si nos entraba p\u00e1nico y abandon\u00e1bamos lo que entre manos llevamos.<\/span><\/h3>

                      Otro <\/em>es la aparici\u00f3n asidua, durante muchas noches, del Ni\u00f1o Jes\u00fas con la Madre Virgen, quien a ruegos nuestros, nos refer\u00edan tiernos episodios de su vida, particularmente de su ni\u00f1ez, que no constan en el Evangelio, con los cuales nos instru\u00eda y regalaba.<\/span><\/h3>

                      Otro <\/em>es la manifestaci\u00f3n del estado actual de cada vidente y exvidentes y simpatizantes suyos, incluso de Benita Aguirre, en \u00e9xtasis, que no se enteraba de lo que se hablaba; para que su director apreciara bien las cosas y escribiera sobre el particular.<\/span><\/h3>

                      Otro <\/em>es la instrucci\u00f3n doblemente diaria dada por la Sant\u00edsima Virgen para nuestro gobierno y el de nuestro cargo, en lo que toca al pasado, presente y porvenir; y ordenarnos que escribamos a los que Nuestra Se\u00f1ora desea, aleccion\u00e1ndonos y mand\u00e1ndonos las leamos las cartas recibidas y las contestadas para su aprobaci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                      Otro <\/em>es la correcci\u00f3n mariana de este Libro, correcci\u00f3n tan admirable que, de no haber sido as\u00ed, no hubi\u00e9ramos llegado a imprimirle. Conservamos empero, en los originales y las pruebas, las correcciones y notas practicadas por la Virgen Mar\u00eda, unas mediante la vidente, y otras directa e inmediatamente por la divina Se\u00f1ora, de noche, mientras est\u00e1bamos recogidos, y nadie materialmente pod\u00eda acercarse a los originales. Adem\u00e1s, Nuestra Se\u00f1ora posteriormente lo declar\u00f3 as\u00ed a la vidente.<\/span><\/h3>

                      Y, \u00faltimamente, son las instrucciones sobre la impresi\u00f3n y publicaci\u00f3n del presente Libro, de cuya lectura espera lo que no ha conseguido en la campa de Ezquioga. El tiempo hablar\u00e1. En esta postrera \u00e9poca hay que registrar la conversi\u00f3n a mejor vida del ni\u00f1o Jos\u00e9 M\u00aa Cocho, de Valladolid, habida durante el pasado mes de abril: uno de los casos notables, vistos en estos tiempos, que se ha dado, ciertamente, en testimonio de la realidad de las apariciones de la Virgen en Ezquioga.<\/span><\/h3>

                      Este ni\u00f1o aparentaba una puntualidad, piedad y humildad raras en su edad y las circunstancias que le rodeaban, debido a causas, que no importa apuntar. Not\u00e1bamos que la Sant\u00edsima Virgen le manifestaba un cari\u00f1o especial, que atribu\u00edamos en parte, a la conducta singularmente devota del ni\u00f1o. Nosotros, sin embargo, est\u00e1bamos a la reserva; cuando transcurridos algunos meses, presenciamos las amargas quejas, aumentadas en terribles y descorazonadoras, casi inexplicables, de Nuestra Se\u00f1ora contra \u00e9l, Jos\u00e9 Mar\u00eda. Quisimos hablar a \u00e9ste para ver si le reduc\u00edamos; mas la Virgen lo imped\u00eda. \u00bfQu\u00e9 ocurre aqu\u00ed?, nos dec\u00edamos. \u00bfQu\u00e9 caso es \u00e9ste tan extraordinario que no comprendemos? Pero, al propio tiempo, not\u00e1bamos la preocupaci\u00f3n ininterrumpida de Nuestra Se\u00f1ora, traducida en inter\u00e9s creciente por dicho ni\u00f1o. Al cabo de un mes pudimos saber que, el aludido se arrojaba decididamente en brazos de la divina Madre, seg\u00fan y como se detalla en Documentaci\u00f3n Serie C, Secci\u00f3n III, c) a donde remitimos al lector, donde conocer\u00e1 completamente el caso.<\/span><\/h3>

                      Al entregarnos el convertido su documento de referencia, nos escribe: \u201cAqu\u00ed,<\/span><\/h3>
                      1. Amado, interprete mi agradecimiento a la Sant\u00edsima Virgen y el deseo que tengo de que la conozcan los pecadores, como yo; para que la amen, como yo la amo, ahora, sin miedo ni reparo a nada, manifestando esto para gloria de Nuestra Se\u00f1ora\u201d.<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

                        Por lo que a m\u00ed toca, firmo las antecedentes Declaraciones en Valladolid, a 6 de Mayo de 1934.<\/span><\/h3>

                        Benita Aguirre <\/em>(rubricado)<\/span><\/h3>

                        \u00a0<\/p>\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/section>\n\t\t\t\t

                        \n\t\t\t\t\t\t
                        \n\t\t\t\t\t
                        \n\t\t\t
                        \n\t\t\t\t\t\t
                        \n\t\t\t\t
                        \n\t\t\t\t\t\t\t

                        DOCUMENTACI\u00d3N PARA TODO LO ANTERIOR<\/h1>

                        Nuestras pruebas<\/span><\/h3>

                        Documentaci\u00f3n Serie A, B y C<\/span><\/h3>

                        \u00a0<\/h3>

                        \u201cTe confieso Padre, Se\u00f1or del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas a los sabios y prudentes del siglo y las revelaste a los humildes. As\u00ed, Padre, porque as\u00ed te fue grato\u201d. (Mat. 11-25)<\/em><\/span><\/h3>

                        Dios ha escogido a los necios, seg\u00fan el mundo, para confundir a los sabios; a los flacos del mundo para confundir a los fuertes; y a las cosas viles y despreciables del mundo, y a aquellos que eran nada para destruir las que son, al parecer, m\u00e1s grandes, a fin de que ning\u00fan mortal se jacte ante su\u00a0 acatamiento. (1\u00aa Cor. 1, 27-28-29).<\/span><\/h3>

                        \u00a0<\/h3>

                        Observaciones<\/span><\/h3>

                        \u00a0<\/h3>

                        Nos remitimos a todo el texto del Libro, con relaci\u00f3n a las humildes personas de los videntes, y particularmente, a los cap\u00edtulos VI y XVI, en los que de ellas ex profeso tratamos, para que a las mismas sean aplicadas rigorosamente <\/em>los dos sagrados textos anteriores, en los que Nuestro Se\u00f1or Jesucristo alaba a su eterno Padre por haber escogido para todas sus grandes Obras a los peque\u00f1uelos y despreciables seg\u00fan el mundo, por las razones que luego aduce el Ap\u00f3stol; pero, n\u00f3tese bien, y esto es para todos, no videntes y videntes, a fin de que ning\u00fan mortal se jacte ante el acatamiento divino.<\/em><\/span><\/h3>

                        Aqu\u00ed suelen originarse algunos interrogantes:<\/span><\/h3>
                        • \u00bfCu\u00e1les son las cosas que el eterno Padre escondi\u00f3 a los sabios prudentes y revel\u00f3 a los humildes? <\/em>Y se contesta: Pues, precisamente, aquellas que el Salvador trata en el mismo cap\u00edtulo, las cuales contrastan enormemente con la manera de pensar y sentir y obrar del mundo. V. gr.: \u201cVino Juan mortificado, y dicen que est\u00e1 endemoniado. a venido el Hijo del Hombre comiendo y bebiendo, y dicen que es un glot\u00f3n y bebedor, amigo de publicanos y gentes de mala vida\u201d.<\/span><\/h3><\/li>
                        • \u00bfPor qu\u00e9 el juicio del mundo sobre las cosas y personas sagradas es desatinado y errado? <\/em>Pues, precisamente, porque este juicio est\u00e1 en raz\u00f3n directa de su enemistad con Sabemos que el mundo es enemigo de<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                          \u00a0<\/h3>

                          Dios, y por esto, aliado del diablo. Forzosamente su manera de pensar, sentir y obrar ha de estar en oposici\u00f3n re\u00f1ida con la manera de pensar, sentir y obrar de Dios. Y como entre los componentes del mundo figura todo linaje de hombres y mujeres de todas clases sociales, incluso sacerdotes y religiosos de todas categor\u00edas, que aun predicando que el mundo es uno de los tres enemigos del alma, sea por amistad, bienestar u otras inconfesables pasiones, van asociados a \u00e9l, producen una mezcla de modos de pensar, sentir y obrar mundanos y divinos que, como en todas las mezclas, el elemento inferior, bajo y ruin, desnaturaliza al superior, alto y bueno y convierte la mezcla en mala, repulsiva y nefanda. Tales son las cosas del mundo, particularmente aquellas que, partiendo del elemento religioso mundano, echan a perder las del elemento religioso divino.<\/span><\/h3>

                          El mundo tiene por locura la cruz, y se esfuerza por negar todo lo sobrenatural en lo humano. Que le dejen a \u00e9l vivir del mundo y para el mundo.\u00a0 Los que le siguen, aunque religiosos, se quiebran la cabeza cuando ven claramente la sublimidad de la cruz y las cosas sobrenaturales en la tierra. Las ven, seg\u00fan la fe, pero las niegan, seg\u00fan el mundo.<\/span><\/h3>
                          • Ahora se comprender\u00e1 por qu\u00e9 los primeros tratan de locos, farsantes, negociantes, etc., a los videntes y simpatizantes<\/em>; y los segundos pastelean en esto, que no es lo que no debe ser, y al fin se van con el mundo, que les tira de cabeza<\/span><\/h3><\/li>
                          • Ahora se comprender\u00e1 tambi\u00e9n por qu\u00e9 Jesucristo, Se\u00f1or Nuestro ha ocultado y negado las sublimidades divinas a los sabios y prudentes y las ha revelado a los humildes seg\u00fan el mundo<\/em>. La finalidad de Dios en esto la trae San Pablo, cuando afirma que el Se\u00f1or ha escogido a los necios y flacos, seg\u00fan el mundo, para confundir a los sabios y fuertes; y a las cosas viles y despreciables y que son nada, seg\u00fan el mundo, para destruir las que, al parecer, son m\u00e1s grandes. Confundir y destruir<\/em>: Confundir la soberbia y prudencia de la carne, y destruir el poder y la astucia mundana. La historia lo reconoce as\u00ed, y quieran que no, los hombres han de tascar el freno divino de siempre.<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                            Dentro de poco, cuando suene la hora, que ser\u00e1 cuando Dios haya purificado los hombres y las cosas que llenan su plan; entonces, a los resplandores de la luz eterna, se ver\u00e1 que no fueron locos, farsantes y negociantes que trataron y defendieron las Santas Apariciones de Ezquioga, sino que se les dar\u00e1 completa raz\u00f3n; quedando, in puris<\/em>, al descubierto, las mara\u00f1as de los que con tenacidad, digna de mejor causa, les opusieron.<\/span><\/span><\/h3>
                            • Y \u00faltimamente se advertir\u00e1 la raz\u00f3n por la cual la Sant\u00edsima Virgen no aparece, de ordinario, a los prelados y las personas de valer, que afianzar\u00edan las Apariciones\u2026 <\/em>Porque, ciertamente, quiere que los prelados y las personas de valer la vean a Ella, de ordinario, en el profundo y constante estudio que de sus Apariciones a los d\u00e9biles e ignorantes hagan; y no se pronuncien a favor ni en contra, mientras no hayan empleado todos, absolutamente todos los recursos de la ciencia, la virtud y la oraci\u00f3n incesantes en sus manos<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                              Esto es tan l\u00f3gico que lo contrario nos sabr\u00eda a falta de\u00a0 compensaci\u00f3n divina, si esto, por imposible ocurrir pudiera. Porque, si el cielo tratare con la propia medida al sabio que al ignorante, al poderoso que al desvalido, a la autoridad que al subordinado, al prelado que al simple fiel, entonces, \u00bfd\u00f3nde estar\u00eda la ley de la compensaci\u00f3n, en virtud de la cual Dios da a unos lo que regatea a otros, para que as\u00ed brille su justicia? Dios concede robusta salud a un pobre, y en cambio, a lo mejor se la niega a un rico. Da fuerzas materiales a un ignorante, y en cambio, las da intelectuales a un sabio. Otorga excelente voz a un ga\u00f1an, y en cambio, la retira a un buen orador, etc.<\/span><\/h3>

                              Es l\u00f3gico, pues, que en el terreno de las Apariciones, conceda \u00e9stas al desvalido e ignorante, mientras que al sabio le d\u00e9 conocimientos para penetrarlas, y al poderoso valer para apoyarlas: penetraci\u00f3n y apoyo que no necesita el necio y flaco, porque a estos les basta y sobra lo que la revelaci\u00f3n les descubre.<\/span><\/h3>

                              El listo y el fuerte, el prelado y el gobernante no tienen raz\u00f3n para pedir a Dios visiones y revelaciones, que les sirvan de medios para creer; precisamente, porque en su mano tienen sobrados medios intelectuales y experimentales para escrutarlas y definirlas, luego de perfectamente escrutadas. Entonces es cuando ver\u00e1n perfectamente a Jes\u00fas, a la Virgen y a los santos en los estudios que de tales visiones hayan realizado. Pretender lo contrario; exigir como alg\u00fan prelado ha hecho, el que, como condici\u00f3n para creer en las Apariciones de Ezquioga, hechas a sus diocesanos, Nuestro Se\u00f1or y la Virgen deban aparecerse a \u00e9l, es tan jactancioso como rid\u00edculo. \u00bfHasta en lo eterno se quiere mandar?<\/span><\/h3>

                              \u00a0<\/h3>

                              Documentaci\u00f3n Serie A<\/span><\/h3>

                              \u201cPruebas materiales, periciales y morales\u201d<\/span><\/h3>

                              La Documentaci\u00f3n Serie A<\/em>, integra el texto de esta Obra, que el lector habr\u00e1 podido ojear y examinar despacio. Por esta raz\u00f3n, es suficiente que la aduzcamos en \u201cSumario\u201d, se\u00f1alando el cap\u00edtulo correspondiente a cada Apartado, a fin de que puedan repasarse. Es ello muy conveniente.<\/span><\/h3>

                              \u00a0<\/h3>

                              Esta Documentaci\u00f3n Serie A<\/em>, consta de los Apartados siguientes:<\/span><\/h3>
                              1. Los 22 g\u00e9neros de pruebas que en el Pr\u00f3logo se expresan y en el Texto se detallan.<\/span><\/h3><\/li>
                              2. Los 18 testimonios e informes de ilustres fisi\u00f3logos, m\u00e9dicos y psic\u00f3logos a favor de los Hechos de Ezquioga, que integran el cap\u00edtulo<\/span><\/h3><\/li>
                              3. Las 12 curaciones milagrosas, entre otras muchas, atribuidas a la Sant\u00edsima Virgen en sus Apariciones a Ezquioga, que integran el cap\u00edtulo<\/span><\/h3><\/li>
                              4. Las 7 conversiones admirables, entre otras, al Catolicismo, debidas a Nuestra Se\u00f1ora en su descensi\u00f3n a Ezquioga, detalladas en el cap\u00edtulo<\/span><\/h3><\/li>
                              5. Los 12 favores especiales, entre otros, recibidos de Nuestra Se\u00f1ora, que son parte del expresado cap\u00edtulo.<\/span><\/h3><\/li>
                              6. Las 10 profec\u00edas cumplidas y el conocimiento de secretos, entre innumerables dados por Nuestra Se\u00f1ora, y que son parte del referido cap\u00edtulo XIX.<\/span><\/h3><\/li>
                              7. Los 10 notables castigos, entre muchos otros, recibidos a causa de burla, negaci\u00f3n o propaganda negativa de las dichas Apariciones, con los que se clausura al mencionado cap\u00edtulo, y<\/span><\/h3><\/li>
                              8. Los 40 interrogatorios oficiales a videntes y simpatizantes durante la doble persecuci\u00f3n, y los procesos seguidos a los mismos, que son parte de los cap\u00edtulos XXIV-XXV.<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

                                \u00a0<\/h3>

                                Documentaci\u00f3n Serie B<\/span><\/h3>

                                \u00a0<\/h3>

                                \u201cPruebas testificales\u201d: Declaraciones seleccionadas de videntes y exvidentes de Ezquioga. Importancia de las revelaciones en estas Declaraciones contenidas. El valor sobrenatural de las revelaciones est\u00e1 en raz\u00f3n directa de la incapacidad y humildad de los que las declaran. Por motivos de curiosidad hist\u00f3rica y art\u00edstica. Dificultades en la recogida, el examen y la selecci\u00f3n de las visiones y revelaciones que van aqu\u00ed declaradas. Un criterio de autenticidad de las revelaciones. Las pruebas cient\u00edficas deseadas. Sobre las revelaciones prof\u00e9ticas. Se\u00f1ales divinas para distinguir la verdadera de la falsa profec\u00eda. Ejemplo sagrado de videntes, exvidentes, malos y falsos videntes de Ezquioga. Reglas cr\u00edticas sobre la interpretaci\u00f3n de profec\u00edas. Concordancia de las profec\u00edas de los videntes de Ezquioga con las ya conocidas y acreditadas referentes a los \u00faltimos tiempos. Tres modos de aplicaci\u00f3n de las Declaraciones de los Videntes de Ezquioga. Semejanzas y armon\u00edas entre las profec\u00edas de los Libros Sagrados y los videntes de Ezquioga. Impresi\u00f3n general y particular sobre las visiones y revelaciones contenidas en tales Declaraciones. Apariciones de la Sant\u00edsima Virgen. Idem. de Jes\u00fas. Idem. de \u00e1ngeles y santos. Idem. del diablo. Lugares en que aparece la Virgen y fruto alcanzado. Los castigos se imponen. Instrucciones y advertencias\u2026<\/em><\/span><\/h3>

                                \u00a0<\/em><\/span><\/h3>

                                \u201cPruebas testificales\u201d.- Declaraciones de videntes y exvidentes de Ezquigoa.<\/span><\/h3>

                                \u00a0<\/h3>

                                Importancia de las revelaciones en estas declaraciones contenidas.<\/em>– Es tan grande, tan descomunal la multiplicidad, dentro de la m\u00e1s absoluta unidad ortodoxa de las revelaciones de Nuestro Se\u00f1or Jesucristo y de nuestra Se\u00f1ora Mar\u00eda, hechas a los videntes de Ezquioga; tienen \u00e9stas un valor tan excepcional para el presente y porvenir, que cada d\u00eda que pasa par\u00e9cenos m\u00e1s singulares. Los que hemos seguido, paso a paso, el desarrollo de las mismas, las consideramos como humildes fuentecillas en sus comienzos, arroyuelos modestos en su formaci\u00f3n; arroyos crecidos en su curso y r\u00edos formidables a las horas presentes, con fundadas esperanzas de pr\u00f3ximos desbordamientos, que lo inundar\u00e1n todo, y a cuyo terrible paso, el l\u00e9gamo que dejar\u00e1 ser\u00e1 el abono fertilizador que dar\u00e1 rica savia a las nuevas plantas que broten.<\/span><\/h3>

                                Cada revelaci\u00f3n aportada es una nueva ense\u00f1anza para la humanidad, dada por el mismo que la cre\u00f3 y la gobierna y la ha de juzgar, a quien se unen las dictadas por el \u201cAuxilio de los Cristianos\u201d, que notando el poco caso que de su Hijo Divino, en general se hace, se ha ofrecido a intervenir, con el objeto de ver si ante la presencia suya en Ezquioga, la humanidad se conmov\u00eda y retornaba sus pasos hacia Dios.<\/span><\/h3>

                                Nada hay, que sepamos, en la historia universal, que iguale a la excepcional variedad una <\/em>de estas Revelaciones, porque es evidente que \u201cla Obra de la Sant\u00edsima Virgen en Ezquioga, es tan grande que los tiempos no han conocido obra igual\u201d. \u2014Documentaci\u00f3n Serie B, 8, d)\u2014. Y cada fecha que transcurre, siendo las revelaciones m\u00e1s concretas, a los actuales y futuros tiempos relativos, crece con ellas la admiraci\u00f3n, rozando el pasmo, y casi la impotencia por seguir el curso de su data, notando que ellas son, despu\u00e9s de los Libros Santos, sobre todo los Evangelios, la doctrina que los parafrasea, y aparte de estos Santos Libros, los documentos que explican y acent\u00faan el Plan Divino sobre la humanidad presente y futura, y todas ellas constituyen una Suma Sagrada de conocimientos pr\u00e1cticos saludables para el particular y la sociedad presente y del porvenir.<\/span><\/h3>

                                Indicaciones \u00fatiles que alegran a quien las recibe; conocimientos provechosos que ampl\u00eda los adquiridos; lecciones pr\u00e1cticas que dan ejemplo y vida; ilustraciones preciosas que satisfacen al m\u00e1s exigente; doctrinas prof\u00e9ticas, que, aunque muchas de ellas condicionales, <\/em>a su tiempo se cumplen; cuadros apocal\u00edpticos que infunden saludable pavor; entretenimientos cari\u00f1osos que atraen y subyugan; consejos santos que estimulan a vivir bien; avisos oportunos que evitan disgustos y errados pasos; mandatos terminantes que empujan a su cumplimiento; y conminaciones terribles que, ofreciendo temor, evitan el pecado; todo esto son las Revelaciones de Jes\u00fas y Mar\u00eda a los videntes de Ezquioga. \u2014En cuanto al valor teol\u00f3gico de estas Revelaciones, t\u00e9ngase presente lo que dejamos dicho en el cap\u00edtulo XII acerca del Valor de las apariciones y revelaciones privadas\u2014.<\/span><\/h3>

                                L\u00e9anse detenidamente muchas veces, con la reverencia debida, y sabore\u00e1ndose su grato contenido, se obtendr\u00e1 de tal panal la rica miel del cielo, que se nos derrama, para que nuestras almas se harten de ella. Bienaventurado el que lee y escucha las palabras de esta profec\u00eda y observa las cosas escritas en ella, pues el tiempo (de cumplirse) est\u00e1 cerca.<\/span><\/h3>

                                A nosotros lo que nos sorprende y casi no nos lo explicamos, es que, habiendo tantos sacerdotes de ambos cleros, tan amantes de Mar\u00eda, tantas congregaciones y revistas marianas, y tantos entusiastas por la Madre de Dios de misericordia, que trabajan con celo por la difusi\u00f3n de su nombre y de su culto y de sus gracias, y por la proclamaci\u00f3n Universal Mediaci\u00f3n y Asunci\u00f3n en cuerpo y alma a los cielos, no estudien las Apariciones Marianas de Ezquioga. Pero, \u00bfqu\u00e9 digo estudien, si en el terreno de los grandes absurdos no encontramos otro\u00a0 mayor que, el que menos<\/em>, silencia los Hechos de Ezquioga por el pueril temor al qu\u00e9 dir\u00e1n los \u00bfsabios?, los \u00bfpol\u00edticos?, los \u00bfpoderosos? del mundo, creyendo que no deben aventurarse a desempe\u00f1ar un desairado papel en estos tiempos de deserci\u00f3n e incredulidad cat\u00f3licas\u2026; y el que m\u00e1s, despotrica, ignara, cobarde y blasfematoriamente contra ellos sin temor a la tierra ni al cielo.<\/span><\/span><\/h3>

                                \u00bfQu\u00e9 es esto? Pero \u00bfa qu\u00e9 tiempos hemos llegado? \u00bfEs que es l\u00f3gico, es posible que se tema a una negaci\u00f3n sin estudio y sin pruebas? \u00bfNo es solo cobard\u00eda sin nombre? Y \u00bfno se permitir\u00e1 que sospechemos que tanto celo desplegado en obsequio de la Madre de Dios, no ofrezca sus enormes lunares, cuando se la regatea y hasta se le ridiculiza en la m\u00e1s grande Obra secular de esta misma Se\u00f1ora nuestra?<\/span><\/h3>

                                \u00bfSe cree o no se cree? Y no queremos que se crea sin fundamentos, sin raciocinio, sin pruebas, sin contrastes objetivos. Queremos que, aun los fundamentos, los raciocinios, las pruebas y los contrastes subjetivos, a\u00fan muy valiosos, se dejen a un margen para que no se diga que creemos al \u201cmagister dixit\u201d sino a los Hechos<\/em>: \u00bfMateriales? Materiales. \u00bfPsicol\u00f3gicos? Psicol\u00f3gicos.<\/span><\/h3>

                                \u00bfMorales? Morales. Pero que nadie se sustraiga a la instrucci\u00f3n que arrojan, y a la fe que apoyan y consolidan tales fundamentos, tales raciocinios, tales pruebas, y tales contrastes, que avaloran las Declaraciones que aqu\u00ed insertamos, para que, ante lo que son y significan, venga a postrarse todo el mundo y bendiga a la Madre de misericordia y se salve.<\/span><\/h3>

                                Si los cat\u00f3licos espa\u00f1oles, particularmente los vasco-navarros, a cuyo pa\u00eds la Stma. Virgen ha descendido con tantas pruebas de amor, hubiesen cooperado (y deb\u00edan haber cooperado) en la medida que nuestra Se\u00f1ora se propuso en su Descendimiento: el triunfo del Catolicismo en Espa\u00f1a, estar\u00eda tan cerca que lo tocar\u00edamos con nuestras manos; y por dicho triunfo, algo m\u00e1s se hubiera beneficiado la humanidad toda; aminor\u00e1ndose ciertamente los terribles castigos que nos aguardan. \u00a1Qu\u00e9 responsabilidad tan tremenda la de los que han puesto obst\u00e1culos a la Obra de Nuestra Se\u00f1ora!<\/span><\/h3>

                                \u00a0<\/h3>

                                El valor sobrenatural de las Revelaciones est\u00e1 en raz\u00f3n directa de la incapacidad y de la humillaci\u00f3n de los que las declaran.<\/span><\/h3>

                                \u00a0<\/h3>

                                Tratamos del \u201cvalor sobrenatural\u201d de las Revelaciones; no del valor humano, sea este hist\u00f3rico, art\u00edstico, cient\u00edfico o teol\u00f3gico; ni del valor preternatural, que<\/span><\/h3>

                                \u00a0<\/h3>

                                cuando lo es, francamente lo declaramos; sino del valor m\u00edstico, del realmente celestial, del que parte de Jes\u00fas y de Mar\u00eda o de sus delegados celestiales: Este valor, pues, de las Revelaciones, que aqu\u00ed insertamos, est\u00e1 en raz\u00f3n directa de la incapacidad y de la humillaci\u00f3n de los que las declaran.<\/span><\/h3>

                                1\u00ba Si las Revelaciones fuesen dadas a un sabio, podr\u00edanse atribuir a la\u00a0 sabidur\u00eda; si a un poderoso, podr\u00edamos imputar al poder; si a un astuto o p\u00edcaro, podr\u00edanse achacar a la astucia o picard\u00eda. Es m\u00e1s: con la mejor buena fe del mundo, si esto fuera, podr\u00edase dudar de las Revelaciones; cuando menos, podr\u00edase sospechar si la sabidur\u00eda, el poder, la astucia y la picard\u00eda habr\u00edan tomado en ellas poca o gran parte.<\/span><\/h3>

                                Pero el caso no es as\u00ed: El caso es que las Revelaciones son dadas generalmente a personas ignorantes de la ciencia, del arte y hasta de las trapacer\u00edas humanas. Es m\u00e1s; no son dadas solamente a personas ignorantes, sino a personas d\u00e9biles o de corta edad, lo cual agrava el detalle de la ignorancia. Ahora bien; no es posible creer que estas personas puedan proferir, de suyo, lo que de suyo ni tienen ni pueden tener \u201chic et nunc\u201d. Ni lo discurren ni lo conciben ni lo han o\u00eddo ni lo han estudiado. Y cuando tienen las Revelaciones, que es generalmente, cuando est\u00e1n en verdadero \u00e9xtasis, se prueba por el \u00e9xtasis mismo que, a\u00fan cuando las hubiesen o\u00eddo y estudiado, a\u00fan cuando estuviesen preparadas para darnos gato por liebre. v. gr.: no es posible psicol\u00f3gica ni f\u00edsicamente que pudieran repetirlas. No queda lugar a otra conclusi\u00f3n, luego que es examinado el ext\u00e1tico declarante, y se ve que su \u00e9xtasis es aut\u00e9ntico, con los contrastes que se quiera, que inclinarse ante la afirmaci\u00f3n de que la revelaci\u00f3n proferida es, como tal, revelaci\u00f3n del cielo.<\/span><\/h3>

                                Luego la postrera conclusi\u00f3n es clara, es a saber: que la incapacidad de los declarantes es un auxiliar de prueba f\u00edsica del valor sobrenatural de las revelaciones declaradas. <\/em>La incapacidad contrasta y destaca la revelaci\u00f3n; y a mayor incapacidad mayor valor de la revelaci\u00f3n. Cuanto m\u00e1s infeliz es el vidente m\u00e1s grande se muestra el Agente que obra en \u00e9l. Es un peque\u00f1o, es un tosco, es un in\u00fatil instrumento que, puesto en manos del Supremo Artista es divinamente pulsado; para que se vea que cualquier persona o cosa, por despreciable que sea, en manos del divino Artista, suena maravillosamente; y esto \u201cut non glorietur\u00a0 omnis caro in conspectu ejus\u201d \u20141\u00aa Cor. 1-29\u2014, para que nadie pueda gloriarse en la presencia de Dios.<\/span><\/h3>

                                2\u00ba Lo que acabamos de apuntar se refiere a la parte involuntaria <\/em>del instrumento humano; porque, si rozamos su parte voluntaria<\/em>, es a saber: si este instrumento incapaz, por lo mismo que lo es y por lo mismo que se tiene, ni se enorgullece ni se engr\u00ede ni se infat\u00faa por el don recibido; antes, por el contrario, se abaja y vilipendia m\u00e1s en su presencia y en la de Dios; entonces, esta humillaci\u00f3n contrasta y destaca m\u00e1s la obra divina de la Revelaci\u00f3n, por cuanto el vidente contribuye, de su parte, a levantarla o ensalzarla m\u00e1s. Por manera, que a mayor abatimiento del instrumento, mayor valor del sonido transmitido por su medio.<\/span><\/h3>

                                El vidente, por tanto, puede contribuir de su parte, humill\u00e1ndose<\/em>, al engrandecimiento de la obra divina, y esto, en s\u00ed misma considerada tal Obra y en lo que toca a la edificaci\u00f3n de las gentes; porque mucho hace la limpieza y el decoro del instrumento a la aceptaci\u00f3n del sonido. Cuanta m\u00e1s limpieza y cuanto m\u00e1s decoro mayor aceptaci\u00f3n. He ah\u00ed por qu\u00e9 la segunda finalidad divina en las revelaciones consiste en la edificaci\u00f3n del vidente y de los fieles que le oyen y le ven. Mucho hace a la aceptaci\u00f3n de la vianda el que \u00e9sta sea presentada en plato decente y purificado.<\/span><\/h3>

                                Nosotros, que alrededor de tres a\u00f1os, estamos en contacto inmediato con los videntes, estudi\u00e1ndolos de cien maneras, hemos podido apreciar con absoluta justeza la parte instrumental que estos tienen con el Agente divino, y las leyes que este divino Agente les impone; y hemos apreciado tambi\u00e9n el grado de conservaci\u00f3n del instrumento por parte de \u00e9ste; concluyendo que el instrumento suena bien, maravillosamente bien cuando es perfecta y amorosamente conservado.<\/span><\/h3>

                                Ante la necesidad, a) de fijar los hechos, que abonan nuestra leg\u00edtima defensa; b) de tejer las p\u00e1ginas de verdadera historia religiosa y social; y c) por motivos de curiosidad hist\u00f3rica y art\u00edstica\u2026<\/em><\/span><\/h3>
                                1. Ciertamente que nuestra obligada defensa cimentase en los Hechos que determinan la triple Documentaci\u00f3n A., B., C. particularmente la segunda, por lo que las Declaraciones de visiones y revelaciones quedan tan a salvo de la previa censura como el propio texto que las explica y sobre las que se basa; de forma que, siendo su parte, no s\u00f3lo integrante, sino substancial, era obligado aducirlas. Ahorrarlas ser\u00eda en perjuicio de la brillantez de la<\/span><\/h3><\/li>
                                2. Hay m\u00e1s; son las Declaraciones mencionadas unas monumentales hitas en el camino de la historia de la vida, que los amantes del saber tendr\u00e1n que consultar si quieren acertar en la verdad de los En este sentido, la aportaci\u00f3n de las Declaraciones, tan corregidas y limadas, son un gran servicio a la humanidad.<\/span><\/h3><\/li><\/ol>
                                  1. Los motivos art\u00edsticos arraigan en la novedad, hermosura y exquisitez de las visiones aut\u00e9nticas, tan homog\u00e9neas como variadas, tan nuevas como religiosas, tan actuales como ortodoxas, tan futuras como ciertas, con detalles ininventables, que prueban que, si no han sido copiadas de parte alguna, tampoco han sido fantaseadas, pues la fantas\u00eda humana no llega hasta rozar en tal forma a los probados<\/span><\/h3><\/li><\/ol>

                                    Que la severa o despiadada cr\u00edtica no quiera darles cr\u00e9dito\u2026 ah\u00ed es nada en comparaci\u00f3n del bagaje cultural, que de suyo arrojan, salido de personas incultas (que aqu\u00ed est\u00e1 lo simplemente maravilloso) y por esto mismo, siempre digno de que la severa cr\u00edtica lo tome muy en cuenta.<\/span><\/h3>

                                    En todos los menesteres de las visiones y revelaciones de que tratamos es preciso llevar siempre delante los ojos que, sobre todo, las revelaciones, en casi su totalidad, se refieren a la instrucci\u00f3n, edificaci\u00f3n, santificaci\u00f3n y salvaci\u00f3n del cuerpo social actual, claro es que aplic\u00e1ndose cada individuo su parte.<\/span><\/h3>

                                    Y esto da a entender sencillamente que las revelaciones no han sido dadas para los videntes que, en su caso, son \u2014lo hemos repetido\u2014 tubos del \u00f3rgano celeste: no es como de ordinario, en las personas santas que, las m\u00e1s de las veces atend\u00edan a la mayor santificaci\u00f3n de \u00e9stas. Es el cuerpo social,\u00a0 descentrado, deca\u00eddo, desviado, el que el cielo quiere salvar. Para \u00e9l son las revelaciones, cuyas Declaraciones deber\u00e1 atender y aplicarse, si no pretende frustrar los designios que sobre \u00e9l la Sant\u00edsima Virgen en sus apariciones a Ezquioga tiene.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Dificultades en la recogida, el examen y la selecci\u00f3n de las visiones y revelaciones que van aqu\u00ed detalladas.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    A primera vista parecer\u00e1 expedito el camino seguido para la b\u00fasqueda, transcripci\u00f3n y examen de las Declaraciones de las visiones y revelaciones que se fijan. Hemos hallado para ello un camino tortuoso, de cuestas empinadas, sembrado de piedras, tapizado de baches y erizado de espinas. Y cuando cre\u00edamos haberlo recorrido hemos tenido que volverlo a recorrer una, tres, seis y doce veces, arrancando cada vez espinas, cubriendo baches, quitando piedras, allanando cuestas, y present\u00e1ndolo lo m\u00e1s recto posible, sin dejar en todode encomendarnos al cielo, para dejarlo tal como se muestra en el Libro. Que no hemos omitido sacrificio alguno para que el trabajo, sin quitarle sustancialidad e integridad alguna, resulte con perfecci\u00f3n relativa.<\/span><\/h3>

                                    Hay en ello labores tan particulares que no se creer\u00edan aunque las expusi\u00e9ramos. El tiempo descubrir\u00e1 los hero\u00edsmos de sacrificio que implica una tarea semejante; y a los que crean que tan f\u00e1cil es, dados el tiempo y los elementos con que hemos contado, quisi\u00e9ramos verlos con las manos metidas en una masa tan dura.<\/span><\/h3>

                                    Se nos alcanza que algunos exvidentes sientan que sus declaraciones <\/em>hayan sido omitidas, luego de entregadas a nosotros. El hecho no se debe a nuestra voluntad, sino a la criba que no lo ha pasado. Ellos cumplieron con su deber, por amor a la obediencia, entreg\u00e1ndolas; y nosotros cumplimos con el nuestro, por amor a la verdad, separ\u00e1ndolas. Reine la caridad en todos y todas las cosas. En peor lugar se hallan los que, sordos y reacios, no se han allanado a presentarlas.<\/span><\/h3>

                                    Un criterio de autenticidad de las revelaciones<\/em>. El P. Bruno de Jes\u00fas y Mar\u00eda, carmelita, director de la revista \u201cEtudes Carmelitaines mystiques et missionaires\u201d,<\/span><\/h3>

                                    \u2014Par\u00eds, Descl\u00e9e, De Brovwer et Cie.,\u2014 observa que \u201cel enriquecimiento doctrinal consecutivo en las Apariciones es un criterio de autenticidad de las mismas\u201d. Hay que tener en cuenta que este docto padre, juntamente con profesores m\u00e9dicos, ha publicado en dicha revista: Les faits mysterieux de Beauraing<\/em>, con opini\u00f3n desfavorable a las apariciones ocurridas \u00faltimamente en este lugar, y de paso, como quien no lo quiere, rechaza tambi\u00e9n la sobrenaturalidad de las de Ezquioga; al cual padre, como a los que tratan de igual modo el asunto, les hacemos notar que, no habiendo estado \u00e9l en Beauraing, ni en Ezquioga, solo por haber o\u00eddo a dos o tres testigos, aunque sean calificados, \u2014Les Annales des Beauraing et de Banneux, n\u00ba. 9, p\u00e1g. 2\u2014, pues cada uno cuenta los hechos a su manera, mal puede informarse del estado de cosas en cada uno de dichos lugares, y menos a\u00fan puede enjuiciar rectamente el caso. Y tal van los razonamientos en dicha revista que, por sus pretensiones cient\u00edficas, deber\u00eda de andar con m\u00e1s tiento en lo que observa.<\/span><\/h3>

                                    Pero, dejando esta proposici\u00f3n incidental, y entrando en la substancia, es a saber: que \u201cel enriquecimiento doctrinal consecutivo en las Apariciones es un criterio de autenticidad de las mismas\u201d, siendo, como es, esta doctrina cierta, precisamente por serlo, y por haberla invocado el P. Bruno, echa por tierra cuanto habla desfavorablemente con respecto a Ezquioga, ya que las Apariciones de \u00e9stas tienen una pl\u00e9tora tal de \u201cenriquecimiento doctrinal consecutivo\u201d, que es caso primero, que sepamos, de la humanidad, habida cuenta del tiempo (dos a\u00f1os) en que las Apariciones transcurren. La Salette, Lourdes, F\u00e1tima, otros y muchos m\u00e1s, Beauraing, que realmente abunda poco, que sepamos, en este \u201cenriquecimiento doctrinal\u201d quedan muy atr\u00e1s, pero muy atr\u00e1s de Ezquioga. No\u00a0 hay m\u00e1s que ojear la triple Documentaci\u00f3n <\/em>de este Libro y se vendr\u00e1 en conocimiento de lo que decimos. Porque es tal <\/span>extensivo-intensiva <\/em>la \u201clabor doctrinal\u201d aut\u00e9ntica (hablamos, seg\u00fan dejamos advertido, sin querer prevenir el juicio definitivo de la Iglesia) de las Apariciones de Ezquioga, que abruma y admira, alecciona y espanta.<\/span><\/span><\/h3>

                                    \u00c9ste es el hecho singular <\/em>de las Apariciones de Ezquioga; y nosotros, que llevamos puestas las manos en la masa, desde casi el principio de las mismas, sin quitarlas un momento, podemos asegurar que en la triple Documentaci\u00f3n<\/em>, sin faltar lo substancial e integral, y lo que debe llegar a saberse <\/em>(t\u00e9ngase esto muy en cuenta) no todo ha podido llegar a nuestras manos, a\u00fan cuando lo hemos requerido; ni todo se puede publicar, habida cuenta del estado social actual y de la caridad que exige silenciar y disimular aquellas cosas que, hiri\u00e9ndola, se excitar\u00eda m\u00e1s que la aprovechar\u00eda.<\/span><\/h3>

                                    Si el P. Bruno hubiera estado en Ezquioga, o hubiera consultado con nosotros, no diera ciertamente opini\u00f3n desfavorable, en cuanto a la sobrenaturalidad<\/em>, de sus Hechos aut\u00e9nticos; antes bien, hubiera confirmado en ella la doctrina segura que sienta y dejamos apuntada. Porque sentar esta doctrina y, al aplicarla a Ezquioga, admitir juicio desfavorable a ella, es igual que contradecirse palmariamente, es igual que nada se sabe de la misma.<\/span><\/h3>

                                    Precisamente conviene insistir mucho en este punto b\u00e1sico y diferencial <\/em>de las Apariciones de Ezquioga. \u00c9stas contienen tal riqueza de revelaciones nuevas, unas en su forma, y otras en su fondo que, estando concordes totalmente, como no pueden menos, con la ortodoxia cat\u00f3lica, ampl\u00edan, realzan y aureolan esta misma ortodoxia; de forma que vienen a componer una extra summa <\/em>teol\u00f3gica, que el Hijo de Dios, y particularmente su Madre Sant\u00edsima, (que se ha tomado la molestia de venir a sacar a la humanidad del fango en que est\u00e1 sumida, se\u00f1al\u00e1ndola los caminos rectos por donde ha de ir) nos ense\u00f1an.<\/span><\/h3>

                                    Bien tenemos olvidado que los que no entienden o no quieren entender o hacen el sordo al divino llamamiento han de poner reparos y hasta gritos en el cielo, a estas declaraciones, sobre todo cuando tratan de los ejemplares castigos futuros y pr\u00f3ximos<\/em>. (Y tan pr\u00f3ximos que ya vamos llevando toques de atenci\u00f3n) Pero, \u00a1qu\u00e9 vamos a hacer! Dec\u00eda el Se\u00f1or: \u201cYo les dar\u00e9 o\u00eddos para que no oigan y ojos para que no vean y boca para que no hablen\u201d. \u2014Is. 6-10.\u2014 Y as\u00ed vemos que se les dicen estas cosas, y no las quieren o\u00edr. Recordamos que el primer censor de este Libro, discutiendo con nosotros algunos reparos, y corregidos algunos puntos, dio por viable el texto; al llegar a las Declaraciones, viada alguna, atasc\u00f3se a la segunda, no atrevi\u00e9ndose a pasar de ella. \u00bfQu\u00e9 ocurri\u00f3? Los castigos, en general, le aturdieron de tal manera que \u201cno se atrevi\u00f3 a pasar adelante\u201d. Pero, se\u00f1or, repusimos, si aprobada la Obra en principio, hay que aprobar lo que es parte no s\u00f3lo integrante sino substancial de la misma, mientras no sea contra la fe y moral cat\u00f3licas. \u2014\u201cNo me atrevo: no me atrevo\u201d.<\/span><\/h3>

                                    \u00bfLas pruebas cient\u00edficas deseadas? <\/em>\u2014Cierto se\u00f1or censor, despu\u00e9s que hubo le\u00eddo con todo el detenimiento que gust\u00f3 este Libro, preguntaba: \u00bfY las pruebas cient\u00edficas? \u201cToda la tendencia de esta Obra a\u00f1ad\u00eda, se dirige a admitir con una credulidad pueril las cosas m\u00e1s incongruentes, s\u00f3lo porque las ha dicho un vidente, sin aducir jam\u00e1s una prueba verdaderamente cient\u00edfica\u201d<\/em>.<\/span><\/h3>

                                    Antes de contestar a tal acusaci\u00f3n, podemos adelantar otra respuesta, cogida del interrogante que muchos otros \u00bfsabios? que vienen a Ezquioga, despu\u00e9s que han visto o puedan ver a su sabor los \u00e9xtasis (las f\u00edsicas, las b\u00e1sicas pruebas), todav\u00eda preguntan: \u00bfY las pruebas? \u00bfY los milagros? Para nosotros esto es lo que vale<\/em>.<\/span><\/h3>

                                    Tanto los unos como los otros interrogan una misma cosa. Los que creen en los milagros piden milagros<\/em>, y los que no creen en ellos o poco les aprecian o fingen que se puede pasar sin ellos o dejarlos a todo margen, exigen pruebas cient\u00edficas<\/em>. All\u00e1 se van unos y otros en el mismo esp\u00edritu.<\/span><\/h3>

                                    Podr\u00edamos comenzar por preguntarles qu\u00e9 es lo que entienden por pruebas cient\u00edficas. \u00bfPretenden, acaso, divorciar la ciencia del Autor de la sabidur\u00eda? Porque de la contestaci\u00f3n que den es nuestra respuesta. Si la sabidur\u00eda es una cosa como Dios, que parte del \u00e1rbol divino, ramificado en tantas secciones como asuntos vitales conocemos, \u2014V\u00e9ase nuestra obra: De Dios a la Creaci\u00f3n, etc. Tomos I y II\u2014, entonces las pruebas cient\u00edficas se reducen a los milagros. Pero si pretenden disociar la ciencia del Autor de las mismas; es m\u00e1s, si no reconocen el orden sobrenatural, entonces les sujetaremos a esas pruebas cient\u00edficas que con este pomposo nombre no son otra cosa que ex\u00e1menes y an\u00e1lisis de los nueve Hechos ocurridos en Ezquioga, que examinamos y analizamos con todo detenimiento, oponi\u00e9ndoles sendos argumentos en todo este Libro, y cuyo resultado es y no puede ser otro que la admisi\u00f3n de tales Hechos, hist\u00f3ricos todos, preternaturales y sobrenaturales algunos, que las ciencias naturales no explican, pero que ciertamente no pueden rechazar. Si despu\u00e9s de le\u00eddos los cap\u00edtulos que tratan de estos nueve Hechos, que aquel censor ley\u00f3, debieron satisfacerle por las pruebas que en ellos damos, \u00bfc\u00f3mo todav\u00eda pregunta por las pruebas cient\u00edficas?<\/span><\/h3>

                                    Los hechos <\/em>no se pueden negar. De estos los hay preternaturales y otros de car\u00e1cter sobrenatural, que tanto la medicina como la psicolog\u00eda no se los explican. Y cuando no se explica una cosa, o hay que encogerse de hombros, reconociendo la ignorancia del particular, o, en todo caso de la ciencia, o hay que dar el salto a lo extranatural para ver si en \u00e9l se nos declaran tales fen\u00f3menos. Y lo extranatural, ciertamente, desdoblado en preternaturalidad y sobrenaturalidad, aunque no se les quiera reconocer, los manifiestan satisfactoriamente, y nosotros los dejamos explicados en el texto. \u00bfC\u00f3mo, pues, luego de le\u00eddo el texto, sobre todo: Nuestras pruebas <\/em>del pr\u00f3logo, se tiene la osad\u00eda de asesorar que en \u00e9l no se aduce jam\u00e1s una prueba verdaderamente cient\u00edfica? <\/em>Porque no conocemos otras pruebas, ni realmente las conoce \u00e9l, porque no las hay. Les ocurre a estos se\u00f1ores como a los que desean milagros para creer. \u00a1Si los est\u00e1n observando y sin embargo no los ven. \u00a1Qu\u00e9 ceguera tan espantosa! Jes\u00fas resucit\u00f3 a L\u00e1zaro en presencia de todos los que a su alrededor estaban, mas no todos creyeron en la resurrecci\u00f3n de L\u00e1zaro. \u2014Jn. 11\u2014.<\/span><\/h3>

                                    Y dicho censor aumenta a\u00fan m\u00e1s su ceguera diciendo: \u201cToda la tendencia de esta obra se dirige a admitir con una credulidad pueril las cosas m\u00e1s incongruentes, s\u00f3lo porque las ha dicho un vidente\u201d. \u00a1Credulidad pueril\u2026! <\/em>Nunca fuimos cr\u00e9dulos, y en estas materias menos a\u00fan. Antes de conocerlas rechaz\u00e1bamos muchas de ellas, pero dudando de todo. Cuando afirmamos lo que escribimos es cuando las hemos estudiado y examinado, y analizado y contrastado y depurado, rectificando no pocas veces.<\/span><\/h3>

                                    \u201c\u00a1Cosas incongruentes!\u201d <\/em>Retamos a cualquiera nos se\u00f1ale en las Declaraciones de ambos linajes de videntes que exponemos, una incongruencia substancial. Faltas de belleza literaria\u2026 accidentes\u2026nimiedades \u00bfQu\u00e9 cosa que el hombre roce no las tiene? Pero aducir estas peque\u00f1eces es de hombres peque\u00f1os.<\/span><\/h3>

                                    \u00a1S\u00f3lo porque las ha dicho un vidente\u2026!<\/em><\/span><\/h3>

                                    Creemos a los videntes, luego de bien aquilatadas todas las facetas que sus prismas ofrecen. Y cuando las hemos aquilatado, no les admitimos todo cuanto ellos puedan presentarnos, sino aquello que ha pasado por el espeso tamiz de la verdad conocida. Sin embargo; repetimos que no todo lo admitimos. En muchos<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    extremos substanciales de las Declaraciones \u2014\u00e9sta es otra prueba\u2014 videntes que no se han podido ver ni entender, coinciden. \u00bfQu\u00e9 m\u00e1s garant\u00edas?<\/span><\/h3>

                                    De esto a que nos gusten todas las Declaraciones, es otra cosa. No toda la ley de Dios gusta a muchos cristianos, y sin embargo es ley de Dios. Pues, en el orden de cosas de las Declaraciones sucede otro tanto, y a\u00fan m\u00e1s; porque precisamente las Apariciones y Revelaciones vienen a avisar de que, no cumpli\u00e9ndose la ley divina, o llega la correcci\u00f3n de los infractores o el castigo de los mismos. Por esto, \u00bfc\u00f3mo van a gustar todas las Declaraciones? \u201cBienaventurados los limpios de coraz\u00f3n porque ellos ver\u00e1n a Dios\u201d. \u2014Mat, 5-8\u2014. Cuanto m\u00e1s limpia se tenga el alma, mayor luz y gusto se recibir\u00e1 en la lectura de las Declaraciones, conoci\u00e9ndose entonces cu\u00e1n sencillas son.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Sobre las revelaciones prof\u00e9ticas.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Las revelaciones prof\u00e9ticas no se inspiran, y m\u00e1s a\u00fan, no se dictan para que est\u00e9n ociosas, sino para que las conozcan los hombres.<\/span><\/h3>

                                    El lenguaje prof\u00e9tico es m\u00e1s perfecto que el lenguaje vulgar, y necesariamente m\u00e1s conforme al Verbo de Dios, porque participa m\u00e1s de la naturaleza divina, la cual, siendo una y simple, contiene t\u00edpicamente en s\u00ed todos los seres.<\/span><\/h3>

                                    Los profetas (l\u00e9ase vidente) porque tienen m\u00e1s luz que la ordinaria, extienden sus or\u00e1culos a muchas personas y cosas venideras en diversos tiempos. Lo que se anuncia de los jud\u00edos puede extenderse por tropolog\u00eda, a los cristianos. \u2014S. Jer\u00f3nimo; y Cornelio Al\u00e1pide en C\u00e1nones prophet., can. IV\u2014. La Sagrada Escritura (y lo mismo relativamente las otras profec\u00edas), puede tener varias versiones y sentidos can\u00f3nicos, a\u00fan literales; porque, siendo el sentido literal el intentado por su autor, Dios, cuya inteligencia lo comprende todo simult\u00e1neamente, no hay inconveniente en que el sentido literal de una frase contenga varios sentidos. \u2014S. Agust\u00edn y Sto. Tom\u00e1s\u2014.<\/span><\/h3>

                                    Hay predicci\u00f3n natural <\/em>cuando, por conocimientos naturales, se vaticinan sucesos que, forzosamente, dadas ciertas causas, surten sus correspondientes efectos. As\u00ed, v. gr., predijeron Donoso Cort\u00e9s, Balmes y Chateaubriand.<\/span><\/h3>

                                    Grado \u00ednfimo de profec\u00eda <\/em>es el movimiento que, por instinto interior, se tiene para obrar exteriormente. Tal fue el de Sans\u00f3n.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Grado segundo de profec\u00eda <\/em>es cuando por luz infusa, que no es propiamente revelaci\u00f3n, es ilustrado alguno para conocer las cosas. Tal fue el de Salom\u00f3n y algunos santos.<\/span><\/h3>

                                    La profec\u00eda propiamente dicha <\/em>estriba en el conocimiento por revelaci\u00f3n divina de las verdades sobrenaturales pasadas, presentes y sobre todo futuras.<\/span><\/h3>

                                    Es necesario advertir que todas las profec\u00edas conminatorias son condicionales, y el cumplimiento material <\/em>de \u00e9stas depende del cumplimiento de la condici\u00f3n. Dase siempre su cumplimiento moral. <\/em>Tales son la profec\u00eda de Jon\u00e1s y las de San Vicente Ferrer, quienes predec\u00edan el fin de los pueblos, si no hac\u00edan penitencia. Pero, como la hicieron, Dios retard\u00f3 el castigo. Sin embargo, la penitencia puso fin al mundo pecador, y las profec\u00edas moralmente <\/em>se cumplieron.<\/span><\/h3>

                                    La profec\u00eda es gracia gratis data<\/em>, o sea, independiente de la caridad; y por eso pueden tenerla grandes pecadores, porque Spiritus ubi vult spirat<\/em>. \u2014Jn. 3-8\u2014. Por esto, las profec\u00edas, aunque el instrumento que Dios se valga para anunciarlas sea malo, no deben ser despreciadas.<\/span><\/h3>

                                    Se\u00f1ales divinas para distinguir la verdadera de la falsa profec\u00eda: Ejemplo sagrado de videntes, exvidentes, malos y falsos videntes de Ezquioga<\/em>. El Se\u00f1or, hablando de la se\u00f1al con que se ha de distinguir la profec\u00eda buena de la mala, afirma: \u201cAquello que un profeta predijere (absolutamente) en su nombre, y no acaeciere<\/em>, a \u00e9ste no le he hablado Yo\u201d. \u2014Deut. 23-22\u2014. Su profec\u00eda no es aut\u00e9ntica. Sin embargo, sigamos oyendo al mismo Se\u00f1or: \u201cSi se levantaren en medio de ti profetas y predijeren se\u00f1ales y portentos, que acaecieren<\/em>, pero que os dijeren: Vamos, sigamos y sirvamos a los dioses ajenos, no oig\u00e1is las palabras de esta profeta o so\u00f1ador, porque es vuestro Dios el que os prueba <\/em>para ver si le am\u00e1is de todo coraz\u00f3n y con toda vuestra alma, o no\u201d. \u2014Deut. 13, 1-3\u2014.<\/span><\/h3>

                                    Hay un pasaje b\u00edblico, \u2014Lib. 3. Reg., c. 3.\u2014, que todo \u00e9l es un exacto retrato, y a la vez, un perfecto modelo de lo que sucede con respecto a los videntes y no videntes, videncias y no videncias de Ezquioga. Lo extractaremos: Cuando Jeroboam, rey de Israel, hizo idolatrar a su pueblo, y \u00e9l mismo estaba oficiando sobre el altar idol\u00e1trico de Betel, \u2014El rey pecaba de dos maneras: Oficiando en cosas que no le compet\u00edan y en obsequio al \u00eddolo que adoraba\u2014, un profeta o var\u00f3n de Dios, enviado por el Se\u00f1or, anunci\u00f3 terribles castigos contra el rey y el altar, diciendo: \u00c9sta es la se\u00f1al que me ha dado el Se\u00f1or: He aqu\u00ed que este altar ser\u00e1 destruido y arrojada la ceniza que en \u00e9l est\u00e1.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Al momento, el rey extendi\u00f3 su mano y dijo: Prendedle. Pero la mano con que hab\u00eda se\u00f1alado al profeta qued\u00f3 seca e inm\u00f3vil. Arrepentido aquel, rog\u00f3 al var\u00f3n de Dios solicitase del Eterno la curaci\u00f3n de su mano, quien accediendo, obtuvo la curaci\u00f3n deseada. Agradecido Jeroboam, a\u00f1adi\u00f3 al profeta: Ven conmigo a mi casa para que comas y darte dinero.<\/span><\/h3>

                                    Respondi\u00f3 el var\u00f3n de Dios: \u201cSi me dieres la mitad de tu casa no ir\u00e9 contigo ni comer\u00e9 pan ni beber\u00e9 agua en este lugar. As\u00ed me lo tiene mandado el Se\u00f1or, quien me a\u00f1adi\u00f3: Tampoco regresar\u00e1s por el camino que viniste\u201d. El profeta cumpli\u00f3lo as\u00ed.<\/span><\/h3>

                                    M\u00e1s, cierto anciano profeta, que habitaba en Betel al servicio del rey id\u00f3latra,<\/span><\/h3>

                                    \u2014Este profeta era exprofeta de Dios o perverso profeta, que hip\u00f3critamente, fue en busca del verdadero profeta para hacerle claudicar y para otros aviesos fines\u2014, oy\u00f3 contar a sus hijos lo que acababa de acontecer, y pregunt\u00f3 a estos: \u00bfPor cu\u00e1l camino ha marchado el var\u00f3n de Dios? Enterado, y montando en su borriquillo, fue en busca de aqu\u00e9l, a quien, hallando sentado debajo de un terebinto, pregunt\u00f3le: \u00bfEres t\u00fa el var\u00f3n de Dios que viniste de Jud\u00e1? \u2014Yo soy, respondi\u00f3 el profeta\u2014. Ven, pues, conmigo a mi casa para que comas. \u2014No puedo, repuso su interlocutor, porque el Se\u00f1or me lo ha prohibido, y le expuso la prohibici\u00f3n. \u2014Atiende, le dijo el profeta idol\u00e1trico: Soy profeta semejante a ti, y el \u00e1ngel \u2014el \u00e1ngel de las tinieblas\u2014 me ha hablado palabra del Se\u00f1or, dici\u00e9ndome: Ll\u00e9vale contigo a tu casa para que coma y beba. \u2014 En este profeta, al servicio de Betel, tenemos un profeta falso, que oye al diablo y le sirve, tentando al buen profeta\u2014. El var\u00f3n de Dios, \u2014En este var\u00f3n de Dios tenemos a un verdadero profeta, que supo resistir la tentaci\u00f3n de Jeroboam y no supo vencer la que le suger\u00eda, era la misma, el falso profeta; y por ello, de verdadero profeta se torna en profeta pecador. Hay que tener en cuenta que en la antig\u00fcedad hab\u00eda tres clases de profetas: a) santos, como El\u00edas, Isa\u00edas, Daniel, etc.; b) pecadores, como Balaam y Jon\u00e1s; c) falsos o seudo profetas, como los de los \u00eddolos y anticristos\u2014 no obstante conocer el mandato divino, condescendi\u00f3 con el falso profeta.<\/span><\/h3>

                                    Cuando ambos estaban sentados a la mesa, fue anunciada palabra al viejo profeta \u2014Tambi\u00e9n y por excepci\u00f3n se vale el Se\u00f1or de los profetas, como Due\u00f1o de todos que es, para anunciar su palabra; y en este caso particular, se vali\u00f3 del mismo que hab\u00eda sido seductor del verdadero profeta\u2014 quien, dijo al var\u00f3n de Dios: Esto dice el Se\u00f1or: Por cuanto no fuiste obediente a la palabra divina, no ser\u00e1 sepultado tu cad\u00e1ver en el sepulcro de tus padres. En efecto; despu\u00e9s que el var\u00f3n de Dios sali\u00f3 de la casa del falso profeta, y cuando iba de camino, sali\u00f3 un le\u00f3n que le mat\u00f3. El cad\u00e1ver quedaba tendido en medio del camino, y a un lado y otro lo eran el asno y el le\u00f3n, sin que<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    \u00e9ste da\u00f1ara a ninguno de los dos. \u2014\u00a1Cuan terrible es la justicia divina, y c\u00f3mo nos ense\u00f1a a ser exactos en el cumplimiento de sus mandatos conocidos!\u2014.<\/span><\/h3>

                                    El profeta viejo, que esto supo, corri\u00f3 con su asno al lugar de la tragedia, y tomando el cad\u00e1ver, lo coloc\u00f3 sobre su asno, diciendo: Verdaderamente este profeta, a causa de su inobediencia al mandato divino, ha sido de tal manera castigado. Le llor\u00f3 con sus hijos, y le coloc\u00f3 en su propio sepulcro, ordenando que, al morir \u00e9l, fuese sepultado cabe el profeta castigado. \u2014Los falsos profetas vaticinan en el nombre de Dios (sin que el Se\u00f1or les env\u00ede) visiones, adivinaciones falsas y seducciones de su coraz\u00f3n (Jerem\u00edas 24, 14). \u00a1Ay de los profetas insipientes que siguen su esp\u00edritu y nada ven! (Ezeq. 23, 3). De este falso profeta no sabemos si se arrepinti\u00f3 en verdad, como parece\u2014.<\/span><\/h3>

                                    A poco se cumpli\u00f3 la palabra del Se\u00f1or contra el altar y los lugares altos, que hab\u00eda sido predicha por el profeta difunto, Pero, no por todo lo sucedido, Jeroboam se enmend\u00f3; sino, que por el contrario, sigui\u00f3 obrando tan mal o peor que antes, por el cual pecado la casa de Jeroboam fue extinguida y borrada de la superficie de la tierra. \u2014Para que se vea que el arrepentimiento, si no es sincero y total, de nada sirve\u2014.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Reglas cr\u00edticas sobre la interpretaci\u00f3n de profec\u00edas.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    La prudencia, cr\u00edtica \u00e9sta de la credulidad, que lo admite todo, tan lejos como de la temeridad, que todo lo rechaza. Es dif\u00edcil hallar un justo medio. Para discernir e interpretar las profec\u00edas modernas no solamente se requiere leerlas y pesarlas mucho, conocer su finalidad y circunstancias, compararlas y conciliarlas con otras an\u00e1logas, aprobadas o ciertas, no apartarse del testimonio de los antiguos y del que las refiere, sin grave fundamento, sino conocer muy bien el esp\u00edritu de la Iglesia, la historia y su filosof\u00eda, la l\u00f3gica y todas las ciencias con las profec\u00edas relacionadas, sobre todo, un conocimiento claro de la filosof\u00eda de la Providencia en el gobierno del mundo. Eso, aparte de la luz que Dios quiera comunicar.<\/span><\/h3>

                                    La filosof\u00eda de la Providencia ense\u00f1a: a) que s\u00f3lo Dios es estable; b) que Dios a los que ama, reprende y castiga; c) que a los r\u00e9probos premia en esta mundo por alg\u00fan bien natural que hacen, no habi\u00e9ndolos de premiar en el otro; d) que las sociedades son aqu\u00ed infaliblemente premiadas o castigadas.<\/span><\/h3>

                                    De otro lado, la santidad y doctrina del sujeto, aunque son garant\u00eda, no son regla infalible; pues, hombres malos como Balaam y Caif\u00e1s y hasta el mismo demonio profetizaron.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    La m\u00e1s clara se\u00f1al de la verdad prof\u00e9tica es el cumplimiento de \u00e9sta; y de todas las que nosotros aducimos apenas hay una que no se haya verificado en gran parte. Hay garant\u00eda, por tanto, para creerlas aut\u00e9nticas, como tambi\u00e9n a esperar a que se cumplir\u00e1 la parte que todav\u00eda est\u00e1 por realizar.<\/span><\/h3>

                                    Cuando el cumplimiento de profec\u00edas tan trascendentales, como \u00e9stas, se aplaza, el aplazamiento est\u00e1 anunciado siempre por otras de un modo que no deja lugar a dudas. \u2014Extracto de la materia por el P.J.D. Corbat\u00f3, en Apolog\u00eda del Gran Monarca\u2014.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Concordancias de las profec\u00edas de los videntes de Ezquioga con las ya conocidas y acreditadas, referentes a los \u00faltimos tiempos.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Muchos se extra\u00f1an, cuando no se escandalizan, de las revelaciones hechas por la Sant\u00edsima Virgen a los videntes aut\u00e9nticos de Ezquioga, poni\u00e9ndolos reparos y obst\u00e1culos; cuando, si hubiesen hojeado las aprobadas de los santos y dem\u00e1s siervos de Dios, tocante a los propios asuntos y tiempos a que se refieren aquellas, depondr\u00edan todos sus recelos. Mas, no se estudia, y en su lugar se emplea el desprecio y la burla; sucediendo a las declaraciones de los videntes de Ezquioga la suerte misma que corrieron todas, todas <\/em>las profec\u00edas de los santos respecto al particular. Las profec\u00edas de santa Br\u00edgida, aprobadas por la Iglesia, eran ridiculizadas, mientras viv\u00eda la santa, las cuales eran calificadas de \u201ccosas de la vieja\u201d, por religiosos doctos, que fueron divina y sensiblemente castigados a causa de sus desmanes contra la fiel sierva de Dios.<\/span><\/h3>

                                    As\u00ed son tratadas las cosas santas en y por el mundo no religioso y por el religioso. Pero es evidente que, como Dios nada obra en vano, y como se ha advertido al principio de la Obra, ha delegado en su Madre los ministerios de predicadora, intercesora y medianera, para advertir al mundo que, en vista de su universal corrupci\u00f3n, haga oraci\u00f3n, penitencia y sacrificios, precisamente lo que en otras azarosas \u00e9pocas ped\u00eda el Se\u00f1or por medio de sus santos; oraci\u00f3n <\/em>privada y p\u00fablica, penitencia <\/em>abnegatoria e inmolatoria, y sacrificio <\/em>en obsequio de nuestros hermanos; se sigue que las apariciones de la Sant\u00edsima Virgen en Ezquioga no son m\u00e1s que \u201ccontinuaci\u00f3n acentuada\u201d de una ley eterna, y por tanto, las revelaciones dadas en dichas apariciones, para ser aut\u00e9nticas, han de estar en perfecta consonancia con las pret\u00e9ritas, aprobadas unas y por aprobar otras, m\u00e1s todas ellas reconocidas por verdaderas.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Porque hay que insistir en este extremo, desatendido y rechazado por olvidado e inestudiado. Es a saber: que todas las visiones y revelaciones verdaderas de Ezquioga tienden a concretar la idea de la monstruosa depravaci\u00f3n universal <\/em>para ir a parar en la temporal y eterna perdici\u00f3n humana, y el anhelo del cielo por remediar esta colosal miseria, a fin de que el mundo se purifique y salve. Y como en ello cabe mayor responsabilidad a los que est\u00e1n puestos para ser luz y sal de la tierra; he ah\u00ed que muchas de las revelaciones atiendan a este capital extremo.<\/span><\/h3>

                                    Y parece mentira que los que no ignoran que el esp\u00edritu de profec\u00eda, por ser don del Esp\u00edritu Santo, no puede faltar en la Iglesia cat\u00f3lica, tomen las visiones y revelaciones (sencillas plasmaciones de este prof\u00e9tico esp\u00edritu) como cosas vitandas, o cuando menos inatendibles, \u00a1adonde hemos llegado!, so pretexto que no se cumplen o que no se sabe cu\u00e1ndo se cumplir\u00e1n. Precisamente todas las visiones y revelaciones mencionadas, que al fin repetido se dirigen, son conminatorias, de forma que, si hubiere enmienda en los hombres, habr\u00eda mitigaci\u00f3n o cesaci\u00f3n de castigos. Pero, rep\u00e1rese (cada cual puede ser juez en esta materia) despu\u00e9s de tantas revelaciones, \u00bfhay enmienda en el mundo?<\/span><\/h3>

                                    \u00bfNo? Pues la conclusi\u00f3n es l\u00f3gica. Tampoco habr\u00e1 disminuci\u00f3n ni retraso, antes bien, suceder\u00e1n a su tiempo los castigos. \u2014Las principales profec\u00edas sobre los \u00faltimos tiempos y, por consiguiente, de la aparici\u00f3n de los Cruc\u00edferos y del Gran Monarca o Rey poderoso, restauradores de la religi\u00f3n y del orden general en el mundo, pueden leerse en: a) Novus Liber mir\u00e1bilis, por Adrien Peladan, notable publicista (Venecia, 1510); Apolog\u00eda del Gran Monarca, por el P.J.D. Corbato; (Valencia, Bibliot. Espa\u00f1olista, 1904); y en otros. En tales obras se incluyen las profec\u00edas del beato Joaqu\u00edn de Flora, cisterciense y abad de Corazzo (siglo XII; San Anselmo, obispo y padre de la Iglesia (s. id.); N.P.S. Francisco de As\u00eds, Santa Br\u00edgida de Suecia y San Angelo, carmelita (s. XIII); San Vicente Ferrer, dominico (s. XIV; P. Jer\u00f3nimo Savonarola, dominico (s. XV); Santa Catalina de Raconigi, beatos Nicolas Factor y Bernardino de Bustos, franciscanos, Taulero (s. XVI); San Alfonso Rodriguez (s. XVIII); beatos Reinaldo y Luis Grig\u00f1\u00f3n de Monfort, Ven. Bartolom\u00e9 Holzhauser, P. Lorenzo Ricci, general de los jesuitas, Pedro Turrel (s. XVIII); Sor Ana Mar\u00eda Taigi, Josefa Lamarine, Bug de Milhas, Sor Mar\u00eda Lataste, Maximino y Melania, videntes de Lasalette (s. XIX), hasta 200 profetas que fija el P. Corbat\u00f3\u2014. Como se ve, no son unos cualesquiera los profetas citados, sino que tienen garantizada su personalidad en este linaje de asuntos, y derecho, por tanto, a que se les crea, y todos ellos, l\u00e9ase bien, concuerdan con las profec\u00edas de los aut\u00e9nticos videntes de Ezquioga\u2014.<\/span><\/h3>

                                    Con respecto a los especiales castigos, fulminados por la Sant\u00edsima Virgen en sus Revelaciones a los aut\u00e9nticos videntes de Ezquioga, contra el clero desencauzado, tan negados y desprestigiados por los mismos contra quienes se<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    fulminan, debemos advertir que las Apariciones de que tratamos no fueron negadas ni vilipendiadas hasta que dichos castigos fueron dictados. Les sucedi\u00f3 id\u00e9nticamente igual que pas\u00f3 a los escritos de la Madre Rafols, esto es, que, mientras no fueron hallados los escritos que tratan de las conminaciones a dicho clero, los anteriores escritos fueron hallados aceptables; en cuanto salieron los de las conminaciones , no han sido buenos ninguno \u00a1vaya l\u00f3gica!<\/span><\/h3>

                                    Pues bien; para que se vea que las conminaciones de Ezquioga no van m\u00e1s all\u00e1 de lo que rezan los escritos de la Madre Rafols y todas las anteriores\u00a0 profec\u00edas sobre el mismo asunto, diremos sucintamente que sobre los castigos fulminados contra un clero inobservante de sus deberes, hablaron terminantemente N.P.S. Francisco de As\u00eds, Santa Ildegarda, Santa Catalina de Sena, Beato Bartolom\u00e9 Saluzzo, venerables Sor Dominica del Para\u00edso, Sor Isabel Canori Mora, \u2014En 1925 dice el Se\u00f1or a esta Venerable: \u201cYo reformar\u00e9 mi pueblo y mi Iglesia. Enviar\u00e9 celosos sacerdotes a predicar mi fe; formar\u00e9 un nuevo apostolado. Enviar\u00e9 a Mi divino Esp\u00edritu a renovar la tierra\u2026 Mas toda esta grande obra no se realizar\u00e1 sin un profundo trastorno de todo el mundo, de todas las poblaciones, incluso de todo el clero secular y regular,\u00a0 de todas\u00a0 las corporaciones religiosas de uno y otro sexo\u201d\u2014, Bartolom\u00e9 Holzhauser, Sor Ana Catalina Emmerich, Sor Imelda, Beato Benito Jos\u00e9 de Labre, Magdalena de la Vende\u00e9, Sor Mar\u00eda de la Cruz o Melania (de la Salette), \u2014Las guerras europeas y mundiales, las hambres y pestes, el exterminio y desolaci\u00f3n y los tres d\u00edas de tinieblas est\u00e1n anunciados por la Virgen a Maximino y Melania\u2014, Magdalena Porsat, Sor Natividad, M. Mar\u00eda Rafols, San Juan Bosco, \u2014De 1870 a 1873 el entonces D. Bosco habla de futuros horribles castigos al mundo, y dice: En noche oscura, pero iluminada por el cielo, una multitud de hombres, mujeres y ni\u00f1os, de todos h\u00e1bitos, se reunieron en torno al Papa y salieron en procesi\u00f3n del Vaticano por entre muertos y heridos, tendidos en el suelo. Cuando se dieron cuenta que estaban fuera de Roma, hab\u00edan andado 200 d\u00edas\u2014. Los \u00e1ngeles enarbolaron un estandarte en el que se le\u00eda: Regina sine labe concepta, Auxilium Cristianorum, y que entregaron al Papa, mand\u00e1ndole que fuera a predicar la divina Palabra y el desapego de las cosas terrenales, diciendo que hab\u00eda llegado la hora de la elevaci\u00f3n del pobre, del labrador y del artesano. Andando el Papa, le rodearon gentes, que engrosaban a medida que avanzaba, llegando a Roma donde enton\u00f3 el Tedeum. Todo el tiempo trascurrido en verificarse estas cosas corresponde a 400 salidas de sol. Lo cual se corresponde con lo que el se\u00f1or y la Virgen han dicho a los tres a\u00f1os de destierro en el desierto, etc.\u2014, todos ellos santos o siervos de Dios, intachables, y muy amigos del sacerdocio, algunos de ellos sacerdotes, que se vieron forzados por el cielo a anunciar los castigos que especifican para estos \u00faltimos tiempos. Nuestra Se\u00f1ora, en sus revelaciones a los verdaderos videntes de Ezquioga, no hace otra cosa que reavivar la memoria de tales inminentes castigos, con la agravante de haber<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    aumentado estos en proporci\u00f3n a la maldad de los \u00faltimos tiempos, y de anunciar que son tan pr\u00f3ximos, que est\u00e1n ya encima: Conversi\u00f3n total a Dios es lo que se pide, que lo dem\u00e1s est\u00e1 de sobra.<\/em><\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/em><\/span><\/h3>

                                    Tres modos de aplicaci\u00f3n de las Declaraciones de los videntes de Ezquioga.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Las declaraciones de los aut\u00e9nticos videntes de Ezquioga pueden tomarse como: a) documentos hist\u00f3ricos; b) profec\u00edas privadas; c) elementos de juicio.<\/span><\/h3>

                                    Como documentos hist\u00f3ricos<\/em>, tanto como profec\u00edas privadas son susceptibles de estudio cr\u00edtico, y de hecho lo practicamos a lo largo de toda esta obra; dejando a la autoridad de la Iglesia el que, en su d\u00eda se pronuncie acerca de las mismas, en cuanto a escritos inspirados o revelados, destinados a regular nuestra creencia.<\/em><\/span><\/h3>

                                    Como elementos de juicio <\/em>son, desde luego, necesarios para la defensa que llevamos entre manos; porque, en dichas declaraciones, se trata entre otras\u00a0 cosas, de actuaciones personales, propias y ajenas, ordenadas por autoridad superior, que las dejan al margen de toda delincuencia.<\/span><\/h3>

                                    En lo relativo al estudio de la Profec\u00eda de San Malaquias, en armon\u00eda con las declaraciones de los videntes aut\u00e9nticos de Ezquioga, he aqu\u00ed lo que el doctor Pijoan escribe, a quien extractamos: (\u2014El siglo XX y el fin del mundo, p\u00e1g. 42-43\u2014)<\/span><\/h3>

                                    \u201cCon respecto a los principios generales relativos al estudio de las profec\u00edas no oficialmente reconocidas por la Iglesia, hay que distinguir tres disposiciones o estados del alma por las cuales debe pasar el que lealmente aborde el estudio de una profec\u00eda nueva.<\/span><\/h3>

                                    1\u00ba. No despreciar, no rechazar a priori y sin examen, un escrito que se presenta como profec\u00eda<\/em>. Porque Dios puede hablar c\u00f3mo, cu\u00e1ndo y a quien quiera. Y lo ha hecho a los santos. Ser\u00eda por consiguiente, hacer causa com\u00fan con los racionalistas y naturalistas el rechazar un escrito por la sola raz\u00f3n de ofrec\u00e9rsenos como profec\u00eda.<\/span><\/h3>

                                    2\u00ba. El examen a que nos referimos, ha de ser formal; y consiste en averiguar si\u00a0 la profec\u00eda contiene \u201calgo expreso y no dudoso\u201d contra la fe<\/em>; y a\u00fan esto es poco, porque podr\u00eda proceder de ilusi\u00f3n o imaginaci\u00f3n humana; por esto es preciso conocer la realizaci\u00f3n de la misma, <\/em>que es la gran piedra de toque de toda profec\u00eda verdadera; Jn. 14-19-, aunque no es necesario que para ser verdadera se haya verificado en todas sus partes<\/em>: basta que se haya verificado (y de ello hay comprobaci\u00f3n) un cierto n\u00famero de predicciones; porque si vemos claramente la intervenci\u00f3n divina en una parte de la profec\u00eda, podemos deducir el mismo origen sobrenatural para las restantes; ya que Dios no puede hacerse solidario de un falsario o de un iluminado.<\/span><\/h3>

                                    3\u00ba. Cuando sin prejuicios, se ha estudiado el valor de una profec\u00eda, hay que respetarla<\/em>, si ha sido reconocida verdadera desde el viso de la fe y de la historia, seg\u00fan queda expuesto\u201d.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Semejanzas y armon\u00edas entre las profec\u00edas y los profetas de los Libros Sagrados y los de Ezquioga.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Del estudio comparativo de las visiones, revelaciones y profec\u00edas de los Libros Sagrados del Antiguo y Nuevo Testamento con las tenidas y proferidas por los videntes de Ezquioga, obtenemos las conclusiones siguientes:<\/span><\/h3>

                                    1\u00ba. Que el lenguaje, tono y finalidad, tanto de las unas como de las otras, es id\u00e9ntico: lenguaje sencillo, sobrio, parco; tono terminante, imperativo, en\u00e9rgico; finalidad, la correcci\u00f3n y santificaci\u00f3n de los hombres y los pueblos, mediante el acercamiento a Dios Creador y Redentor suyo; y como sanci\u00f3n a la transgresi\u00f3n de este divino y eterno Plan, los castigos, primeramente suaves, parciales e intermitentes; y secundariamente, terribles, generales y concluyentes. Todas, absolutamente todas las revelaciones, llevan id\u00e9ntico sello.<\/span><\/h3>

                                    2\u00ba. Que los instrumentos empleados por el cielo para este linaje particular\u00edsimo de empresas han sido, casi siempre, personas ignoradas, humildes y hartas veces in\u00fatiles.<\/span><\/h3>

                                    3\u00ba. Que los medios adoptados en la introducci\u00f3n de estos instrumentos,\u00a0 ll\u00e1mense profetas o videntes, en los pueblos, son el milagro, el descubrimiento de las conciencias, vida mortificada, la pureza de las costumbres y la misi\u00f3n particular acerca de grandes y peque\u00f1os.<\/span><\/h3>

                                    4\u00ba. Que el desprecio de los grandes y poderosos a los profetas, y la persecuci\u00f3n y el martirio de \u00e9stos ha sido y es general.<\/span><\/h3>

                                    5\u00ba. Que las profec\u00edas, unas se han cumplido, y las restantes se cumplir\u00e1n, por igual raz\u00f3n que las anteriores.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    6\u00ba. Que el clamor ante los desprecios, las persecuciones, vejaciones y el martirio de los profetas o videntes ha llagado en todo tiempo al cielo; por cuya causa el Se\u00f1or, que los mand\u00f3 como embajadores suyos a los pueblos, toma a su especial cargo no dejar sin ejemplar castigo las injusticias cometidas con sus enviados, y \u00faltimo.<\/span><\/h3>

                                    7\u00ba. Pero, como las Revelaciones de Jes\u00fas y la Sant\u00edsima Virgen, en su secci\u00f3n futura, y m\u00e1s particularmente, en lo que se refiere a los castigos anunciados, son tan concretos que no parecen sino una par\u00e1frasis del Apocalipsis de San Juan, sobre todo a partir de su cap\u00edtulo VII: par\u00e1frasis exacta y del m\u00e1s alto valor por el origen de donde parte, de ah\u00ed las \u201cArmon\u00edas de las Revelaciones en Ezquioga con el Apocalipsis de San Juan.<\/span><\/h3>

                                    En efecto; el Apocalipsis, redactado por el ap\u00f3stol San Juan, durante su destierro en Patmos, trata en sus tres primeros cap\u00edtulos de las iglesias de Asia de su tiempo; y en los tres siguientes, de la gloria del divino Cordero en el cielo. Pero, al llegar al cap\u00edtulo VII, y sobre todo ya en el VIII, comienza a describir los castigos que la justicia de Dios mandar\u00e1 al mundo prevaricador en los \u00faltimos tiempos<\/em>.<\/span><\/h3>

                                    Pero, \u00bfes qu\u00e9 estamos ya en los \u00faltimos tiempos? El lector podr\u00e1 examinar nuestra Obra: De Dios a la Creaci\u00f3n; De la Creaci\u00f3n al Arte; del Arte a Dios, <\/em>principalmente el volumen tercero, cap\u00edtulo \u00faltimo, todav\u00eda in\u00e9dito, donde larga y biogr\u00e1ficamente tratamos este asunto, y se convencer\u00e1 de que lo estamos. Adem\u00e1s, el m\u00e1s profundo contraste entre los videntes de Ezquioga y sus Declaraciones da la sensaci\u00f3n de que en esto, no solo hay armon\u00eda sino identidad entre la mencionada Obra, las Declaraciones apuntadas de los videntes y el Apocalipsis del Evangelista.<\/span><\/h3>

                                    Entrando, empero, en la enumeraci\u00f3n, detalle y lapsos de tiempo de los castigos referidos por los videntes de Ezquioga y el Apocalipsis, hay tanta armon\u00eda e identidad entre ellos que no parece sino que aquellos se van tomando de \u00e9ste. Pero, a poco que el estudioso lector los vaya examinando y comparando, ver\u00e1 que no obstante que los videntes desconozcan por completo y hasta ignoren el t\u00edtulo del Apocalipsis, y que no es posible, por una reuni\u00f3n de circunstancias, que no es menester apuntar, que los videntes los inventen, el hecho es que los castigos anunciados por \u00e9stos, son iguales o muy parecidos a los que San Juan describe en su libro prof\u00e9tico; hasta la \u00e9poca de paz que seguir\u00e1 a los castigos; hasta el recrudecimiento de la persecuci\u00f3n terribil\u00edsima a la Iglesia de Dios con la aparici\u00f3n del Anticristo y los falsos profetas hasta el fin del mundo.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    M\u00e1s, queremos se fije el lector en un detalle significativ\u00edsimo que, como los anteriores, coincide con otro, que los videntes de Ezquioga se\u00f1alan. Dice as\u00ed el Apocalipsis: \u201cEntre tanto, los dem\u00e1s hombres que no perecieron con estas plagas, no por eso hicieron penitencia de las obras de sus manos con dejar de adorar a los demonios y a los simulacros de oro y plata y bronce y piedra y madera, que ni pueden ver ni o\u00edr ni andar. Ni tampoco se arrepintieron de sus homicidios, hechicer\u00edas, deshonestidades y robos\u2026\u201d \u2014Capi. IX. 20-21\u2014.<\/span><\/h3>

                                    Est\u00e1 visto que tenemos dos sentidos para juzgar las cosas; y en lo que ata\u00f1e a esto, solemos pedir sanciones grandes para que los hombres se arrepientan de sus cr\u00edmenes y delitos y vuelvan a lo que deban ser; sin reparar que, por muchos castigos que recibamos, a causa de no tenerlos por tales, o porque pronto olvidamos el escarmiento, volvemos a las andadas: Es lo que acaban de expresar el Apocalipsis, y eso mismo es lo que expresan los videntes de Ezquioga.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Impresi\u00f3n \u201cparticular\u201d sobre las dichas visiones y revelaciones.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Notadas las impresiones generales, vengamos sobre las particulares sobre el caso, ofreci\u00e9ndonos ante todo la forma de las:<\/span><\/h3>

                                    Apariciones de la Sant\u00edsima Virgen<\/em>.\u2014 Todos, absolutamente todos los videntes, coinciden en declarar la forma de las apariciones marianas, aumentadas en unos y restringidas en otros. La Virgen se aparece joven, casi ni\u00f1a. Hay que notar que Nuestra Se\u00f1ora, por m\u00e1s que durmi\u00f3 para despertar en el cielo a los 72 a\u00f1os, \u2014V\u00e9ase De Dios a la Creaci\u00f3n, etc., tomo I, \u201cDefinibilidad dogm\u00e1tica de la Asunci\u00f3n de la Virgen\u201d, y la Declaraci\u00f3n de Cruz Lete. Documentaci\u00f3n Serie B, n\u00ba 3<\/em>\u2014, <\/em>sin embargo su naturaleza no envejeci\u00f3 jam\u00e1s, sino que sostuvo a los 30 a\u00f1os de edad, manteni\u00e9ndose as\u00ed en lo sucesivo hasta siempre. Pero por raz\u00f3n de su virginidad\u00a0 y pureza, sin mancha alguna, en atenci\u00f3n a la dignidad de Madre de Dios, y debido a su premio singular en el cielo, con gozo y gloria superior a todos, excepci\u00f3n hecha de Dios, de ah\u00ed el que aparezca con una juventud inferior a los treinta a\u00f1os de edad; semeja a una ni\u00f1a de 15 a 18 a\u00f1os. Tan hermosa, tan sin defecto alguno, tan llena de gracia y encanto sin igual, que, poseyendo las caracter\u00edsticas todas de la Esposa de los Cantares, descritas por el Esp\u00edritu Santo, son envueltas estas caracter\u00edsticas en un nimbo de gloria tal, que el que la ve vestida de sol, calzada de la luna, coronada de estrellas, rodeada de \u00e1ngeles, pisando el drag\u00f3n, envuelta en el singular \u201clumen gloriae\u201d suyo, radiando de luz<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    inmensamente m\u00e1s potente que la del sol, se estremece, siendo robada el alma hacia ese portento de belleza suma que encandila.<\/span><\/h3>

                                    Viste la Virgen en Ezquioga, de ordinario, t\u00fanica blanca y manto negro; pocas veces de Inmaculada. Lleva en su mano izquierda al Ni\u00f1o Jes\u00fas, de lado, con t\u00fanica blanca y crucifijo entre las manos entrelazadas. En otra mano, un pa\u00f1uelo y rosario en la mu\u00f1eca. A veces est\u00e1 rodeada de alg\u00fan santo o de santos. La mayor parte de las veces est\u00e1 triste, derramando l\u00e1grimas, en ocasiones de sangre. A veces enmudece; otras habla y revela futuros acontecimientos y secretos del coraz\u00f3n. Otras veces aparece de Dolorosa, acompa\u00f1ada de \u00e1ngeles o sola, a tenor de c\u00f3mo es descrita en las diversas apariciones que siguen. Hay ocasiones, pero \u00e9stas son las menos, en que se presenta sin visi\u00f3n, a ciertas almas muy queridas suyas, y la presentaci\u00f3n es como si anduviese por el mundo, cual joven honest\u00edsima, de jovialidad y alegr\u00eda grandes, mostrando sumo inter\u00e9s por lo de Ezquioga y por conversar con dichas almas, pero sin declararse a ellas,\u00a0 las cuales, mientras han hablado con Ella, (va a veces sola y otras acompa\u00f1ada) han notado harta rareza en las palabras y en las obras, sobre todo en las pupilas, que son siempre las de la Virgen, intrig\u00e1ndose mucho; y s\u00f3lo cuando ha marchado se les ha ocurrido que pudiese ser la Madre de Dios, sospecha que se ha confirmado posteriormente, declar\u00e1ndolo Nuestra Se\u00f1ora a otros videntes.<\/span><\/h3>

                                    Apariciones de Jes\u00fas<\/em>.\u2014 Nuestro Divino Salvador se aparece de muchas formas, edades y actitudes, pero todas rememorando episodios de su vida sant\u00edsima. Sin embargo, lo ordinario es que aparezca de ni\u00f1o peque\u00f1o, de 10 o 12 a\u00f1os, como el Jesus\u00edn de Praga, bien como sagrado Coraz\u00f3n, ostentando su amante costado herido, bien como en alg\u00fan trance de la Pasi\u00f3n. La hermosura del Se\u00f1or es copia de la de su Madre. No hay hijo que m\u00e1s a su madre se parezca, ya que su Humanidad sacrat\u00edsima es, en el orden natural, la perfecci\u00f3n suma y la restauraci\u00f3n del tipo Ad\u00e1n en su primera fase. Como Nuestra Se\u00f1ora, calla o habla, seg\u00fan conviene; se alegra o entristece y hasta derrama l\u00e1grimas de sangre, y adopta aptitudes en armon\u00eda con el misterio que representar quiere al vidente. En otros lugares fue m\u00e1s el Ni\u00f1o Jes\u00fas que la Sant\u00edsima Virgen, el que se apareci\u00f3 a los ni\u00f1os con los cuales jugaba como otro peque\u00f1\u00edn, y amorosamente les regalaba.<\/span><\/h3>

                                    Apariciones de \u00e1ngeles y santos<\/em>.\u2014 Con la Sant\u00edsima Virgen y con Jes\u00fas suelen aparecerse \u00e1ngeles y tambi\u00e9n santos. Lo m\u00e1s ordinario son los primeros, que acompa\u00f1an a Nuestra Se\u00f1ora.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Los \u00e1ngeles suelen vestir t\u00fanicas blancas y, en ocasiones, unos anillos de oro ci\u00f1en sus cabezas rizadas. No hablan nunca y est\u00e1n siempre a las \u00f3rdenes de Jes\u00fas y de la Virgen. Los santos van con sus h\u00e1bitos de ministerio u orden religiosa en que sirvieron en el mundo, acompa\u00f1ando a Nuestro Se\u00f1or y Nuestra Se\u00f1ora. A veces hablan.<\/span><\/h3>

                                    Apariciones del diablo<\/em>: Manera de saber distinguirlo<\/em>. En el cap\u00edtulo XIII dejamos dicho muchas cosas pertinentes a este \u201csingular desgraciado\u201d; mas, corresponde aqu\u00ed fijarlo en si propio y en las circunstancias de las apariciones de Jes\u00fas y de Mar\u00eda. T\u00e9ngase siempre presente (y es bueno repetirlo) que el mal esp\u00edritu es de oficio ladr\u00f3n y seductor. Y como seductor al mal, miente para enga\u00f1ar y corromper. Por esto suele tomar formas y actitudes de todo lo existente: de seres visibles e invisibles y de objetos conocidos y por conocer; a veces seres\u00a0 y objetos inveros\u00edmiles. Toma la forma de Jes\u00fas y de Mar\u00eda, de \u00e1ngeles y santos, de almas del purgatorio y condenados, de personas vivas y difuntas. Claro est\u00e1 que de ordinario, no suele ir tan caracterizado que por alg\u00fan rastro, gesto, o voz no se le conozca; pero, si esto es lo ordinario, y por ello suelen distinguirlo enseguida o luego los videntes; no obstante, extraordinariamente, permiti\u00e9ndolo Dios, finge tan perfectamente, que para conocerle, hay que echar mano de los medios orales o psicol\u00f3gicos a fin de forzarle a que d\u00e9 una contestaci\u00f3n categ\u00f3ricamente adecuada, seg\u00fan en dicho cap\u00edtulo dejamos advertido. Y el que esto no sepa o no lo emplee, desde luego ser\u00e1 seducido por la serpiente vieja, en la creencia de que no es \u00e9l, sino Jes\u00fas, Mar\u00eda, \u00e1ngel, santo o persona digna, seg\u00fan vaya disfrazado. Y se disfraza de todo lo que reviste y acompa\u00f1a, y como reviste y acompa\u00f1a a dichos seres.<\/span><\/h3>

                                    Es prueba de que el diablo ha recibido del cielo mayor poder para tentar a los hombres (siendo esto se\u00f1al de que estamos en los \u00faltimos tiempos) la raz\u00f3n de que hasta que han sucedido los Hechos de Ezquioga hu\u00eda de la hostia consagrada, de la cruz, del agua bendita, del rosario, de los evangelios; en una palabra, de todas las cosas sagradas. Pues, desde las Apariciones de la Virgen en la campa de Anduaga no le asustan estas cosas santas, muy por el contrario las rompe, las arroja al suelo y se mofa de ellas y del que las emplea. \u00a1Cu\u00e1ntos casos de estos pod\u00edamos, sin esfuerzo, aducir, de los cuales somos testigos! \u2014 Documentalmente los tenemos registrados en nuestro Cuad. De Memor.\u2014<\/span><\/h3>

                                    Y ello es menester que, tanto el vidente como su juez y director y todos lo conozcan, a fin de que, en materia tan abstrusa como esta, no hierren.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Y, desdichadamente, por no conocer estos pormenores muchos videntes han tomado ciertas apariciones diab\u00f3licas, con sus revelaciones correspondientes, si las ha habido, por apariciones del cielo, enga\u00f1\u00e1ndose y enga\u00f1ando a quienes toman el g\u00e9nero averiado y sano, por bueno.<\/span><\/h3>

                                    Y es tan astuto el diablo que, para m\u00e1s f\u00e1cilmente enga\u00f1ar a los videntes, aparte el diab\u00f3lico disfraz apuntado (como su estudio no consista sino en observar a Jes\u00fas, Mar\u00eda, \u00e1ngeles y santos y videntes y no videntes, y ver qu\u00e9 hacen y c\u00f3mo lo hacen y lo que hablan y c\u00f3mo lo hablan y sus tendencias, que son siempre a lo bueno, pero que el diablo las desarreglar\u00e1 de tal modo que hasta forjar\u00e1 cosas y palabras buenas para mejor seducir) se introdujo de tres especiales modos en las apariciones santas, entrando aqu\u00ed lo dificultoso:<\/span><\/h3>

                                    En el modo 1\u00ba<\/em>, presentase solitario<\/em>, como Virgen, v. gr.; con el ni\u00f1o (que dice ser Jes\u00fas), con \u00e1ngeles (por supuesto malos), con luz (no brillante como la del cielo) etc. En el modo 2\u00ba <\/em>presentase en medio <\/em>de una visi\u00f3n verdadera, fingiendo la voz para ver si pasa por tal. Y en el modo 3\u00ba<\/em>, presentase cuando ha desaparecido la verdadera aparici\u00f3n<\/em>, para entonces, \u00e9l darse tono y ver si recibe homenajes de los videntes, y como con nuestra madre Eva, entra en conversaci\u00f3n con ellos para ver si los seduce y los derriba.<\/span><\/h3>

                                    Vamos a citar dos ejemplos tomados de las declaraciones de un exvidente que, como todas, se nos presentaron para el examen, vi\u00e9ndose en ellos confirmado lo antecedente. Dice as\u00ed:<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    31 Julio 1931<\/em>: \u201cLlegu\u00e9 a Ezquioga, y al terminar el rosario, vi aparecer entre nubes a la virgen con el ni\u00f1o entre los brazos, como el d\u00eda anterior. Al poco rato desapareci\u00f3 para volver a aparecerse de milagrosa, de rodillas y orando \u00e9sta desapareci\u00f3 para aparecer sentada en una silla con un ni\u00f1o en las rodillas. Dur\u00f3 tres cuartos de hora\u201d.<\/span><\/h3>

                                    16 Agosto 1931<\/em>: \u201cLa visi\u00f3n fue de dolorosa con dos \u00e1ngeles en cada lado, llevando en las manos espadas de fuego. Luego, apareci\u00f3 una monja y se puso de rodillas. La virgen me habl\u00f3 con una voz muy suave y me dijo que la monja me dir\u00eda unas palabras. \u00c9sta me mir\u00f3 y me dijo\u2026\u201d Refugium virginum. \u201cLuego, volvi\u00f3se a la virgen en actitud de hablar. Al poco rato desapareci\u00f3 la monja y los \u00e1ngeles, y la virgen paseando una mirada por los que all\u00ed estaban presentes, desapareci\u00f3.<\/span><\/h3>

                                    Pues bien, sin temor a ser desmentido, esas virgen, ni\u00f1o, dolorosa, milagrosa, \u00e1ngeles y monja fueron todos ellos demonios del infierno.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Y ante este tenor, los que se metieron a directores y a recoger a troche y moche declaraciones, y ciertos jueces, vean si pueden pasar adelante.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Lugares en que aparece la Virgen y fruto alcanzado.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    \u201cMe estoy apareciendo, \u2014dice Nuestra Se\u00f1ora\u2014, y no hubiera cre\u00eddo hubiese quedado ni un solo coraz\u00f3n sin entregarse a M\u00ed\u2026 Los que m\u00e1s debieran amarme son los que m\u00e1s lejos est\u00e1n de M\u00ed\u2026 Pedid por ellos y por los que no piden\u2026 Si se rezase en Espa\u00f1a tres Avemar\u00edas por cada persona no enviar\u00eda el castigo\u2026\u201d \u201cPero, en vista que no se hace, mi querido Padre \u2014 a\u00f1ade Jes\u00fas\u2014 est\u00e1 obligado a enviarle\u2026 Tengo motivos para abandonaros, pero es tanto el amor que mi querida Madre tiene a Espa\u00f1a, que os avisa\u201d. \u2014 Documentaci\u00f3n Serie B, n\u00ba 2.\u2014<\/span><\/h3>

                                    Creemos haber insinuado que la misma multiplicidad de apariciones y a tantos videntes, por ser cosa desusada, es motivo de esc\u00e1ndalo, risa y mofa para muchos cat\u00f3licos, incluso sacerdotes y religiosos, y de persecuci\u00f3n a los videntes y de cuantos con ellos simpatizan. Conocemos casos de pueblos creyentes en lo de Ezquioga, que ha bastado la propaganda en contra, de su cura, para trastornarlo y pervertirlo; y de comunidades religiosas que, en ejercicios el padre que los dirig\u00eda, los encamin\u00f3 de tal modo que, al terminarlos, acabaron las religiosas y religiosos por no creer en nada de lo que tratamos.<\/span><\/h3>

                                    La propaganda, la predicaci\u00f3n, el escrito, el libelo, la mofa y la persecuci\u00f3n son terribles, m\u00e1s terribles de lo que se puede imaginar. Sabemos de videntes que, s\u00f3lo por serlo, han sido despedidos de casa y maltratados. Se les dice que la Iglesia ha prohibido visitar a Ezquioga; que pecan mortalmente los que van, y que los que les aconsejan que vayan son malos. Hasta se ha aconsejado la comisi\u00f3n del crimen, como medio para que desaparezcan los videntes. Jam\u00e1s crey\u00e9ramos, hasta que aqu\u00ed vinimos, que tanta miseria hubiese en el mundo cat\u00f3lico, que fuese tanta la confusi\u00f3n reinante, y que los pocos leales que tiene Cristo y su Madre, hubiesen de pasar por tales horcas caudinas. M\u00e1s todo lo pasaremos con Aqu\u00e9l que nos conforta y con la protecci\u00f3n eficaz y consoladora de Nuestra Se\u00f1ora.<\/span><\/h3>

                                    Es por todo esto que la divina Madre, a primeros de julio de 1932, se queja amargamente a otro vidente, a quien dijo: \u201cUn a\u00f1o hace ya que aparezco en este lugar; y \u00a1cu\u00e1n pocos son los que me visitan! Aun cuando haya gentes<\/strong><\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    nuevas que vienen a encomendarse a M\u00ed, son m\u00e1s los que se han marchado, dejando de creer y de invocarme\u2026\u201d<\/span><\/h3>

                                    Esta incredulidad misma, y los preguntados que se nos hacen sobre el caso, al revelarnos que casi no quedan verdaderos creyentes<\/em>, si no tuvi\u00e9ramos fe en las apariciones actuales de la Virgen nos har\u00edan creer por fuerza; pues es de fe que la providencia del Se\u00f1or, da las cosas, en tiempo oportuno<\/em>. Y, \u00bfqu\u00e9 tiempo m\u00e1s oportuno que el que corremos, d\u00edgase lo que se quiera en contra, en el que casi nadie cree y practica menos, para que Jes\u00fas y la Virgen, providentes en tiempo oportuno, vengan a socorrernos en la medida de tal necesidad? Y, \u00bfqui\u00e9n negar\u00e1 que la necesidad de ahora no es tal?<\/span><\/h3>

                                    Refuerzan todav\u00eda m\u00e1s los consejos vertidos el hecho de las:<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    Se\u00f1ales extraordinarias de la conmiseraci\u00f3n de Cristo y Mar\u00eda hacia sus hijos.<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    No son solamente las apariciones mencionadas y los saludables efectos de las mismas, el desusado fen\u00f3meno que se advierte. Hay m\u00e1s todav\u00eda: como fuertes aldabonazos, que el cielo da para la conmoci\u00f3n de las almas distra\u00eddas y perdidas sin rumbo en el proceloso mar de la vida, son las im\u00e1genes sacras animadas, que advierten al que no quiere cerrar los ojos y o\u00eddos, que Nuestro Se\u00f1or y la Virgen nos llaman a penitencia, porque se acerca la hora. Ayer fue el Santo Cristo de L\u00edmpias, tan mal tra\u00eddo y llevado por los hombres de ciencia y arte (no hablamos de los ateos e imp\u00edos, pues de estos no hay cuenta), que negaron la autenticidad de sus movimientos; hoy es una imagen peque\u00f1ita y sin valor material, del Sagrado Coraz\u00f3n de Jes\u00fas, de una sirvienta de Madrid, en una de cuyas manos se advierte hinchaz\u00f3n y moradura, y a poco, unas gotitas de sangre que vierte. Es tambi\u00e9n una imagen del Cristo de Limpias, en estampa, de Villafranca (Guipuzcoa) que, por dos veces ha sangrado. Son otros crucifijos, uno de X y otro que est\u00e1 en Gerona, el de Asti (Italia) reconocido, que tambi\u00e9n han sangrado, etc., etc.; y citamos estos hechos para destacar el hecho general de que, a causa de los azarosos tiempos que corren, malos<\/em>, como los han hecho los hombres, el cielo, todav\u00eda compasivo, se vale del movimiento de esas im\u00e1genes, como se vale de las apariciones dichas, obradas directamente por \u00e9l, para despertar a los dormidos y hacerlos entrar en el camino de la salvaci\u00f3n.<\/span><\/h3>

                                    Los castigos se imponen<\/em>. Estamos viendo c\u00f3mo los mismos cat\u00f3licos creyentes, a lo que tienen m\u00e1s horror no es al pecado, sino a los castigos<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>

                                    anunciados. Horror de esclavos, no de hijos. Todo se les vuelve a preguntar por el castigo, y cu\u00e1les, y cu\u00e1ntos, y c\u00f3mo, y cu\u00e1ndo y d\u00f3nde ser\u00e1n. Nos re\u00edmos de cierto acomodado cat\u00f3lico de una ciudad norte\u00f1a que, preguntando por los castigos, se le dijo que estaba anunciado por la Virgen que dicha ciudad ser\u00eda inundada y tragada por el mar; y, con harta pena, responde: \u00a1Ahora que hab\u00eda comprado yo un chalet en la Concha!<\/span><\/h3>

                                    Pero no quepa la menor duda. La Virgen no quiere mandar por su cuenta <\/em>castigos. Es Madre misericordios\u00edsima que, por esto, ha venido, y aguarda, hasta la mofa y el escarnio y la persecuci\u00f3n, a que sus hijos extraviados se conviertan. Pero la justicia es de su Hijo, quien no ha de permitir que, en lo m\u00e1s m\u00ednimo, cuando la saeta se\u00f1ale la hora, quede la tierra, que ha regado con su sangre, sin purificar, de tantos cr\u00edmenes y sacrilegios y malas obras y peores palabras y deseos, que en todas horas en ella cometen sus hijos. Y ser\u00e1, es preciso sea pronto, porque tras la ola de la inmoralidad y de la impiedad, que lo va cubriendo todo, ha de venir la ola divina que, a su vez, se encarame sobre aquellas y las sepulte para siempre.<\/em><\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/em><\/span><\/h3>

                                    Instrucciones y advertencias<\/span><\/h3>

                                    \u00a0<\/h3>
                                    1. Toda la Documentaci\u00f3n va publicada como prueba de nuestra obligada defensa propia y de los Hechos de<\/span><\/h3><\/li>
                                    2. No todos los videntes recogieron declaraciones; y otros, que las recogieron, no las<\/span><\/h3><\/li>
                                    3. Por m\u00e1s que recogimos muchas m\u00e1s declaraciones que las que aqu\u00ed se insertan, \u00fanicamente las insertadas, luego de repetidas veces examinadas, cribadas, contrastadas y limadas, aunque conservamos el lenguaje y el estilo particular de las mismas, son las que nos merecen fe y confianza y de las cuales s\u00f3lo respondemos.<\/span><\/h3><\/li>
                                    4. Las Declaraciones que se insertan, est\u00e1n dadas casi siempre terminado el \u00e9xtasis, o tan luego han podido los<\/span><\/h3><\/li><\/ol>
                                      • Es imposible, de toda imposibilidad, que los videntes, que firman las Declaraciones, correspondientes a sus firmas, hayan elucubrado las revelaciones ata\u00f1entes. Ni tienen ciencia, ni aunque la tuvieran, poseen la picard\u00eda suficiente para ello. \u00bfQu\u00e9 decimos? No hay sabio ni p\u00edcaro, por listos que sean que, puestos en las circunstancias que los videntes, sobre<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                                        \u00a0<\/h3>

                                        todo Benita, elucubren una doctrina como la contenida en sus declaraciones. Esto se prueba haciendo un examen comparativo con las declaraciones supuestas.<\/span><\/h3>
                                        • Los supuestos videntes, cuyos nombres y declaraciones no ponemos, no es porque no queremos, sino porque tenemos pruebas concluyentes de que no son verdaderos o de la Sant\u00edsima Virgen, sino del demonio o mentirosos. Entendemos aqu\u00ed por supuestos videntes, a todos los falsos, seg\u00fan ha quedado declarado en el cap\u00edtulo<\/span><\/h3><\/li>
                                        • El modo de manifestarse la Sant\u00edsima Virgen a los videntes y darles sus revelaciones, es parecido a una conferencia telef\u00f3nica, para la que el aparato receptor es el vidente en \u00e9xtasis, que la trasmite a los oyentes, y viceversa, aunque sin necesidad de hilos, micr\u00f3fono y operadora. Bajo otro s\u00edmil exp\u00f3nelo la misma Santa Virgen, diciendo: \u201cYo soy la mecan\u00f3grafa y los videntes las m\u00e1quinas. El papel que pongo en \u00e9stas para escribir es la gracia de Dios. Cuando las m\u00e1quinas se estropean, las compongo; m\u00e1s si no quedan bien, escojo otras\u201d.<\/strong><\/span><\/h3><\/li>
                                        • Confesamos que Nuestra Se\u00f1ora ha dado el \u00faltimo y principal retoque a la Declaraciones. Tan es as\u00ed que, si despu\u00e9s de tanta labor, como importa la presente, la divina Madre no hubiera directamente intervenido en la correcci\u00f3n de las mismas e ilustraci\u00f3n de todo el libro, nos hubi\u00e9ramos retirado sin haberlo dado a la imprenta.<\/span><\/h3><\/li><\/ul>

                                          Examinadas atentamente las declaraciones, tan distintas, de un lado, y tan variadas de otro, hay que reconocer en todas ellas un fondo com\u00fan, un pensamiento capital, un propio origen, una grandeza, hija de la doctrina misma, y una regla de moral; esto es: el fondo com\u00fan <\/em>de la diversa cuanto una doctrina; el pensamiento capital <\/em>de la santificaci\u00f3n y salvaci\u00f3n de las almas y los pueblos; el propio origen <\/em>divino, tanto si son de Dios, como si lo son de Mar\u00eda; una grandeza hija de la doctrina misma<\/em>, especificada en tan diversas Declaraciones, de distintas fechas; y una regla de moral <\/em>para los tiempos actuales y del porvenir, de ense\u00f1anzas sublimes, como que parten de indiscutible fuente, que nos conviene leer y releer, para no s\u00f3lo no olvidar jam\u00e1s ense\u00f1anzas tales, sino para llevarlas al terreno de la pr\u00e1ctica, en el que labraremos nuestra felicidad temporal y eterna.<\/span><\/h3>

                                          \u00a0<\/h3>

                                          Impresi\u00f3n general sobre las visiones y revelaciones contenidas en tales \u201cDeclaraciones\u201d.<\/span><\/h3>

                                          \u00a0<\/h3>

                                          \u00a0<\/h3>

                                          Antes de entrar en la exposici\u00f3n particular <\/em>de las Declaraciones de las visiones y revelaciones ocurridas en Ezquioga, preciso es ofrecer en bloque, las que no se especifican, para que el lector forme idea, siquiera aproximada, de la magnitud e importancia del asunto, pues es m\u00e1s lo que se calla por similitud o dificultad de exposici\u00f3n, que lo que se manifiesta por haberlo reunido en \u00e9sta.<\/span><\/h3>

                                          No sabemos qu\u00e9 gozos cantar, despu\u00e9s de haber visto cuanto de formidable y excelso ocurre en Ezquioga, y luego de haber le\u00eddo y examinado, repetidas veces, con atenci\u00f3n suma las visiones y revelaciones, o\u00eddas unas veces; presenciadas otras; declaradas aquellas; y anotadas por nosotros mismos, las dem\u00e1s; habiendo descontado las que no pueden pasar (y creemos que en estos menesteres nadie nos gana en escrupulosidad); porque asombra la gran variedad dentro de la unidad m\u00e1s severa, y la grandeza de la misericordia divina, dentro de la universal corrupci\u00f3n humana, que busca incansable, a la hechura de sus manos, para llevarla a un eterno feliz asilo.<\/span><\/h3>

                                          Y es un portento, sencillamente un portento, inaudito<\/em>, en toda la extensi\u00f3n de la palabra, considerar la \u201ccompa\u00f1\u00eda\u201d de los que han visto y tratado a Nuestra Se\u00f1ora, a Jes\u00fas y a los Santos, de todas las edades, sexos y condiciones, segregados del com\u00fan mundano, atra\u00eddos a la Santa Monta\u00f1a de las Apariciones, y convertidos (los que han cooperado) en plantel de confesores de la fe. Porque han sido alrededor de 152 los llamados <\/em>a estas santas comunicaciones \u2014(Cap\u00edtulo XIV)\u2014 del cual vamos a citar solamente aquellos que merecen recordaci\u00f3n. (Esta lista, despu\u00e9s de compuesta, fue corregida y ordenada de nuevo tal como va aqu\u00ed por la Sant\u00edsima Virgen, en \u00e9xtasis de Benita Aguirre). Tales son:<\/span><\/h3>

                                          1\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0 Andr\u00e9s Bereciart\u00faa, de Ezquioga de 9 a\u00f1os 2\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0 Antonia Bereciart\u00faa, de Ezquioga de 12 a\u00f1os 3\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Benita Aguirre, de Legazpia de 9 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          4\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0 Hermano Cruz Lete, de Isasondo, de 20 a\u00f1os. Fallecido 5\u00ba.\u00a0 Mar\u00eda Celaya, de Bac\u00e1icoa, de 19 a\u00f1os. Fallecida<\/span><\/h3>

                                          6\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0 Beatriz Arrue, de Albistur, y algunas otras del mismo pueblo 7\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 In\u00e9s Igoa, de Torrano, de 17 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          8\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0 Jos\u00e9 Garmendia, de Legazpia, de 41 a\u00f1os 9\u00ba.\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Pilar Ciordia, de Pamplona de 30 a\u00f1os 10\u00ba. Gloria Vi\u00f1als, de Pamplona de 19 a\u00f1os 11\u00ba. Evarista Gald\u00f3s, de Gabiria, de 21 a\u00f1os 12\u00ba. Ignacio Gald\u00f3s, de Ezquioga de 47 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          \u00a0<\/h3>

                                          13\u00ba. Ramona Olazabal, de Beizama, de 20 a\u00f1os 14\u00ba. Juan Ibarguren, de Azpeitia, de 21 a\u00f1os 15\u00ba. Jes\u00fas Elcoro, de Vergara de 23 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          16\u00ba.\u00a0 Jes\u00fas R., de San Sebasti\u00e1n de 28 a\u00f1os 17\u00ba. Juan Larra\u00f1aga, de Zum\u00e1rraga de 12 a\u00f1os 18\u00ba. Beatriz Larra\u00f1aga, de Zum\u00e1rraga de 9 a\u00f1os 19\u00ba.\u00a0 Ignacio Jaca, de Zum\u00e1rraga de 13 a\u00f1os 20\u00ba. Juanita Salvide, de Herrera de 9 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          21\u00ba. Mart\u00edn Ayerbe, de Cegama<\/span><\/h3>

                                          22\u00ba. Guy de Thebalt, de Francia de 5 a\u00f1os 23\u00ba. Francisco Diego, de Ira\u00f1eta de 21 a\u00f1os 24\u00ba. Luis Izurzun, de Ira\u00f1eta de 21 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          25\u00ba. Esperanza Aranda, de San Sebasti\u00e1n de 30 a\u00f1os 26\u00ba. M. Jezequel, de Francia<\/span><\/h3>

                                          27\u00ba. Josefa Lasa, de Ata\u00fan de 22 a\u00f1os 28\u00ba. Juana A., de Renter\u00eda de 71 a\u00f1os 29\u00ba. Ignacio Aguado, de Alava de 35 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          30\u00ba. Eugenio Ugalde, de Cestona, de 23 a\u00f1os 31\u00ba. J. Taboada, de Pasajes<\/span><\/h3>

                                          32\u00ba. M. Fernandez, de Pasajes 33\u00ba. M. Sanchez de Segura<\/span><\/h3>

                                          34\u00ba. Mar\u00eda Antonia, de Albistur de 43 a\u00f1os 35\u00ba. Victor Salazar, de Araceta<\/span><\/h3>

                                          36\u00ba. Esteban Bolinaga, de 70 a\u00f1os<\/span><\/h3>

                                          37\u00ba. Le\u00f3n Zabaleta, de O\u00f1ate de 51 a\u00f1os 38\u00ba. M. Huerva, de Catalu\u00f1a<\/span><\/h3>

                                          39\u00ba. L. Alb\u00f3, de Catalu\u00f1a<\/span><\/h3>

                                          40\u00ba. M. Qui\u00f1onero, de Ba\u00f1olas<\/span><\/h3>

                                          41\u00ba. Enriqueta Tom\u00e1s, de Ba\u00f1olas, M. Letona, de Vergara 42\u00ba. E. Bedoya, del Ferrol<\/span><\/h3>

                                          43\u00ba. M. Jca, de Huarte-Araquil de 21 a\u00f1os 44\u00ba. Jos\u00e9 Liz\u00e1rraga, de Torrano de 15 a\u00f1os 45\u00ba. Mar\u00eda Recalde, de Durango de 39 a\u00f1os 46\u00ba. Felix Armendariz, de Artajona<\/span><\/h3>

                                          47\u00ba. Mar\u00eda Carmen Salaverr\u00eda, de Alza de 3 a\u00f1os.<\/span><\/h3>\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/section>\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

                                          Leer\u00a0 m\u00e1s: https:\/\/\/el-rechazo-a-las-apariciones-de-ezquioga\/ CUARTO MILENIO EZQUIOGA-VER \u2020 Procede ahora la inserci\u00f3n de aquellas Declaraciones de videntes, que guarden conformidad con las normas anteriormente sentadas. Helas aqu\u00ed: N\u00famero 1 Declaraci\u00f3nes de Benita Aguirre N\u00daMERO 1.\u2014 Declaraciones de Benita Aguirre. Juicio cr\u00edtico de los \u00e9xtasis y las declaraciones de esta vidente. Los castigos. Creyentes, videntes, director de […]<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"aside","meta":{"ocean_post_layout":"","ocean_both_sidebars_style":"","ocean_both_sidebars_content_width":0,"ocean_both_sidebars_sidebars_width":0,"ocean_sidebar":"0","ocean_second_sidebar":"0","ocean_disable_margins":"enable","ocean_add_body_class":"","ocean_shortcode_before_top_bar":"","ocean_shortcode_after_top_bar":"","ocean_shortcode_before_header":"","ocean_shortcode_after_header":"","ocean_has_shortcode":"","ocean_shortcode_after_title":"","ocean_shortcode_before_footer_widgets":"","ocean_shortcode_after_footer_widgets":"","ocean_shortcode_before_footer_bottom":"","ocean_shortcode_after_footer_bottom":"","ocean_display_top_bar":"default","ocean_display_header":"default","ocean_header_style":"","ocean_center_header_left_menu":"0","ocean_custom_header_template":"0","ocean_custom_logo":0,"ocean_custom_retina_logo":0,"ocean_custom_logo_max_width":0,"ocean_custom_logo_tablet_max_width":0,"ocean_custom_logo_mobile_max_width":0,"ocean_custom_logo_max_height":0,"ocean_custom_logo_tablet_max_height":0,"ocean_custom_logo_mobile_max_height":0,"ocean_header_custom_menu":"0","ocean_menu_typo_font_family":"0","ocean_menu_typo_font_subset":"","ocean_menu_typo_font_size":0,"ocean_menu_typo_font_size_tablet":0,"ocean_menu_typo_font_size_mobile":0,"ocean_menu_typo_font_size_unit":"px","ocean_menu_typo_font_weight":"","ocean_menu_typo_font_weight_tablet":"","ocean_menu_typo_font_weight_mobile":"","ocean_menu_typo_transform":"","ocean_menu_typo_transform_tablet":"","ocean_menu_typo_transform_mobile":"","ocean_menu_typo_line_height":0,"ocean_menu_typo_line_height_tablet":0,"ocean_menu_typo_line_height_mobile":0,"ocean_menu_typo_line_height_unit":"","ocean_menu_typo_spacing":0,"ocean_menu_typo_spacing_tablet":0,"ocean_menu_typo_spacing_mobile":0,"ocean_menu_typo_spacing_unit":"","ocean_menu_link_color":"","ocean_menu_link_color_hover":"","ocean_menu_link_color_active":"","ocean_menu_link_background":"","ocean_menu_link_hover_background":"","ocean_menu_link_active_background":"","ocean_menu_social_links_bg":"","ocean_menu_social_hover_links_bg":"","ocean_menu_social_links_color":"","ocean_menu_social_hover_links_color":"","ocean_disable_title":"default","ocean_disable_heading":"default","ocean_post_title":"","ocean_post_subheading":"","ocean_post_title_style":"","ocean_post_title_background_color":"","ocean_post_title_background":0,"ocean_post_title_bg_image_position":"","ocean_post_title_bg_image_attachment":"","ocean_post_title_bg_image_repeat":"","ocean_post_title_bg_image_size":"","ocean_post_title_height":0,"ocean_post_title_bg_overlay":0.5,"ocean_post_title_bg_overlay_color":"","ocean_disable_breadcrumbs":"default","ocean_breadcrumbs_color":"","ocean_breadcrumbs_separator_color":"","ocean_breadcrumbs_links_color":"","ocean_breadcrumbs_links_hover_color":"","ocean_display_footer_widgets":"default","ocean_display_footer_bottom":"default","ocean_custom_footer_template":"0","ocean_post_oembed":"","ocean_post_self_hosted_media":"","ocean_post_video_embed":"","ocean_link_format":"","ocean_link_format_target":"self","ocean_quote_format":"","ocean_quote_format_link":"post","ocean_gallery_link_images":"off","ocean_gallery_id":[],"footnotes":""},"categories":[24],"tags":[],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8939"}],"collection":[{"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=8939"}],"version-history":[{"count":39,"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8939\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":26621,"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8939\/revisions\/26621"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=8939"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=8939"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/fiatgarabandal.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=8939"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}